{"id":8974,"date":"2021-01-09T14:24:18","date_gmt":"2021-01-09T14:24:18","guid":{"rendered":"https:\/\/redinternacional.net\/?p=8974"},"modified":"2021-01-09T14:27:52","modified_gmt":"2021-01-09T14:27:52","slug":"el-cristianismo-y-la-gran-mentira-como-pudo-yahve-conquistar-a-roma-laurent-guyenot","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/redinternacional.net\/2021\/01\/09\/el-cristianismo-y-la-gran-mentira-como-pudo-yahve-conquistar-a-roma-laurent-guyenot\/","title":{"rendered":"El Cristianismo y la gran mentira: C\u00f3mo pudo Yahv\u00e9 conquistar a Roma – por Laurent Guy\u00e9not"},"content":{"rendered":"
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Primo Levi, autor italiano de Si esto es un hombre<\/em><\/a> (1947) – “un pilar de la literatura del Holocausto” seg\u00fan Wikipedia -, escribi\u00f3 un cuento corto de ficci\u00f3n titulado “Un testamento”, que consiste en la \u00faltima recomendaci\u00f3n de un miembro del gremio de los “sacamuelas” a su hijo. Termina con estas palabras:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 De todo lo que acabas de leer se deduce que la mentira es un pecado para los dem\u00e1s, y para nosotros una virtud. La mentira forma parte de nuestras tareas: debemos mentir con palabras, con los ojos, con la sonrisa, con la ropa. No s\u00f3lo para enga\u00f1ar a los pacientes; como se sabe, nuestro prop\u00f3sito es m\u00e1s elevado, y la mentira, no nuestro talento en el giro de la mano, hace nuestra verdadera fuerza. Con la mentira, pacientemente aprendida y piadosamente ejercida, si Dios nos ayuda llegaremos a dominar este pa\u00eds y tal vez el mundo: pero esto s\u00f3lo se puede hacer con la condici\u00f3n de haber sido capaces de mentir mejor y m\u00e1s tiempo que nuestros enemigos. Yo no ver\u00e9 ese d\u00eda, pero vosotros lo ver\u00e9is: ser\u00e1 una nueva edad de oro, en la que s\u00f3lo en \u00faltima instancia tendremos que arrancar de nuevo alguna que otra muela, pues nos bastar\u00e1 con gobernar el Estado y administrar los asuntos p\u00fablicos, para prodigar las piadosas mentiras que hemos aprendido a llevar a la perfecci\u00f3n. Si demostramos que somos capaces de esto, el imperio de los sacamuelas se extender\u00e1 de este a oeste hasta las islas m\u00e1s distantes, y no tendr\u00e1 fin.<\/em>[1]<\/p>\n No hay valor literario particular en esta prosa. Su \u00fanico inter\u00e9s es la pregunta que surge: \u00bfA qui\u00e9n se refiere Primo Levi con esta sociedad de mentirosos profesionales, cuyo oficio se transmite de padre a hijo, y cuyo plan es conquistar el mundo? \u00bfDe qui\u00e9nes son la met\u00e1fora? Y quiz\u00e1s esta otra pregunta: \u00bfQu\u00e9 es este “testamento” de ellos?<\/p>\n Aunque no supi\u00e9ramos a qu\u00e9 banda de mentirosos profesionales pertenec\u00eda Lev\u00ed, su “Dios” los delatar\u00eda: s\u00f3lo hay un dios que entren\u00f3 a su pueblo para mentir y les prometi\u00f3 la dominaci\u00f3n del mundo, y ese es el dios de Israel. “Israel”, recuerden, es el nombre que Yahv\u00e9 le dio a Jacob, despu\u00e9s de que Jacob mintiera a su anciano padre Isaac, con palabras y con un disfraz: “Yo soy Esa\u00fa tu primog\u00e9nito”, dijo, vestido con “las mejores ropas de Esa\u00fa”, para quitarle a Esa\u00fa su primogenitura (G\u00e9nesis 27:15-19). Esta es, en sentido literal y literario, la historia fundacional de Israel. Mientras los cristianos no le vean la maldad o lo malicioso a esta f\u00e1bula, y su correlaci\u00f3n con el comportamiento jud\u00edo, seguir\u00e1n desempe\u00f1ando el papel de Esa\u00fa.<\/p>\n \u00bfCu\u00e1l es la mayor mentira jud\u00eda de la historia? Sin duda, la afirmaci\u00f3n de que los jud\u00edos, de todas las naciones que habitan esta tierra, fueron alguna vez “elegidos” por el todopoderoso Creador del Universo para iluminar y gobernar la humanidad, mientras que todos sus enemigos eran maldecidos por el mismo Creador. Lo verdaderamente desconcertante no es la enormidad de la mentira: muchos individuos pueden sentirse elegidos por Dios, e incluso hay naciones que se lo creen en ciertas etapas. Pero s\u00f3lo los jud\u00edos han logrado convencer a miles de millones de no jud\u00edos (cristianos y musulmanes) de su elecci\u00f3n. \u00bfC\u00f3mo lo hicieron? “Casi por accidente”, escribi\u00f3 el autor jud\u00edo Marcus Eli Ravage en su art\u00edculo de 1928 “Un caso real contra los jud\u00edos<\/a>“. En mi opini\u00f3n, el factor accidental fue bastante menor.<\/p>\n La teor\u00eda de los cristianos seg\u00fan la cual, despu\u00e9s de elegir a los jud\u00edos<\/a>, Dios los maldijo por su rechazo a Cristo no se contradice, sino que valida la afirmaci\u00f3n de los jud\u00edos de que son el \u00fanico grupo \u00e9tnico al que Dios eligi\u00f3, am\u00f3 exclusivamente y gui\u00f3 personalmente a trav\u00e9s de sus profetas durante miles de a\u00f1os. He argumentado en “El Gancho Santo<\/a>” que esto ha dado a los jud\u00edos una ambivalente pero decisiva autoridad espiritual sobre los gentiles. De hecho, incluso la “maldici\u00f3n” de los jud\u00edos que acompa\u00f1a su elecci\u00f3n desde el punto de vista cristiano ha sido beneficiosa para ellos, porque el juda\u00edsmo no puede sobrevivir sin la hostilidad hacia y desde el mundo gentil; eso es parte de su ADN b\u00edblico. Jes\u00fas salv\u00f3 a los jud\u00edos en el sentido de que el odio de \u00e9stos hacia el cristianismo preserv\u00f3 su identidad, que de otra manera podr\u00eda haber perecido, una vez desaparecido el Templo. Seg\u00fan Jacob Neusner “el juda\u00edsmo tal como lo conocemos naci\u00f3 en el encuentro con el cristianismo triunfante”[2] La judeofobia cristiana ten\u00eda una ventaja sobre la judeofobia pagana: con el cristianismo, los jud\u00edos no s\u00f3lo siguieron odiados como at\u00e1vicos antisociales (ver por ejemplo las Historias<\/em> de T\u00e1cito v, 3-5), sino como el pueblo elegido por Dios en otro tiempo, y su Tor\u00e1 se convirti\u00f3 en el bestseller mundial. La elecci\u00f3n divina es una carta de triunfo imbatible en el juego de las naciones. Si Ud. duda de su poder, preg\u00fantese: \u00bfhabr\u00edan conseguido los jud\u00edos apoderarse de Palestina en 1948 sin esa carta de triunfo? \u00a1La carta maestra del “Holocausto” por s\u00ed sola jam\u00e1s lo habr\u00eda logrado!<\/p>\n A medida que he ido tomando conciencia de la resonancia entre lo espiritual y lo gen\u00e9tico, as\u00ed como de la guerra de los jud\u00edos contra la identidad blanca, he llegado a preguntarme si la noci\u00f3n revelada de la preferencia y predestinaci\u00f3n divina jud\u00eda no ha sido un lento y debilitante veneno inyectado en nuestra alma colectiva. La supuesta elecci\u00f3n jud\u00eda significa una superioridad metaf\u00edsica que nos hace, a nosotros los no jud\u00edos, la segunda opci\u00f3n de Dios en el mejor de los casos. Claro, este no es un dogma expl\u00edcito del cristianismo – el Credo no incluye “Creo que Dios eligi\u00f3 a los jud\u00edos” -, pero es un postulado subyacente de la Cristolog\u00eda. \u00bfEso lo hace menos o m\u00e1s eficiente contra nuestro sistema inmunol\u00f3gico racional? Es dif\u00edcil decidir. Creo que los jud\u00edos han llevado su elecci\u00f3n por el dios celoso Yahv\u00e9 como una especie de aura intimidante, y a veces espeluznante, no muy diferente de la marca de Ca\u00edn, seg\u00fan la cual “el que mate a Ca\u00edn sufrir\u00e1 una venganza s\u00e9ptuple” (G\u00e9nesis 4:15). Es apropiado mencionar aqu\u00ed que Ca\u00edn es el ancestro ep\u00f3nimo de los ceneos, una tribu madianita aliada de los israelitas durante la conquista de Cana\u00e1; \u00a0de acuerdo con la erudita “hip\u00f3tesis de los ceneos”, el culto Yahwista es de origen ceneico[3].<\/p>\n \u00bfC\u00f3mo lo hicieron? \u00bfC\u00f3mo se las arreglaron los jud\u00edos para introducir de contrabando su Gran Mentira en la religi\u00f3n exclusiva de las naciones europeas? Se trata de una pregunta leg\u00edtima e importante, \u00bfno es as\u00ed? Desde una perspectiva puramente hist\u00f3rica, sigue siendo uno de los mayores enigmas; uno que los historiadores laicos prefieren dejar a los historiadores eclesi\u00e1sticos, que se conforman con el extra\u00f1o relato que menciona a Constantino escuchando voces [y viendo dibujarse una cruz en el cielo, con lo cual decide convertirse al cristianismo] cerca del puente Milvio<\/a>. La pregunta es muy simple: \u00bfC\u00f3mo es que Roma termin\u00f3 adoptando como fundamento espiritual una doctrina y un libro que afirma que Dios eligi\u00f3 a los jud\u00edos, en un per\u00edodo de judeofobia romana generalizada? \u00bfY c\u00f3mo es posible que, menos de dos siglos despu\u00e9s de convertir a Jerusal\u00e9n en una ciudad griega llamada Aelia Capitolina, donde los jud\u00edos ten\u00edan prohibida la entrada, Roma adoptara oficialmente una religi\u00f3n que anunciaba la ca\u00edda de Roma y una nueva Jerusal\u00e9n?<\/p>\n Una parte de la respuesta es que hab\u00eda sido una gran preocupaci\u00f3n de los emperadores romanos la voluntad de unificar al Imperio bajo una religi\u00f3n com\u00fan. Antes del cristianismo, no se trataba de eliminar las religiones locales, sino de crear un culto com\u00fan para dar una legitimidad divina y un v\u00ednculo religioso al Imperio. Cuando buscaban inspiraci\u00f3n religiosa, los romanos generalmente se dirig\u00edan a Egipto. Los cultos de Osiris (o Serapis, como lleg\u00f3 a llamarse desde el siglo III a.C.), de su hermana-esposa Isis y de su hijo Horus (o Harp\u00f3crates, Horus el Ni\u00f1o) fueron muy populares en todo el Mediterr\u00e1neo y proporcionaban a los romanos lo m\u00e1s parecido a una religi\u00f3n internacional.<\/p>\n Adriano (117-138) le dio a Osiris los rasgos de Antinoo, a quien tambi\u00e9n le dedic\u00f3 una nueva ciudad, nuevos juegos deportivos y una constelaci\u00f3n. El origen de Antinoo no est\u00e1 claro. La Historia de Augusto<\/em> nos dice que era el amante gay (eromenos) del emperador Adriano, y muchos historiadores todav\u00eda reproducen ese cuento, aunque la Historia de Augusto<\/em> es la obra de un impostor, cosa que saben los especialistas. Es muy probable que esta historia forme parte de una propaganda cristiana contra una religi\u00f3n competidora. Se supone que Antinoo, cuyo nombre est\u00e1 formado por anti, “semejante”, y nous, “esp\u00edritu”, se ahog\u00f3 en el Nilo un 24 de octubre, al igual que Osiris, y su muerte fue interpretada como un sacrificio. Como divinidad, Antinoo fue asimilado a Osiris, y por extensi\u00f3n a Hermes, Dionisio y Baco, todas divinidades del M\u00e1s All\u00e1. En un obelisco monol\u00edtico encontrado en Roma pero construido en Antin\u00f3polis, Antinoo es designado como Osiris Antin\u00f3polis. Por lo tanto, su culto debe interpretarse como una nueva expresi\u00f3n del culto a Osiris patrocinado por el Imperio. El rostro y el cuerpo de Antinoo, esculpido en miles de copias, eran una autocelebraci\u00f3n de la raza blanca que entonces dominaba el mundo, desde Anatolia hasta Espa\u00f1a, y desde Gran Breta\u00f1a hasta Egipto[4].