La OMS da un golpe de timón para dictar la agenda sanitaria mundial de Gates y las grandes farmacéuticas – por F. William Engdahl
Actuando por iniciativa de la Administración Biden, para noviembre de 2022, convenientemente al comienzo de la próxima temporada de gripe en el hemisferio norte, la OMS (Organización Mundial de la Salud), salvo un milagro, impondrá un control descendente sin precedentes sobre las regulaciones y medidas sanitarias nacionales de todo el planeta. En lo que equivale a un golpe de estado encubierto, la OMS obtendrá nuevos poderes draconianos para anular la soberanía nacional en 194 países miembros de la ONU, y dictar sus medidas sanitarias con fuerza de ley internacional. A veces se le llama el Tratado de Pandemia de la OMS, pero es mucho más. Y lo que es peor, la mayor parte del presupuesto de la OMS procede de fundaciones privadas vinculadas a las vacunas, como la Fundación Gates, o de las grandes farmacéuticas, lo que supone un enorme conflicto de intereses.
Nuevos poderes draconianos de la OMS
Hacer algo con furtividad significa hacerlo de manera sigilosa u oculta, para evitar que se conozca ampliamente y que posiblemente se le oponga. Esto se aplica a la propuesta entregada por la Administración Biden a la OMS de Ginebra el 18 de enero de 2022, según los documentos oficiales de la OMS. La OMS ocultó los detalles de las «enmiendas» estadounidenses durante casi tres meses, hasta el 12 de abril, justo un mes antes de que el órgano competente de la OMS se reúna para aprobar las medidas radicales. Además, en lugar de los 18 meses de espera anteriores para convertirse en tratado en el derecho internacional, esta vez sólo se utilizan 6 meses. Se trata de una carrera de fondo. La propuesta de EE.UU. cuenta con el respaldo de todos los países de la UE y, en total, de 47 países, lo que garantiza una aprobación casi segura.
Las propuestas, tituladas oficialmente «Fortalecimiento de la preparación y la respuesta de la OMS a las emergencias sanitarias: Propuesta de enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional», fueron presentadas por la Subsecretaria de Asuntos Mundiales (OGA) del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, Loyce Pace, como «enmiendas» a un tratado del Reglamento Sanitario Internacional de la OMS de 2005 previamente ratificado. La OMS define así ese tratado de 2005 «el Reglamento Sanitario Internacional (2005) (RSI) proporciona un marco jurídico general que define los derechos y las obligaciones de los países en la gestión de eventos y emergencias de salud pública que pueden cruzar las fronteras. El RSI es un instrumento de derecho internacional jurídicamente vinculante para 196 países, incluidos los 194 Estados Miembros de la OMS». (énfasis añadido).
La Sra. Pace llegó a la Administración Biden tras dirigir el Consejo de Salud Global, entre cuyos miembros se encuentran los nombres más corruptos de la Gran Farmacia, como Pfizer, Lilly, Merck, J&J, Abbott o la financiada por Bill Gates AVAC, por nombrar algunos. Sus propuestas para la transformación radical de los poderes «pandémicos» y epidémicos de la OMS, podrían haber sido fácilmente escritas por Gates y la Gran Farmacia.
Antes de examinar lo que las «enmiendas» de Loyce Pace harán para potenciar la transformación de la OMS en una dictadura sanitaria mundial con poderes sin precedentes para anular las decisiones de cualquier gobierno nacional, hay que señalar una cuestión jurídica sigilosa. Al disfrazar un cambio completo en los poderes del tratado de la OMS de 2005 como meras «enmiendas» a un tratado ratificado, la OMS afirma, junto con la Administración Biden, que la aprobación de las enmiendas no requiere un nuevo debate de ratificación por parte de los gobiernos miembros. Esto es un engaño. Sin ningún debate nacional por parte de los representantes elegidos, la OMS no elegida se convertirá en el futuro en un superpoder mundial sobre la vida y la muerte. Washington y la OMS han restringido deliberadamente el proceso de participación pública para imponerlo.
