![\"fgjh\"](\"https:\/\/redinternacional.net\/wp-content\/uploads\/2019\/11\/fgjh.jpg\")
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\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Laurent Guy\u00e9not aborda el asunto de la judeidad, el origen y significado de su deidad, y la manera en que los judios consideran la inmortalidad. Todo ello, por supuesto, tiene implicaciones en el presente.<\/p>\n
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\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Karl Marx vio el reinado del dinero y el materialismo en la sociedad capitalista moderna como el triunfo \u00faltimo del juda\u00edsmo. Ya que “\u00bfcu\u00e1l es la base secular del juda\u00edsmo? La necesidad pr\u00e1ctica, el inter\u00e9s propio. \u00bfCu\u00e1l es la religi\u00f3n mundana del jud\u00edo? La compraventa. \u00bfCu\u00e1l es su dios mundano? El dinero”<\/em>.<\/p>\n \u00a0\u00a0 “El jud\u00edo se ha emancipado en una manera jud\u00eda, no s\u00f3lo porque \u00e9l ha adquirido el poder financiero, sino tambi\u00e9n porque, por medio de \u00e9l y tambi\u00e9n aparte de \u00e9l, el dinero se ha convertido en una potencia mundial, y el esp\u00edritu pr\u00e1ctico jud\u00edo se ha convertido en el esp\u00edritu pr\u00e1ctico de las naciones cristianas. Los jud\u00edos se han emancipado en la misma medida que los cristianos se han hecho jud\u00edos. (…) El jud\u00edo es permanentemente creado por la sociedad civil a partir de sus propias entra\u00f1as. (…) El dios de los jud\u00edos se ha secularizado y se ha convertido en el dios del mundo”<\/em> [1].<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Marx entendi\u00f3 la judeidad como un modo de pensar, y pens\u00f3 que la avaricia material hab\u00eda llegado a ser la fuerza impulsora de la sociedad burguesa porque dicha avaricia siempre ha sido la verdadera base del juda\u00edsmo, su fuerza interior, su corriente sangu\u00ednea. \u00c9l escribi\u00f3 esto en 1843, a la edad de 25 a\u00f1os. \u00c9l ya hab\u00eda formulado algunas de sus ideas m\u00e1s fundamentales, como la siguiente, en el mismo art\u00edculo: “El dinero es la esencia separada del trabajo del hombre y de la existencia del hombre, y esa esencia ajena lo domina, y \u00e9l la adora”. <\/em>Desestimar este art\u00edculo como obra de un Marx inmaduro bajo la influencia de los prejuicios anti-jud\u00edos de sus d\u00edas ser\u00eda absurdo dado que Marx naci\u00f3 y fue criado en una familia jud\u00eda (su padre, Herschel Levi, hab\u00eda cambiado su apellido e hizo bautizar a su familia entera cuando Karl ten\u00eda seis a\u00f1os). M\u00e1s bien podemos considerar el pensamiento de Marx acerca de la “cuesti\u00f3n jud\u00eda” como una de las intuiciones seminales de su comprensi\u00f3n de la alienaci\u00f3n del Hombre.<\/p>\n \u00a0\u00a0 Ya convencido de que la religi\u00f3n es una superestructura formada por las relaciones de producci\u00f3n, Marx tambi\u00e9n escribi\u00f3 en ese mismo ensayo: “No busquemos el secreto del jud\u00edo en su religi\u00f3n, sino que busquemos el secreto de su religi\u00f3n en el jud\u00edo real”<\/em>. Estaremos de acuerdo con Marx si entendemos que la “religi\u00f3n” del jud\u00edo significa el Juda\u00edsmo Reformado dominante de la Europa Occidental del siglo XIX. Aquella forma del juda\u00edsmo era el resultado reciente de la Haskal\u00e1<\/em>, la Ilustraci\u00f3n jud\u00eda, cuyo prop\u00f3sito declarado era transformar la judeidad desde ser una identidad nacional inasimilable a ser una identidad religiosa asimilable, al menos a los ojos de los Gentiles. “Ser un jud\u00edo en casa y un hombre en la calle”<\/em>, era el lema de la Haskal\u00e1<\/em>.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Pero entonces, \u00bfd\u00f3nde encontraremos el secreto del “jud\u00edo real”?; \u00bfc\u00f3mo los jud\u00edos se hicieron materialistas?. \u00bfConcordaremos con Abraham Leon, que desarrolla sus ideas a partir de Marx en The Jewish Question: A Marxist Interpretation<\/em> (1946), para sostener que “los jud\u00edos constituyen hist\u00f3ricamente un grupo social con una funci\u00f3n econ\u00f3mica espec\u00edfica”<\/em>, una funci\u00f3n econ\u00f3mica que incluye la usura y que ha formado la mentalidad de ellos? “Ellos son una clase, o m\u00e1s precisamente, un pueblo-clase” <\/em>[2]. El problema con aquella teor\u00eda es que explica la judeidad como algo formado mucho m\u00e1s tarde que la Biblia<\/em> hebrea e independientemente de ella. Aqu\u00ed debo discrepar con Marx y Leon, y estar de acuerdo con la mayor\u00eda de los pensadores jud\u00edos, tanto religiosos como seculares, en cuanto a que la Biblia<\/em> es el modelo de la judeidad.