{"id":8839,"date":"2020-10-21T18:55:05","date_gmt":"2020-10-21T18:55:05","guid":{"rendered":"https:\/\/redinternacional.net\/?p=8839"},"modified":"2020-10-21T19:40:01","modified_gmt":"2020-10-21T19:40:01","slug":"la-geopolitica-de-las-elecciones-estadounidenses","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/redinternacional.net\/2020\/10\/21\/la-geopolitica-de-las-elecciones-estadounidenses\/","title":{"rendered":"La Geopolitica de las elecciones estadounidenses – por Alexander Dugin"},"content":{"rendered":"
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“De ahora en adelante, \u00e9lites y masas, globalistas y patriotas, dem\u00f3cratas y republicanos, progresistas y conservadores se han convertido en polos independientes y de pleno derecho, con sus propias estrategias, programas, puntos de vista, evaluaciones y sistemas de valores alternativos. Trump hizo estallar a Estados Unidos, rompi\u00f3 el consenso de la \u00e9lite, descarril\u00f3 la globalizaci\u00f3n.”<\/em><\/div>\n
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El consenso de cien a\u00f1os de las \u00e9lites estadounidenses<\/strong><\/h4>\n

La misma expresi\u00f3n \u201cla geopol\u00edtica de las elecciones estadounidenses\u201d suena muy inusual e inesperada. Desde los a\u00f1os 30 del siglo XX, el enfrentamiento entre los dos principales partidos estadounidenses, los republicanos \u201crojos\u201d (Great Old Party\u00a0\u2013 GOP) y los dem\u00f3cratas \u201cazules\u201d, se ha convertido en una competencia basada en un acuerdo frente a los principios b\u00e1sicos en la pol\u00edtica, la ideolog\u00eda y la geopol\u00edtica aceptados por ambas partes. La \u00e9lite pol\u00edtica de Estados Unidos se bas\u00f3 en un consenso profundo y completo, en primer lugar, en la lealtad al capitalismo, el liberalismo y el establecimiento de Estados Unidos como la principal potencia del mundo occidental.<\/p>\n

Independientemente de si estamos tratando con los \u201crepublicanos\u201d o con los \u201cdem\u00f3cratas\u201d, uno podr\u00eda estar consciente de que su visi\u00f3n del orden mundial era casi id\u00e9ntica:<\/p>\n

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  • globalista,<\/li>\n
  • liberal,<\/li>\n
  • unipolar<\/li>\n
  • atlantista y<\/li>\n
  • centrado en los Estados Unidos.<\/li>\n<\/ul>\n

    Esta unidad tuvo su expresi\u00f3n institucional en el Consejo de Relaciones Exteriores \u2013 CFR (Council on Foreign Relations), creado durante la celebraci\u00f3n del acuerdo de Versalles como consecuencia de la Primera Guerra Mundial y que reuni\u00f3 a representantes de ambas partes. El papel del CFR creci\u00f3 constantemente y despu\u00e9s de la Segunda Guerra Mundial se convirti\u00f3 en la sede principal del creciente globalismo. En las primeras etapas de la Guerra Fr\u00eda, el CFR permiti\u00f3 que los sistemas convergieran con la URSS sobre la base de los valores compartidos de la Ilustraci\u00f3n. Pero debido al fuerte debilitamiento del campo socialista y la traici\u00f3n de Gorbachov, la \u201cconvergencia\u201d ya no era necesaria, y la construcci\u00f3n de una paz global estaba en manos de un polo: el del ganador de la Guerra Fr\u00eda.<\/p>\n