<\/p>\n <\/p>\n Antinoo como Baco, escultura colosal que se presume perteneci\u00f3 a la villa de Adriano en Palestrina<\/strong><\/em><\/p>\n \u00a1Qu\u00e9 contraste con su competidor, el culto del Crucificado! La pregunta, entonces, se vuelve: \u00bfPor qu\u00e9 Cristo finalmente suplant\u00f3 a Osiris, incluso absorbiendo el culto de Isis? \u00bfC\u00f3mo es que el Imperio romano glorioso y seguro de s\u00ed mismo se convirti\u00f3 al culto de un curandero jud\u00edo torturado y ejecutado por las autoridades romanas por sedici\u00f3n? Esta es la cuesti\u00f3n jud\u00eda que pocos quieren investigar. Asumiendo que el cristianismo es una creaci\u00f3n humana (esta es mi premisa personal), es obviamente una creaci\u00f3n jud\u00eda en gran medida. \u00bfC\u00f3mo se las arreglaron los jud\u00edos para crear una religi\u00f3n para los gentiles capaz de erradicar todas las dem\u00e1s religiones del Imperio, comenzando por el culto imperial?<\/p>\n Es probable que nunca se llegue a aprehender plenamente esta tem\u00e1tica, pero con lo que hemos aprendido sobre las costumbres jud\u00edas en los \u00faltimos cien a\u00f1os, podemos tratar de dibujar alg\u00fan escenario razonable, uno que no implique que Dios le hable a los emperadores, sino otro dispositivo parlante muy convincente – el dinero – junto con la influencia pol\u00edtica de una red transgeneracional jud\u00eda decidida a tomar el control de la pol\u00edtica religiosa del Imperio. Hoy en d\u00eda sabemos que tales redes transgeneracionales jud\u00edas, capaces de llevar a la ruina imperios o naciones anfitrionas, existen. Tambi\u00e9n sabemos que las redes jud\u00edas son buenas para fabricar y promover su macabra religi\u00f3n judeoc\u00e9ntrica para los Goyim, el llamado cristianismo.<\/p>\n <\/p>\n \u00bfEs esta b\u00fasqueda realmente necesaria? \u00bfPuede esperarse alg\u00fan beneficio para la civilizaci\u00f3n occidental con cuestionar sus ya tambaleantes fundamentos cristianos? \u00bfY es la Gran Mentira un asunto tan importante? Antes de seguir adelante, quiero compartir mi punto de vista sobre estas preguntas, en las que he estado reflexionando mucho.<\/p>\n “La grandeza de la civilizaci\u00f3n blanca surgi\u00f3 de la fe cristiana”. Tal declaraci\u00f3n no parece muy controvertida. Y sin embargo, creo que es algo equivocado. Los logros de nuestra civilizaci\u00f3n provienen de la fuerza interior de nuestra raza, que incluye una excepcional propensi\u00f3n a “idealizar”, con lo que me refiero tanto a generar ideas como a trabajar para su realizaci\u00f3n. El genio de nuestra raza es ser creadores de poderosas ideas que nos impulsan hacia adelante y hacia arriba. Esta capacidad, que S\u00f8ren Kierkegaard llama idealidad (In Vino Veritas<\/em>, 1845), no debe confundirse con lo que com\u00fanmente llamamos idealismo, aunque se puede argumentar que el idealismo es nuestro punto flaco, donde radica nuestra vulnerabilidad, la debilidad inherente a nuestra fuerza.<\/p>\n Durante siglos, la fe cristiana ha sido un veh\u00edculo – casi se podr\u00eda decir una superestructura – para nuestro anhelo de idealizar y realizar; pero esta fe no es lo que lo origin\u00f3. No son los sacerdotes los que construyeron las catedrales en las que oficiaban (la mayor\u00eda de las iglesias eran empresas colectivas de ciudades, pueblos y aldeas); no eran monjes los trovadores y poetas que elaboraron el sublime ideal del amor caballeresco que es el “milagro de nuestra civilizaci\u00f3n” (Stendhal)[5]; Johann Sebastian Bach escribi\u00f3 m\u00fasica para la Iglesia, pero no era un cl\u00e9rigo, y su Ave Mar\u00eda sonar\u00eda igualmente admirable si se le cantase a la diosa Isis; muchos genios de nuestros panteones europeos, como Dante, Leonardo da Vinci o Galileo, eran cat\u00f3licos nominales, por obligaci\u00f3n, pero amantes secretos de Sof\u00eda (l\u00e9ase mi art\u00edculo “La Crucifixi\u00f3n de la Diosa<\/a>“). La fuente del genio art\u00edstico, cient\u00edfico y cultural de la raza blanca no es el cristianismo, esto es lo que opino yo.<\/p>\n <\/p>\n Descendimiento de la Cruz<\/a>, detalle, por Rogier Van der Weyden, Antes de 1435, Museo del Prado<\/strong><\/em><\/p>\n Kevin MacDonald hace un discreto pero crucial \u00e9nfasis en su prefacio a La Espada de Cristo<\/em> de Giles Corey cuando escribe que “los aspectos adaptativos del Cristianismo” son los que “produjeron la expansi\u00f3n occidental, la innovaci\u00f3n, el descubrimiento, la libertad individual, la prosperidad econ\u00f3mica y los fuertes lazos familiares”[6] Esto es cierto si con “los aspectos adaptativos del cristianismo” nos referimos a los aspectos que son adoptados y adaptados del antiguo mundo greco-romano-germ\u00e1nico, m\u00e1s que del Antiguo y el Nuevo Testamento. Entre los aspectos adaptativos del cristianismo deben contarse sus diversos colores nacionales. La ortodoxia Rusa es buena para Rusia por la misma raz\u00f3n que el confucionismo es bueno para China: porque es una Iglesia nacional, por lo que ser un ortodoxo ruso significa ser un patriota. Lo mismo podr\u00eda decirse en el pasado sobre el luteranismo para Alemania o, en un contexto m\u00e1s estrecho, el catolicismo para Irlanda. Pero estas versiones nacionales del cristianismo est\u00e1n, de hecho, en oposici\u00f3n a su declaraci\u00f3n de misi\u00f3n universal (katholikos<\/em>) y a la Roma papal.<\/p>\n Los valores familiares son tambi\u00e9n aspectos adaptativos del cristianismo. Jes\u00fas reneg\u00f3 de su familia (Mateo 12:46-50) y Pablo ense\u00f1\u00f3 que “es bueno para el hombre no casarse”, recomend\u00e1ndose el matrimonio s\u00f3lo para aquellos que no pueden evitar fornicar (1 Corintios 7). Los “valores cristianos” no son para nada cristianos, son simplemente conservadores. De hecho, si nos fijamos en las expresiones populares del cristianismo, el catolicismo ha sido tan adaptable que se podr\u00eda decir que es m\u00e1s pagano que jud\u00edo. \u00bfQu\u00e9 tiene de jud\u00edo la Navidad o la Madre Mar\u00eda?<\/p>\n El problema con el cristianismo est\u00e1 en sus aspectos jud\u00edos no adaptables y hoy en d\u00eda prominentes. No se trata s\u00f3lo de la noci\u00f3n grotesca de que los jud\u00edos son los elegidos de Dios, sino del car\u00e1cter a\u00fan m\u00e1s grotesco del dios que los eligi\u00f3. Parad\u00f3jicamente, con su imagen antropom\u00f3rfica de Dios \u00bfo deber\u00edamos decir judeom\u00f3rfica? heredada de la Tor\u00e1, el cristianismo ha sentado las bases del ate\u00edsmo moderno, y tal vez haya da\u00f1ado irremediablemente la idealidad gentil. Debido a que el Dios del Antiguo Testamento es “un peque\u00f1o, injusto e implacable fan\u00e1tico del control; un limpiador \u00e9tnico vengativo y sediento de sangre; un […] gorila caprichosamente mal\u00e9volo”, Richard Dawkins decidi\u00f3 ser ateo, como la gran mayor\u00eda de los eruditos de origen cristiano[7]. Todos ellos, lo reconocen, han confundido a Dios con Yahv\u00e9 y han ca\u00eddo v\u00edctimas de la Gran Mentira B\u00edblica. Y como no pueden concebir a Dios fuera del paradigma b\u00edblico, proh\u00edben que se discuta sobre el Dise\u00f1o Inteligente en las universidades, bajo la calumniosa acusaci\u00f3n de que es otro nombre para el Dios b\u00edblico (ver el documental Expulsados<\/em>: No se permite el Dise\u00f1o Inteligente<\/a>), cuando en realidad es una reivindicaci\u00f3n de la Sof\u00eda griega. El soci\u00f3pata Yahv\u00e9 ha arruinado la reputaci\u00f3n de Dios y ha llevado a la moderna impotencia occidental.<\/p>\n As\u00ed pues la Gran Mentira Jud\u00eda engendr\u00f3 la Gran Mentira Atea, \u00bfo la llamaremos la Mentira Darwiniana? “Yahweh es Dios” y “Dios est\u00e1 muerto” se oponen como las dos caras de una misma moneda. Nuestra civilizaci\u00f3n materialista es de hecho m\u00e1s jud\u00eda que el cristianismo que rechaz\u00f3, porque el materialismo (la negaci\u00f3n de cualquier otro mundo) es el n\u00facleo metaf\u00edsico de la Biblia hebrea (l\u00e9ase mi ensayo “Israel como un solo hombre<\/a>, una teor\u00eda del poder jud\u00edo”).<\/p>\n Si el cristianismo pudiera incluir, entre sus aspectos adaptativos, el rechazo del Dios Celoso del Antiguo Testamento y la Gran Mentira de la elecci\u00f3n jud\u00eda, entonces ser\u00eda redimible. Pero los cristianos prefieren vender sus almas al diablo; se niegan a rechazar el Antiguo Testamento, a convertirse en disc\u00edpulos de Marci\u00f3n<\/a>. En dos mil a\u00f1os de existencia, el cristianismo institucional ha evolucionado constantemente en la direcci\u00f3n opuesta, volvi\u00e9ndose cada vez m\u00e1s escriturario, judaizado y centrado en Israel: de la ortodoxia al catolicismo, y del catolicismo al protestantismo, la tendencia es inconfundible. \u00bfQu\u00e9 m\u00e1s se puede esperar de una instituci\u00f3n que siempre ha invitado a los jud\u00edos y ha declarado que los jud\u00edos dejan de serlo con s\u00f3lo recibir el bautismo?<\/p>\n As\u00ed que el cristianismo es un callej\u00f3n sin salida. Incluso, ahora forma parte del problema, no de la soluci\u00f3n. Puede que nos haya servido bien durante algunos siglos, pero a largo plazo, ha sido un instrumento de la esclavizaci\u00f3n gentil ante el poder jud\u00edo. En todo caso, al menos, no nos ha ayudado a prevenir este estado de servidumbre, y no puede ayudarnos a superarlo. Muchos hoy en d\u00eda se preguntan: \u00bfpor qu\u00e9 somos tan d\u00e9biles? Ya es hora de considerar lo obvio: se nos estuvo ense\u00f1ando durante generaciones a adorar y emular al hombre clavado en la cruz bajo la presi\u00f3n jud\u00eda: esto no es ning\u00fan est\u00edmulo para resistir el martirio. Hay una correlaci\u00f3n obvia entre el hecho de que hasta ayer se nos dec\u00eda que era moral “amar a tus enemigos” y el que hoy nos meten presos por cualquier supuesto “discurso de odio”.