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 \u00bfPodemos intentar reconciliar aquella visi\u00f3n con la marxista, si buscamos la ra\u00edz del materialismo jud\u00edo en la historia antigua de los hebreos como est\u00e1 relatada en el \u00c9xodo<\/em>, cuando Mois\u00e9s primero encontr\u00f3 a Yahv\u00e9 en el “suelo sagrado” del monte Horeb o Sina\u00ed, mientras cuidaba los reba\u00f1os de su suegro, el sacerdote madianita Jethro (\u00c9xodo<\/em> 2-3), el cual m\u00e1s tarde lo instruy\u00f3 acerca de c\u00f3mo gobernar sobre los hebreos (18:19-25)? Diversos estudiosos, comenzando con Charles Beke (Mount Sinai a Volcano<\/em>, 1873, y Sinai in Arabia and of Midian<\/em>, 1878), han enfatizado que si tomamos esa historia en serio, Mois\u00e9s hered\u00f3 la religi\u00f3n de su suegro, cuyo dios parec\u00eda inseparable de una monta\u00f1a sagrada que “tiembla violentamente”<\/em>, que env\u00eda “sonidos de truenos y luces de rel\u00e1mpagos”<\/em> y que “humea como un horno”<\/em> (19:16-19), y que est\u00e1 claramente localizada en la regi\u00f3n volc\u00e1nica de Arabia del Noroeste llamada Madi\u00e1n (como incluso Pablo sab\u00eda: “Sina\u00ed es una monta\u00f1a en Arabia”<\/em>, G\u00e1latas <\/em>4:25).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Si seguimos esta teor\u00eda, que recientemente ha ganado terreno [3], el Yahvismo fue originalmente la religi\u00f3n de una confederaci\u00f3n de tribus proto-\u00e1rabes semi-n\u00f3madas que viv\u00edan en la semi-des\u00e9rtica zona de Hejaz, las cuales intentaron conquistar Siria inferior, una regi\u00f3n pr\u00f3spera y urbanizada de la F\u00e9rtil Media Luna donde ellos ya hab\u00edan estado comerciando y asaltando durante siglos. La principal innovaci\u00f3n hecha por Mois\u00e9s al culto madianita fue proporcionar a Yahv\u00e9 un medio para dejar su volc\u00e1n: una lujosa tienda de campa\u00f1a enchapada en oro, de la cual detalladas especificaciones son dadas en \u00c9xodo<\/em>, cap\u00edtulos 25 a 31. No es de extra\u00f1ar que, a partir de aquel tiempo en adelante, Yahv\u00e9 aparezca como el jefe militar de un pueblo dispuesto para el pillaje: “Toda la plata y todo el oro, todo lo hecho de bronce o hierro, ser\u00e1n consagrados a Yahv\u00e9 y puestos en su tesorer\u00eda” <\/em>(Josu\u00e9 <\/em>6:19).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Esta perspectiva hist\u00f3rica recorre un largo camino para explicar la esencia del juda\u00edsmo, pero s\u00f3lo si a\u00f1adimos que no fueron los acontecimientos mismos los que formaron la judeidad sino su cristalizaci\u00f3n en la Escritura Sagrada; no la verdadera historia de los jud\u00edos sino la historia de los jud\u00edos sobre su propio pasado. Lo que es importante no es lo que sucedi\u00f3 (o no) en la \u00e9poca de Mois\u00e9s y de Josu\u00e9 sino el valor sagrado anexado por los jud\u00edos a su leyenda. Identidad es memoria, no historia, y la narrativa b\u00edblica es la piedra angular de la identidad jud\u00eda. Es la fuente \u00faltima y viva de la judeidad, su inalterable c\u00f3digo gen\u00e9tico, que ha formado la relaci\u00f3n de los jud\u00edos con el mundo durante 2.500 a\u00f1os.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 En este art\u00edculo sigo la percepci\u00f3n de Marx y pregunto: \u00bfHasta qu\u00e9 punto la avaricia material es la ideolog\u00eda subyacente de la Biblia <\/em>hebrea? Esto, por supuesto, conducir\u00e1 a una inversi\u00f3n circular de la presunci\u00f3n de Marx de que la religi\u00f3n jud\u00eda es un producto del materialismo pr\u00e1ctico de los jud\u00edos. En vez de eso, sostendr\u00e9 que la acumulaci\u00f3n de la riqueza producida por otros es la funci\u00f3n misma asignada a los jud\u00edos por su Biblia<\/em>. Es Yahv\u00e9, aprenden ellos, quien orden\u00f3 a Mois\u00e9s que condujera a los hebreos a la tierra cananea “que fluye con leche y miel” <\/em>(N\u00fameros<\/em> 13:27), y luego les dijo: “Ustedes sorber\u00e1n la leche de las naciones”<\/em> (Isa\u00edas <\/em>60:16).<\/p>\n <\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 El Templo de Yahv\u00e9 parece haber sido destinado principalmente como la gigantesca b\u00f3veda para los metales preciosos saqueados de pueblos Gentiles:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 “Har\u00e9 temblar a todas las naciones, y los tesoros de todas las naciones fluir\u00e1n hacia ac\u00e1, y llenar\u00e9 este Templo con gloria, dice Yahv\u00e9 de los Ej\u00e9rcitos. M\u00eda es la plata, m\u00edo el oro, declara Yahv\u00e9 de los Ej\u00e9rcitos” <\/em>(Hageo<\/em> 2:7-8)<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 El Templo de Jerusal\u00e9n era simult\u00e1neamente un lugar de culto y un banco central, quiz\u00e1s el primero de la Historia. Las comunidades jud\u00edas dispersas alrededor del mundo enviaban sus contribuciones anuales all\u00ed. \u00c9se es el asunto del discurso de Cicer\u00f3n en el tribunal en favor de Flaccus: su cliente, Lucius Valerius Flaccus, gobernador de Asia, hab\u00eda impedido a las comunidades jud\u00edas bajo su jurisdicci\u00f3n enviar sus contribuciones anuales a Jerusal\u00e9n. Esas contribuciones hab\u00edan sido incautadas en varias ciudades, para satisfacci\u00f3n de los residentes no-jud\u00edos. Cicer\u00f3n defendi\u00f3 la medida de Flaccus como econ\u00f3micamente sabia. La riqueza almacenada en el Templo, la virtual propiedad de la casta sacerdotal hereditaria, dio ocasi\u00f3n a la leyenda del fabuloso tesoro de Salom\u00f3n. Seg\u00fan 1 Reyes <\/em>10:14, “El peso del oro recibido anualmente por Salom\u00f3n ascend\u00eda a seiscientos sesenta y seis talentos de oro”<\/em>, pesando un talento aproximadamente 30 kgs. [4].