2018: 245 millones de cristianos perseguidos en el mundo y 4.305 asesinados
Un genocidio el que nadie habla
Esta organización protestante analiza la situación de los cristianos que son víctimas de opresión, discriminación y hasta asesinatos en 50 países del mundo.
En total, 245 millones de cristianos – católicos, ortodoxos, protestantes, bautistas, evangélicos, pentecostales, cristianos expatriados, conversos – son perseguidos, lo que equivale a “uno de cada nueve cristianos”, comparado con uno de cada doce el año pasado, según la organización.
El número de cristianos asesinados aumentó de 3.066 a 4.305 entre noviembre de 2017 y octubre de 2018, un aumento del 40%. “El índice revela una persecución contra las minorías cristianas que aumenta año tras año”, escribe Michel Varton, director de Doors Open, en este informe.
“Lo que llama la atención es que África se ha convertido en el centro de la violencia contra los cristianos”, con 4.165 muertos. Sólo Nigeria tuvo 3.731 muertos” (frente a 2.000 en 2017). Este país se enfrenta a una doble amenaza, la del grupo yihadista Boko Haram, que es “cada vez más violento”, y la de los “pastores Peuls, que descienden al sur del país y atacan sistemáticamente las aldeas cristianas”.
Sin embargo, es Corea del Norte el país encabeza nuevamente este ranking anual. Pero se desconoce el número de muertes en este país debido a la falta de “datos fiables”. La oenegé señala que “decenas de miles de cristianos están encerrados en campos de trabajos forzados”.
La ONG alerta también sobre la situación en México, en donde “organizaciones criminales y carteles de la droga atacan a cristianos porque consideran a las iglesias como fuentes de ingresos” y en Colombia, país en donde según esta organización “grupos criminales amenazan a los cristianos que se oponen a su autoridad y los obligan a menudo a pagar un impuesto para su protección”.
Afganistán, Somalia, Libia, Pakistán, Sudán, Eritrea, Yemen, Irán, India, Siria, figuran en la lista de países donde ocurren “persecuciones extremas”.
La ONG considera que el “extremismo islámico” es “un factor importante en la persecución de los cristianos en 38 de los 50 países del índice”, sobre todo África, Oriente Medio y Asia.
En un año, “el número de iglesias atacadas, dañadas o quemadas (…) casi se duplicó, pasando de 793 a 1.847”, mientras que “el número de cristianos detenidos aumentó de 1.905 a 3.150” en el mismo período.