<\/p>\n No guardo ning\u00fan rencor personal contra el cristianismo. El catolicismo forma parte de mis recuerdos de infancia m\u00e1s felices, y el sonido de las campanas de la Iglesia nunca deja de tocar una profunda fibra en m\u00ed. Mis abuelos por parte de mi madre eran burgueses cat\u00f3licos que criaron una familia grande y feliz con s\u00f3lidos valores morales. Si pudiera vislumbrar alguna esperanza en esta clase social, yo ser\u00eda un cat\u00f3lico pol\u00edtico como Balzac, o un cat\u00f3lico rom\u00e1ntico como Chateaubriand. Pero la burgues\u00eda cat\u00f3lica est\u00e1 casi extinguida, nunca se ha recuperado del fallecimiento del Marechal Petain. A sus hijos los llamaron fascistas y sus nietos son adictos a la pornograf\u00eda. El catolicismo tambi\u00e9n ha abandonado el pa\u00eds: ya no hay sacerdotes, y de qu\u00e9 sirve un cura rural si no puede bendecir las cosechas en las Pascuas de Resurrecci\u00f3n. Por lo tanto, ya que no creo que Jes\u00fas se levant\u00f3 f\u00edsicamente de su tumba, considero que el cristianismo institucional ha agotado su potencial de civilizaci\u00f3n en Occidente. \u00a1Y miren a nuestro Papa, por Dios, aqu\u00e9l que dijo que “dentro de cada cristiano hay un jud\u00edo”!<\/p>\n <\/p>\n Hablo como franc\u00e9s, pero dudo que al catolicismo americano le quede mucho m\u00e1s del Esp\u00edritu santo. Muri\u00f3 en Dallas con la bala m\u00e1gica de Arlen Specter. Por supuesto, hay cat\u00f3licos valientes como E. Michael Jones, que ha capturado el genio malvado de la raza jud\u00eda en su libro imprescindible El Esp\u00edritu Revolucionario Jud\u00edo<\/em><\/a> (que pronto saldr\u00e1 traducido en al espa\u00f1ol). Pero el profesor Jones es la excepci\u00f3n que confirma la regla. Y ni siquiera hablo del protestantismo americano, hoy en d\u00eda una simple fuerza mercenaria para Si\u00f3n.<\/p>\n <\/p>\n Mucho antes de que fuera reempacada para los gentiles, la Gran Mentira era un autoenga\u00f1o jud\u00edo. Como he detallado al final de mi largo art\u00edculo “El sionismo, el criptojuda\u00edsmo y el enga\u00f1o b\u00edblico<\/a>“, en los siglos VI y V a.C. en Babilonia, una \u00e9lite sacerdotal de Jerusal\u00e9n decidi\u00f3 que Yahv\u00e9, el dios nacional de Israel, aunque aparentemente vencido, era de hecho el \u00fanico dios real y, por consiguiente, el Creador del Cielo y la Tierra. Una afirmaci\u00f3n irrisoria, pero cuando los persas conquistaron Babilonia, esos jud\u00edos, que se encontraban en una posici\u00f3n favorable despu\u00e9s de ayudar a los persas, se propusieron fingir que su monote\u00edsmo teocl\u00e1stico, basado en la exclusi\u00f3n de todos los dem\u00e1s dioses, era id\u00e9ntico al monote\u00edsmo tolerante de los persas; en otras palabras, que su dios tribal Yahv\u00e9 era Ahura Mazda, el Dios del Cielo. He demostrado que el enga\u00f1o salta a la vista en los libros de Esdras y Nehem\u00edas, donde a los persas solos se les pinta como creyentes en que Yahv\u00e9 es “el Dios del Cielo”, mientras que para los israelitas es “el dios de Israel” y nada m\u00e1s.<\/p>\n Lo que los jud\u00edos sacerdotales lograron en Babilonia en el siglo V a.C. fue una etapa preliminar para lo que otra generaci\u00f3n del mismo elenco sacerdotal comenzar\u00eda a planear en el siglo I d.C. en Roma, despu\u00e9s de haber sido llevados all\u00ed en condiciones similares de cautiverio. Mientras Yahv\u00e9 parec\u00eda nuevamente vencido, se propuso conquistar a su vencedor desde dentro. La conspiraci\u00f3n de los jud\u00edos de Babilonia para enga\u00f1ar a los persas con un monote\u00edsmo falsificado fue el ensayo para la m\u00e1s sofisticada conspiraci\u00f3n de los jud\u00edos de Roma para enga\u00f1ar a los romanos con el cristianismo.<\/p>\n Entre esas dos etapas, los jud\u00edos parecen haber convencido a una parte de la aristocracia romana de que ellos eran los primeros monote\u00edstas verdaderos, los adoradores del verdadero Dios. Para griegos y romanos, el Creador supremo era un concepto filos\u00f3fico, mientras que los cultos religiosos eran polite\u00edstas por definici\u00f3n. Por eso, alrededor del 315 AC, el aristot\u00e9lico Teofrasto<\/a> de Ereso reflexionaba sobre los jud\u00edos como unos “fil\u00f3sofos de nacimiento”, aunque le molestaban sus primitivos holocaustos [sacrificios totales por el fuego]. Algunos escritores jud\u00edos (Arist\u00f3bulo de Paneas, Artapanos de Alejandr\u00eda, e incluso Fil\u00f3n de Alejandr\u00eda) hab\u00edan logrado algo m\u00e1s: enga\u00f1ar a algunos griegos con la descabellada afirmaci\u00f3n de que Homero, Hes\u00edodo, Pit\u00e1goras, S\u00f3crates y Plat\u00f3n hab\u00edan sido inspirados por Mois\u00e9s.[8]<\/p>\n A los jud\u00edos ya se les menciona en Roma en el siglo II a.C. Se ha supuesto que eran en su mayor\u00eda fenicios convertidos. Mart\u00edn Bernal defiende esa tesis en “Jud\u00edos y Fenicios<\/a>“, con el argumento de que “no hay rastros de jud\u00edos en el Mediterr\u00e1neo Occidental antes de la destrucci\u00f3n de Cartago [146 a.C.]”, mientras “despu\u00e9s de esa fecha, se se\u00f1ala su presencia con frecuencia en la zona”, mientras que los fenicios se desvanecieron de las p\u00e1ginas de la historia. Las lenguas y culturas de los fenicios y los jud\u00edos eran pr\u00e1cticamente id\u00e9nticas[9]. Peter Myers aporta m\u00e1s luz en su bien fundado art\u00edculo “Cartagineses, fenicios y bereberes se convirtieron en jud\u00edos<\/a>“, en el que sostiene que “tras la destrucci\u00f3n de Cartago por Roma, muchos cartagineses y fenicios se convirtieron al juda\u00edsmo, porque Jerusal\u00e9n era el \u00fanico centro que quedaba de la civilizaci\u00f3n sem\u00edtica occidental”. El art\u00edculo de la Enciclopedia Judaica<\/em> sobre Cartago, citado por Myers, apoya esa hip\u00f3tesis, a\u00f1adiendo que los fenicios, al convertirse al juda\u00edsmo despu\u00e9s de su declive pol\u00edtico, “conservaron su identidad sem\u00edtica y no fueron asimilados por la cultura romano-helen\u00edstica que odiaban”. Esta teor\u00eda, que tambi\u00e9n explica el misterioso origen de los sefard\u00edes en Espa\u00f1a – una colonia cartaginesa -, es de obvia importancia para comprender la actitud de los jud\u00edos hacia el Imperio Romano, destructor de la civilizaci\u00f3n fenicia.<\/p>\n <\/p>\n Flavio Josefo destaca la antigua afinidad entre fenicios y jud\u00edos: Hirom, rey de Tiro, intercambiaba regalos con el rey Salom\u00f3n; le ayud\u00f3 a edificar el templo de Jerusal\u00e9n, antes de la fundaci\u00f3n de Cartago, y se carteaban intercambiando desaf\u00edos cient\u00edficos.<\/p>\n En el a\u00f1o 63 a.C., la comunidad jud\u00eda de Roma se ampli\u00f3 con miles de cautivos tra\u00eddos de Judea por Pompeyo, y progresivamente liberados (Fil\u00f3n de Alejandr\u00eda, Legatio ad Caium<\/em>, 156). Se cree que Julio C\u00e9sar introdujo una legislaci\u00f3n para garantizar su libertad religiosa y que la ley fue confirmada por Augusto, quien tambi\u00e9n los eximi\u00f3 del servicio militar. Se dice que el emperador Claudio (41-54 d.C.) expuls\u00f3 a los jud\u00edos de Roma (Suetonio, Claudio<\/em> xv, 4; Hechos<\/em> 18:2), o al menos les prohibi\u00f3 congregarse (Casio Dio lx, 6). Pero parece que conocieron tiempos favorables bajo Ner\u00f3n (54-68), cuya esposa Popea Sabina es considerada como una jud\u00eda secreta tipo Ester en la tradici\u00f3n jud\u00eda, porque el historiador jud\u00edo Flavio Josefo la llama “adoradora de Dios” (Antig\u00fcedades de los Jud\u00edos<\/em>, xx, 195) y menciona su apoyo a la liberaci\u00f3n de los sacerdotes jud\u00edos procesados en Roma (Vita 16)[10].<\/p>\n <\/p>\n En 70, el reci\u00e9n proclamado emperador Vespasiano y su hijo Tito trajeron a Roma unos 97.000 jud\u00edos cautivos (Josefo, La<\/em> Guerra Jud\u00eda<\/em> vi, 9), as\u00ed como miembros de la nobleza jud\u00eda recompensados por su apoyo en la guerra de Judea, siendo Josefo el m\u00e1s famoso de ellos. Poco despu\u00e9s, cuando Josefo comenz\u00f3 a trabajar en sus Antig\u00fcedades de los Jud\u00edos<\/em> en 20 vol\u00famenes, se nos dice que fueron redactados los Evangelios[11]. En el mismo per\u00edodo, seg\u00fan la historia est\u00e1ndar de la Iglesia, ya tenemos en Roma una iglesia cristiana, encabezada por un tal Clemente de Roma (88-99). Clemente debi\u00f3 ser un jud\u00edo educado como Josefo, porque su \u00fanica ep\u00edstola genuina se caracteriza por numerosos hebra\u00edsmos, abundantes referencias al Antiguo Testamento y una mentalidad lev\u00edtica. Una antigua y cre\u00edble tradici\u00f3n lo supone liberto del c\u00f3nsul Tito Flavio Clemens, primo de los emperadores flavianos. Nos enteramos por Casio Dio de que Flavio Clemens fue ejecutado por Domiciano, hermano y sucesor de Tito, por “ate\u00edsmo” y “desviaci\u00f3n hacia las costumbres jud\u00edas”. Su esposa Flavia Domitilla fue desterrada a la isla de Pandateria (Ventotene). Con el tiempo, Flavio Clemens lleg\u00f3 a ser considerado un m\u00e1rtir cristiano, y esto dio lugar a la idea de la persecuci\u00f3n de Domiciano a los cristianos. Pero los historiadores ahora descartan esta idea (no hay ninguna persecuci\u00f3n claramente atestiguada de los cristianos antes de mediados del siglo III),[12] y asumen que a Flavio Clemens y Flavia Domitila se les acusaba simplemente de judaizar, y el primero quiz\u00e1s de circuncidarse[13]. Uno de los asesinos de Domiciano en el a\u00f1o 96 fue un mayordomo de Domitila llamado Esteban, lo que puede sugerir una venganza jud\u00eda.<\/p>\n La actitud de los Flavianos hacia los jud\u00edos era aparentemente doble. Por un lado, parec\u00edan decididos a acabar con la religi\u00f3n jud\u00eda, que ve\u00edan, correctamente, como la fuente del separatismo jud\u00edo. No contento con haber destruido el templo jud\u00edo de Jerusal\u00e9n, Vespasiano tambi\u00e9n orden\u00f3 la destrucci\u00f3n del de Leont\u00f3polis, en Egipto. En general, los romanos sol\u00edan integrar a los dioses vencidos con una ceremonia de evocatio deorum<\/em>, por la cual se le conced\u00eda al dios un santuario en Roma. Pero se consideraba inasimilable al dios Yahv\u00e9, por lo que sus objetos de culto se trataban como mero bot\u00edn, seg\u00fan Emily Schmidt: “El tratamiento del dios jud\u00edo puede verse como una inversi\u00f3n del t\u00edpico tratamiento o actitud romana hacia los dioses extranjeros, tal vez como una anti evocatio<\/em>“[14].<\/p>\n Por otro lado, la biograf\u00eda de Josefo muestra que Vespasiano y Tito no s\u00f3lo eran misericordiosos, sino incluso agradecidos con los jud\u00edos que se hab\u00edan unido a ellos en Judea. No hay contradicci\u00f3n entre estos dos aspectos de la pol\u00edtica jud\u00eda de los Flavianos: reprimieron el separatismo jud\u00edo y prohibieron el proselitismo jud\u00edo, pero fomentaron la asimilaci\u00f3n jud\u00eda. Los jud\u00edos asimilacionistas abandonaron la circuncisi\u00f3n y no ten\u00edan ninguna objeci\u00f3n a la asimilaci\u00f3n sincr\u00e9tica de Yahv\u00e9 con Zeus o J\u00fapiter. La misma pol\u00edtica b\u00e1sica doble fue seguida por los sucesores de los emperadores flavianos, Trajano (98-117) y Adriano (117-138)[15].