<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Es iluminador comparar la avaricia de Yahv\u00e9 por el oro con la ense\u00f1anza de Cristo:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 “Almacenad tesoros para ustedes en el cielo, donde ni la polilla ni la herrumbre los destruyen y los ladrones no pueden socavar y robar. Ya que dondequiera que est\u00e9 vuestro tesoro, all\u00ed estar\u00e1 vuestro coraz\u00f3n tambi\u00e9n” <\/em>(Mateo<\/em> 6:20-21).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Cuando Jes\u00fas volc\u00f3 los puestos de los cambistas y comerciantes del Templo, \u00e9l estaba desafiando a la religi\u00f3n institucional judeana, y es injusto acusar a los sacerdotes que lo hicieron detener y crucificar de haber traicionado a Yahv\u00e9.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 A fin de conseguir un nuevo cuadro de Yahv\u00e9, comparemos los t\u00e9rminos del convenio que \u00e9l ofreci\u00f3 a la gente jud\u00eda: “Si ustedes fielmente obedecen la voz de Yahv\u00e9 vuestro dios… Yahv\u00e9 vuestro dios os levantar\u00e1 m\u00e1s alto que cada otra naci\u00f3n en el mundo”<\/em> (Deuteronomio<\/em> 28:1), con los t\u00e9rminos de aquel otro convenio ofrecido a Jes\u00fas, cuando “el diablo le mostr\u00f3 todos los reinos del mundo y su esplendor. Y le dijo: A ti dar\u00e9 todo esto, si postrado me adorares”<\/em> (Mateo<\/em> 4:8-10).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 De la Biblia<\/em> los jud\u00edos han aprendido y seguir\u00e1n aprendiendo que su destino dado por Yahv\u00e9 es “alimentarse de la riqueza de las naciones<\/em> (o Gentiles)” (Isa\u00edas<\/em> 61:5), y tambi\u00e9n que la banca es el modo de hacerlo:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 “Si Yahv\u00e9 tu dios te bendice como \u00e9l ha prometido, ustedes ser\u00e1n acreedores de muchas naciones, pero deudores de ninguna; ustedes gobernar\u00e1n sobre muchas naciones, y no ser\u00e1n gobernados por ninguna” <\/em>(Deuteronomio<\/em> 15:6).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Jos\u00e9, el hijo de Jacob, fue el primero en poner en pr\u00e1ctica esa bendici\u00f3n. Habi\u00e9ndose elevado desde el status<\/em> de un esclavo al de canciller del Fara\u00f3n, \u00e9l favorece a sus parientes y obtiene para ellos “posesiones de tierra en Egipto, en la mejor parte del pa\u00eds, la regi\u00f3n de Rameses”. <\/em>Responsable de manejar las reservas nacionales de grano, \u00e9l almacena grandes cantidades durante los a\u00f1os de abundancia; y luego, cuando el hambre golpea, \u00e9l negocia un precio alto para el grano monopolizado y as\u00ed “acumul\u00f3 todo el dinero que se encontraba en Egipto y Cana\u00e1n”. <\/em>El a\u00f1o siguiente, habiendo creado una escasez monetaria, \u00e9l obliga a los campesinos a abandonar sus reba\u00f1os a cambio del grano: “Entrega tu ganado y te distribuir\u00e9 alimentos a cambio de tu ganado, si tu dinero se ha acabado”<\/em> (G\u00e9nesis<\/em> 47:14-17).<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Un a\u00f1o m\u00e1s tarde, los campesinos no tienen nada m\u00e1s “excepto nuestros cuerpos y nuestra tierra”<\/em>, y as\u00ed tienen que mendigar, y luego venderse a fin de sobrevivir: “T\u00f3manos a nosotros y a nuestra tierra a cambio de comida, y nosotros con nuestra tierra nos haremos los siervos del Fara\u00f3n; s\u00f3lo danos semillas, de modo que nosotros podamos sobrevivir y no morir y la tierra no se convierta en desierto”<\/em>. Y de esa manera los hebreos, despu\u00e9s de instalarse en Egipto, “adquirieron propiedad all\u00ed; ellos eran fruct\u00edferos y se hicieron muy numerosos”<\/em> (G\u00e9nesis<\/em> 47:11-27), lo cual es el signo seguro de la bendici\u00f3n de Yahv\u00e9, seg\u00fan la Tor\u00e1<\/em>. Un pueblo dotado con un libro tan santo tiene una ventaja enorme en la competencia por el control de la riqueza, la misma ventaja que tiene el psic\u00f3pata no inhibido por alg\u00fan sentido de justicia.