El hambre no es consecuecia de una sociedad dividida en clases sociales sino de una supuesta \u201cley natural\u201d que lleva el nombre del reverendo.<\/p>\n
El malthusianismo es falso, una cortina de humo que justifica las peores lacras de capitalismo, por m\u00e1s que perdure en la ideolog\u00eda burguesa con diversos nombres como superpoblaci\u00f3n, explosi\u00f3n demogr\u00e1fica o eugenesia.<\/p>\n
Tiene un evidente componente clasista porque, seg\u00fan Malthus, en este mundo los que sobran son los pobres, por lo que los malthusianos son partidarios de imponer la esterilizaci\u00f3n y el control de la natalidad sobre las poblaciones del Tercer Mundo.<\/p>\n
El mito de la superpoblaci\u00f3n no es, pues, otra cosa que imperialismo, por lo que Engels defini\u00f3 a los malthusianos como los peores enemigos de la clase obrera (1).<\/p>\n
En torno a Malthus el imperialismo ha inventado una serie de pretextos reaccionarios para luchar contra los pobres y mantener la pobreza en el mundo. Una de ellas es la seudoecolog\u00eda, donde el malthusianismo siempre est\u00e1 presente en todas sus formas, como el decrecimiento, el planeta finito y otras lindezas del mismo estilo.<\/p>\n
El 31 de agosto un art\u00edculo de Le Monde aseguraba que \u201cen \u00c1frica la presi\u00f3n demogr\u00e1fica est\u00e1 devorando los bosques\u201d porque los campesinos africanos tienen la costumbre ancestral de quemarlos peri\u00f3dicamente.<\/p>\n
Es la t\u00edpica intoxicaci\u00f3n de los altavoces del imperalismo porque la quema de bosques en \u00c1frica no tiene nada que con la \u201cpresi\u00f3n demogr\u00e1fica\u201d.<\/p>\n