<\/p>\n A partir de estos hechos b\u00e1sicos, y teniendo en cuenta el patr\u00f3n establecido por el c\u00edrculo sacerdotal de Esdras en Babilonia, no es dif\u00edcil imaginar lo que estaba pasando en Roma en el primer siglo. La teor\u00eda que voy a discutir ahora va as\u00ed: la piedra angular de la Iglesia Cat\u00f3lica Romana fue colocada por primera vez por una hermandad secreta de jud\u00edos sacerdotes, que hab\u00edan sido tra\u00eddos a Roma por Vespasiano y Tito en la secuela de la guerra jud\u00eda que destruy\u00f3 su templo en el a\u00f1o 70 DC. Algunos se hab\u00edan ganado el favor y la protecci\u00f3n de Vespasiano al entregarle el fabuloso tesoro del Templo que hizo posible su ascenso al trono imperial. Flavio Josefo, que se hab\u00eda pasado al bando de los romanos en Galilea y fue recompensado m\u00e1s all\u00e1 de toda medida por Vespasiano, puede haber sido un miembro influyente de ese c\u00edrculo jud\u00edo. Aquellos jud\u00edos poderosos, ricos y conscientes, usando la asimilaci\u00f3n para el disimulo, ten\u00edan el motivo, los medios y la oportunidad de fabricar la religi\u00f3n sincr\u00e9tica que podr\u00eda servir sus intereses como su caballo de Troya.<\/p>\n Tomo prestada esta teor\u00eda del libro de Flavio Barbiero La Sociedad Secreta de Mois\u00e9s<\/em><\/a>: La l\u00ednea de sangre mosaica y una conspiraci\u00f3n que abarca tres milenios<\/em> (2010). El autor no es un historiador entrenado, sino un cient\u00edfico con una mente inquisitiva y l\u00f3gica combinada con una gran imaginaci\u00f3n y un gusto por las teor\u00edas atractivas. Hay una gran cantidad de especulaciones en la gran historia que desarrolla, desde Mois\u00e9s hasta los tiempos modernos, pero es perspicaz y coherente. Al menos es un buen punto de partida para tratar de responder a la pregunta de c\u00f3mo los jud\u00edos crearon el cristianismo.<\/p>\n Seg\u00fan esta tesis, estos jud\u00edos sacerdotales tra\u00eddos a Roma por Vespasiano y Tito hab\u00edan aceptado la ruina de su naci\u00f3n y su Templo, pero no hab\u00edan renunciado a su programa b\u00edblico de supremac\u00eda jud\u00eda; simplemente lo reinterpretaron desde su nuevo punto de vista dentro de la capital del Imperio. A\u00fan celosos de su linaje y estrictamente endog\u00e1micos, retuvieron y transmitieron a su progenie el sentido de la misi\u00f3n de pavimentar para Israel un nuevo camino hacia su destino. \u00bfAcaso no se podr\u00eda suponer que, bajo su aparente lealtad al Emperador, compart\u00edan el mismo odio a Roma que transpira de los textos jud\u00edos del primer siglo como los Apocalipsis de Esdras y de Baruch? En Esdras, el rugido del Le\u00f3n de Jud\u00e1 hace que el \u00e1guila romana estalle en llamas, y un Israel reunificado y libre se vuelve a asentar en Palestina. En Baruch<\/em>, el Mes\u00edas derrota y destruye los ej\u00e9rcitos romanos, y luego lleva al emperador romano encadenado al Monte Si\u00f3n y lo mata[16]. El mismo odio hacia Roma impregna el Libro del Apocalipsis, donde a Roma, bajo el fino velo de “Babilonia”, se le llama la Gran Ramera, cuyas carnes ser\u00e1n consumadas por la ira de Dios, para dar paso a una nueva Jerusal\u00e9n.<\/p>\n Consideremos, como hip\u00f3tesis de trabajo, que estos sacerdotes jud\u00edos ten\u00edan un plan. Adoptaron la estrategia de la red que permiti\u00f3 a sus lejanos antepasados infiltrarse en la corte persa y as\u00ed recuperar el poder perdido bajo el patrocinio de Esdras<\/em>. Su objetivo, seg\u00fan Flavio Barbiero, era “tomar posesi\u00f3n de la reci\u00e9n nacida religi\u00f3n cristiana y transformarla en una s\u00f3lida base de poder para la familia sacerdotal” (p. 146). Ya exist\u00eda un culto a Cristo, atestiguado por las ep\u00edstolas de Pablo escritas en los a\u00f1os 50, pero los Evangelios le dieron un giro muy diferente en las d\u00e9cadas siguientes a la destrucci\u00f3n del Templo. Pedro, el que respetaba las leyes jud\u00edas, presentado como cabeza de la Iglesia de Jerusal\u00e9n por el Evangelio de Mateo, se convirti\u00f3 en el fundador del papado romano en la literatura atribuida a Clemente de Roma, estableciendo as\u00ed un v\u00ednculo espiritual entre Roma y Jerusal\u00e9n.<\/p>\n Para entender mejor la comunidad jud\u00eda que elabor\u00f3 estas tradiciones, debemos mirar m\u00e1s de cerca la primera guerra jud\u00eda. En el a\u00f1o 67, el emperador Ner\u00f3n envi\u00f3 a su comandante del ej\u00e9rcito Vespasiano para aplastar la rebeli\u00f3n de los saduceos sacerdotales que hab\u00edan desafiado el poder romano prohibiendo en el Templo los sacrificios diarios que se ofrec\u00edan en nombre y a expensas del Emperador. Cuando, tras la muerte de Ner\u00f3n, Vespasiano fue declarado emperador en diciembre del 69, su hijo Tito se qued\u00f3 en Judea para terminar de sofocar la rebeli\u00f3n. En el Libro vi de la Guerra Jud\u00eda<\/em> de Josefo, nos enteramos de que, desde la primera etapa del asedio de Tito a Jerusal\u00e9n, muchos jud\u00edos se pasaron a los romanos, incluyendo “cabezas de las familias sacerdotales”. Tito “no s\u00f3lo recibi\u00f3 a estos hombres muy amablemente, sino que […] les dijo que cuando se librara de esta guerra, les devolver\u00eda a cada uno de ellos sus posesiones de nuevo”. Hasta los \u00faltimos d\u00edas del asedio, seg\u00fan nos informa Josefo, algunos sacerdotes obtuvieron un \u00a0salvoconducto bajo la condici\u00f3n de que entregaran a Tito parte de las riquezas del Templo. Uno, llamado Jes\u00fas, entreg\u00f3 “dos candelabros similares a los que estaban depositados en el Templo, algunas mesas, algunos c\u00e1lices y copas para beber, todos de oro macizo. Tambi\u00e9n entregaron la cortina [la que se rasg\u00f3 al expirar Jes\u00fas seg\u00fan Mateo 27:51], las vestiduras del sumo sacerdote, con las piedras preciosas y muchos otros objetos utilizados para los sacrificios”. Otro, llamado Finees, presentado por Josefo como “el guardi\u00e1n del tesoro del Templo”, entreg\u00f3 “las t\u00fanicas y los cinturones de los sacerdotes, una gran cantidad de tela p\u00farpura y escarlata […] y una gran cantidad de los ornamentos sagrados, gracias a los cuales, aunque era prisionero de guerra, obtuvo la amnist\u00eda reservada a los desertores”.<\/p>\n Obviamente, esos sacerdotes negociaban sus vidas y su libertad a cambio de partes del tesoro del Templo. El Templo no era s\u00f3lo un santuario religioso, era, en un sentido real, un banco central y una b\u00f3veda gigante, que albergaba enormes cantidades de oro, plata y artefactos preciosos financiados por los diezmos de todo el mundo. Uno de los prop\u00f3sitos del Templo, podr\u00edamos decir, era satisfacer la codicia de Yahweh: “Llenar\u00e9 este Templo de gloria, dice Yahweh Sabaoth. La plata es m\u00eda, el oro es m\u00edo”. (Hageo 2:7).[17] Seg\u00fan el Pergamino de Cobre encontrado cerca del Mar Muerto en 1952, el tesoro del Templo, que ascend\u00eda a toneladas de oro, plata y objetos preciosos, hab\u00eda sido escondido durante el asedio en 64 lugares.[18] Por lo tanto, es l\u00f3gico suponer, como lo hace Barbiero, que Tito y Vespasiano s\u00f3lo pudieron apoderarse del mismo con la ayuda de sacerdotes de alto rango.<\/p>\n Este enorme bot\u00edn, cuya pieza central simb\u00f3lica era la enorme menor\u00e1<\/em> representada en el Arco de Tito (foto de apertura), ciertamente ayud\u00f3 a Vespasiano a ganarse la aclamaci\u00f3n de sus tropas como emperador, y luego a convencer al Senado. La construcci\u00f3n del Coliseo, entre los a\u00f1os 70 y 80, fue financiada enteramente por este bot\u00edn.<\/p>\n <\/p>\n Barbiero hace la suposici\u00f3n plausible de que Josefo hab\u00eda contribuido con su parte del tesoro del Templo a Vespasiano. Ya que Josefo juega un gran papel en la teor\u00eda de Barbiero, esbocemos lo que sabemos de \u00e9l. Nacido como Yosef ben Matityahu, pertenec\u00eda a la primera de las 24 clases sacerdotales por parte de padre, seg\u00fan su autobiograf\u00eda. Tambi\u00e9n se nos dice que, a mediados de sus veinte a\u00f1os, hab\u00eda pasado m\u00e1s de dos a\u00f1os en Roma para negociar con el emperador Ner\u00f3n la liberaci\u00f3n de algunos sacerdotes jud\u00edos que estaban sometidos a juicio, probablemente por evasi\u00f3n de impuestos (Vita 16). En el 67, a la edad de 30 a\u00f1os, sirvi\u00f3 como comandante del ej\u00e9rcito jud\u00edo, y luego desert\u00f3, pas\u00e1ndose al bando romano ese mismo a\u00f1o. Luego sirvi\u00f3 como traductor para Tito y Vespasiano, y pudo salvar la vida de doscientos cincuenta miembros de su c\u00edrculo sacerdotal. Cuando Vespasiano se convirti\u00f3 en emperador en el 69, le concedi\u00f3 a Josefo su libertad, y a partir de ese momento Josefo asumi\u00f3 el apellido del emperador. De vuelta en Roma, Vespasiano lo aloj\u00f3 en su propia villa (habiendo construido para s\u00ed mismo un lujoso palacio), y le concedi\u00f3 un salario vitalicio sacado del tesoro del Estado, as\u00ed como una enorme finca en Judea. Josefo dedic\u00f3 el resto de su vida a escribir libros que celebraban la historia jud\u00eda, siendo su \u00faltimo libro, Contra Apion<\/em>, una defensa del juda\u00edsmo. Hasta su muerte a principios de siglo, fue un miembro prominente de la comunidad jud\u00eda en Roma, que inclu\u00eda muchos sacerdotes m\u00e1s.<\/p>\n En el Libro IV de la Guerra Jud\u00eda<\/em>, Josefo cuenta c\u00f3mo, tras su captura en Galilea, fue llevado a Vespasiano, y convenci\u00f3 al general para que lo escuchara en privado. Vespasiano consinti\u00f3 y les pidi\u00f3 a todos que se retiraran, excepto a Tito y a dos de sus amigos. Entonces Josefo entreg\u00f3 a Vespasiano una “profec\u00eda” de Dios, seg\u00fan la cual Ner\u00f3n morir\u00eda pronto y Vespasiano ascender\u00eda al poder imperial. Vespasiano mantuvo a Josefo con \u00e9l y le recompens\u00f3 por su profec\u00eda cuando se hizo realidad. Este relato en particular carece de la credibilidad que generalmente caracteriza al libro de Josefo. Por lo tanto, Flavio Barbiero asume que debe entenderse como un eufemismo vergonzoso: en realidad, Josefo proporcion\u00f3 a Vespasiano no una predicci\u00f3n acerca de su ascenso a emperador, sino los medios para convertirse en emperador. Los medios eran el tesoro del Templo.<\/p>\n Josefo Flavio fue el primero de los sacerdotes jud\u00edos en caer a merced de los romanos, y fue el que obtuvo los mayores favores. Viendo que no s\u00f3lo pertenec\u00eda a la primera de las familias sacerdotales, sino que tambi\u00e9n ocupaba un puesto de responsabilidad muy alto en Israel, como gobernador de Galilea, y que ten\u00eda un profundo conocimiento del desierto de Jud\u00e1, donde hab\u00eda pasado tres a\u00f1os de su juventud, es leg\u00edtimo creer que conoc\u00eda las operaciones para esconder el tesoro y era perfectamente capaz de encontrar los escondites. Durante su audiencia privada con Vespasiano inmediatamente despu\u00e9s de su captura, Josefo debi\u00f3 negociar su propia seguridad y futura prosperidad a cambio del tesoro del Templo. La propuesta debi\u00f3 ser irresistible para el pobre general romano, que ve\u00eda as\u00ed la posibilidad de asegurarse los recursos necesarios para su ascenso al poder imperial. En esa ocasi\u00f3n, los dos probablemente hicieron un pacto, que iba a cambiar los destinos del mundo<\/em>.