<\/p>\n <\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Yahv\u00e9 no tiene ninguna recompensa almacenada en el Cielo para nadie. Sus bendiciones para aquellos que le “temen” son puramente terrenales: ser “lleno de d\u00edas”<\/em>, tener numerosos descendientes y una gran fortuna. La \u00fanica supervivencia del hombre es por medio de la generaci\u00f3n y la riqueza, seg\u00fan la Tor\u00e1<\/em> (sangre y dinero, extra\u00f1amente, son hom\u00f3nimos en hebreo, como Jacques Attali ha se\u00f1alado [5]). La ilustraci\u00f3n arquet\u00edpica de esto es la historia de Job. \u00c9l no espera ning\u00fan consuelo despu\u00e9s de la muerte para su sufrimiento en este mundo: “Si el hombre una vez muerto puede volver a vivir, yo esperar\u00eda con esperanza, cada d\u00eda de mi sufrimiento, que viniera mi relevo”<\/em> (Job <\/em>14:14) [6]. Desafortunadamente, “el hombre, una vez puesto a descansar, nunca se levantar\u00e1 otra vez; el cielo se desgastar\u00e1 antes de que \u00e9l se despierte, o antes de que sea despertado de su sue\u00f1o” <\/em>(14:7-12). Como \u00fanica recompensa por su fidelidad a Yahv\u00e9, Job recibe una prolongaci\u00f3n de 140 a\u00f1os de vida en la tierra, numerosos descendientes, “catorce mil ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil burras”<\/em> (42:12).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Otro significativo ejemplo se encuentra en Isa\u00edas<\/em> cap. 38: Cuando el rey Ezequ\u00edas “cay\u00f3 enfermo y estaba en el punto de su muerte”<\/em>, \u00e9l no expresa ninguna esperanza de encontrar a Yahv\u00e9 en alg\u00fan Otro Mundo, sino que en cambio se desespera por la perspectiva de no verlo m\u00e1s en su Templo. En respuesta a su rezo, Yahv\u00e9 le concede unos quince a\u00f1os suplementarios de vida terrenal. La Canci\u00f3n de Ezequ\u00edas que sigue claramente declara que la muerte no tiene ninguna promesa de alguna vida: “Aquellos que bajan a la fosa ya no pueden esperar tu fidelidad”<\/em> (Isa\u00edas <\/em>38:11-19). Yahv\u00e9 no tiene nada que ver con los muertos, a quienes \u00e9l “no recuerda m\u00e1s” (Salmos<\/em> 88:6).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Yahv\u00e9 no reside en alguna clase de Otro Mundo, donde los justos podr\u00edan esperar encontrarlo despu\u00e9s de la muerte. La Biblia <\/em>hebrea se diferencia de todas las tradiciones religiosas de la Antig\u00fcedad por la incapacidad de sus autores de concebir una vida futura salvo como un sue\u00f1o sin sue\u00f1os en la h\u00fameda oscuridad del Sheol<\/em> [inframundo], donde el bueno y el malo descienden por igual. La muerte en el Sheol <\/em>es una virtual aniquilaci\u00f3n, la cosa imaginable m\u00e1s cercana a la nada.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 La tradici\u00f3n judaica no sabe nada de los mitos funerarios tan populares en otras culturas, cuyos h\u00e9roes exploran o conquistan el Otro Mundo. Los pueblos polite\u00edstas colocaron sus esperanzas fundamentales en un Para\u00edso ultraterreno, a menudo dotado con una fuente milagrosa o un “\u00e1rbol de la vida”, que proporciona la vida eterna y la juventud; es el “mundo donde no hay muerte”. Ninguna tal esperanza es dada por Yahv\u00e9 a su pueblo. La Tierra Prometida de los hebreos es un lugar geogr\u00e1fico accesible situado entre el Nilo y el \u00c9ufrates; es un destino que es exclusivamente terrestre y colectivo. El Yahvismo ha enfocado la esperanza de todo su pueblo en esa tierra. De hecho, los escribas Yahvistas han puesto de cabeza el mito universal de la bienaventurada vida futura; el persa Pard\u00e8s<\/em> (Jard\u00edn) con su \u00e1rbol de la vida eterna no es, en el G\u00e9nesis<\/em>, un futuro prometido al justo despu\u00e9s de su muerte sino un pasado perdido para siempre para toda la Humanidad. Y all\u00ed ellos han escenificado el drama introduciendo en el mundo el doble azote de la muerte y el trabajo, ya que la muerte, a ojos de ellos, no lleva ninguna promesa, y el trabajo ninguna recompensa espiritual.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 En el centro de este materialismo b\u00edblico est\u00e1 la noci\u00f3n de que el hombre es completamente terrenal: polvo \u00e9l es y al polvo retornar\u00e1 (G\u00e9nesis <\/em>3:19). Algunos objetar\u00e1n que la Tor\u00e1<\/em> tiene dos t\u00e9rminos para designar el esp\u00edritu inmortal: nefesh <\/em>y ruah<\/em>. Pero nefesh<\/em>, enga\u00f1osamente traducido en la Septuaginta <\/em>griega como psique<\/em>, designa a un “ser viviente”, y a veces se traduce simplemente como “vida”. Se aplica tanto a animales como a hombres, y est\u00e1 \u00edntimamente relacionado con la sangre en las prohibiciones de alimentos de Lev\u00edtico<\/em> cap. 17. La palabra hebrea ruah<\/em>, traducida como pneuma <\/em>en la Septuaginta<\/em>, significa “aliento”, “respiraci\u00f3n”, y tambi\u00e9n designa la vida, para animales y humanos por igual. As\u00ed, no hay ninguna noci\u00f3n de un alma inmortal en la f\u00f3rmula de G\u00e9nesis <\/em>2:7: “Yahv\u00e9 Elohim form\u00f3 al hombre del suelo de la tierra e insufl\u00f3 en su nariz el aliento de vida <\/em>[nesham\u00e1], y el hombre lleg\u00f3 a ser una criatura que respira<\/em> [nefesh]”.