![\"36767.jpg\"](\"https:\/\/redinternacional.net\/wp-content\/uploads\/2018\/09\/36767.jpg\")
<\/p>\n<\/p>\n
El rito sacrificial est\u00e1 en el origen de la civilizaci\u00f3n y, por ende, de pr\u00e1cticamente todas las religiones. Las m\u00e1s arcaicas sacrificaban a una persona que era considerada siempre culpable. El rito devolv\u00eda as\u00ed la paz a una comunidad ocasionalmente crispada.<\/p>\n
Seg\u00fan Ren\u00e9 Girard<\/strong>, escritor y antrop\u00f3logo franc\u00e9s, el critianismo cambi\u00f3 el gui\u00f3n de este viejo drama: un \u00fanico sacrificado al que todos reconocieron como v\u00edctima inocente acab\u00f3 con todos los sacrificios. Desde entonces, al menos en Occidente, fue suficiente con recordarlo peri\u00f3dicamente de forma simb\u00f3lica. Para Girard esto supuso un avance civilizatorio<\/strong>.<\/ins><\/p>\n Cuando hay un \u00fanico sacrificado<\/strong> que es reconocido como inocente, la Humanidad se hermana: el Cordero de Dios<\/em> quita el pecado del mundo; y no solo de un grupo, de una comunidad o de una naci\u00f3n. Todos somos inocentes porque todos somos culpables. Sin embargo, cuando alguien se considera v\u00edctima inocente en virtud de su pertenencia a un grupo, la Humanidad se fragmenta: unos son los malos y otros son los buenos<\/strong>. En nombre del progreso se produce un regreso, y la pol\u00edtica se convierte en una\u00a0religi\u00f3n primitiva<\/strong> que no sabe que lo es.<\/p>\n En nombre de los grupos inocentes, los grupos designados como culpables han de ser sacrificados, siquiera simb\u00f3licamante en el altar de los medios de comunicaci\u00f3n<\/p><\/blockquote>\n Los modernos pseudoilustrados que pretenden reinventar la Humanidad vuelven as\u00ed sin saberlo a las pulsiones m\u00e1s elementales que est\u00e1n en el origen de todos los ritos arcaicos<\/strong>: en nombre de los grupos inocentes, los grupos designados como culpables han de ser sacrificados, siquiera simb\u00f3licamante en el altar de los medios de comunicaci\u00f3n. Pero \u00bfqui\u00e9nes son los inocentes?<\/p>\n Tengo una amiga a la que le molesta mucho que las madres suban al autob\u00fas con su ni\u00f1o en un carrito, pero es muy comprensiva con los ciegos que suben con un perro. Y no es por un amor desinteresado a los ciegos, sino a los perros.<\/p>\n Hace unas semanas el Ayuntamiento de Ciudad Real aprob\u00f3 la parada bajo demanda<\/strong> para mujeres que viajan solas en los autobuses que circulan por la noche. Un concejal de la oposici\u00f3n pidi\u00f3 que se incluyesen entre los beneficiarios a personas mayores y discapacitadas, pero el pleno se opuso. El motivo no confesado para esta extra\u00f1a negativa es f\u00e1cil de adivinar: las mujeres son inocentes, pero los ancianos y discapacitados no.<\/p>\n Adoradores de la madre Tierra, animalistas, neofeministas, elegetebistas, secesionistas frustrados\u2026 son los nuevos inocentes de la nueva \u201carcaica religi\u00f3n\u201d, y su mera presencia o su afectado testimonio nos convierten a todos los dem\u00e1s en presuntos culpables. La exaltaci\u00f3n del inocente del buenismo imperante no deja de ser un cristianismo enloquecido, por m\u00e1s que la mayor\u00eda de sus miembros se declaren ateos.<\/p>\n En la nueva religi\u00f3n la dial\u00e9ctica gregaria de los perseguidos y los perseguidores, intensificada por la pasi\u00f3n mim\u00e9tica que dir\u00eda Ren\u00e9 Girard, se superpone a cualquier intento de reflexi\u00f3n. El lenguaje est\u00e1 finiquitado y la raz\u00f3n ha caducado<\/strong>. El rostro entristecido de la \u201cv\u00edctima inocente\u201d pululando por las redes sociales y por la televisi\u00f3n es la nueva verdad. Todo el que tenga ojos lo ver\u00e1. Para atender a las palabras hay al menos que saber leer. Para pensar, hay que saber razonar un poco. Pero las im\u00e1genes hablan a todos por s\u00ed mismas con abrumadora objetividad.