Siglo XXI: el siglo de la balcanización de los pueblos
El siglo XXI, será el periodo de la balcanización de los pueblos, y el intento de acabar con los Estado-Nación, los cuales hasta el momento es el mejor modelo político que conoce el hombre para dar protección a los ciudadanos, y que permite el desarrollo científico-tecnológico, y a su vez, conservar la memoria de la historia. El Neo-imperialismo pretende crear cientos de provincias alrededor del mundo todas hostiles entre sí, basados en sus diferencias étnicas y religiosas.
La Disolución de la URSS generó 15 nuevas Repúblicas, el plan a largo plazo, es que las 21 Repúblicas que conforman hoy La Federación Rusa, muchas de ellas se vuelvan hostiles hacia Moscú, y reclamen su independencia. El Emirato del Cáucaso es el primer intento de Occidente de balcanizar Rusia.
En los últimos treinta años, se ha visto un fenómeno sociológico e histórico muy significativo, la descomposición de los Estados-Nación, dando lugar al nacimiento de nuevos países a un ritmo vertiginoso. El antiguo Bloque del Este se desmoronó a principios de los años noventa del siglo XX. Yugoslavia se partió y de ahí nacieron 7 nuevos estados, y la Unión Soviética por su lado, se disolvió, dando lugar al nacimiento de 15 nuevos países. Rusia como principal estado. Por la parte del Cáucaso, nacieron 3 nuevos países (Georgia, Armenia y Azerbaiyán), por la parte del mar báltico también surgieron 3 (Estonia, Lituania y Letonia), Europa Oriental también vio el surgir de tres nuevos países (Ucrania, Bielorrusia y Moldavia), y por la zona de Asia Central, nacieron 5 nuevas naciones (Turkmenistán, Uzbekistán, Kazajistán, Tayikistán y Kirguistán). Lo cual cambio todo el mapa geopolítico de la zona y del mundo. Después de la desaparición de la Unión Soviética, y los nacientes estados “autónomos” La OTAN, se expandió por casi todas las repúblicas ex-soviéticas, y por toda la zona rodeando y amenazando a Rusia con un ataque militar directo, y luego con una posible desmembración del país.
En la región del Cáucaso norte, están las 5 Repúblicas rusas que tienen el Islam-suní como religión oficial (Chechenia, Ingusetia, Osetia del Norte, Daguestán, Kabardia-Balkaria), en este territorio es donde los servicios de inteligencia estadounidenses, británicos e israelíes junto con La OTAN, buscan la creación de un nuevo estado independiente de Moscú. El Emirato del Cáucaso, la balcanización de Rusia empezaría por ese extenso territorio periférico, para luego seguir desmembrando el país por las fronteras, se pretende crear una estrategia similar a que están llevando en Siria, atacar a Rusia por el sur-oeste por medio de mercenarios extranjeros y Takfiris radicales, que buscarían lograr la independencia del Emirato del Cáucaso. Arabia Saudita y los países del golfo pérsico, serian cómplices en esta tarea, ya que estos estados, también querían ver a Rusia en pedazos, ganando un importante aliado en Asia Central. El Emirato del Cáucaso, dejando a su vez a Siria e Irán sin su principal aliado. Rusia perdería el Cáucaso en su totalidad, y su acceso al mar caspio. Por la parte sur del país, Occidente junto con La OTAN podrían estimular el espíritu separatista de dos Repúblicas rusas, de mayoría de población budista Tuvá y Buriatia. Así como utilizan a los radicales Yihadistas radicales para crear califatos en Irak y Siria, y luego en Rusia. El modelo Neo-imperial utilizaría otras religiones y etnias para la partición de Rusia. La misma estrategia que están empleando en Oriente Medio, la quieren llevar a las puertas de Rusia. Balcanizar las zonas fronterizas para debilitar Moscú. En el otro extremo del país, específicamente en la parte nor-oeste se encuentra Finlandia, rival tradicional ruso, donde se encuentra La República de Carelia, una zona que en el pasado pertenecía a Finlandia, y que hasta hace poco este reclamaba como suyo, por sus vínculos históricos, geográficos y culturales. La OTAN y Occidente prometió a Finlandia devolver este territorio a sus fronteras. Cabe señalar que Finlandia será uno de los próximos miembros de la OTAN. Por la parte de la frontera oeste, esta Ucrania, que podría recuperar Crimea, después de la desestabilización total de Rusia, el bloque Occidental invitaría a Ucrania a tomar más territorio, como modo de venganza “por la tradicional opresión de los rojos”
Rusia, por su composición religiosa, étnica y cultural es el país más opcionado para balcanización de su territorio, más que Siria e Irán. El imperio busca la partición del país por medio de la conformación de bloques. Las Repúblicas rusas con mayoría musulmana formen un bloque para la conformación de un nuevo estado (Emirato del Cáucaso), las budistas otro país independiente, y las Repúblicas cristianas ortodoxas que son la mayoría formen otro bloque autónomo. Al final todos serian hostiles entre sí. La OTAN, Europa y Estados Unidos no tienen ningún afán de balcanizar Rusia, y saben que por el momento esto es imposible, por ahora la prioridad es rodearla, destruyendo primero a Oriente Medio.
Los intentos de Rusia de anexar Crimea y Osetia del sur (territorio que actualmente está dentro de las fronteras de Georgia), la defensa de Siria con su intervención militar directa en el país Árabe, y la creación de la zona Euro-asiática, más que volver a Rusia una súper-potencia, buscan proteger sus fronteras y consolidar la integridad de su territorio, evitando así la balcanización de su pais. Para Estados Unidos, Europa, y La OTAN, la disolución de la URRS no ha terminado, solo se ha postergado. Antes de desmembrar al país en su totalidad, hay que destruir su zona más cercana que es Oriente Próximo. Irak, Siria e Irán. De todas maneras todos los caminos conducen a Moscú.
Felix Antonio Cossío Romero, 26 mayo 2018