[19]<\/p>\n Esto, m\u00e1s que una “profec\u00eda”, puede explicar el extraordinario favor que Josefo recibi\u00f3 de Vespasiano, lo cual, admite Josefo, despert\u00f3 mucha envidia entre la aristocracia romana.<\/p>\n Sin embargo, hay algo de importancia en la profec\u00eda de Josefo que se le escapa a Barbiero. Se trata de la inversi\u00f3n de la expectativa mesi\u00e1nica que hab\u00eda provocado el levantamiento jud\u00edo contra Roma. Como escribe Josefo en La Guerra Jud\u00eda<\/em> (vi, 5), “lo que m\u00e1s movi\u00f3 al pueblo a rebelarse contra Roma fue una profec\u00eda ambigua de sus Escrituras de que ‘uno de su pa\u00eds iba a gobernar el mundo entero'”. Los jud\u00edos se equivocaron en su interpretaci\u00f3n de esta profec\u00eda, escribe Josefo, porque se aplicaba en realidad a Vespasiano, “que fue nombrado emperador en Judea”. Pero al darle la vuelta a la profec\u00eda mesi\u00e1nica jud\u00eda, \u00bfrenunci\u00f3 Josefo al destino de los jud\u00edos de gobernar el mundo, o estaba elaborando un Plan B, algo basado en el procurar aprovechar la fuerza del Imperio Romano en vez de oponerse a \u00e9l? En otras palabras, al reconocer a Vespasiano como el Mes\u00edas, \u00bfno estaba pensando en convertir a Roma en el instrumento a largo plazo del mesianismo jud\u00edo?<\/p>\n Tal vez incluso ya estaba pensando en la reconstrucci\u00f3n de Jerusal\u00e9n. Sabemos que los primeros cristianos jud\u00edos lo hicieron. Dos generaciones despu\u00e9s de Josefo, Justino M\u00e1rtir (muri\u00f3 en 165), nacido en Samaria y muy probablemente jud\u00edo, pero predicando en Roma, escribi\u00f3 en su Di\u00e1logo con Trif\u00f3n<\/em> que respond\u00eda afirmativamente a la pregunta: “\u00bfUstedes los cristianos realmente sostienen que este lugar, Jerusal\u00e9n, volver\u00e1 a levantarse, y creen realmente que su pueblo se reunir\u00e1 aqu\u00ed en la alegr\u00eda, bajo Cristo…?”[20]<\/p>\n Barbiero sugiere que Josefo estaba \u00edntimamente conectado con los padres fundadores jud\u00edos del cristianismo romano. Esta hip\u00f3tesis se deriva de los propios escritos de Josefo, que contienen tres referencias indirectas al cristianismo. El libro xviii, cap\u00edtulo 3 de las Antig\u00fcedades<\/em> incluye el famoso pasaje sobre Jes\u00fas, “un hombre sabio” y “un hacedor de obras maravillosas, un maestro de aquellos hombres que reciben la verdad con placer”, que fue condenado a la cruz por Pilato. “Y la tribu de cristianos, as\u00ed llamada por \u00e9l, no se ha extinguido en este d\u00eda.” La autenticidad de este Testimonium Flavianum<\/em> est\u00e1 en debate, pero la opini\u00f3n acad\u00e9mica dominante es que es un pasaje genuino con interpolaciones cristianas. En xviii, 5, Josefo habla con gran admiraci\u00f3n sobre “Juan, que fue llamado el Bautista”, subrayando su gran popularidad y condenando a Herodes Antipas por su asesinato. Este es considerado un pasaje gaut\u00e9ntico. En xx, 9, Josefo expresa la misma simpat\u00eda por Santiago, “el hermano de Jes\u00fas, que fue llamado Cristo”, y lo presenta como una figura respetada en los c\u00edrculos fariseos: cuando fue apedreado hasta morir por orden del sumo sacerdote Anan, provoc\u00f3 la indignaci\u00f3n de todos los celosos de la Ley, y caus\u00f3 en \u00faltima instancia el fin de la carrera de Anan. Esto tambi\u00e9n se considera un pasaje genuino, con una sola inserci\u00f3n cristiana, la referencia a que Jes\u00fas era llamado Cristo.<\/p>\n La tesis de Barbiero sobre la implicaci\u00f3n de Josefo con el cristianismo es veros\u00edmil. Si aceptamos el consenso de que la Iglesia Romana ya estaba organizada en los 90, con un obispo de sangre sacerdotal jud\u00eda, entonces es inconcebible que Josefo no estuviese consciente de ello. Siendo consciente de ello, podr\u00eda haber sido hostil o apoyarlo. Si adem\u00e1s aceptamos el consenso general sobre las referencias positivas de Josefo a Jes\u00fas, a su precursor Juan el Bautista y a su hermano Santiago, debemos concluir que Josefo apoy\u00f3 a la Iglesia Cristiana primitiva. \u00bfEra secretamente un cristiano, entonces?<\/p>\n La pregunta nos trae a la mente otro Josefo, un misterioso personaje presente en los cuatro evangelios can\u00f3nicos: Jos\u00e9 de Arimatea, quien asumi\u00f3 la responsabilidad del entierro de Jes\u00fas despu\u00e9s de su crucifixi\u00f3n. Se le describe como “un miembro prominente del Sanedr\u00edn” (Marcos 15:43), “un hombre bueno y recto” que “no hab\u00eda consentido lo que los dem\u00e1s hab\u00edan planeado y llevado a cabo” (Lucas 23:51), y “que era disc\u00edpulo de Jes\u00fas, aunque en secreto porque ten\u00eda miedo de los jud\u00edos” (Juan 19:38). Estaba suficientemente conectado con Pilato como para obtener su permiso para sacar el cuerpo de Jes\u00fas de la cruz y enterrarlo en su tumba privada. La raz\u00f3n por la que menciono a Jos\u00e9 de Arimatea aqu\u00ed es para sugerir -esta es mi contribuci\u00f3n a la teor\u00eda de Barbiero- que podr\u00eda haber sido un personaje inventado como un alter ego simb\u00f3lico de Flavio Josefo.<\/p>\n Dicho esto, Barbiero quiz\u00e1s sobreeval\u00fae la autenticidad de las referencias de Josefo a Jes\u00fas, Juan el Bautista y Santiago. La pregunta sigue sin resolverse. Personalmente, encuentro todo el Testimonio Flavio <\/em>sospechoso, y no s\u00f3lo parcialmente dudoso. Aparece en todos los manuscritos griegos, pero podr\u00eda haber sido a\u00f1adido en el segundo o tercer siglo. Volver\u00e9 sobre este problema.<\/p>\n <\/p>\n Para explicar c\u00f3mo una hermandad secreta de jud\u00edos sacerdotes pudo convertir el Imperio al culto de un mes\u00edas jud\u00edo, Barbiero plantea otra teor\u00eda audaz, basada en la \u00edntima conexi\u00f3n entre el cristianismo y el mitra\u00edsmo.<\/p>\n El culto a Mitra, asociado a Sol Invictus, experiment\u00f3 su r\u00e1pido desarrollo en Roma en la \u00e9poca de Domiciano. Como explica Barbiero, “no era una religi\u00f3n, sino una asociaci\u00f3n esot\u00e9rica reservada exclusivamente a los hombres”. Todos los participantes eran sacerdotes, por lo menos desde el cuarto nivel, y entre ellos s\u00f3lo hab\u00eda diferencias de jerarqu\u00eda determinadas por el nivel de iniciaci\u00f3n” (p\u00e1g. 164). La mayor\u00eda de las mitras<\/em> eran criptas subterr\u00e1neas, y muchas se encuentran ahora bajo las iglesias. “Tanto las fuentes escritas como los testimonios arqueol\u00f3gicos demuestran que desde Domiciano, Roma siempre fue el centro m\u00e1s importante de esta organizaci\u00f3n, que se hab\u00eda arraigado profundamente en el coraz\u00f3n mismo de la administraci\u00f3n imperial, tanto en el palacio como en la guardia pretoriana” (p. 160).<\/p>\n <\/p>\n Mitras sacrificando el toro, c. 150 d.C.<\/strong><\/em><\/p>\n Tertuliano y otros autores cristianos se\u00f1alan los paralelos entre el mitra\u00edsmo y el cristianismo y los atribuyen a la imitatio diabolica<\/em>: Se dice que Mitra es un demonio que imit\u00f3 los sacramentos cristianos para descarriar a los hombres. Los historiadores generalmente est\u00e1n de acuerdo en que la imitaci\u00f3n procedi\u00f3 en la direcci\u00f3n opuesta.<\/p>\n Los paralelismos no deben ser exagerados. Por ejemplo, el hecho de que tanto Mitra como Jes\u00fas nacieran en el solsticio de invierno no es significativo ya que es un desarrollo tard\u00edo en el caso del cristianismo (no tiene base en los Evangelios), y se aplica a muchas otras divinidades. Pero hay muchas otras similitudes, como la ceremonia mitraica “durante la cual se consum\u00eda pan y vino consagrado en memoria de la \u00faltima cena de Mitra” (p. 162).<\/p>\n La organizaci\u00f3n mitraica estaba presidida por un jefe supremo conocido como el pater patrum [abreviado como papa], quien gobernaba desde una gruta en la colina del Vaticano en Roma, donde Constantino hizo construir la bas\u00edlica de San Pedro en 322. Esta cueva del Vaticano (la llamada Phrygianum, que todav\u00eda est\u00e1, y se encuentra situada a los pies de la actual bas\u00edlica) fue la sede central del culto a Mitra hasta la muerte del \u00faltimo pater patrum, el senador Vectius Agorius Praetextatus, en el a\u00f1o 384 d.C. Inmediatamente despu\u00e9s, el culto a Mitra fue oficialmente abolido y la cueva fue ocupada por Sirio (el sucesor del obispo de Roma, D\u00e1maso), quien adopt\u00f3 el nombre del jefe de la secta mitraica, pater patrum, o Papa, por primera vez en la historia de la iglesia. Tambi\u00e9n adopt\u00f3 la misma vestimenta y se sent\u00f3 en la misma silla, que se convirti\u00f3 en el trono de San Pedro en Roma. Los s\u00edmbolos mitraicos estaban, y a\u00fan est\u00e1n, grabados en este trono. Sol Invictus Mithras, al que seg\u00fan los historiadores \u00a0rend\u00edan pleites\u00eda la mayor\u00eda de los senadores romanos, del ej\u00e9rcito y la administraci\u00f3n p\u00fablica, desapareci\u00f3 casi de golpe, sin ninguna matanza, persecuci\u00f3n, exilio o abjuraci\u00f3n forzada. De la noche a la ma\u00f1ana, el senado romano, basti\u00f3n del culto a Mitra, descubri\u00f3 que era totalmente cristiano. […] El asiento, las vestiduras, el t\u00edtulo y las prerrogativas del pater patrum no fueron las \u00fanicas cosas que pasaron del culto en torno a Mitra a la iglesia. Adem\u00e1s de las similitudes en doctrinas y rituales, encontramos en las iglesias cristianas la mesa de piedra frente al \u00e1bside, el altar donde se exhib\u00eda el disco del sol en la mitraea. Tambi\u00e9n encontramos la estola, el tocado del obispo (todav\u00eda llamado mitra), las vestiduras, los colores, el uso del incienso, el aspergillum, las velas encendidas delante del altar, las genuflexiones y, no menos importante, el objeto m\u00e1s representativo que domina el rito cristiano: la exposici\u00f3n de la Hostia, que est\u00e1 contenida en un disco del que sale el sol, la custodia.<\/em> (pp. 162-164)<\/p>\n El culto de Mitra, se\u00f1ala Barbiero, “prosper\u00f3 casi en simbiosis con el cristianismo, hasta el punto de que las iglesias cristianas muy a menudo se elevan encima o al lado de los lugares de culto mitraico. Este es el caso, por ejemplo, de las bas\u00edlicas de San Clemente, San Esteban Rotundo, Santa Prisca, etc., que surgieron sobre grutas dedicadas al culto del Sol Invictus<\/em>” (p. 32).