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 En mi libro “From Yahweh to Zionism”<\/em> he enfatizado la antinomia existente entre la religi\u00f3n egipcia, completamente enfocada en el Otro Mundo, y la religi\u00f3n jud\u00eda, que apunta solamente a este mundo, lo que condujo a los egipcios a considerarla como una anti-religi\u00f3n<\/em> [7]. Eso es algo que todos los eruditos b\u00edblicos han reconocido desde el siglo XIX. Sigmund Freud hizo uso de la ciencia de su tiempo cuando \u00e9l escribi\u00f3 en su ensayo Mois\u00e9s y el Monote\u00edsmo <\/em>(1939):<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 “Ning\u00fan otro pueblo de la Antig\u00fcedad <\/em>[aparte de los egipcios] ha hecho tanto para negar la muerte, ni ha hecho tal cuidadosa provisi\u00f3n para una vida futura. <\/em>(…) La religi\u00f3n jud\u00eda temprana, por otra parte, hab\u00eda abandonado completamente la inmortalidad; la posibilidad de una existencia despu\u00e9s de la muerte nunca fue mencionada en ning\u00fan lugar”<\/em> [8].<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Muy correctamente, Freud restringe su declaraci\u00f3n a la “religi\u00f3n jud\u00eda temprana”, a menudo referida como “hebra\u00edsmo antiguo” pero que yo llamo Yahvismo. La evoluci\u00f3n del juda\u00edsmo durante los \u00faltimos dos mil a\u00f1os es otra historia. En el per\u00edodo helen\u00edstico, el dualismo griego y egipcio se infiltr\u00f3 en el pensamiento jud\u00edo. Pero, significativamente, los libros helen\u00edsticos jud\u00edos (escritos en griego) que se abrieron camino entre el Antiguo Testamento<\/em> cristiano hab\u00edan sido exclu\u00eddos del canon hebreo [9], y su \u00fanico legado dentro del juda\u00edsmo es la idea de la resurrecci\u00f3n f\u00edsica, que resulta de un giro materialista aplicado al concepto griego de anastasis<\/em>, “despertar”, originalmente una met\u00e1fora simple de la vida futura basada en el eufemismo de la muerte como un sue\u00f1o [10].<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 M\u00e1s recientemente, el juda\u00edsmo Reformado tambi\u00e9n ha tratado de inyectar el (concepto de) alma inmortal en el dogma judaico. Pero, como dije antes, eso es el producto final del esfuerzo de los jud\u00edos europeos de Occidente para asimilarse. Aquello era profundamente imitador del cristianismo en su esfuerzo para hacer de la judeidad una materia estrictamente de religi\u00f3n m\u00e1s bien que del car\u00e1cter de naci\u00f3n. Y es muy significativo que cuando Moses Mendelssohn, el padre de la Haskal\u00e1 <\/em>[la educaci\u00f3n secular jud\u00eda] del siglo XVIII, decidi\u00f3 convencer a sus cong\u00e9neres jud\u00edos para que aceptaran el credo de la inmortalidad del alma \u2014una condici\u00f3n necesaria para la elevaci\u00f3n de la Humanidad seg\u00fan \u00e9l\u2014 \u00e9l no se bas\u00f3 en la tradici\u00f3n jud\u00eda. En vez de eso \u00e9l produjo un di\u00e1logo en el estilo de Plat\u00f3n (y llamado igual), titulado Fed\u00f3n o la Inmortalidad del Alma<\/em> (1767). Eso lo eximi\u00f3 de confesar que \u00e9l estaba tomando prestada la noci\u00f3n desde el cristianismo, el cual de todos modos lo hered\u00f3 de la filosof\u00eda griega.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Muchos intelectuales jud\u00edos realmente protestaron contra la introducci\u00f3n de aquel cuerpo extra\u00f1o en el pensamiento jud\u00edo, y la reacci\u00f3n de ellos se convertir\u00eda en un principio central del sionismo. Seg\u00fan Moses Hess (Rome and Jerusalem: The Last National Question<\/em>, 1862), “Nada es m\u00e1s extra\u00f1o al esp\u00edritu del juda\u00edsmo que la idea de la salvaci\u00f3n del individuo, lo cual, seg\u00fan la concepci\u00f3n moderna, es la piedra angular de la religi\u00f3n”<\/em>. La esencia del juda\u00edsmo es “la creencia viva en la continuidad del esp\u00edritu en la historia humana”<\/em> [11].<\/p>\n \n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Creo que el materialismo es la premisa m\u00e1s fundamental del hebra\u00edsmo, y, por consecuencia, el fundamento de la cultura jud\u00eda y su influencia en la sociedad occidental. Incluso el tribalismo jud\u00edo es s\u00f3lo un corolario del materialismo, en tanto reduce al individuo a su herencia gen\u00e9tica. La obsesi\u00f3n de Yahv\u00e9 es mantener pura<\/em> la sangre de su pueblo elegido, y eso a su vez est\u00e1 vinculado al monote\u00edsmo exclusivo: Yahv\u00e9 proh\u00edbe a los jud\u00edos casar a sus hijos con no-jud\u00edos porque “tu hijo ser\u00eda seducido desde seguirme a m\u00ed a servir a otros dioses”<\/em> (Deuteronomio <\/em>7:3). Pero la verdadera conexi\u00f3n causal es probablemente lo contrario: la exclusividad de culto puede ser vista como una justificaci\u00f3n religiosa para la endogamia. \u00c9ste es el punto de vista del psic\u00f3logo social Kevin MacDonald, quien, en A People that Shall Dwell Alone<\/em>, sostiene que el juda\u00edsmo es una “estrategia evolutiva grupal entre pueblos” <\/em>[12]. \u00c9ste es tambi\u00e9n el punto de vista de algunos pensadores seculares jud\u00edos, como Isaac Kadmi-Cohen, quien afirma en su Essay on the Jewish Soul <\/em>(1929) que “la divinidad en el juda\u00edsmo est\u00e1 contenida en la exaltaci\u00f3n de la entidad representada por la raza”<\/em> [13]. El hecho hist\u00f3rico de que los jud\u00edos son gen\u00e9ticamente mezclados es irrelevante aqu\u00ed: lo que es importante es el hecho cognoscitivo de que muchos, si no la mayor parte de ellos, creen que ellos son los descendientes de Jacob, hijo de Isaac, hijo de Abraham.