    El comienzo de la d\u00e9cada de los 90 del siglo XX se convirti\u00f3 en un minuto de gloria para los globalistas y el propio CFR. A partir de ese momento, el consenso de las \u00e9lites estadounidenses, independientemente de la afiliaci\u00f3n partidista, se fortaleci\u00f3 a\u00fan m\u00e1s, y las pol\u00edticas de Bill Clinton, George W. Bush o Barack Obama, al menos en temas importantes de pol\u00edtica exterior y lealtad a la agenda globalista, pr\u00e1cticamente no fueron diferentes. Por parte de los republicanos, el an\u00e1logo \u201cderechista\u201d de los globalistas (representados principalmente por los dem\u00f3cratas), fueron los neoconservadores, quienes expulsaron a los paleoconservadores del partido despu\u00e9s de los a\u00f1os 80, es decir, aquellos republicanos que segu\u00edan tradiciones aislacionistas y se mantuvieron fieles a los valores conservadores, caracter\u00edsticos del Partido Republicano, hasta principios del siglo XX y de los primeros tiempos de la historia de Estados Unidos.<\/p>\n

    S\u00ed, dem\u00f3cratas y republicanos estaban en desacuerdo en pol\u00edtica fiscal, en materia de medicina y seguros (aqu\u00ed los dem\u00f3cratas estaban econ\u00f3micamente a la izquierda y los republicanos a la derecha), pero esta era una disputa en el marco del mismo modelo, que de ninguna manera o casi nunca afect\u00f3 a los principales vectores de la pol\u00edtica, por no hablar de la pol\u00edtica extranjera. En otras palabras, las elecciones en los Estados Unidos no ten\u00edan ning\u00fan significado geopol\u00edtico y, por lo tanto, una combinaci\u00f3n como \u201cla geopol\u00edtica de las elecciones estadounidenses\u201d no se utilizaba debido a su falta de sentido o sin sentido.<\/p>\n

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    Trump destruye el consenso<\/strong><\/h4>\n

    Todo cambi\u00f3 en 2016, cuando el actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lleg\u00f3 inesperadamente al poder. En la propia Am\u00e9rica, su llegada se convirti\u00f3 en algo completamente excepcional. Todo el programa de campa\u00f1a de Trump se bas\u00f3 en las cr\u00edticas al globalismo y a las \u00e9lites estadounidenses gobernantes. En otras palabras, Trump desafi\u00f3 directamente el consenso bipartidista, incluido el ala neoconservadora de su partido republicano, y \u2026 gan\u00f3. Por supuesto, 4 a\u00f1os de presidencia de Trump han demostrado que es simplemente imposible reformar por completo la pol\u00edtica estadounidense de una manera tan inesperada, y Trump tuvo que hacer muchos compromisos, incluido el nombramiento del neoconservador John Bolton como su asesor de seguridad nacional. Pero a pesar de todo, trat\u00f3 de seguir su l\u00ednea, al menos en parte, lo que enfureci\u00f3 a los globalistas. As\u00ed, Trump cambi\u00f3 dr\u00e1sticamente la estructura misma de las relaciones entre los dos principales partidos estadounidenses. Bajo su mando, los republicanos han regresado en parte a las posiciones del nacionalismo estadounidense caracter\u00edsticas del Partido Republicano temprano, de ah\u00ed las consignas de\u00a0America first!\u00a0o\u00a0Let\u2019s make America great again!\u00a0Esto provoc\u00f3 una radicalizaci\u00f3n de los dem\u00f3cratas, quienes, a partir del enfrentamiento entre Trump y Hillary Clinton, de hecho, declararon una guerra real a Trump y a todos los que lo apoyaron en un nivel pol\u00edtico, ideol\u00f3gico, medi\u00e1tico, econ\u00f3mico, etc.<\/p>\n

    Durante 4 a\u00f1os esta guerra no se detuvo ni un instante y hoy, en v\u00edsperas de las nuevas elecciones, alcanz\u00f3 su punto culminante. Todo esto se manifest\u00f3:<\/p>\n

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    • en la amplia desestabilizaci\u00f3n del sistema social,<\/li>\n
    • \u00a0en la rebeli\u00f3n de elementos extremistas en las principales ciudades de Estados Unidos (con el apoyo casi abierto de las fuerzas anti-Trump del Partido Dem\u00f3crata),<\/li>\n
    • en la demonizaci\u00f3n directa de Trump y sus partidarios, quienes, en caso de la victoria de Biden, se enfrentan al ostracismo real, sin importar el cargo que ocupen,<\/li>\n
    • acusan a Trump y a todos los patriotas y nacionalistas estadounidenses de ser fascistas,<\/li>\n
    • a un intento de presentar a Trump como un agente de fuerzas externas, en primer lugar, Vladimir Putin, etc.<\/li>\n<\/ul>\n