Una nueva ley de facto
Como era de esperar, la OMS ha publicado finalmente las «enmiendas» de los Estados Unidos. Muestra las supresiones y también las nuevas adiciones. Lo que hacen los cambios de la Administración Biden es transformar un papel previamente consultivo de la OMS a los gobiernos nacionales no sólo en las respuestas a las pandemias, sino también en todo lo relacionado con la «salud» nacional, con un poder totalmente nuevo para anular las agencias nacionales de salud si el Director General de la OMS, ahora Tedros Adhanom, lo determina. La Administración estadounidense de Biden y la OMS se han confabulado para crear un tratado totalmente nuevo que trasladará todas las decisiones sanitarias del ámbito nacional o local a Ginebra, Suiza y la OMS.
El artículo 9 es el típico de las enmiendas de Washington al actual Tratado de la OMS. El cambio de EE.UU. consiste en insertar el «deberá» de la OMS y suprimir el «podrá»: “Si el Estado Parte no acepta la oferta de colaboración en un plazo de 48 horas, la OMS podrá… En el mismo artículo ahora se suprime «oferta de colaboración por parte de la OMS, teniendo en cuenta las opiniones del Estado Parte interesado…» Las opiniones o el juicio de, por ejemplo, Alemania o India, o las autoridades sanitarias de EE.UU. pasan a ser irrelevantes. La OMS podrá pasar por encima de los expertos nacionales y dictar como ley internacional sus mandatos para todas y cada una de las futuras pandemias, así como para las epidemias o incluso los problemas sanitarios locales.
Además, en el nuevo artículo 12 propuesto sobre la «Determinación de una emergencia de salud pública de importancia internacional, una emergencia de salud pública de importancia regional o una alerta sanitaria intermedia», el jefe de la OMS —ahora Tedros en su nuevo mandato de 5 años— puede decidir por sí solo declarar una emergencia, incluso sin el acuerdo del Estado miembro. El jefe de la OMS consultará entonces a su correspondiente «Comité de Emergencia» de la OMS sobre la poliomielitis, el ébola, la gripe aviar, el COVID o lo que sea que declaren como problema. En resumen, se trata de una dictadura global sobre la salud de los ciudadanos por parte de uno de los organismos sanitarios más corruptos del mundo. Los miembros de un determinado Comité de Emergencia de la OMS se eligen mediante procedimientos opacos y, por lo general, como en el actual sobre la poliomielitis, muchos miembros están vinculados a los diversos frentes de la Fundación Gates, como GAVI o CEPI. Sin embargo, el proceso de selección es totalmente opaco e interno a la OMS.
Entre otros poderes, el nuevo Tratado de Pandemia dará a Tedros y a la OMS la facultad de exigir pasaportes de vacunas e inyecciones de COVID en todo el mundo. Están trabajando en la creación de un programa global de pasaporte vacunal/identidad digital. Bajo el nuevo «Tratado de Pandemia», cuando la gente es perjudicada por las políticas de salud de la OMS, no hay responsabilidad. La OMS tiene inmunidad diplomática.
La antigua empleada de la OMS y denunciante de irregularidades, Astrid Stuckelberger, ahora científica del Instituto de Salud Global de la Facultad de Medicina de la Universidad de Ginebra, señaló que «si los Estados miembros adoptan el nuevo Tratado sobre Pandemias, esto significa que la Constitución de la OMS (según el artículo 9) tendrá prioridad sobre la constitución de cada país durante los desastres naturales o las pandemias. En otras palabras, la OMS estará dictando a otros países, ya no hará recomendaciones».
¿Quién es la OMS?
El Director General de la OMS tendría el poder definitivo bajo las nuevas reglas, para determinar, por ejemplo, si Brasil o Alemania o Estados Unidos deben imponer un bloqueo por pandemia al estilo de Shanghái o cualquier otra medida que decida. Esto no es bueno. Especialmente cuando el jefe de la OMS, Tedros, de la región de Tigray en Etiopía, es un antiguo miembro del Politburó de la organización marxista designada terrorista (entonces por Washington), el Frente de Liberación del Pueblo de Tigray. No tiene título de médico, el primero en la historia de los directores generales de la OMS que no lo tiene. Tiene un doctorado en Salud Comunitaria, sin duda un campo impreciso, difícilmente una cualificación médica para un zar de la salud mundial. Entre sus artículos científicos publicados hay títulos como «Los efectos de las presas en la transmisión de la malaria en la región de Tigray». Al parecer, consiguió su puesto en la OMS en 2017 gracias al respaldo de Bill Gates, el mayor donante privado de la OMS.
