![\"RuedaPrensaCorrupci\u0097n\"](\"https:\/\/redinternacional.net\/wp-content\/uploads\/2019\/05\/768568.jpg\")
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“Los exitosos due\u00f1os del gran capital escriben las leyes en Estados Unidos en su beneficio propio, las que luego ir\u00e1n a aplicar los jueces de forma extraterritorial para luchar contra la corrupci\u00f3n, las que luego el poderoso Ejecutivo nacional impondr\u00e1 a nivel global bajo presi\u00f3n y acoso (narrativo, econ\u00f3mico, y militar).”<\/strong><\/em><\/p>\n <\/p>\n El primero de diciembre de 2018 Meng Wanzhou, ejecutiva de la empresa china de telecomunicaciones Huawei e hija de su fundador, fue detenida en Canad\u00e1 en tr\u00e1nsito hacia M\u00e9xico por agentes estadounidenses bajo la acusaci\u00f3n de haber hecho negocios con Ir\u00e1n (y luego por fraude financiero) por lo cual podr\u00eda enfrentar una pena de c\u00e1rcel por m\u00e1s de una d\u00e9cada sin haber violado ninguna ley ni canadiense ni estadounidense.<\/p>\n Antes que Estados Unidos rompiera de forma unilateral el acuerdo firmado con Ir\u00e1n, hacer negocios con aquel pa\u00eds no era ilegal. Por supuesto que cuando hablamos de legalidad nos referimos a las leyes de un solo pa\u00eds, no a las leyes internacionales, que han sido sistem\u00e1ticamente violadas por ese mismo pa\u00eds. Estados Unidos no solo dicta las leyes sino que las puede cambiar abruptamente seg\u00fan su conveniencia y seg\u00fan el estado de humor del nuevo presidente, lo que convierte la saludable \u201calternancia en el poder\u201d en el comod\u00edn (joker) de un juego de naipes. El acuerdo que firma un presidente con la mano lo borra el pr\u00f3ximo con el codo.<\/p>\n Pero nada de esto es caprichoso sino parte de una l\u00f3gica de intereses financieros y econ\u00f3micos, organizados por la propaganda y la guerra ideol\u00f3gica. A Venezuela y a Cuba se los bloquea de las formas m\u00e1s brutales en nombre de la democracia y los derechos humanos para demostrar que el \u201csocialismo no funciona\u201d (y de paso no hablar de los casos donde s\u00ed ha funcionado) mientras a dictaduras absolutas como Arabia Saudita se las protege por la simple raz\u00f3n de proveer a Occidente con petr\u00f3leo y ser uno de los principales consumidores de armamentos de la poderosa industria militar. A otras dictaduras poderosas como China nunca se les reclama por los Derechos Humanos sino por alguna que otra tarifa (los campeones de la democracia nunca critican ni acosan a las dictaduras que protegen los grandes capitales, sean de izquierda o de derecha).<\/p>\n Esta actuaci\u00f3n extraterritorial (que es colonialista e ileg\u00edtima de por s\u00ed porque nunca es rec\u00edproca) es justificada por la \u201clucha contra la corrupci\u00f3n\u201d. En muchos casos puntuales y publicitados es as\u00ed, como cuando jueces estadounidenses han multado a diferentes bancos europeos por permitir el lavado de dinero de, por ejemplo, el narcotr\u00e1fico.<\/p>\n Dejemos de lado la participaci\u00f3n de Estados Unidos en el tr\u00e1fico de drogas y de armas, pero veamos que esta extraterritorialidad no solo es ileg\u00edtima sino que adem\u00e1s se sostiene por la mera fuerza de la corrupci\u00f3n legalizada del poder financiero. \u00bfC\u00f3mo? Los ejecutivos de bancos y de grandes transnacionales no estadounidenses temen este tipo de sanciones multimillonarias. Muchas empresas han quebrado o han tenido que ser liquidadas o venidas. No por mera casualidad la divisi\u00f3n de Energ\u00eda de Alstom de Francia fue venida a la alica\u00edda General Electric luego de ser acusada por jueces estadounidenses de pagar coimas en Indonesia, Egipto, Taiw\u00e1n y otros pa\u00edses, pese al decreto en contra que hab\u00eda emitido el gobierno franc\u00e9s un a\u00f1o antes. M\u00e1s recientemente, la asociaci\u00f3n de Alstom con la alemana Siemens fue vetada por la Uni\u00f3n Europea. Una reciente investigaci\u00f3n de The Economist ha se\u00f1alado un patr\u00f3n curioso: los jueces estadounidenses reducen las penas de las \u201ccompa\u00f1\u00edas corruptas\u201d cuando prometen vend\u00e9rselas a alguna otra compa\u00f1\u00eda estadounidense<\/b>.