      La feroz confrontaci\u00f3n interpartidaria, en la que algunos de los propios republicanos, principalmente los neoconservadores (como Bill Kristol, adem\u00e1s de los principales ide\u00f3logos de los neoconservadores), se opusieron a Trump, provoc\u00f3 una fuerte polarizaci\u00f3n en toda la sociedad estadounidense. Y hoy, en el oto\u00f1o de 2020, en el contexto de la constante epidemia del Covid-19 y sus consecuencias sociales y econ\u00f3micas asociadas, la carrera electoral es algo completamente diferente de lo que fue en los \u00faltimos 100 a\u00f1os de la historia estadounidense, comenzando con Versalles, los 14 puntos globalistas de Woodrow Wilson y la creaci\u00f3n del CFR.<\/p>\n

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      A\u00f1os 90: un minuto de gloria para los globalistas<\/strong><\/h4>\n

      Por supuesto, no fue Donald Trump quien rompi\u00f3 personalmente el consenso globalista de las \u00e9lites estadounidenses, poniendo a Estados Unidos al borde de una Guerra Civil a toda regla. Trump se ha convertido en un s\u00edntoma de profundos procesos geopol\u00edticos desde principios de la d\u00e9cada del 2000.<\/p>\n

      En los a\u00f1os 90 del siglo XX, el globalismo alcanz\u00f3 su cl\u00edmax, el campo sovi\u00e9tico estaba en ruinas, los agentes directos de los Estados Unidos estaban en el poder siendo l\u00edderes de Rusia y China, quienes comenzaban a copiar obedientemente el sistema capitalista, lo que cre\u00f3 la ilusi\u00f3n del inminente \u201cfin de la historia\u201d (F. Fukuyama). Al mismo tiempo, a la globalizaci\u00f3n s\u00f3lo se opusieron abiertamente las estructuras extraterritoriales del fundamentalismo isl\u00e1mico, a su vez controladas por la CIA y los aliados de Estados Unidos de Arabia Saudita y otros pa\u00edses del Golfo, y varios \u201cEstados rebeldes\u201d, como el Ir\u00e1n chi\u00edta y la todav\u00eda comunista Corea del Norte, que son grandes en s\u00ed mismos, pero no representaban un peligro verdadero. Parec\u00eda que la dominaci\u00f3n del globalismo era total, el liberalismo segu\u00eda siendo la \u00fanica ideolog\u00eda que somet\u00eda a todas las sociedades y el capitalismo segu\u00eda siendo el \u00fanico sistema econ\u00f3mico. Antes de la proclamaci\u00f3n del Gobierno Mundial (y este es el objetivo de los globalistas y en particular, la culminaci\u00f3n de la estrategia CFR) solo quedaba un paso.<\/p>\n

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      Los primeros signos de la multipolaridad<\/strong><\/h4>\n

      Pero desde principios de la d\u00e9cada de 2000, algo sali\u00f3 mal. Con Putin se detuvo la desintegraci\u00f3n y la mayor degradaci\u00f3n de Rusia, cuya desaparici\u00f3n final de la arena mundial era una condici\u00f3n necesaria para el triunfo de los globalistas. Tras emprender el camino de la restauraci\u00f3n de la soberan\u00eda, Rusia ha recorrido una gran distancia en los \u00faltimos 20 a\u00f1os, convirti\u00e9ndose en uno de los polos m\u00e1s importantes de la pol\u00edtica mundial, por supuesto, todav\u00eda muchas veces inferior al poder de la URSS y el campo socialista, pero ya no obedeciendo servilmente a Occidente, como lo era en los a\u00f1os 90 \u2026<\/p>\n