<\/p>\n En esta tensi\u00f3n soterrada, guerra silenciosa al fin, gana quien m\u00e1s pena da<\/p><\/blockquote>\n En esta tensi\u00f3n soterrada, guerra silenciosa al fin, gana quien m\u00e1s pena da. Y como la pena es un inobservable, es la conducta que a ella se asocia lo que vale: ojos h\u00famedos, cejas arqueadas, llanto y l\u00e1grimas. Estas son las nuevas armas de los grupos autodenominados v\u00edctimas. La imagen lo es todo, prueba indiscutible y fundadora de \u201cnuevos derechos\u201d. Las palabras ya solo importan a unos pocos. Leer o escribir es pasatiempo de cuatro gatos<\/strong>.<\/p>\n Si Marx<\/strong> viviese en nuestra \u00e9poca aprender\u00eda a ser un excelente actor y un experto fot\u00f3grafo. Tantos libros escritos, y tan gordos, \u00bfpara qu\u00e9? La frase de nuestro Marx moderno dir\u00eda: \u201c\u00a1quejicas y llorones del mundo, un\u00edos!\u201d Cabe en un tuit y puede acompa\u00f1arse con un meme<\/strong>. Tan solo estas palabras, subtitulando la foto del barbudo Marx sumido en un llanto inconsolable y vestido de drag queen<\/em>, podr\u00edan cambiar el rumbo de la Historia.<\/p>\n Un pol\u00edtico aparece por televisi\u00f3n y alguien ufanamente exclama: \u201cqu\u00e9 asco me da, no lo puedo soportar\u201d, y se acab\u00f3 la reflexi\u00f3n<\/p><\/blockquote>\n No queremos ya razones, queremos emociones<\/strong>, incluso sensaciones (cuanto m\u00e1s b\u00e1sicas, mejor). Un pol\u00edtico aparece por televisi\u00f3n y alguien ufanamente exclama: \u201cqu\u00e9 asco me da, no lo puedo soportar\u201d, y se acab\u00f3 la reflexi\u00f3n. Pensar requiere esfuerzo y los argumentos pueden ser discutidos; pero degustar y oler es f\u00e1cil, y los sabores y los olores no son refutables. Hoy el asco es estructural, no depende de la persona: joven o viejo, guapo o feo; si no defiende con suficiente vehemencia a las autoproclamadas v\u00edctimas, \u201cque asco me da\u201d. Los inocentes agradan y provocan empat\u00eda, los culpables tan solo dan asco. Pero como dan asco tras ser etiquetados previamente como culpables por los infatigables y medi\u00e1ticos defensores de los inocentes, no hay forma de salir del c\u00edrculo. Regresamos entonces al mundo emocional y sensitivo de la primera infancia. Hay cosas que nos agradan como un postre almibarado y otras muchas que nos repugnan como el pescado podrido: la pol\u00edtica se ha convertido en cuesti\u00f3n de olores y sabores<\/strong>; y el asco, en su principal categor\u00eda.<\/p>\n Las plantas y los animales son inocentes. Los homosexuales son inocentes. Todas las mujeres son inocentes, y por eso son seres de luz incapaces de mentir o de cometer un crimen. Sin embargo, hay muchas personas culpables en virtud de alg\u00fan pecado original. Los pecados son m\u00faltiples y variados: ser blanco y occidental (y no fustigarse por ello), haber nacido hombre, ser heterosexual, ser aficionado a los toros, celebrar la Navidad o no adorar con suficiente devoci\u00f3n a Ernesto Che Guevara<\/strong>. Algunos son pintorescos; otros, aparentemente insignificantes y simplones. Tanto da, todos son igualmente pecados y ninguno ha de ser perdonando. El buenismo alimenta el odio como la gasolina al fuego y necesita siempre identificar a los mal\u00edsimos que, obviamente, siempre son los otros\u2026 y dan mucho asco.<\/p>\n Apunto estamos de eliminar las fronteras y abolir el ej\u00e9rcito. El mundo es un para\u00edso porque la gente es inocente y buena; pero ojo, no vaya usted a quedar fuera de \u201cla gente\u201d. Disentir es confesi\u00f3n de culpabilidad. Si usted lo hace ser\u00e1 el indeseable aguafiestas de la reuni\u00f3n, la personificaci\u00f3n del mal, el mismo Hitler resucitado: en definitiva, el asco en persona. Se convertir\u00e1 entonces en el candidato id\u00f3neo para el sacrifico laico de los nuevos tiempos: el linchamiento inmisericorde en las redes sociales y la acusaci\u00f3n p\u00fablica desde los medios de comunicaci\u00f3n. Al\u00e9grese por ello, de momento \u201clos inocentes\u201d no le clavar\u00e1n un pu\u00f1al en el altar.<\/p>\n Jes\u00fas Palomar, 5 septiembre 2018<\/p>\n Fuente<\/a><\/p>\n Traducido al franc\u00e9s aqu\u00ed<\/a><\/p>\nEl \u201cbuenismo\u201d, una nueva religi\u00f3n<\/h4>\n