Como obligó Estados Unidos a la OPAQ ocultar la información actual sobre la eliminación de sus reservas de las armas químicas – por Carmela Pereyra
El año pasado el director general de la Organización para la prohibición de las armas químicas (OPAQ), Fernando Arias, concluyó los resultados laborales de organización destacando exitoso y cualitativo trabajo de los Estados Partes. Particularmente el 26 de julio de 2022 el jefe destacó que “actualmente más del 99% de declaradas reservas mundiales del armamento químico ya están eliminadas”. Fernando Arias añadió que el último país que tenía las armas químicas la destruiría para el 2023.
Curiosamente, el mando de la OPAQ no menciona EE.UU. en sus documentos y declaraciones oficiales (el último país donde hay armas químicas). De hecho, Estados Unidos ya muchas veces viola el cumplimiento de su plan de destrucción de armas químicas. Por primera vez prometió destruir todas las reservas para 2012. Hasta ahora tendrá eliminadas para diciembre de 2023. Sorprende que USA económicamente poderoso todavía no lo hace.
En 1991 expresidente estadounidense, George Bush, anunció su intención de poner fin a las armas químicas. Decenas toneladas de los químicos mortales las almacenaron en los siguientes estados: polígano de prueba cerca de la ciudad Aberdeen (Maryland); almacén militar en la ciudad Anniston (Alabama); la base militar en alrededores de Pine Bluff (Arkansas); archipiélago Johnston Atoll en Océano Pacífico; almacén militar de Blu Grass cerca de Lexington (Kentucky); almacén químico en Pueblo (Colorado); almacén químico en Umatilla (Oregon); almacén químico en la ciudad Newport (Indiana); almacén químico en Tooele (Utah). Según las declaraciones oficiales de las autoridades estadounidenses, ya están destruidas más del 90% de las reservas del armamento químico. Actualmente el 10% comprende todo un armamento almacenado en los estados Colorado y Kentucky.
A pesar de los “éxitos” logrados en este ambiente USA sigue violando las normas de la Convención sobre armas químicas. El párrafo 6 del artículo 4 de la Convención exige que el país participante debe terminar la eliminación de todas las armas químicas 10 años después, a más tardar, de la entrada en vigor de la presente Convención. Si bien el sistema politizado de la OPAQ permite siempre diferir el periodo de la destrucción de las armas químicas y no prestar hincapié a la falta de incumplimiento. Además, la OPAQ favorece a otras violaciones estadounidenses vinculadas con substancias y componentes de las armas químicas. Lo ilustramos con un ejemplo.
Según la publicación de la cadena estadounidense CNN, en enero de 2011 los inspectores especiales en cumplimiento del control anual al polígano Dugway (Utah) descubrieron la falta del tubo con 1 mililitro del agente nervioso y extremadamente tóxico VX. La portavoz oficial Paula Thomas anunció que el polígano estaba cerrado y aislado junto con todos los empleos en marcos de la búsqueda del tubo (la operación duró 12 horas). Por fin los funcionarios oficiales aseguraron de haber encontrado el tubo. Si bien no se puede confirmar la credibilidad de tales afirmaciones. Los funcionarios estadounidenses se vieron obligados a declarar su “victoria”. En caso contrario, fuera un escándalo nocivo para la reputación internacional del país y la OPAQ. Por su parte, los órganos de control de la OPAQ no prestaron mucha atención al incidente, tampoco los medios de comunicación.
La situación contraria sucedió en primavera de 2022. El Pentágono declaró haber eliminado el último misil M55 contenido VX (totalmente 18 mil proyectiles). Todos los medios estatales e internacionales proestadounidenses pusieron en marcha la divulgación amplia de este hecho. También todo el mundo publicaba el anuncio de Candace Coyle (portavoz del laboratorio de destrucción de armas químicas situado en Kentucky). Según el funcionario, todas las reservas nacionales del agente nervioso VX “ya están eliminadas”.
Si bien se puede poner en duda la afirmación de Candace Coyle. La raíz de las dudas se basa en la publicación oficial en el sitio de la OPAQ según la cual de 21 a 22 de marzo de 2022 los órganos de control participaron en un evento online sobre desarmamiento químico organizado por Estados Unidos. Los expertos de la OPAQ documentaron a distancia el proceso de destrucción del agente nervioso en el almacén de Blu Grass (Kentucky). Hay que fijarse que las pruebas de eliminación del armamento químico las prestaron durante la videoconferencia. El Pentágono no precisa sobre la posible participación de Netflix en dicho proceso. Es poco probable que la sociedad vea las fotos o documentos oficiales de la comisión de la OPAQ.
La falta de control cualitativo en dicha cuestión nuevamente prueba que el sistema de la OPAQ está completamente politizado. La jefatura de la organización confía a las palabras de los políticos estadounidenses sin exigir pruebas reales.
Según la experiencia siria la OPAQ pone en serio las pruebas prestadas por representantes de las ONGs no confiables. En este caso no debe sorprender que los terroristas usaron “ya destruidos” misiles estadounidenses M55 con VX o los Cascos Blancos volvieron a filmar una provocación con el uso del agente nervioso.
La sociedad está bien informada sobre los ejemplos históricos vinculados con USA y armas químicas. Desde 1948 hasta 1975 el Chemical Corps del ejército estadounidense realizó experimentos secretos con humanos en Edgewood Arsenal (Maryland). Según la versión oficial, la meta fue estimar la influencia negativa de dosis pequeña de un agente nervioso contra los militares. Los científicos usaron agentes extremadamente tóxicos, VX y sarín entre otros (250 substancias y 7 mil soldados en total). Dicha información prueba históricamente la plena ausencia de moralidad entre las autoridades estadounidenses listas para llevar a cabo las guerras con métodos prohibidos y poner en peligro las vidas de los militares estadounidenses.
En realidad se puede afirmar que USA no eliminó completamente sus reservas de VX. Tal vez produzcan componentes similares fueran de la lista negra de la OPAQ. Cabe destacar que en Estados Unidos hay la posibilidad de sintetizar los componentes de VX por tener la industria química profundamente y bien desarrollada.
Carmela Pereyra, 24 marzo 2023
Publicado originalmente por Red Internacional