El aborto sólo te permite elegir ser la madre de un hijo vivo o de uno muerto – por Elentir
Julia Otero, sorprendida de que el Papa esté contra el aborto
Preguntada por las palabras del Papa Francisco de que abortar es como “contratar un sicario para resolver un problema” (algo en lo que estoy plenamente de acuerdo). Según Julia Otero, “ha habido una cierta sorpresa” cuando el Papa Francisco ha dicho esto. ¿Sorpresa por qué? La Iglesia Católica condena el aborto como lo que es: matar a un ser humano inocente e indefenso, y el Papa es la cabeza visible de la Iglesia Católica. De hecho, hace cuatro años, en su Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, el Papa Francisco escribió lo siguiente:
“Entre esos débiles, que la Iglesia quiere cuidar con predilección, están también los niños por nacer, que son los más indefensos e inocentes de todos, a quienes hoy se les quiere negar su dignidad humana en orden a hacer con ellos lo que se quiera, quitándoles la vida y promoviendo legislaciones para que nadie pueda impedirlo. Frecuentemente, para ridiculizar alegremente la defensa que la Iglesia hace de sus vidas, se procura presentar su postura como algo ideológico, oscurantista y conservador. Sin embargo, esta defensa de la vida por nacer está íntimamente ligada a la defensa de cualquier derecho humano. Supone la convicción de que un ser humano es siempre sagrado e inviolable, en cualquier situación y en cada etapa de su desarrollo.”
Unas palabras que fueron silenciadas por medios progresistas, curiosamente. Igual de curioso es que ayer Carmen Calvo no quisiera criticar al Papa por esas palabras, tal vez porque, como señala hoy El País, Calvo tiene previsto un próximo viaje al Vaticano para intentar resolver el ridículo hecho por su gobierno con la exhumación de Franco (como ya os dije hace unos días, Sánchez no quería al general ferrolano en el Valle de los Caídos y lo va a tener en pleno centro de Madrid).
Carmen Calvo cree que el aborto te permite decidir si quieres ser madre
Calvo se limitó a decir que esa es “la doctrina que mantiene la Iglesia Católica, no ha dicho nada nuevo”. Entonces Julia Otero dijo que “hay partidos políticos, como Vox, que está en contra del aborto”, y también mencionó a Pablo Casado, que dijo hace unos días que “el aborto no es un derecho”. Calvo entonces se decidió a meter baza, alegando que “Pablo Casado está de acuerdo con Vox”. Y en este punto es donde la vicepresidenta se puso a columpiarse.
Y es que Calvo, como se puede escuchar en el vídeo de la entrevista (minuto 30:35), lanzó la siguiente afirmación: “lo que es un derecho es que las mujeres decidamos, en el marco de la ley, cuándo queremos o podemos ser madres”. Como en muchas otras cosas, Calvo parece tener una cierta confusión mental. Una mujer puede elegir no ser madre si se abstiene de mantener relaciones sexuales o si usa anticonceptivos. Desde el momento en que concibe una vida en su vientre, esa mujer ya es madre. Y es que la vida humana no empieza en el momento del parto, ni en una determinada semana fruto de una mera convención política, como sostiene el pensamiento mágico progre. Científicamente la vida humana es un devenir que comienza en la concepción. En ese momento adquirimos la identidad genética que nos acompañará toda la vida. Y como todo ser humano, ese hijo por nacer tiene una madre, que es la persona que le lleva en su vientre.
El aborto sólo te permite elegir ser la madre de un hijo vivo o de uno muerto
Al contrario de lo que sostiene Carmen Calvo, el aborto legalizado no te permite elegir si quieres ser madre o no. El aborto sólo te permite elegir si quieres ser la madre de un hijo vivo o de un hijo muerto. Esto no es una cuestión religiosa ni ideológica, sino científica y racional. Y es que además de lo que la medicina nos muestra sobre el inicio de la vida y sobre el vínculo genético entre la madre y su hijo por nacer, también cabe apelar a la lógica. Lo que Carmen Calvo viene a decirnos es que una mujer embarazada no es la madre del hijo que lleva en el vientre, y que ese hijo o bien no tiene madre o, si la tiene, a saber dónde estará y cómo es que ese hijo ha acabado en el vientre de otra. Lo dicho: pensamiento mágico progre, el mismo pensamiento según el cual un hijo no es un ser humano ni tiene derechos como tal unos segundos antes del parto, pero sí unos segundos después, aunque no haya ocurrido ningún cambio sustancial en su organismo.
Y por cierto, y para que no se enfade la muy igualitaria Calvo, lo que he dicho para la madre es también aplicable para el padre, aunque haya muchas abortistas que consideran que ese hombre no tiene nada que decir sobre la vida o la muerte de su hijo, como si en vez de un ser humano estuviésemos hablando de unos zapatos. A este grado de inhumanidad hemos llegado…
Elentir, 11 octubre 2018