<\/p>\n Como alguien ha notado, basta que dos personas en cualquier parte del mundo se env\u00eden un correo por Gmail (o por casi cualquier otro medio electr\u00f3nico) para que un juez en Estados Unidos considere el caso tratado bajo su jurisdicci\u00f3n, ya que Google es una compa\u00f1\u00eda con base en California.<\/p>\n Pero la extraterritorialidad de un pa\u00eds no solo es ileg\u00edtima sino parte de la corrupci\u00f3n misma que dice combatir. Recordemos que los jueces, aparte de su propios criterios para aplicar las leyes (por algo las abiertas luchas pol\u00edticas para nominar a los representantes de la Suprema Corte), tambi\u00e9n deben aplicar las leyes aprobadas. Para aprobar una ley primero hay que escribirla. \u00bfQui\u00e9nes escriben las leyes? Supongamos, en el mejor caso de ingenuidad democr\u00e1tica, que la escribe el pueblo estadounidense. Aun as\u00ed deber\u00edan ser leyes aplicables solo al territorio estadounidense. Pero es necesario ser muy ingenuo para creer que las leyes en Estados Unidos las escribe el pueblo. Es m\u00e1s, ni siquiera la escriben los legisladores. Los legisladores votan, muchas veces y a pesar de la masiva propaganda medi\u00e1tica, contra la opini\u00f3n del pueblo estadounidense, como ya lo han demostrado diferentes estudios, entre ellos el de Princeton University. Pero como esto no es suficiente, las leyes las redactan comit\u00e9s integrados por pol\u00edticos y por representantes de grandes compa\u00f1\u00edas privadas, las que normalmente son sus mayores donantes (de ah\u00ed que donen dinero a dos candidatos opuestos que se disputan una banca en el senado). Los grandes inversores no tienen m\u00e1s ideolog\u00eda ni principios morales que las de sus intereses privados \u2013en nombre del inter\u00e9s general, claro<\/b>.<\/p>\n La existencia de estos casos de corrupci\u00f3n legal, que hacen de la corrupci\u00f3n ilegal un derivado casi irrelevante, cuando no \u00fatil para perseguir a la competencia, han sido siempre negados por aquellos que consideran que criticar un gobierno o un pa\u00eds es una forma de traici\u00f3n patri\u00f3tica y no un servicio a la verdad y la justicia. El patriotismo es la distracci\u00f3n de quienes han perdi\u00f3 la patria que habitan. Demonizar a los cr\u00edticos es parte de la l\u00f3gica mientras los tiburones contin\u00faan su exitoso camino. Recientemente, el USA Today demostr\u00f3, en una extensa y detallada investigaci\u00f3n, que en los \u00faltimos a\u00f1os todos los congresos de la uni\u00f3n pasaron miles de leyes (por lo menos 2.100) y todas fueron burdas \u201ccopia y pega\u201d digitadas por los representantes de las grandes compa\u00f1\u00edas privadas<\/b>. Tanto los legisladores estatales como los nacionales est\u00e1n sumergidos en esta l\u00f3gica y tr\u00e1fico (legal) de influencias, casi todos procedentes de los llamados \u201cintereses especiales\u201d y de poderosos lobbies financieros (los sindicatos podr\u00edan ser considerados los lobbies de los de abajo, pero no por casualidad desde los 80s han sido debilitados hasta su casi irrelevancia). Todo lo cual explica que el 40 por ciento de la poblaci\u00f3n estadounidense no sea due\u00f1a ni del uno por ciento de toda su riqueza, pero fan\u00e1ticamente defiende la idea de que el cinco por ciento posea m\u00e1s del 60 por ciento de todo, porque lo ha logrado \u201cpor m\u00e9rito propio\u201d y no por una sistem\u00e1tica y globalizada corrupci\u00f3n legal. Aunque, claro, convencer a un pueblo que es asaltado por su propio inter\u00e9s no deja de ser un m\u00e9rito.<\/p>\n As\u00ed, los exitosos due\u00f1os del gran capital escriben las leyes en Estados Unidos en su beneficio propio, las que luego ir\u00e1n a aplicar los jueces de forma extraterritorial para luchar contra la corrupci\u00f3n, las que luego el poderoso Ejecutivo nacional impondr\u00e1 a nivel global bajo presi\u00f3n y acoso (narrativo, econ\u00f3mico, y militar).<\/p>\n Por supuesto que no es mi inter\u00e9s, ni por lejos, defender ninguna empresa, ning\u00fan multimillonario chino, ni al gobierno chino, ni al de Ir\u00e1n ni a nadie sino, lisa y llanamente, la verdad. Sobre todo esa verdad que no se deja ver debajo de tantas banderas que flamean los fan\u00e1ticos medievales en beneficio de la ya inalcanzable aristocracia financiera.<\/p>\nEl verdadero fraude financiero<\/h4>\n