<\/p>\n Barbiero concluye que el mitra\u00edsmo y el cristianismo “no eran dos religiones en competencia, como a menudo leemos, sino dos instituciones de naturaleza diferente que estaban estrechamente conectadas”, o “dos caras de la misma moneda”. (p. 163). Recoge que el culto inici\u00e1tico de Mitra se hab\u00eda transformado bajo los Flavios en una especie de masoner\u00eda, que promov\u00eda el cristianismo como una religi\u00f3n exot\u00e9rica para el pueblo.<\/p>\n Pero obviamente el cristianismo no se deriva totalmente del mitra\u00edsmo: tiene ra\u00edces jud\u00edas. \u00bfC\u00f3mo se mezcl\u00f3 el mitra\u00edsmo con el juda\u00edsmo? Esto Barbiero lo explica con la hip\u00f3tesis de que, bajo los Flavianos, los jud\u00edos sacerdotales entraron al sacerdocio mitraico en una estrategia concertada para apoderarse de \u00e9l y judaizarlo, tal como lo har\u00edan con la masoner\u00eda siglos despu\u00e9s. Desde la \u00e9poca de Domiciano, los seguidores del mitra\u00edsmo “eran libertos de la familia imperial de los Flavios y, por consiguiente, con toda probabilidad, jud\u00edos romanizados” (p. 159). “Sol Invictus Mithras era la cobertura tras la cual se escond\u00eda la organizaci\u00f3n esot\u00e9rica secreta recreada en Roma por la familia sacerdotal mosaica que hab\u00eda escapado de la masacre de Jerusal\u00e9n” (p. 173). No estoy convencido del todo al respecto. La hip\u00f3tesis de la toma del mitra\u00edsmo por parte de los sacerdotes jud\u00edos es un eslab\u00f3n d\u00e9bil en la cadena de hip\u00f3tesis de Barbiero. El mitra\u00edsmo claramente no es un culto jud\u00edo, y la tesis de su subversi\u00f3n por parte de los sacerdotes jud\u00edos en el siglo I d.C. descansa en muy pocas pruebas.<\/p>\n Sin embargo, una mirada m\u00e1s cercana al origen oriental del mitra\u00edsmo puede iluminarnos. Plutarco explica (Vidas paralelas<\/em> xxiv, 7) que el culto a Mitra fue tra\u00eddo por primera vez desde Asia Menor despu\u00e9s de que Pompeyo derrotara a Mitr\u00eddates VI, rey del Ponto, quien, aunque de origen persa, gobernaba sobre Anatolia. Mitra es un dios frigio -de ah\u00ed su sombrero frigio-, y Mitridates significa “regalo de Mitra”. El historiador romano Appian de Alejandr\u00eda, en Las guerras extranjeras<\/em>, describe la tercera guerra mitrid\u00e1ctica como una guerra mundial, y dice que “al final trajo la mayor ganancia a los romanos; ya que ensanch\u00f3 los l\u00edmites de su dominio desde la puesta del sol hasta el r\u00edo \u00c9ufrates”[21]. Mientras buscaba m\u00e1s informaci\u00f3n sobre el mitra\u00edsmo, me encontr\u00e9 con un libro de Cyril Glass\u00e9 titulado Mitra\u00edsmo, el virus que destruy\u00f3 Roma<\/em><\/a> (2016). Aunque el libro es de calidad no acad\u00e9mica, vale la pena tomar en cuenta su visi\u00f3n central:<\/p>\n La religi\u00f3n del mitra\u00edsmo fue un caballo de Troya dejado en la playa por Mitr\u00eddates VI del Ponto como veneno para que los romanos lo tomaran endulzado. […] El mitra\u00edsmo era un culto a s\u00ed mismo dise\u00f1ado para subvertir y destruir a Roma. Ese culto ha dejado su marca en la civilizaci\u00f3n occidental<\/em>.<\/p>\n Seg\u00fan Glass\u00e9, el sacrificio del toro, o Taurobolium<\/em>, que est\u00e1 representado en innumerables relieves, era un cr\u00edptico llamado a la venganza contra Roma: el toro representa a Roma, mientras que Mitra es Mitr\u00eddates , Esta teor\u00eda es sorprendentemente similar a la de Barbiero, s\u00f3lo que con frigios en lugar de jud\u00edos en el papel de conspiradores contra Roma. La tesis de Glass\u00e9 es tan infundada como la de Barbiero, pero ambas pueden reforzarse mutuamente si recordamos que frigios y jud\u00edos hab\u00edan sido vencidos por Pompeyo durante la misma campa\u00f1a militar en el 63 A.C. Adem\u00e1s hab\u00eda muchos jud\u00edos en el reino deMitr\u00eddates, y muchos cautivos de ambas naciones fueron llevados juntos a Roma en el primer siglo A.C. Compartieron un destino com\u00fan y, quiz\u00e1s, una aspiraci\u00f3n com\u00fan de venganza.<\/p>\n No se me ocurre ninguna raz\u00f3n en particular por la que el toro simbolizar\u00eda Roma para los jud\u00edos cautivos de Pompeyo, pero encontr\u00e9 un detalle interesante que podr\u00eda explicar por qu\u00e9 s\u00ed podr\u00eda haber simbolizado el poder\u00edo militar de Roma para los jud\u00edos cautivos de Vespasiano: la Legio X Fretensis<\/em> romana, que estuvo involucrada de manera central durante la guerra jud\u00eda -desde el ataque a Judea en el 66 hasta la captura de Masada en el 72, pasando por el asedio a Jerusal\u00e9n que llev\u00f3 a la destrucci\u00f3n del Templo en el 70-, ten\u00eda el toro como s\u00edmbolo.<\/p>\n <\/p>\n El estandarte de la Legio X Fretensis, y un aureus de oro en su honor<\/strong><\/em><\/p>\n Barbiero nos est\u00e1 llevando a la noci\u00f3n de que los jud\u00edos no s\u00f3lo impusieron una religi\u00f3n jud\u00eda al Imperio, sino que en realidad asumieron su liderazgo cuando el emperador fue reemplazado por el Papa:<\/p>\n El objetivo de la estrategia era la completa sustituci\u00f3n de la clase dirigente del Imperio Romano con los descendientes de la familia sacerdotal que hab\u00edan sobrevivido a la destrucci\u00f3n de Jerusal\u00e9n y el Templo. Este resultado se logr\u00f3 en menos de tres siglos; para entonces todas las religiones antiguas hab\u00edan sido eliminadas y sustituidas por el cristianismo, y la primitiva nobleza romana hab\u00eda sido virtualmente aniquilada y reemplazada por miembros de la familia de origen sacerdotal que hab\u00edan acumulado todo el poder y la riqueza del Imperio<\/em>. (p. 184)<\/p>\n Esta tesis es la base de las dos \u00faltimas partes del libro de Barbiero, sobre “Las ra\u00edces judeocristianas de la aristocracia europea” y sobre “los or\u00edgenes mosaicos de las sociedades secretas modernas”. Estas partes, aunque son bastante especulativas, est\u00e1n llenas de chismes adicionales y nuevos conocimientos sobre esos misteriosos y fascinantes temas. La primera parte sobre el linaje de Mois\u00e9s tambi\u00e9n es original y bien argumentada, pero no es directamente relevante para el tema que se discute aqu\u00ed.<\/p>\n <\/p>\n Considero el libro de Barbiero como un intento fruct\u00edfero para resolver el misterio de c\u00f3mo los jud\u00edos crearon el cristianismo y lo convirtieron en la religi\u00f3n romana. Pero ciertamente no ofrece una reconstituci\u00f3n de la historia completa. Sucediereon muchas cosas en los tres siglos siguientes, que necesitan ser aclaradas. Un contexto importante, que rara vez se toma en cuenta, es la “Crisis del Tercer Siglo” (235-284), durante la cual “el Imperio romano casi se derrumb\u00f3 bajo las presiones combinadas de las invasiones b\u00e1rbaras y las migraciones al territorio romano, las guerras civiles, las rebeliones campesinas, la inestabilidad pol\u00edtica” (Wikipedia<\/em><\/a>), pero tambi\u00e9n los eventos catacl\u00edsmicos y las enfermedades generalizadas como la Peste de Cipriano (c. 22] En este contexto, el sabor apocal\u00edptico del cristianismo temprano debe haber sido un factor clave de su \u00e9xito. Curiosamente, el Apocalipsis, el \u00faltimo texto incluido en el canon cristiano, es considerado por algunos estudiosos como una versi\u00f3n \u00a0cristianizada de un apocalipsis jud\u00edo, porque, excepto por su pr\u00f3logo y ep\u00edlogo (de 4:1 a 22:15), no contiene ning\u00fan motivo cristiano reconocible.[23]<\/p>\n Tambi\u00e9n hay dos importantes bloques de construcci\u00f3n del cristianismo que el enfoque de Barbiero en el mitra\u00edsmo romano deja fuera: la vida de Jes\u00fas en los Evangelios, y el Cristo m\u00edstico de Pablo. \u00bfC\u00f3mo se originaron y c\u00f3mo se integraron? La conexi\u00f3n entre ellos es uno de los problemas m\u00e1s dif\u00edciles del nacimiento del cristianismo. Porque, como escribe el Conde Doherty en El rompecabezas de Jes\u00fas<\/em><\/a>: \u00bfcomenz\u00f3 el cristianismo con un Cristo m\u00edtico <\/em>(1999), un libro que ha enviado una onda expansiva entre los especialistas de Jes\u00fas (aqu\u00ed citado partir del pdf<\/a> de 600 p\u00e1ginas): “Ni una sola vez Pablo o cualquier otro escritor de ep\u00edstolas del primer siglo identifica a su divino Cristo Jes\u00fas con el hombre hist\u00f3rico reciente conocido por los Evangelios. Ni atribuyen las ense\u00f1anzas \u00e9ticas que presentan a tal hombre”. Cristo es simplemente para Pablo una deidad celestial que ha soportado una prueba de encarnaci\u00f3n, muerte, sepultura y resurrecci\u00f3n, y que se comunica con sus devotos a trav\u00e9s de sue\u00f1os, visiones y profec\u00edas. Tal cristolog\u00eda gn\u00f3stica tiene ra\u00edces en las religiones de misterio anteriores a Jes\u00fas. Es dif\u00edcil explicar c\u00f3mo un Jes\u00fas humano pudo transformarse en un Cristo tan divino en unas pocas d\u00e9cadas, estando en vida de aquellos que lo conocieron.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 La primera dificultad es que la gran mayor\u00eda de los primeros cristianos eran, obviamente, jud\u00edos. “Dios es uno”, dice el m\u00e1s fundamental de los principios teol\u00f3gicos jud\u00edos. Adem\u00e1s, la mente jud\u00eda ten\u00eda una obsesi\u00f3n contra la asociaci\u00f3n de cualquier cosa humana con Dios. No pod\u00eda ser representado ni siquiera por la sugerencia de una imagen humana, y miles de jud\u00edos hab\u00edan desnudado sus cuellos ante las espadas de Pilatos simplemente para protestar contra la implantaci\u00f3n de normas militares que conllevaban la imagen del C\u00e9sar a la vista del Templo. La idea de que un hombre era una parte literal de Dios habr\u00eda sido recibida por cualquier jud\u00edo con horror y apoplej\u00eda.<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Y a\u00fan as\u00ed se nos insta a creer que los jud\u00edos fueron inmediatamente llevados a elevar a Jes\u00fas de Nazaret a niveles divinos sin precedentes en toda la historia de la religi\u00f3n humana. Deber\u00edamos creer no s\u00f3lo que identificaron a un criminal crucificado con el antiguo Dios de Abraham, sino que recorrieron el imperio y pr\u00e1cticamente de la noche a la ma\u00f1ana convirtieron a un gran n\u00famero de jud\u00edos m\u00e1s con la misma propuesta escandalosa y completamente blasfematoria. A pocos a\u00f1os de la supuesta muerte de Jes\u00fas, sabemos de comunidades cristianas en muchas de las principales ciudades del imperio, todas las cuales presumiblemente aceptaron que un hombre que nunca hab\u00edan conocido, crucificado como rebelde pol\u00edtico en una colina en las afueras de Jerusal\u00e9n, hab\u00eda resucitado de entre los muertos y era de hecho el preexistente Hijo de Dios, creador, sustentador y redentor del mundo. Dado que muchas de las comunidades cristianas en las que obraba Pablo\u00a0 exist\u00edan antes de que \u00e9l llegara, y dado que las Ep\u00edstolas de Pablo no aporta validaci\u00f3n al cuadro que dibujan los Hechos, acerca de una intensa actividad misionera por parte del grupo de Jerusal\u00e9n en torno a Pedro y Santiago, hay que reconocer que la historia no registra qui\u00e9n realiz\u00f3 esta asombrosa haza\u00f1a<\/em>.