C\u00f3mo el Laboratorio de Cambio de R\u00e9gimen de Estados Unidos cre\u00f3 al l\u00edder golpista venezolano<\/h4>\n\nAntes del fat\u00eddico d\u00eda del 22 de enero, menos de uno de cada cinco<\/a> venezolanos hab\u00eda o\u00eddo hablar de Juan Guaid\u00f3. Hace tan s\u00f3lo unos meses, el joven de 35 a\u00f1os era un personaje desconocido en un grupo pol\u00edticamente marginal de extrema derecha estrechamente relacionado con horribles actos de violencia callejera. Incluso en su propio partido, Guaid\u00f3 hab\u00eda sido una figura de nivel medio en la Asamblea Nacional<\/strong>, dominada por la oposici\u00f3n, que ahora est\u00e1 en desacato de acuerdo con la Constituci\u00f3n de Venezuela.<\/p>\nPero despu\u00e9s de una sola llamada telef\u00f3nica del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, Guaid\u00f3 se proclam\u00f3 presidente de Venezuela. Ungido como el l\u00edder de su pa\u00eds por Washington, un habitante de los estratos m\u00e1s bajos de la pol\u00edtica, hasta entonces desconocido, fue abalanzado a la escena internacional como el l\u00edder seleccionado por Estados Unidos de la naci\u00f3n con las mayores reservas de petr\u00f3leo del mundo<\/strong>.<\/p>\nHaci\u00e9ndose eco del consenso de Washington, el consejo editorial del New York Times<\/em> aclam\u00f3<\/a> a Guaid\u00f3 como un “rival cre\u00edble” para Maduro con un “estilo refrescante y la visi\u00f3n de llevar adelante el pa\u00eds”. El consejo editorial de Bloomberg News lo aplaudi\u00f3<\/a> por buscar la “restauraci\u00f3n de la democracia” y el Wall Street Journal<\/em> lo declar\u00f3<\/a> “un nuevo l\u00edder democr\u00e1tico”. Mientras tanto, Canad\u00e1, numerosas naciones europeas, Israel y el bloque de gobiernos latinoamericanos de derecha conocido como el Grupo de Lima reconocieron a Guaid\u00f3 como el l\u00edder leg\u00edtimo de Venezuela.<\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n
Antes del fat\u00eddico d\u00eda del 22 de enero, menos de uno de cada cinco<\/a> venezolanos hab\u00eda o\u00eddo hablar de Juan Guaid\u00f3. Hace tan s\u00f3lo unos meses, el joven de 35 a\u00f1os era un personaje desconocido en un grupo pol\u00edticamente marginal de extrema derecha estrechamente relacionado con horribles actos de violencia callejera. Incluso en su propio partido, Guaid\u00f3 hab\u00eda sido una figura de nivel medio en la Asamblea Nacional<\/strong>, dominada por la oposici\u00f3n, que ahora est\u00e1 en desacato de acuerdo con la Constituci\u00f3n de Venezuela.<\/p>\n Pero despu\u00e9s de una sola llamada telef\u00f3nica del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, Guaid\u00f3 se proclam\u00f3 presidente de Venezuela. Ungido como el l\u00edder de su pa\u00eds por Washington, un habitante de los estratos m\u00e1s bajos de la pol\u00edtica, hasta entonces desconocido, fue abalanzado a la escena internacional como el l\u00edder seleccionado por Estados Unidos de la naci\u00f3n con las mayores reservas de petr\u00f3leo del mundo<\/strong>.<\/p>\n Haci\u00e9ndose eco del consenso de Washington, el consejo editorial del New York Times<\/em> aclam\u00f3<\/a> a Guaid\u00f3 como un “rival cre\u00edble” para Maduro con un “estilo refrescante y la visi\u00f3n de llevar adelante el pa\u00eds”. El consejo editorial de Bloomberg News lo aplaudi\u00f3<\/a> por buscar la “restauraci\u00f3n de la democracia” y el Wall Street Journal<\/em> lo declar\u00f3<\/a> “un nuevo l\u00edder democr\u00e1tico”. Mientras tanto, Canad\u00e1, numerosas naciones europeas, Israel y el bloque de gobiernos latinoamericanos de derecha conocido como el Grupo de Lima reconocieron a Guaid\u00f3 como el l\u00edder leg\u00edtimo de Venezuela.<\/p>\n<\/div>\n