El almirante William H. McRaven presentó al secretario de Defensa James Mattis su dimisión del Consejo Consultativo de Innovación, creado en 1996 por el entonces secretario de Defensa, Ash carter, para aplicar en el terreno militar las nuevas industrias y tecnologías de Silicon Valley.
El almirante McRaven entró en oposición frontal con el presidente Donald Trump cuando este último retiró al ex director de la CIA, John Brennan, la acreditación que le daba acceso a secretos militares y de la seguridad nacional. McRaven publicó entonces un artículo donde se solidarizaba con Brennan y pedía la cancelación de su propia acreditación. Aquel texto se publicó en el Washington Post [1] el mismo día que otros ex altos responsables de la inteligencia estadounidense también publicaban un texto de apoyo a Brennan [2].
Luego de la reciente publicación de un artículo anónimo contra Trump en el New York Times [3], atribuido a un alto funcionario no identificado de la Casa Blanca, se solicitó al almirante McRaven que dimitiera de su puesto en el ya mencionado Consejo.
El almirante McRaven se hizo célebre por haber montado la operación Neptune’s Spear, en la que, durante una acción militar realizada en la localidad pakistaní de Abbotabad, fue asesinada una persona identificada por la administración Obama como Osama ben Laden.
Aquella operación provocó una airada protesta de Pakistán. En primer lugar porque Estados Unidos violó descaradamente la soberanía pakistaní y, en segundo lugar, porque Osama ben Laden no residía en Abbotabad ya que murió en Afganistán en diciembre de 2001.
El almirante McRaven pasó entonces a dirigir el Mando de Operaciones Especiales (US SoCom), o sea todas las fuerzas especiales estadounidenses. Como jefe del US SoCom, McRaven reveló orgullosamente –en audiencia ante el Congreso– haber dirigido asesinatos políticos en 78 países. El presidente Obama había encargado a McRaven la creación de una red internacional con las fuerzas especiales de los aliados de Estados Unidos para poder asesinar a cualquiera en cualquier lugar del mundo en menos de 48 horas [4].
Por su parte, John O. Brennan hizo carrera en la CIA, hasta convertirse en su director (de 2013 a 2017). Brennan desarrolló considerablemente el programa de asesinatos de la CIA con el uso de drones (aviones no tripulados). En el marco de esa “actividad”, Brennan mantuvo una estrecha colaboración con el almirante McRaven. Sin embargo, entró en conflicto con el general Michael Flint, director de la inteligencia militar estadounidense.
Al convertirse en el primer consejero de seguridad nacional del presidente Trump, el general Flint hizo destituir a Brennan y trató de reorganizar la CIA priorizando las misiones de obtención de datos de inteligencia de origen humano en vez de la liquidación física de enemigos. Ya destituido, Brennan ripostó dirigiendo una lucha política contra Flint y Trump, rápidamente acusados de ser agentes rusos. La acreditación de seguridad de Brennan fue revocada el 15 de agosto de 2018.
Voltairenet, 14 septiembre 2018
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