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 La circuncisi\u00f3n refuerza la primac\u00eda de lo f\u00edsico. Como “el signo del convenio” entre Yahv\u00e9 y Abraham, “marcado en la carne” de cada var\u00f3n ocho d\u00edas despu\u00e9s del nacimiento, “generaci\u00f3n tras generaci\u00f3n”<\/em> (G\u00e9nesis<\/em> 17:9-14), ella simboliza perfectamente la naturaleza no espiritual del Yahvismo. Es como un rasgo gen\u00e9tico artificial, o una marca trans-humanista, pero por substracci\u00f3n. Spinoza estaba en lo correcto cuando \u00e9l escribi\u00f3: “Atribuyo tal valor al signo de la circuncisi\u00f3n, que es la \u00fanica cosa que estimo capaz de asegurar una existencia eterna a esta naci\u00f3n”.<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Podr\u00eda argumentarse que la circuncisi\u00f3n suaviza la estricta endogamia del juda\u00edsmo, ya que puede ser un rito de admisi\u00f3n en la comunidad jud\u00eda. Es verdad, pero eso nunca sucede en la Biblia<\/em>. Perm\u00edtame recordar brevemente la edificante historia de Siquem, un pr\u00edncipe cananeo que se enamor\u00f3 de Dina, la hija de Jacob, y pidi\u00f3 [tras haberse acostado con Dina] casarse con ella. \u00c9l estaba listo a dar cualquier cosa al clan de Jacob, “lo que ustedes pidan. Pidan por la novia un precio tan alto como quieran”. <\/em>Su padre Hamor suplic\u00f3 en su nombre:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 “El coraz\u00f3n de mi hijo Siquem est\u00e1 puesto en vuestra hija. Por favor permitid que ella se case con \u00e9l. Emparentad con nosotros; dadnos vuestras hijas y tomad vosotros las nuestras. Podemos vivir juntos, y el pa\u00eds estar\u00e1 abierto para ustedes, para que ustedes lo habiten, se trasladen, y adquieran posesiones”.<\/em><\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Los hijos de Jacob entonces “respondieron con enga\u00f1o a Siquem y su padre Hamor”<\/em>, exigiendo que “ustedes se hagan como nosotros circuncidando a todos sus varones. Entonces les daremos nuestras hijas, tomando las vuestras para nosotros; y nos quedaremos con ustedes y seremos una naci\u00f3n”<\/em>. Hamor, confiando en las buenas intenciones de la tribu de Jacob, convenci\u00f3 a sus s\u00fabditos varones de ser circuncidados. Tres d\u00edas despu\u00e9s de la operaci\u00f3n, “cuando los hombres estaban todav\u00eda con el dolor”<\/em>, los hijos de Jacob los atacaron y “mataron a todos los varones”<\/em>, y luego “saquearon la ciudad”<\/em>.<\/p>\n \u00a0\u00a0 “Ellos se apropiaron de sus reba\u00f1os, su ganado, sus burros, todo lo dem\u00e1s en la ciudad y en el campo, y todas sus posesiones. Ellos llevaron cautivos a todas sus mujeres y ni\u00f1os y saquearon todo lo que se encontr\u00f3 en las casas”<\/em> (G\u00e9nesis <\/em>34:1-29).<\/p>\n \u00a0\u00a0 \u00a1Demasiado para el proselitismo jud\u00edo en la Biblia<\/em>!<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Uno no puede dejar de ver un v\u00ednculo entre el materialismo metaf\u00edsico de la Biblia <\/em>hebrea (la negaci\u00f3n de un alma espec\u00edficamente humana) y su desprecio total por las vidas de los no-jud\u00edos, a menudo no distinguibles de su ganado. En ciudades enemigas distantes, Yahv\u00e9 instruye a su pueblo:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 “Ustedes matar\u00e1n por la espada a la poblaci\u00f3n masculina entera. Pero las mujeres, los ni\u00f1os, el ganado y cualquier cosa que la ciudad contenga, a modo de despojos, ustedes pueden tomarlo para ustedes. Ustedes se alimentar\u00e1n de los despojos de los enemigos que Yahv\u00e9 vuestro dios les ha dado”<\/em>.