El senador estadounidense John McCain falleció el 25 de agosto de 2018, a la edad de 81 años. Los grandes medios de prensa transnacionales lo presentan como un «héroe» de la guerra en Vietnam y como un «hombre íntegro» y «sin concesiones» ante el presidente Donald Trump.
Pero el heroísmo en Vietnam de este «defensor de la libertad» consiste en haber participado como piloto en los bombardeos aéreos estadounidenses contra instalaciones civiles vietnamitas. Fue así como su avión fue abatido, en 1967, por medios antiaéreos soviéticos cuando bombardeaba una central eléctrica. Hijo de un almirante estadounidense que sería nombrado jefe del US PaCom [1], John McCain se convirtió entonces en prisionero de guerra y estuvo 5 años en las cárceles vietnamitas, donde dice haber sido torturado.
Ya liberado y de regreso en Estados Unidos, fue electo, en 1982, a la Cámara de Representantes y se convirtió en senador, en 1986. Entre paréntesis, el supuestamente «íntegro» McCain fue uno de los cinco senadores denominados The Keating Five porque aceptaron sobornos del banquero y financista Charles Keating, deseoso de “enterrar” una serie de estafas.
En el 2000, McCain es candidato a la investidura republicana con vista a la elección presidencial. Su rival en aquellas primarias, George W. Bush, no cree en el heroísmo de McCain en Vietnam e incluso lo acusa de traición, recordando la confesión que firmó como prisionero de guerra, confesión que el propio McCain atribuye a la tortura.
En 2008, siendo McCain el candidato republicano a la elección presidencial ante el demócrata Barack Obama, el New York Times revela que varias empresas habían financiado su campaña en el 2000 como retribución a los actos de McCain como presidente de la comisión senatorial para el Comercio.
Las posiciones de McCain en materia de política interna son difíciles de clasificar pero respaldaba la imposición de condenas penales a las mujeres que abortan. Por otro lado, se pronunciaba contra la tortura.
Desde 1993, John McCain ejerció simultáneamente su mandato de senador y la presidencia del IRI, organismo estadounidense que se ocupa de sobornar partidos políticos de derecha en el extranjero. El IRI (International Republican Institute) es uno de los principales tentáculos de la NED (National Endowment for Democracy), que a su vez actúa como servicio secreto común de los «Cincos Ojos» (Australia, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y el Reino Unido). Al ejercer durante 25 años la presidencia del IRI, McCain violó el principio básico de separación de poderes. Fue sólo a principios del actual mes de agosto que John McCain fue reemplazado en la presidencia del IRI por el también senador Dan Sullivan.
Como presidente del IRI, John McCain participó en la organización de numerosos golpes de Estado y apoyó sin excepción todas las guerras estadounidenses y británicas.
McCain preparó, por ejemplo, el fracasado golpe de Estado contra el presidente constitucional de Venezuela Hugo Chávez, el derrocamiento de Jean-Bertrand Aristide, presidente constitucional de Haití, la intentona golpista contra Mwai Kibaki, presidente constitucional de Kenya, y más recientemente, el derrocamiento de Viktor Yanukovich, presidente constitucional de Ucrania.
Verdadero director de la «primavera árabe», John McCain dio la señal de inicio de las guerras contra Libia y Siria en una reunión de los servicios secretos de los aliados de Estados Unidos realizada en El Cairo, en febrero de 2011. Posteriormente viajó al Líbano, donde confió al diputado Okab Sakr, vinculado al hoy primer ministro Saad Hariri, la tarea de garantizar el suministro de armas a los yihadistas que debían derrocar la República Árabe Siria. Durante esa estancia en Líbano, McCain visitó la localidad libanesa de Ersal y decidió instalar allí la base de retaguardia que los yihadistas utilizaron después contra Siria.
En mayo de 2013, el senador estadounidense John McCain penetró ilegalmente en Siria bajo la protección de Israel y se reunió en suelo sirio (ver foto) con varios jefes yihadistas, entre los que se hallaba Mohammad Nour, quien acababa de secuestrar 11 civiles libaneses. Según denunciamos desde este mismo sitio web, en aquella ocasión John McCain se reunió también con Abu Bakr al-Baghdadi, el futuro «califa» del Emirato Islámico (Daesh) [2], acusación desmentida en aquel momento por la oficina de McCain a pesar de la foto que los muestra juntos en el aquel encuentro (al-Baghdadi aparece a la izquierda, en el círculo rojo).
Sin embargo, un año después, el 16 septiembre de 2014, al participar como invitado en el Sean Hannity’s Show de Fox News, el propio McCain dice haberse reunido con los líderes de Daesh y estar en contacto permanente con ellos mientras explica que Estados Unidos tiene que utilizar a todos los «rebeldes» para acabar con la República Árabe Siria (Ver video).
El hecho es que, de manera totalmente consciente y sin remordimiento alguno, John McCain participó en la destrucción de toda una región del mundo.