Como Ministro de Sanidad de Etiopía en la dictadura liderada por Tigray, Tedros estuvo involucrado en un escandaloso encubrimiento de tres grandes brotes de cólera en el país en 2006, 2009 y 2011. Un informe de investigación publicado por la Sociedad de Medicina de Catástrofes y Salud Pública descubrió que, durante uno de los principales brotes de cólera, «a pesar de la identificación en laboratorio del V cholerae como causa de la diarrea acuosa aguda (AWD), el Gobierno de Etiopía (Tedros) decidió no declarar un “brote de cólera” por miedo a las repercusiones económicas derivadas de los embargos comerciales y la disminución del turismo. Además, el gobierno, haciendo caso omiso del Reglamento Sanitario Internacional (OMS), se negó continuamente a declarar una epidemia de cólera y rechazó en gran medida la ayuda internacional».
Como ministro de Sanidad y posteriormente de Asuntos Exteriores de Etiopía, Tedros fue acusado de realizar una limpieza étnica sistemática contra las tribus rivales del país, especialmente los amharas, de negar a los partidarios de la oposición la ayuda alimentaria del Banco Mundial y de otros organismos, así como de nepotismo y de desviar fondos internacionales para la construcción de hospitales hacia el apoyo político a su partido minoritario. Irónicamente, esto es lo contrario de la nueva ley de la OMS que Tedros respalda hoy. El 22 de septiembre de 2021 la Alemania de Merkel propuso a Tedros para un nuevo mandato sin oposición.
OMS, Gates, GERM
El mayor donante de la OMS (incluida su GAVI), el autoproclamado «zar de todo lo global», Bill Gates, ha dado una pista de lo que nos espera con las nuevas normas. En la entrada de su blog del 22 de abril, Gates propone algo divertido con el acrónimo GERM —Equipo de Respuesta y Movilización Global ante Epidemias—. Tendría una «organización permanente de expertos totalmente pagados y preparados para montar una respuesta coordinada a un brote peligroso en cualquier momento». Dice que su modelo es la película de Hollywood, Outbreak. «Los expertos en vigilancia de enfermedades del equipo buscarían posibles brotes. Una vez que detecte uno, el GERM debería tener la capacidad de declarar un brote…» Estaría coordinado, por supuesto, por la OMS de Tedros: «El trabajo sería coordinado por la OMS, el único grupo que puede darle credibilidad mundial».
Una noción distópica de lo que podría tener lugar es la actual falsa epidemia de «gripe aviar», H5N1, que está provocando la eliminación de decenas de millones de pollos en todo el mundo si un solo pollito da positivo a la enfermedad. La prueba es la misma prueba fraudulenta de PCR utilizada para detectar el COVID-19. Recientemente, el Dr. Robert Redfield, jefe de los CDC de Trump, concedió una entrevista en la que «predijo» que la gripe aviar saltará a los humanos y será altamente mortal en la próxima «Gran Pandemia», para la que el COVID-19 era un mero calentamiento. Redfield declaró en una entrevista de marzo de 2022: «Creo que tenemos que reconocer, siempre he dicho que creo que la pandemia de COVID fue una llamada de atención. No creo que sea la gran pandemia. Creo que la gran pandemia está todavía en el futuro, y va a ser una pandemia de gripe aviar para el hombre. Va a tener una mortalidad significativa en el rango del 10-50%. Va a ser un problema». En virtud de los nuevos poderes dictatoriales de la OMS, ésta podría declarar una emergencia sanitaria ante semejante fraude, independientemente de las pruebas contrarias.
F. William Engdahl, 18 de mayo de 2022
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F. William Engdahl es consultor de riesgos estratégicos y conferenciante, es licenciado en política por la Universidad de Princeton y autor de best-sellers sobre petróleo y geopolítica, en exclusiva para la revista online “New Eastern Outlook“.
Fuente: http://www.williamengdahl.com/englishNEO18May2022.php
Traducido al espanol por Red Internacional