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Pero en las ciudades cercanas, “ustedes no deben perdonar la vida a ninguna cosa que respira” <\/em>(Deuteronomio<\/em> 20:13-16). De este modo, en Jeric\u00f3 “Ellos hicieron cumplir la maldici\u00f3n de destrucci\u00f3n sobre cada uno que hab\u00eda en la ciudad: hombres y mujeres, j\u00f3venes y viejos, incluyendo los bueyes, las ovejas y los burros, matando a todos ellos”<\/em> (Josu\u00e9<\/em> 6:21). Lo mismo con los amalecitas: “Maten a hombre y mujer, beb\u00e9s y lactantes, bueyes y ovejas, camellos y burros”<\/em> (1 Samuel <\/em>15:3). De los madianitas, sin embargo, Mois\u00e9s permiti\u00f3 que los hebreos evitaran matar a “muchachas j\u00f3venes que nunca han dormido con un hombre, y cons\u00e9rvenlas para ustedes”<\/em>. Al final del d\u00eda, los despojos “llegaron a seiscientas setenta y cinco mil ovejas y cabras, setenta y dos mil cabezas de ganado, sesenta y un mil burros, y en personas, mujeres que nunca hab\u00edan dormido con un hombre, treinta y dos mil en total”<\/em>, sin mencionar “oro, plata, bronce, hierro, esta\u00f1o y plomo”<\/em> (N\u00fameros <\/em>31:3-31).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Es mi hip\u00f3tesis el que tal asimilaci\u00f3n de no-jud\u00edos con animales y despojos est\u00e1 directamente vinculada a la negaci\u00f3n de su naturaleza espiritual. Isaac Kadmi-Cohen se\u00f1ala que \u00aben el hebreo antiguo, el verbo “morir” se aplica a todas las cosas vivientes, humano o bestia. Para referirse a los hebreos, uno usa el eufemismo “reunirse con el propio pueblo”<\/em> (H\u00e9asef l\u00e9amo)\u00bb<\/em> (Kadmi-Cohen, op. cit<\/em>., p. 141).<\/p>\n <\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 En la Biblia<\/em> hebrea, la inmortalidad que es negada al individuo es atribu\u00edda completamente al pueblo en su conjunto: “He institu\u00eddo un pueblo eterno”<\/em> (Isa\u00edas<\/em> 44:7). En \u00faltimo t\u00e9rmino, es como si los jud\u00edos estuvieran unidos por un alma colectiva, \u00e9tnica, gen\u00e9tica. Maurice Samuel escribe en You Gentiles<\/em> (1924): “El sentimiento en el jud\u00edo, incluso en el jud\u00edo librepensador como yo, es que ser uno con su pueblo es ser por lo tanto admitido al poder de disfrutar del infinito”<\/em> [14]. En el mismo estilo, el activista sionista Alfred Nossig escribi\u00f3 en Berl\u00edn en 1922: “La comunidad jud\u00eda es m\u00e1s que un pueblo en el moderno sentido pol\u00edtico de la palabra. (…) Ella forma un n\u00facleo inconsciente de nuestro ser, la sustancia com\u00fan de nuestra alma”<\/em> [15]. As\u00ed, se dice que el alma de un jud\u00edo es el pueblo jud\u00edo. \u00bfO deber\u00eda esa alma colectiva ser llamada Yahv\u00e9?<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 El argumento de que el juda\u00edsmo es una especie de alma tribal ha sido planteado por varios pensadores jud\u00edos. El rabino estadounidense Harry Waton, escribiendo en “A Program for Jews and Humanity” <\/em>en 1939, es un buen ejemplo. Apelando a su entendimiento de la Biblia <\/em>que habla s\u00f3lo de “una inmortalidad aqu\u00ed mismo en la tierra”<\/em>, y de su entendimiento del juda\u00edsmo como preocupado s\u00f3lo “de esta tierra”, \u00e9l concluye:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 “Los jud\u00edos que tienen un entendimiento m\u00e1s profundo del juda\u00edsmo saben que la \u00fanica inmortalidad que existe para el jud\u00edo es la inmortalidad en el pueblo jud\u00edo. Cada jud\u00edo sigue viviendo en el pueblo jud\u00edo, y seguir\u00e1 viviendo mientras viva dicho pueblo”<\/em> [16].<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 \u00c9sa es la l\u00f3gica que est\u00e1 detr\u00e1s de advertencias como las publicadas por Benzion Netanyahu, el padre del Primer Ministro israel\u00ed, contra casarse con no-jud\u00edos:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 “S\u00f3lo por el inter-matrimonio puede una persona desarraigarse de una naci\u00f3n. (…) Abandonar una naci\u00f3n es, por lo tanto, incluso desde un punto de vista biol\u00f3gico, un acto de suicidio”<\/em> [17].<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Lo que parece estar faltando en el Yahvismo desde el punto de vista de cualquier otra religi\u00f3n es al mismo tiempo su mayor fuerza, porque un individuo tiene s\u00f3lo unas d\u00e9cadas para llevar a cabo su destino, mientras que un pueblo entero tiene siglos. La orientaci\u00f3n nacional del alma jud\u00eda inyecta en cualquier proyecto colectivo una fuerza espiritual y una resistencia contra la cual ninguna otra comunidad nacional puede competir. Eso explica la extraordinaria capacidad de los jud\u00edos para conseguir objetivos a largo plazo por medio de redes trans-generacionales. Los Neoconservadores son la m\u00e1s reciente y la m\u00e1s formidable de esas redes. Y nada es m\u00e1s revelador de su filosof\u00eda que la admiraci\u00f3n profesada por su mentor Leo Strauss por Maquiavelo (seguramente un “jud\u00edo secreto”, seg\u00fan el neocon <\/em>Michael Ledeen, porque “si usted escucha su filosof\u00eda pol\u00edtica, usted oir\u00e1 m\u00fasica jud\u00eda”<\/em> [18]).<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Strauss cree que el genio de Maquiavelo es haber entendido que el verdadero patriota es el que, sabiendo que \u00e9l no tiene ninguna alma individual y por lo tanto ning\u00fan riesgo de ser condenado, no pone ning\u00fan l\u00edmite moral a lo que \u00e9l puede hacer por su pa\u00eds [19]. Eso es exactamente lo opuesto de las palabras de Cristo: “\u00bfDe qu\u00e9 le servir\u00e1 a un hombre ganar todas las riquezas del mundo, si pierde su alma?”