El ‘Plan Andinia’: Israel va a por la Patagonia – por Koldo Salazar López

4567.jpg

El Plan Andinia es un proyecto, tenido como teoría de la colonización pero que no es así. Ha sido abordado desde esta perspectiva tanto por detractores como por acólitos de este plan para evitar levantar alarma social, sin embargo el plan ya fue esbozado a finales del siglo XIX por Teodoro Herzl que, en el texto fundacional del sionismo: El Estado Judío, uno de los cortos capítulos pregunta abiertamente donde establecer Israel, si en Argentina o en Palestina.

“La argentina es por naturaleza uno de los países más ricos de la tierra, de inmensa superficie, población escasa y clima templado. La República Argentina tendría el mayor interés en cedernos una porción de tierra. La actual infiltración de los judíos ha provocado disgusto: habría que explicar a la Argentina la diferencia de la nueva emigración judía” (El estado judío, capítulo 6 ¿Palestina o la Argentina?)

Como todos sabemos, la WZO convocada en Basilea decidió que la Palestina otomana sería el lugar donde se establecería el Estado de Israel, con las consecuencias que todos sabemos, sin embargo el plan no fue del todo desechado sino que, más bien, fue tratado de una forma más periférica por importantes miembros de las comunidades sionistas askenazíes (no olvidemos que la gran mayoría de judíos de Argentina vienen de las regiones de Rusia, Alemania, Austria, Ucrania etc…).

Es también llamativo que existiera un intento previo de parte del banquero Moritz Von Hirsch auf Gereuth de intentar colonizar la Patagonia Argentina para el establecimiento de colonias judías, sin embargo a diferencia de Herzl, Hirsch no tenía ningún ideal político sionista (von Hirsch es previo al sionismo), sino que intentaba controlar estas regiones por la facilidad que le suponía (amplia extensión y poca población pero con bastos recursos naturales). Y fue un fracaso ya que los colonos judíos llegados a Argentina decidieron no ir a la aislada y lejana Patagonia sino que decidieron quedarse en la provincia de Buenos Aires, cerca de la capital y del centro del poder de la República Argentina.

 

Sin embargo, la imperiosa necesidad y la competencia entre estados por lograr objetivos necesarios para el sostenimiento de sus países en base al control de zonas estratégicas de abundantes recursos naturales hizo que Israel pusiera sus ojos en la región ¿por qué?, abundantes recursos mineros, alimenticios en forma de caladeros de pesca, cultivos y cabezas de ganado, recursos petroleros y de gas, control de rutas comerciales estratégicas en el Estrecho de Magallanes y cercanía con la Antártida (razón por la cual Reino Unido mantiene el control sobre las argentinas islas Malvinas).

Para los habitantes de la Patagonia chilena y argentina (tanto mapuches como argentinos/chilenos) es muy preocupante la llegada masiva de soldados israelíes en su último año de servicio militar, entre 8.000/ 10.000 cada año (los hombres sirven durante tres años, desde los 18 hasta los 21 años y las mujeres dos, desde los 18 hasta los 20 años). Cuyo objetivo es tejer redes de inteligencia, mapear la zona e identificar puntos estratégicos a todos los niveles e identificar zonas ricas en recursos hasta zonas de interés militar y estratégico.

Lo más llamativo es el comportamiento de estos soldados que acuden a la Patagonia en grupos con el subterfugio de ser mochileros, aventureros o turistas medioambientales. Sin embargo el trato hacia la población es desagradable, maleducado y supremacista.

Sobre todo es preocupante el papel de Joe Lewis, socio y amigo de George Soros. Este multimillonario británico ha comprado miles de hectáreas de terreno en la Patagonia chilena y argentina, concretamente al sur de la Tierra del Fuego, y rodean el Lago Escondido donde, a pesar de ser un bien de dominio público argentino no se puede acceder porque las tierras que rodean este pago pertenecen a este multimillonario sionista.

Además, después de la negativa de los argentinos, chilenos y mapuches de cobijar a los miles de israelíes que van al país por sus desmanes y la sospecha de que están trazando planes contra ellos, es decir, que son sus enemigos. Muchos de ellos se alojan en las tierras compradas por este empresario donde se estima que posee 25.000 alojamientos vacíos que son ocupados de forma temporal por estos soldados, así como la existencia de un aeropuerto privado con una pista de más de 2 kilómetros con capacidad para aviones civiles y militares. Además se tienen noticias de la existencia de una base militar chilena que está siendo compartida en la Patagonia.

Existen diferentes teorías sobre el interés incuestionable de Israel en este territorio. Algunos analistas aseguran que intentan crear un segundo Israel en caso de destrucción del Estado judío en Oriente Próximo, lo cual es poco probable. Sin embargo es posible que estén creando una base estratégica de corte industrial-militar para la obtención de recursos estratégicos inexistentes en Israel (de naturaleza minera), hidrocarburos (gas y petróleo) por la situación de Israel, rodeado de estados enemigos que pueden cortar relaciones diplomáticas con Israel. Por ejemplo, antes de la Revolución iraní el 70% del petróleo consumido en Israel provenía de Irán.

También es importante la adquisición de tierras cultivables por parte de Israel en esta región. Muchos países ricos que no tienen tierras o por la orografía del terreno no pueden cultivar o mantener una industria ganadera suficiente para su población deciden comprar tierras en otros países y cultivar o criar allí sus alimentos (lo cual da un valor estratégico a estas zonas). Israel no tiene suficiente terreno para generar una industria agricultora/ganadera estable que satisfaga las necesidades de su población, que va in crescendo, de ahí su necesidad de expandirse fuera de su territorio y la Patagonia es muy jugosa.

Asimismo, muy importante, al poseer una base en el sur de Argentina/Chile Israel se asegura una gran ventaja a la hora de reclamar y penetrar en la Antártida una vez que se pueda explotar. Para ello Tel Aviv ha lanzado una ofensiva que lleva décadas en proceso y donde confluye el estado sionista de Israel, el ejército y los servicios de inteligencia así como la participación privada de multimillonarios sionistas que forman parte de esta empresa estratégica que necesita de una fuerte militarización de esta región tanto en origen como en las rutas de transporte.

De hecho muchas personas que han tratado el tema han sido acusadas de antisemitas. Un caso flagrante fue el del general Roberto Bendini, que se filtró que supuestamente había hablado del Plan Andinia a los estudiantes de la Escuela de Guerra, Adrián Salbuchi fue denunciado por la DAIA (Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas) por antisemitismo, como a Santiago Cuneo, que criticó duramente al Estado de Israel y denunció el Plan Andinia.

Sin embargo el Rabino Sergio Bergman que también es el primer político en la historia de Argentina en ostentar el cargo de Ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación Argentina (Ministerio fundado en 2015) en una entrevista declaró que Argentina es “Tierra prometida” y tenía que ser “partida y repartida como así fue el origen de la creación del Estado de Israel”.

Koldo Salazar López, 30 agosto 2018

Fuente

***

VER TAMBIEN:

Print Friendly, PDF & Email