[24]<\/p>\n La forma m\u00e1s simple de superar esta dificultad es asumir que la transformaci\u00f3n del Jes\u00fas humano en el Cristo c\u00f3smico (o al rev\u00e9s, como sugiere Doherty) no ocurri\u00f3 espont\u00e1neamente, sino que fue dise\u00f1ada conectando varios elementos, con el objetivo de fabricar una religi\u00f3n sincr\u00e9tica judeo-helen\u00edstica.<\/p>\n Las cartas de Pablo fueron recogidas por primera vez en la primera mitad del segundo siglo por Marci\u00f3n de Sinope, quien tambi\u00e9n incluy\u00f3 en su canon una breve evangelizaci\u00f3n (fue el primero en utilizar el t\u00e9rmino), pero rechazando el Tanakh jud\u00edo. Alrededor del 208, Tertuliano, un cartagin\u00e9s de probable origen jud\u00edo, se quej\u00f3 de que “la her\u00e9tica tradici\u00f3n de Marci\u00f3n llenaba el universo” (Contra Marci\u00f3n v, 19). Tambi\u00e9n nos cuenta que, en la \u00e9poca de Marci\u00f3n, otro maestro gn\u00f3stico llamado Valent\u00edn estuvo a punto de convertirse en obispo de Roma. En el siglo III d.C. apareci\u00f3 el Mani persa, que se llamaba a s\u00ed mismo “ap\u00f3stol de Jesucristo”, pero rechazaba cualquier influencia jud\u00eda. “Maniqueos” se convirti\u00f3 en la etiqueta que la Iglesia cat\u00f3lica puso a todos los movimientos gn\u00f3sticos que ven\u00edan de Oriente, como los paulistas de Anatolia en el siglo VIII, o los bogomilos de Bulgaria en el siglo IX, los antepasados de los c\u00e1taros que fueron erradicados del sur de Francia a principios del siglo XIII. Todos estos movimientos, que pueden ser vistos como sucesivas oleadas de un mismo movimiento, veneraban a Pablo y rechazaban la Tor\u00e1, cuyo dios consideraban como un demiurgo malvado, un demonio enga\u00f1oso o una ficci\u00f3n maligna.<\/p>\n En el siglo IV, el cristianismo gn\u00f3stico segu\u00eda vivo y floreciente. La biblioteca mon\u00e1stica de la Hermandad Egipcia de San Pacomio, el primer monasterio cristiano conocido, conten\u00eda una gran riqueza de literatura gn\u00f3stica (incluyendo el Evangelio de Tom\u00e1s), entre libros plat\u00f3nicos, herm\u00e9ticos y zoro\u00e1stricos. Como el erudito del Nuevo Testamento Robert Price cuenta en su libro fascinante \u00a0Deconstruyendo a Jes\u00fas<\/em><\/a> (2000):<\/p>\n Al parecer, cuando los monjes recibieron la Carta de Pascua de Atanasio en el a\u00f1o 367 E.C., que contiene la primera lista conocida de los veintisiete libros can\u00f3nicos del Nuevo Testamento, advirtiendo a los fieles que no leyeran otros, es probable que los hermanos decidieran esconder sus apreciados evangelios “her\u00e9ticos”, para que no cayeran en manos de los quemadores de libros eclesi\u00e1sticos<\/em>[25].<\/p>\n Todos estos c\u00f3dices fueron escondidos en un cementerio en Nag Hammadi, donde fueron descubiertos en 1945, revolucionando nuestra imagen del cristianismo temprano. Los eruditos han empezado a cuestionar la visi\u00f3n tradicional de los gn\u00f3sticos como disidentes que se separaron de la Iglesia Ortodoxa; por el contrario, los gn\u00f3sticos que nunca dejaron de afirmar que los cat\u00f3licos romanos estaban corrompiendo el Evangelio bajo la influencia jud\u00eda, pueden haber tenido raz\u00f3n de punta a cabo.<\/p>\n Al comenzar a profundizar en estas cuestiones, descubr\u00ed que una nueva escuela de ex\u00e9gesis del Nuevo Testamento, iniciada por El Rompecabezas de Jes\u00fas<\/em> de Earl Doherty, afirma que el cristianismo naci\u00f3 en el mito, no en la historia. Yo siempre hab\u00eda asumido que la biograf\u00eda de Jes\u00fas era demasiado plausible hist\u00f3ricamente para ser una ficci\u00f3n. A los treinta a\u00f1os, me hab\u00eda fascinado la b\u00fasqueda del Jes\u00fas hist\u00f3rico y escrib\u00ed un libro sobre la relaci\u00f3n “legendaria” entre Jes\u00fas y Juan el Bautista, en el que se argumentaba que los escritores de los Evangelios falsificaban las profec\u00edas genuinas de Juan y forjaban falsas alabanzas a Jes\u00fas por parte de Juan, y que muchos de los dichos atribuidos a Jes\u00fas (del hipot\u00e9tico documento Q) se atribu\u00edan originalmente a Juan[26]. No obstante, no dudaba de la historicidad de Jes\u00fas. Pero mi reciente incursi\u00f3n en la teor\u00eda del “Mito de Cristo” me ha convencido de que el Jes\u00fas hist\u00f3rico es m\u00e1s escurridizo de lo que pensaba. Los Evangelios, por un lado, no son tan antiguos como se admite generalmente (entre los 70 y los 90), ya que, como se\u00f1ala Doherty:<\/p>\n S\u00f3lo en Justino M\u00e1rtir, escribiendo en los 150, encontramos las primeras citas identificables de algunos de los Evangelios, aunque \u00e9l los llama simplemente “memorias de los Ap\u00f3stoles”, sin nombres. Y esas citas no suelen coincidir con los textos de las versiones can\u00f3nicas que tenemos ahora, lo que demuestra que tales documentos estaban todav\u00eda en proceso de evoluci\u00f3n y revisi\u00f3n<\/em>.[27]<\/p>\n La fecha de finales del siglo II para la primera narraci\u00f3n sobre Jes\u00fas es coherente con la hip\u00f3tesis -que va en contra de la teor\u00eda de Barbiero- de que las Antig\u00fcedades de los Jud\u00edos<\/em> de Josefo conten\u00edan originalmente una referencia a Juan el Bautista y otra a Santiago el Justo, pero ninguna referencia a Jes\u00fas, al cual m\u00e1s tarde se insert\u00f3 entre ambos para que Juan pudiera ser presentado como el precursor de Jes\u00fas y Santiago como su hermano y heredero. Hay muchas pruebas de que Santiago, como Juan el Bautista antes que \u00e9l, era una figura famosa por derecho propio. Seg\u00fan el biblista Robert Eisenman, autor de Santiago, el Hermano de Jes\u00fas: La Clave para Desentra\u00f1ar los Secretos de la Cristiandad Primitiva y los Rollos del Mar Muerto<\/em><\/a>, Santiago es id\u00e9ntico al “Maestro de la Rectitud” mencionado en algunos de los Rollos del Mar Muerto, a los que se les atribuy\u00f3 una fecha oficial de forma precipitada. Extra\u00f1amente, la persona de Santiago se opone casi diametralmente al Jes\u00fas de las Escrituras y a nuestra comprensi\u00f3n com\u00fan de \u00e9l. Mientras que el Jes\u00fas de la Escritura es anti-nacionalista, cosmopolita, antinomiano – es decir, opuesto a la aplicaci\u00f3n directa de la Ley Jud\u00eda – y acepta a los extranjeros y a otras personas clasificadas como impuras, el Santiago hist\u00f3rico aparece como observador celoso de la Ley, y rechaza a los extranjeros y a las personas consideradas impuras en general.<\/em><\/p>\n Su muerte por apedreamiento en el 62 “estaba conectada en la imaginaci\u00f3n popular con la ca\u00edda de Jerusal\u00e9n en el 70 CE de una manera que no puede coincidir con la muerte de Jes\u00fas unas cuatro d\u00e9cadas antes”.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Ciertas variantes manuscritas de las obras de Josefo, reportadas por padres de la Iglesia como Or\u00edgenes, Eusebio y Jer\u00f3nimo, los cuales estuvieron todos en alg\u00fan momento viviendo en Palestina, contienen materiales que asocian la ca\u00edda de Jerusal\u00e9n con la muerte de Santiago, no con la muerte de Jes\u00fas. Sus estridentes protestas, en particular las de Or\u00edgenes y Eusebio, posiblemente tengan que ver con la desaparici\u00f3n de este pasaje de todos los manuscritos de la <\/em>Guerra Jud\u00eda que han llegado hasta nosotros<\/em>.[28]<\/p>\n Los estudiosos de Jes\u00fas de la escuela “mitol\u00f3gica”, por oposici\u00f3n a la “historicista”, se abstienen de expresar su conclusi\u00f3n en t\u00e9rminos conspirativos. En su libro On the Historicity of Jesus, Why We Might Have Reason For Doubt<\/a>, Richard Carrier escribe: “el Jes\u00fas que conocemos se origin\u00f3 como un personaje m\u00edtico”, y s\u00f3lo “m\u00e1s tarde, este mito pretendi\u00f3, equivocadamente, descansar en sucesos hist\u00f3ricos (o deliberadamente reenvasado de esa manera)”. Pero encuentro esto de \u00a0“equivocado” muy poco probable, y “deliberadamente reempaquetado” mucho m\u00e1s probable. Carrier sugiere en realidad que la estructura fundamental de la narraci\u00f3n se tom\u00f3 prestada de un patr\u00f3n m\u00edtico romano bien establecido:<\/p>\n En la biograf\u00eda por Plutarco de R\u00f3mulo, el fundador de Roma, se nos dice que era el hijo de Dios, nacido de un pastor humilde; luego, como hombre se convierte en amado por el pueblo, aclamado como rey y asesinado por la \u00e9lite intrigante; al final se levanta de entre los muertos, se le aparece a un amigo para que le d\u00e9 la buena noticia a su pueblo y asciende al cielo para gobernar desde lo alto. \u00a1Igual que Jes\u00fas!<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Plutarco tambi\u00e9n nos habla de las ceremonias p\u00fablicas anuales que a\u00fan se realizaban, celebrando el d\u00eda en que R\u00f3mulo ascendi\u00f3 al cielo. La historia sagrada contada en este evento era b\u00e1sicamente la siguiente: al final de su vida, en medio de rumores de que hab\u00eda sido asesinado por una conspiraci\u00f3n del Senado (al igual que Jes\u00fas fue “asesinado” por una conspiraci\u00f3n de los jud\u00edos – de hecho por el Sanedr\u00edn, el equivalente jud\u00edo del Senado), el sol se oscureci\u00f3 (al igual que cuando Jes\u00fas muri\u00f3), y el cuerpo de R\u00f3mulo se desvaneci\u00f3 (al igual que el de Jes\u00fas). La gente quer\u00eda buscarlo pero el Senado les dijo que no lo hicieran, “porque hab\u00eda resucitado para unirse a los dioses” (tal y como un misterioso joven cuenta a las mujeres en el Evangelio de Marcos). La mayor\u00eda se fue feliz, esperando cosas buenas de su nuevo dios, pero “algunos dudaron” (tal como todos los evangelios posteriores dicen, en el caso de Jes\u00fas: Mt 28.17; Lc 24.11; Jn 20.24-25; incluso Mc 16.8 implica esto). Poco despu\u00e9s, Pr\u00f3culo, un amigo \u00edntimo de R\u00f3mulo, inform\u00f3 que se hab\u00eda encontrado con R\u00f3mulo “en el camino” entre Roma y una ciudad cercana y le pregunt\u00f3: “\u00bfPor qu\u00e9 nos has abandonado?”, a lo que R\u00f3mulo respondi\u00f3 que siempre hab\u00eda sido un dios pero que hab\u00eda bajado a la tierra y se hab\u00eda encarnado para establecer un gran reino, y que ahora ten\u00eda que volver a su casa en el cielo (m\u00e1s o menos como sucede con Cleof\u00e1s en Lc 24.13-32). Entonces R\u00f3mulo le dijo a su amigo que le dijera a los romanos que si eran virtuosos tendr\u00edan todo el poder mundano.