      Paralelamente, China, armada con la liberalizaci\u00f3n de su econ\u00f3mica, retuvo el poder pol\u00edtico en manos del Partido Comunista, evitando el destino de la URSS, el colapso, el caos, la \u201cdemocratizaci\u00f3n\u201d seg\u00fan los est\u00e1ndares liberales y gradualmente se convirti\u00f3 en la mayor potencia econ\u00f3mica solo comparable a Estados Unidos.<\/p>\n

      En otras palabras, exist\u00edan requisitos previos para un orden mundial multipolar que, junto con el propio Occidente (los Estados Unidos y los pa\u00edses de la OTAN), ten\u00eda al menos dos polos bastante importantes y de peso: la Rusia de Putin y China. Y cuanto m\u00e1s lejos, m\u00e1s claramente emergi\u00f3 esta imagen alternativa del mundo, en la que, junto con el Occidente liberal globalista, de otro tipo de civilizaciones, basadas en estos polos que crec\u00edan en poder: la China comunista y la Rusia conservadora se daban a conocer cada vez m\u00e1s. Los elementos del capitalismo y el liberalismo est\u00e1n presentes tanto all\u00ed como all\u00e1. Todav\u00eda no se trate de una alternativa ideol\u00f3gica real, no es la contrahegemon\u00eda (seg\u00fan Gramsci), pero ya son algo. Sin convertirse en algo multipolar en el sentido pleno, en la d\u00e9cada del 2000 el mundo dej\u00f3 de ser inequ\u00edvocamente unipolar. El globalismo comenz\u00f3 a ahogarse, a desviarse de su trayectoria prevista. Esto fue acompa\u00f1ado por una divisi\u00f3n emergente entre Estados Unidos y Europa Occidental. Adem\u00e1s, en los pa\u00edses de Occidente se inici\u00f3 el auge del populismo de derecha e izquierda, en el que se manifest\u00f3 el creciente descontento de la sociedad con la hegemon\u00eda de las \u00e9lites liberales globalistas. El mundo isl\u00e1mico tampoco detuvo su lucha por los valores isl\u00e1micos que, sin embargo, dej\u00f3 de identificarse estrictamente con el fundamentalismo (controlado de una forma u otra por los globalistas) y comenz\u00f3 a adquirir formas geopol\u00edticas m\u00e1s claras:<\/p>\n

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      • ascenso del chi\u00edsmo en el Medio Oriente (Ir\u00e1n, Irak, L\u00edbano, en parte en Siria),<\/li>\n
      • crecimiento de la independencia \u2013 hasta entrar en conflictos con los EE.UU. y la OTAN \u2013 de la Turqu\u00eda sunita de Erdogan,<\/li>\n
      • fluctuaciones de los pa\u00edses del Golfo entre Occidente y otros centros de poder (Rusia, China), etc.<\/li>\n<\/ul>\n

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        El momento Trump: el gran cambio<\/strong><\/h4>\n

        Las elecciones estadounidenses del 2016, que fueron ganadas por Donald Trump, se llevaron a cabo en este contexto, en un momento de grave crisis del globalismo y, en consecuencia, de las \u00e9lites globalistas gobernantes.<\/p>\n

        Fue entonces que, debido a la fachada del consenso liberal, surgi\u00f3 una nueva fuerza, esa parte de la sociedad estadounidense que no quer\u00eda identificarse con las \u00e9lites globalistas dominantes. El apoyo de Trump se ha convertido en un voto de desconfianza a la estrategia del globalismo, no solo contra los dem\u00f3cratas, sino tambi\u00e9n contra los republicanos. As\u00ed, la escisi\u00f3n se revel\u00f3 en la propia ciudadela del mundo unipolar, en la sede de la globalizaci\u00f3n. Aparecieron bajo la espesura del desprecio los deplorables, la mayor\u00eda silenciosa, la mayor\u00eda despose\u00edda (V. Robertson). Trump se ha convertido en un s\u00edmbolo del despertar del populismo estadounidense.<\/p>\n

        As\u00ed que la pol\u00edtica real volvi\u00f3 a los Estados Unidos, de nuevo se trata de una disputa ideol\u00f3gica, de la\u00a0cancel culture, de los BLM, donde la destrucci\u00f3n de monumentos de la historia estadounidense se convirti\u00f3 en la expresi\u00f3n de una profunda divisi\u00f3n en la sociedad estadounidense al interior de sus temas m\u00e1s fundamentales.<\/p>\n