<\/em> (Marcos<\/em> 8:36).\u2013<\/p>\n Laurent Guy\u00e9not, 2018<\/p>\n ***<\/p>\n Traduccion al espanol: editorial-streicher.blogspot.com<\/p>\n Traduccion al ingles: thesaker.is<\/p>\n ***<\/p>\n REFERENCIAS<\/strong><\/em><\/p>\n [1] Karl Marx, On the Jewish Question<\/em>, 1843, https:\/\/www.marxists.org\/archive\/marx\/works\/1844\/jewish-question\/<\/p>\n [2] En www.marxists.de\/religion\/leon<\/p>\n [3] Como recientemente lo ha propuesto el acad\u00e9mico suizo Thomas R\u00f6mer en sus conferencias en el Coll\u00e8ge de France, 2011-2012, en https:\/\/www.college-de-france.fr\/site\/thomas-romer\/course-2011-2012.htm<\/p>\n [4] Este n\u00famero es el probable origen del N\u00famero de la Bestia en Apocalipsis <\/em>13:18.<\/p>\n [5] “Dinero” (DaMim<\/em>) es la misma palabra que “sangre” (DaM<\/em>, plural DaMim<\/em>), una “peligrosa y luminosa proximidad”, seg\u00fan Jacques Attali (Les Juifs, le Monde et l’Argent<\/em>, 2002, p. 36).<\/p>\n [6] Seg\u00fan una traducci\u00f3n m\u00e1s segura que la Nueva Biblia de Jerusal\u00e9n<\/em>, demasiado ambigua en este vers\u00edculo.<\/p>\n [7] Para entender c\u00f3mo los egipcios consideraban a la “religi\u00f3n” jud\u00eda, v\u00e9ase de Jan Assmann, Moses the Egyptian: The Memory of Egypt in Western Monotheism<\/em>, Harvard University Press, 1998, o, del mismo autor, Of God and Gods: Egypt, Israel, and the Rise of Monotheism<\/em>, University of Wisconsin Press, 2008.<\/p>\n [8] Sigmund Freud, Moses and Monotheism<\/em>, 1939 (archive.org), parte 2, I, pp. 33-34. https:\/\/archive.org\/details\/mosesandmonothei032233mbp\/page\/n6<\/p>\n [9] Por ejemplo, el Libro de Sabidur\u00eda<\/em> (o Sabidur\u00eda de Salom\u00f3n<\/em>), escrito en griego en Alejandr\u00eda en el siglo I a.C., afirma que “Dios cre\u00f3 a los seres humanos para ser inmortales”, y critica a aquellos que “no creen en una recompensa para las almas carentes de culpa” (2:22\u201323). Pero incluso dentro de la literatura greco-jud\u00eda de esa \u00e9poca prevalece el punto de vista materialista: seg\u00fan el Eclesi\u00e1stico<\/em> (o Libro de Ben Sirac<\/em>), que tampoco est\u00e1 en la compilaci\u00f3n jud\u00eda, “el destino de los humanos y el destino de los animales es el mismo: (…) todo viene del polvo, todo retorna al polvo” (3:19\u201320).<\/p>\n [10] El verbo anistanai <\/em>aparece en el cap\u00edtulo 12 del Libro de Daniel<\/em> (12:2-3), escrito en griego, junto con la noci\u00f3n greco-egipcia del buen muerto transformado en cuerpo de luz, pero dicha noci\u00f3n ha sufrido un giro materialista en los Libros de los Macabeos<\/em>, donde anastasis ha llegado a ser la milagrosa resurrecci\u00f3n, al Final de los Tiempos, de los desmembrados cuerpos de los m\u00e1rtires, para lo cual no se necesita ning\u00fan alma.<\/p>\n [11] Moses Hess, Rome and Jerusalem: A Study in Jewish Nationalism<\/em>, 1918, pp. 48, 64-65. https:\/\/archive.org\/details\/romeandjerusale02waxmgoog\/page\/n5<\/p>\n [12] Kevin MacDonald, A People that Shall Dwell Alone: Judaism as a Group Evolutionary Strategy<\/em>, 1994.<\/p>\n [13] Isaac Kadmi-Cohen, Nomades: Essai sur l’\u00c2me Juive<\/em>, 1929, p. 143. https:\/\/archive.org\/details\/NomadesByKadmiCohen1.1\/page\/n5<\/p>\n [14] Maurice Samuel, You Gentiles<\/em>, New York, 1924, pp. 74\u201375. https:\/\/archive.org\/details\/YouGentiles\/page\/n3<\/p>\n [15] Alfred Nossig, Integrales Judentum<\/em>, 1922, pp. 1-5. https:\/\/archive.org\/details\/integralesjudent00noss\/page\/n6<\/p>\n [16] Harry Waton, A Program for the Jews and an Answer to All Anti-Semites<\/em>, 1939, pp. 52, 125, 132. https:\/\/archive.org\/details\/AProgramForTheJewsAndAnAnswerToAllAntiSemites<\/p>\n [17] Benzion Netanyahu, The Founding Fathers of Zionism<\/em> (1938), Balfour Books, 2012.<\/p>\n [18] Michael Ledeen, “What Machiavelli (A Secret Jew?) Learned from Moses”<\/em>, Jewish World Review, 7 de Junio de 1999, en www.jewishworldreview.com\/0699\/machiavelli1.asp<\/p>\n [19] Leo Strauss, Thoughts on Machiavelli<\/em>, University of Chicago Press, 1978. Como siempre, Strauss atribuye aqu\u00ed sus propios m\u00e1s profundos pensamientos a otros, como un modo cr\u00edptico de dirigirse s\u00f3lo a aquellos que est\u00e1n calificados para la verdad.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Laurent Guy\u00e9not aborda el asunto de la judeidad, el origen y significado de su deidad, y la manera en que los judios consideran la inmortalidad. Todo ello, por supuesto, tiene implicaciones en el presente. 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“Mi pacto debe quedar marcado en tu carne”<\/em><\/strong><\/h4>\n
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