<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 El relato de Tito Livio [Historia 1.16], al igual que el de Marcos, subraya que “el miedo y el duelo” mantuvieron al pueblo “en silencio durante mucho tiempo”, y s\u00f3lo m\u00e1s tarde proclamaron a R\u00f3mulo “Dios, Hijo de Dios, Rey y Padre”, coincidiendo as\u00ed con lo de Marcos “no dijeron nada a nadie”, aunque obviamente suponiendo que de alguna manera se corriera la voz.<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Parece pues que Marcos est\u00e1 moldeando a Jes\u00fas como el nuevo R\u00f3mulo, con un mensaje nuevo y superior, estableciendo un reino nuevo y superior. El cuento romulano se parece mucho a un modelo subyacente como un esqueleto para la narraci\u00f3n de la Pasi\u00f3n: un gran hombre, fundador de un gran reino, a pesar de venir de or\u00edgenes humildes y de un parentesco sospechoso, es en realidad un hijo de Dios encarnado, pero muere como resultado de una conspiraci\u00f3n del consejo gobernante; entonces una oscuridad cubre la tierra a su muerte y su cuerpo se desvanece, tras lo cual los que le siguieron huyen con miedo (al igual que las mujeres del Evangelio, Mc 16. 8; y los hombres, Mc 14.50-52); entonces, y como ellos tambi\u00e9n, buscaron su cuerpo pero se les dicjo que ya no estaba all\u00ed, que hab\u00eda resucitado; y mientras algunos dudan, entonces el dios resucitado “aparece” para seleccionar a los mejores seguidores para difundir su evangelio.<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Hay muchas diferencias entre los dos relatos, seguramente. Pero las similitudes son demasiado numerosas para ser una coincidencia y las diferencias pueden ser deliberadas. Por ejemplo, el reino material de R\u00f3mulo que favorece a los poderosos se transforma en uno espiritual que favorece a los humildes. En todo caso, resulta que la narraci\u00f3n de la pasi\u00f3n cristiana es una transvaloraci\u00f3n intencional de la ceremonia del Imperio Romano de la encarnaci\u00f3n, muerte y resurrecci\u00f3n de su propio salvador fundador. Otros elementos han sido a\u00f1adidos a los Evangelios – la historia fuertemente judaizada, y muchos otros s\u00edmbolos y motivos que se han introducido para transformarla – y la narraci\u00f3n ha sido modificada, en estructura y contenido, para adaptarse a la propia agenda moral y espiritual de los cristianos. Pero la estructura b\u00e1sica no es original<\/em>.[29]<\/p>\n Otros estudiosos han identificado desde hace tiempo fuertes paralelos entre la vida de Jes\u00fas y las legendarias vidas de hombres santos como Pit\u00e1goras o Apolonio de Tiana. Sobre este \u00faltimo, por ejemplo, encontramos que Apolonio, despu\u00e9s de una vida de hacer milagros, curar a los enfermos, expulsar demonios y resucitar a los muertos, fue entregado por sus enemigos a las autoridades romanas. “A\u00fan as\u00ed”, seg\u00fan el resumen de Bart D. Ehrman, “despu\u00e9s de dejar este mundo, volvi\u00f3 a reunirse con sus seguidores para convencerles de que no estaba realmente muerto sino que segu\u00eda viviendo en el reino celestial”[30].<\/p>\n Robert Price ha se\u00f1alado otra fuente probable para las narraciones del Evangelio: las novelas griegas como Quereas y Cal\u00edrroe<\/em> de Chariton, el Cuento Efesino<\/em> de Xenofonte, la Leucemia <\/em>y el Clitofonte<\/em> de Aquiles Tatio, el Cuento Et\u00edope<\/em> de Heliodoro, Dafne y Cloe<\/em> de Longus, la Historia<\/em> de Apolonio<\/em>, El Rey de Tiro<\/em>, El Cuento Babil\u00f3nico<\/em> de Iamblico y el Sat\u00edrico<\/em>n de Petronio.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Tres grandes dispositivos argumentales se repiten como mecanismo de relojer\u00eda en las antiguas novelas, que sol\u00edan tratar de las aventuras de amantes estelares, algo as\u00ed como las modernas telenovelas. Primero, la hero\u00edna, una princesa, cae en coma y es dada por muerta. Enterrada prematuramente, se despierta m\u00e1s tarde en la oscuridad de la tumba. Ir\u00f3nicamente, es descubierta en el \u00faltimo momento por ladrones de tumbas que han irrumpido en el opulento mausoleo, buscando ricos adornos funerarios […]. Los ladrones le salvan la vida pero tambi\u00e9n la secuestran, ya que no pueden permitirse dejar un testigo. Cuando su prometido o marido llega a la tumba para llorar, se queda at\u00f3nito al encontrar la tumba vac\u00eda y adivina por primera vez que su amada ha sido llevada al cielo porque los dioses envidiaban su belleza. En un cuento, el hombre ve el sudario dejado atr\u00e1s, como en Juan 20:6-7.<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 El segundo dispositivo de la trama es que el h\u00e9roe, al darse cuenta finalmente de lo que ha sucedido, va en busca de la hero\u00edna y finalmente se topa con un gobernador o rey que la quiere y, para quit\u00e1rselo de encima, hace que el h\u00e9roe sea crucificado. Por supuesto, el h\u00e9roe siempre se las arregla para obtener un perd\u00f3n de \u00faltima hora, incluso una vez fijado a la cruz, o sobrevive a la crucifixi\u00f3n por alg\u00fan golpe de suerte. A veces la hero\u00edna tambi\u00e9n parece haber muerto pero termina viva despu\u00e9s de todo.<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Tercero, para terminar, tenemos un feliz reencuentro de los dos amantes, cada uno de los cuales hab\u00eda perdido la esperanza de volver a ver al otro. Al principio no pueden creer que no est\u00e9n viendo a un fantasma, que viene a consolarlos. Al final, pasan del descreimiento a la alegr\u00eda, y est\u00e1n convencidos de que su amado ha sobrevivido en carne y hueso.<\/em><\/p>\n Como he se\u00f1alado en mi art\u00edculo “La Crucifixi\u00f3n de la Diosa”, el patr\u00f3n del romance amoroso sigue siendo evidente en el Evangelio, donde el Jes\u00fas resucitado se aparece primero a su antigua seguidora Mar\u00eda Magdalena, quien, tal vez por esa raz\u00f3n, fue considerada como el alma gemela de Jes\u00fas por muchos gn\u00f3sticos[31].<\/p>\n Price cita el siguiente pasaje de Quereas y Cal\u00edrroe<\/em>, donde Quereas descubre la tumba vac\u00eda de su amada:<\/p>\n Cuando lleg\u00f3 a la tumba, encontr\u00f3 que las piedras hab\u00edan sido movidas y la entrada estaba abierta. Qued\u00f3 asombrado al ver esto y se sinti\u00f3 abrumado por una terrible perplejidad, ante lo que hab\u00eda sucedido. Cf. Marcos 16:5] Un rumor – un mensajero r\u00e1pido – le entreg\u00f3 a los siracusanos esta asombrosa noticia. R\u00e1pidamente se amontonaron alrededor de la tumba, pero nadie se atrevi\u00f3 a entrar hasta que Herm\u00f3crates dio la orden de hacerlo. [Cf. Juan 20:4-6] El hombre que entr\u00f3 report\u00f3 toda la situaci\u00f3n con precisi\u00f3n. Cf. Juan 19:35; 21:24] Parec\u00eda incre\u00edble que ni siquiera el cad\u00e1ver estuviera all\u00ed. Entonces el propio Quereas decidi\u00f3 entrar, en su deseo de volver a ver a Cal\u00edrroe muerta; pero aunque busc\u00f3 en la tumba, no pudo encontrar nada. Mucha gente no pod\u00eda creerlo y entr\u00f3 tras \u00e9l. Todos estaban sobrecogidos por la impotencia. Uno de los que estaban all\u00ed dijo, “se llevaron las ofrendas funerarias [la traducci\u00f3n de Cartlidge dice: “El sudario ha sido arrancado” -cf. Juan 20:6-7]; \u00a0son unos ladrones de tumbas los que lo han hecho; pero \u00bfqu\u00e9 pas\u00f3 con el cad\u00e1ver, d\u00f3nde est\u00e1?” Muchas sugerencias diferentes circulaban entre la multitud. Quereas mir\u00f3 hacia los cielos, extendi\u00f3 sus brazos y llor\u00f3: “\u00bfCu\u00e1l de los dioses es, entonces, el que se ha convertido en mi rival en el amor y se ha llevado a Cal\u00edrroe y ahora la tiene junto a \u00e9l…?<\/em><\/p>\n M\u00e1s tarde, Cal\u00edrroe, reflexionando sobre sus vicisitudes, dice: “He muerto y he vuelto a la vida”. M\u00e1s tarde se lamenta: “He muerto y me han enterrado; me han robado de mi tumba”. Mientras tanto, el pobre Quereas es condenado a la cruz, y la tiene que llevar \u00e9l mismo. Pero en el \u00faltimo minuto, justo antes de ser clavado, su sentencia es conmutada, y lo bajan de la cruz. “Aqu\u00ed, entonces,” comenta Price, “tenemos a un h\u00e9roe que padeci\u00f3 la crucifixi\u00f3n por su amor y regres\u00f3 con vida. En la misma historia, crucifican a un villano tambi\u00e9n, aunque como est\u00e1 pagando lo que se merec\u00eda, no es indultado. Este es Theron, el pirata que se llev\u00f3 a la pobre Cal\u00edrroe como esclava. “Fue crucificado frente a la tumba de Cal\u00edrroe”.<\/p>\n \u00bfSer\u00e1 posible que algunos jud\u00edos, por alg\u00fan Hasbara concertado y persistente, le lavaran el cerebro a los romanos con un incre\u00edble cuento jud\u00edo plagiado a partir de novelas griegas, mitos romanos y culto mitraico? Por supuesto hay otras formas de ver el cristianismo, no como un truco jud\u00edo. Pero encuentro que vale la pena examinar la hip\u00f3tesis. Leo en este webzine muchas quejas contra la colonizaci\u00f3n cultural jud\u00eda. S\u00f3lo estoy sugiriendo que este proceso no comenz\u00f3 ayer.<\/p>\n Laurent Guy\u00e9not, 25 diciembre 2020<\/p>\n *<\/p>\n Articulo original en ingl\u00e9s : https:\/\/www.unz.com\/article\/how-yahweh-conquered-rome\/<\/a><\/p>\n Publicacion original en espanol: Red Internacional<\/a> (Traducci\u00f3n: Mar\u00eda Poumier)<\/p>\n <\/p>\n *<\/p>\n Sobre el autor:<\/strong><\/p>\n Laurent Guy\u00e9not tiene un t\u00edtulo de ingeniero (ENSTA, Par\u00eds) y un doctorado en estudios medievales (Sorbona, Par\u00eds). Es el autor de De Yahv\u00e9 a Si\u00f3n<\/em><\/a>: Dios celoso, Pueblo elegido, Tierra prometida<\/em>… choque de civilizaciones<\/em>, y Nuestro Dios es tu Dios tambi\u00e9n, pero nos ha elegido a nosotros<\/em>: Ensayos sobre el poder jud\u00edo (una colecci\u00f3n de art\u00edculos anteriores de Unz Review). Tambi\u00e9n ha escrito JFK-9\/11: 50 a\u00f1os de Estado Profundo<\/em><\/a> (prohibido en amazon.com) y es co-autor de un documental sobre “Israel y los asesinatos de los hermanos Kennedy<\/a>“.<\/p>\n Hasta ahora sus publicaciones en espa\u00f1ol son:<\/p>\n – 11 de septiembre \u00bfuna operaci\u00f3n que se organiz\u00f3 desde adentro, o una operaci\u00f3n del Mossad? https:\/\/www.voltairenet.org\/article180189.html<\/a> (25 de septiembre de 2013)<\/p>\nLas dos caras de la gran mentira<\/strong><\/h4>\n
Los jud\u00edos en Roma antes de las guerras jud\u00edas<\/strong><\/h4>\n
La fundaci\u00f3n de la Iglesia Romana bajo la dinast\u00eda Flavia<\/strong><\/h4>\n
Flavio Josefo y el cristianismo<\/strong><\/h4>\n
El Culto Misterioso de Mitra<\/strong><\/h4>\n
La cuesti\u00f3n de Jes\u00fas: \u00bfHasta qu\u00e9 punto es falso lo de la “buena\u00a0 noticia” evang\u00e9lica?<\/strong><\/h4>\n