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        El consenso estadounidense se ha derrumbado.<\/strong><\/h4>\n

        De ahora en adelante, \u00e9lites y masas, globalistas y patriotas, dem\u00f3cratas y republicanos, progresistas y conservadores se han convertido en polos independientes y de pleno derecho, con sus propias estrategias, programas, puntos de vista, evaluaciones y sistemas de valores alternativos. Trump hizo estallar a Estados Unidos, rompi\u00f3 el consenso de la \u00e9lite, descarril\u00f3 la globalizaci\u00f3n.<\/p>\n

        Por supuesto, no lo hizo solo. Pero \u00e9l audazmente, tal vez bajo alguna influencia ideol\u00f3gica del at\u00edpico conservador y antiglobalista Steve Bannon (un caso raro de un intelectual estadounidense familiarizado con el conservadurismo europeo, e incluso con el tradicionalismo de Gu\u00e9non y Evola), fue m\u00e1s all\u00e1 del discurso liberal dominante, abriendo as\u00ed una nueva p\u00e1gina en la historia de la pol\u00edtica estadounidense. En esta p\u00e1gina, leemos claramente la f\u00f3rmula \u201cla geopol\u00edtica de las elecciones estadounidenses\u201d.<\/p>\n

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        Elecciones estadounidenses 2020: todo est\u00e1 en juego<\/strong><\/h4>\n

        Dependiendo del resultado de las elecciones de noviembre de 2020, se determinar\u00e1<\/p>\n

          \n
        • la arquitectura del orden mundial (la transici\u00f3n al nacionalismo y la multipolaridad de facto en el caso de Trump, la continuaci\u00f3n de la agon\u00eda de la globalizaci\u00f3n en el caso de Biden),<\/li>\n
        • la estrategia geopol\u00edtica global de Estados Unidos (Am\u00e9rica primero en el caso de Trump, un impulso desesperado hacia el Gobierno Mundial en el caso de Biden),<\/li>\n
        • el destino de la OTAN (su disoluci\u00f3n a favor de una estructura que refleje m\u00e1s estrictamente los intereses nacionales de Estados Unidos, esta vez como Estado, y no como basti\u00f3n de la globalizaci\u00f3n en general en el caso de Trump, o la preservaci\u00f3n del bloque atlantista como instrumento de las \u00e9lites liberales supranacionales en el caso de Biden),<\/li>\n
        • la ideolog\u00eda dominante (conservadurismo de derecha, nacionalismo estadounidense en el caso de Trump, globalismo liberal de izquierda, la eliminaci\u00f3n final de la identidad estadounidense en el caso de Biden),<\/li>\n
        • la polarizaci\u00f3n de los dem\u00f3cratas y los republicanos (crecimiento continuo de la influencia de los paleoconservadores en el Partido Republicano en el caso de Trump) o un retorno a un consenso bipartidista (en el caso de Biden, con un nuevo aumento de la influencia de los neoconservadores en el Partido Republicano),<\/li>\n
        • e incluso el destino de la Segunda Enmienda a la Constituci\u00f3n (su preservaci\u00f3n en el caso de Trump, y su posible derogaci\u00f3n en el caso de Biden).<\/li>\n<\/ul>\n

          Estos son momentos tan importantes que el destino del\u00a0Healthcare, el Muro de Trump e incluso las relaciones con Rusia, China e Ir\u00e1n resultan ser algo de importancia secundaria. Estados Unidos est\u00e1 tan profunda y fundamentalmente dividido que la pregunta ahora es si el pa\u00eds sobrevivir\u00e1 alguna vez a estas elecciones sin precedentes. Esta vez, la lucha entre dem\u00f3cratas y republicanos, Biden y Trump, es una lucha entre dos sociedades agresivamente opuestas entre s\u00ed, y no un espect\u00e1culo sin sentido, de cuyos resultados nada depende fundamentalmente. Estados Unidos ha cruzado a una l\u00ednea fatal. Cualquiera sea el resultado de estas elecciones, Estados Unidos nunca volver\u00e1 a ser el mismo. Algo ha cambiado de manera irreversible.<\/p>\n

