“Populismo en América Latina” es una serie documental que todavía no se transmite y ya causó polémica y confrontación política en México, porque en su publicidad utiliza la imagen de Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de izquierda y puntero en las encuestas, al lado de los ex presidentes Hugo Chávez (Venezuela), Juan Domingo Perón (Argentina) y Luiz Inacio Lula da Silva (Brasil).
Se presume que el último capítulo de los cinco de los que consta la serie está dedicado a López Obrador –a quien sus adversarios califican de populista y lo comparan con el venezolano Chávez.
Del documental, producido por una firma que se presenta como La División, sólo se conoce un trailer difundido por la televisora Imagen en su noticiario nocturno y en redes sociales. No obstante, se había anunciado su transmisión a partir de este 30 de abril por el canal de paga de National Geographic, pero este aclaró que la información es errónea.
“National Geographic aclara que no emitirá ‘Populismo en América Latina’, y que toda información diferente a esta es errónea“, aseguró NatGeo.
El productor ejecutivo y realizador de la serie, Javier García, afirmó que la serie no trata sobre López Obrador y que sólo tiene como propósito exponer el fenómeno del populismo en América Latina.
“La serie es de populismo más no de López Obrador”, aseguró en la entrevista que concedió al periodista Ciro Gómez Leyva, de Grupo Imagen. Además defendió el rigor de la investigación al asegurar que participaron académicos, investigadores, historiadores, politólogos y comunicadores.
Pero el uso de la imagen de López Obrador –con la banda presidencial al pecho– para promocionar el documental en autobuses del transporte público y vallas publicitarias, podría significar una violación a la ley electoral, de acuerdo con Horacio Duarte, representante del candidato presidencial del partido Morena ante el Instituto Nacional Electoral (INE), la autoridad administrativa que vigila las elecciones.
Ante este órgano, el representante de López Obrador ya presentó una queja, pues acusa que la publicidad de la serie afecta la imagen del candidato frente a los ciudadanos que votarán en la elección del próximo primero de julio.
Además, exigió a la autoridad electoral investigar el financiamiento de este documental para comprobar si provino de algún partido y, de ser así, su costo se sume a los gastos de campaña que tienen un tope y son fiscalizados.
Por ahora, las autoridades del gobierno de la Ciudad de México informaron que la productora no contaba con los permisos para exhibir la publicidad en los camiones públicos y, por lo tanto, procedió a su sanción.
Acusan presión política
La productora La División, por su parte, acusó a López Obrador y a la coalición que lo postula (Juntos Haremos Historia, que integran Morena, Partido del Trabajo y Partido Encuentro Social) de ejercer “una presión ilegítima y antidemocrática para impedir que esta serie sea transmitida a las audiencias mexicanas”.
En un comunicado difundido el pasado 26 de abril, afirma que “los productores de la serie, alentados por la libertad de expresión y de opiniones diversas, seguiremos buscando medios para la difusión de una serie que tiene los más altos valores de comunicación“.
Por ahora, su transmisión es una incógnita, pues Claro Video (propiedad de Carlos Slim), Prime Video (de Amazon), Netflix y la cadena de salas de cinematográficas Cinépolis no tienen prevista la programación de esa serie.
No sólo eso. De la página de la productora La División desparecieron los datos de quienes presentaba como responsables de la serie documental. Allí, además de Javier García, aparecía los nombres de Enelio Fariña como director y Olga de Orellana, también como productora ejecutiva. Sin embargo, en su cuenta en Twitter Fariña se deslindó de la empresa y el documental.
Hola, solo comentarte que no formo parte de esa productora desde hace meses y que mi trabajo no ha tenido nada que ver con ese proyecto. No trabajo no en política ni para politicos, como creo que es el caso. No he visto tampoco los documentales.
— Enelio Farina (@enebcn) 28 de abril de 2018
El blog de la compañía productora tiene una publicación del 18 de enero de 2017 que marca la fecha de inicio de sus actividades.
Guerra sucia, dice AMLO
Desde la elección de 2006, la primera en la que contendió como candidato a la Presidencia –entonces por el izquierdista PRD–, Andrés Manuel López Obrador ha sido comparado con Hugo Chávez.
Su entonces contrincante y vencedor en la elección, el panista Felipe Calderón, hizo énfasis en el supuesto carácter populista de López Obrador. Él y diversos sectores empresariales emprendieron una campaña que tuvo como mensaje principal: “Andrés Manuel es un peligro para la nación”.
Calderón ganó la elección con una diferencia de 0.56% de la votación, lo que derivó en una larga lucha por la legalidad del proceso, que tuvo que dirimirse en el Tribunal Electoral federal.
La elección fue válida, pero los magistrados sí admitieron que hubo una fuerte “campaña negra” del PAN, impulsada a través de spots en televisión y radio, contra el candidato del PRD, López Obrador.
Los saldos de esa elección obligaron a una reforma electoral en 2014 que facultó al INE a suspender la transmisión en radio o televisión de los spots que, a su consideración, sean violatorios de la normativa vigente.
La estrategia del “miedo”, como la llaman los especialistas en México, la retomó en esta contienda el candidato del oficialista PRI, José Antonio Meade, que va tercero en las encuestas. También Ricardo Anaya, candidato del conservador PAN, ha asegurado que si gana López Obrador afectará las inversiones en México. Los dos han asegurado que, de ganar López Obrador, México se convertiría en Venezuela.
Incluso han aparecido en Venezuela bardas pintadas en favor del candidato de izquierda.
López Obrador, por su parte, ha acusado una “guerra sucia” de lo que él llama “la mafia en el poder” que, asegura, encabeza el ex presidente Carlos Salinas de Gortari, su acérrimo enemigo político.
A Salinas y a un grupo de empresarios les atribuye el financiamiento del documental. Incluso retó a los productores a revelar quién lo pagó y, a cambio, transmitirlo en “mi Face”, dijo.
De la calidad de la serie ha dicho que es un “bodrio” “aburrido”. Dijo: “Si no se pueden dormir, si no concilian el sueño, vean ese documental, porque es como un ‘Tafil’, van a caer profundo. Es aburridísimo; no cabe duda que no tienen ni imaginación ni talento. Ya lo vi, lo tengo”, afirmó a los medios que lo acompañan en su campaña.
También aseguró que los productores intentaron que distintas cadenas de televisión transmitieran el material, incluidas Fox y Univisión, de Estados Unidos, pero no lo lograron. “Fueron a Televisa, ofrecieron 200 millones de pesos y les dijeron ‘no lo pasamos’; fueron a Azteca, lo mismo, ‘no lo pasamos’; fueron a Imagen, ‘no lo pasamos’; fueron a dos cadenas de televisión de Estados Unidos para que de ahí se transmitiera a México y dijeron ‘no lo pasamos'”.
No obstante, ante la posibilidad de que se transmita por cualquier medio, López Obrador llamó a sus seguidores a una “contra campaña” que haga frente a la “guerra sucia” que acusa en su contra.
El candidato pidió explicar a la gente que la intención es asustarla. “¿Qué tenemos que hacer? Aclararles las cosas, decirles que ya nos están espantando estos corruptos, que lo que no quieren es que haya un cambio verdadero”, dice en un video difundido en redes sociales.