          Por eso estamos hablando de \u201cla geopol\u00edtica de las elecciones estadounidenses\u201d, y por eso resulta tan importante. El destino de Estados Unidos es en muchos sentidos el destino de todo el mundo moderno.<\/p>\n

           <\/p>\n

          El fen\u00f3meno del\u00a0Heartland<\/strong><\/h4>\n

          El concepto m\u00e1s importante de la geopol\u00edtica desde Mackinder, el fundador de esta disciplina, es el \u201cHeartland\u201d. El cual denota el n\u00facleo de la civilizaci\u00f3n de la civilizaci\u00f3n de la tierra (Land Power) opuesta a la civilizaci\u00f3n del mar (Sea Power).<\/p>\n

          Tanto el propio Mackinder, como especialmente Carl Schmitt, quien desarroll\u00f3 sus ideas y su intuici\u00f3n, est\u00e1n hablando del enfrentamiento entre dos tipos de civilizaciones, y no solo de la disposici\u00f3n estrat\u00e9gica de fuerzas en un contexto geogr\u00e1fico.<\/p>\n

          \u201cLa Civilizaci\u00f3n del Mar\u201d encarna la expansi\u00f3n, el comercio, la colonizaci\u00f3n, pero tambi\u00e9n el \u201cprogreso\u201d, la \u201ctecnolog\u00eda\u201d, los cambios constantes en la sociedad y sus estructuras, reflejando el elemento l\u00edquido del oc\u00e9ano \u2013 la sociedad l\u00edquida de Z. Bauman.<\/p>\n

          Es una civilizaci\u00f3n sin ra\u00edces, m\u00f3vil, en movimiento, \u201cn\u00f3mada\u201d.<\/p>\n

          La \u201cCivilizaci\u00f3n de la Tierra\u201d, por el contrario, est\u00e1 asociada al conservadurismo, la constancia, la identidad, la estabilidad, la meritocracia y los valores inmutables, es una cultura con ra\u00edces, de car\u00e1cter sedentario.<\/p>\n

          As\u00ed, el\u00a0Heartland\u00a0adquiere tambi\u00e9n un significado civilizatorio: no es solo una zona territorial, lo m\u00e1s alejada posible de las costas y los espacios mar\u00edtimos, sino tambi\u00e9n una matriz de identidad conservadora, un \u00e1rea de fuertes ra\u00edces, una zona de m\u00e1xima concentraci\u00f3n de la identidad.<\/p>\n

          Al aplicar la geopol\u00edtica a la estructura contempor\u00e1nea de los Estados Unidos, obtenemos una imagen asombrosamente clara. La peculiaridad de los Estados Unidos es que el pa\u00eds est\u00e1 ubicado entre dos espacios oce\u00e1nicos, entre el Oc\u00e9ano Atl\u00e1ntico y el Oc\u00e9ano Pac\u00edfico. A diferencia de Rusia, Estados Unidos no tiene un cambio tan inequ\u00edvoco del centro a uno de los polos, aunque la historia de los Estados Unidos comenz\u00f3 desde la costa Este y se traslad\u00f3 gradualmente hacia el Oeste, y hoy, hasta cierto punto, ambas zonas costeras est\u00e1n bastante desarrolladas y representan dos segmentos de una pronunciada \u201ccivilizaci\u00f3n del mar\u201d.<\/p>\n

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          Los Estados y la geopol\u00edtica electoral<\/strong><\/h4>\n

          Y aqu\u00ed es donde comienza la diversi\u00f3n. Si tomamos el mapa pol\u00edtico de los Estados de Estados Unidos y lo coloreamos con los colores de los dos partidos principales de acuerdo con el principio de qu\u00e9 gobernadores y qu\u00e9 partidos dominan en cada uno de ellos, obtenemos tres franjas:<\/p>\n