{"id":4434,"date":"2018-08-04T19:20:08","date_gmt":"2018-08-04T19:20:08","guid":{"rendered":"https:\/\/redinternacional.net\/?p=4434"},"modified":"2018-08-04T19:20:08","modified_gmt":"2018-08-04T19:20:08","slug":"argentina-dos-tendencias-convergentes-hacia-la-implosion-economica-y-la-explosion-social-por-jorge-beinstein","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/redinternacional.net\/2018\/08\/04\/argentina-dos-tendencias-convergentes-hacia-la-implosion-economica-y-la-explosion-social-por-jorge-beinstein\/","title":{"rendered":"Argentina, dos tendencias convergentes: hacia la implosi\u00f3n econ\u00f3mica y la explosi\u00f3n social – por Jorge Beinstein"},"content":{"rendered":"
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\u00bfHacia donde va Argentina?, su evoluci\u00f3n est\u00e1 marcada por dos tendencias convergentes que han ido tomando velocidad durante 2018: por una parte la marcha hacia la implosi\u00f3n econ\u00f3mica y por otra la ruta no menos veloz hacia la explosi\u00f3n social.<\/p>\n
No es seguro que cada una de ellas o ambas de manera conjunta lleguen al punto de ruptura que cambie radicalmente el panorama nacional, sin embargo su desarrollo comienza a sobredeterminar el comportamiento de los c\u00edrculos dirigentes.<\/p>\n
Por un lado la econom\u00eda va entrando en recesi\u00f3n piloteada por el FMI sin ninguna posibilidad de recuperaci\u00f3n por lo menos en el corto y mediano plazo. La sucesi\u00f3n de ajustes exigida por el Fondo achicar\u00e1 cada vez m\u00e1s el mercado interno (que ya ven\u00eda declinando desde la llegada de Macri) destruyendo el tejido productivo y empobreciendo al grueso de la poblaci\u00f3n. Esa din\u00e1mica conduce inevitablemente hacia la implosi\u00f3n econ\u00f3mica, hacia un momento en el que se desmoronan el conjunto del aparato productivo (solo unas pocas islas podr\u00edan llegar a salvarse), extendidas redes comerciales y una multitud de servicios.<\/p>\n
Lo te\u00f3ricamente esperable en esas situaciones es que el tejido social y su entramado cultural se vayan desintegrando al ritmo de la recesi\u00f3n para finalmente colapsar. Sin embargo en el caso argentino se est\u00e1 desarrollando un fen\u00f3meno poco frecuente que no seguir\u00eda la ruta establecida por la teor\u00eda: mientras la econom\u00eda declina rumbo a la implosi\u00f3n, desde la base de la sociedad se han ido generando formas de acci\u00f3n no solo de resistencia sino tambi\u00e9n ofensivas que van m\u00e1s all\u00e1 de las reivindicaciones econ\u00f3micas. Se trata de una tendencia que se va amplificando apuntando hacia una gran explosi\u00f3n popular, un posible tsunami social que amenaza sumergir al entramado institucional y medi\u00e1tico que sostiene al sistema.<\/p>\n
De todos modos no es inevitable que se produzcan finalmente la implosi\u00f3n ni la explosi\u00f3n, diversos factores pueden retrasarlas de manera significativa o incluso diluirlas en procesos de degradaci\u00f3n de gran amplitud. La recesi\u00f3n por ejemplo podr\u00eda llegar a encontrar un horizonte de \u201cequilibrio\u201d bajo la forma de una \u201ceconom\u00eda de baja intensidad\u201d con un mercado interno comprimido, altos porcentajes de desocupaci\u00f3n, subocupaci\u00f3n, pobreza e indigencia y peque\u00f1os polos de altos ingresos, coincidente con ello las resistencias y rebeliones sociales ahora presentes podr\u00edan llegar a declinar golpeadas por la crisis econ\u00f3mica, la manipulaci\u00f3n medi\u00e1tica y la represi\u00f3n.<\/p>\n
Aunque ese escenario de \u201cpaz de cementerio\u201d, ilusi\u00f3n siniestra de la \u00e9lite dominante, se contrapone a la din\u00e1mica financiera, saqueadora, desestabilizante de dicha \u00e9lite, componente perif\u00e9rica de un proceso parasitario global que la sobredetermina. Y tambi\u00e9n se contrapone al visible potencial creativo de las fuerzas populares avalado por toda su historia, sin ir m\u00e1s lejos recordemos la revuelta de 2001 precedida por una prolongada degradaci\u00f3n neoliberal y las grandes masacres de la dictadura militar.<\/p>\n
En diciembre de 2015 el equipo gobernante consideraba que la situaci\u00f3n econ\u00f3mica le permitir\u00eda realizar gigantescas transferencias de ingresos sin que el barco se hunda. No repar\u00f3 (o subestim\u00f3) que por debajo de esa realidad exist\u00edan fragilidades que se hab\u00edan agravado en los \u00faltimos a\u00f1os, los precios internacionales de las materias primas hab\u00edan sufrido un shock depresivo en 2014 lo que ensombrec\u00eda el futuro del comercio exterior y la ampliaci\u00f3n del mercado interno, impulsado por el gobierno anterior mediante suaves subas de los salarios reales acompa\u00f1adas por reducciones sucesivas del desempleo, comenzaba a tocar techo. Para seguir por la v\u00eda mercadointernista habr\u00eda sido necesario, m\u00e1s temprano que tarde, poner en marcha una dr\u00e1stica estrategia de desconcentraci\u00f3n de ingresos acompa\u00f1ada por el control estatal de \u00e1reas claves como las del comercio exterior y del sistema financiero y as\u00ed impulsar un proceso de r\u00e1pido desarrollo productivo. Alternativa opuesta a la din\u00e1mica concreta y a las aspiraciones de la alta burgues\u00eda (parasitaria, transnacionalizada) que apuntaban hacia la realizaci\u00f3n de un gran saqueo de recursos estatales y privados. As\u00ed fue como con la victoria de Macri se produjeron mega transferencias hacia los grandes grupos econ\u00f3micos v\u00eda exenciones y reducciones tributarias que aumentaron el d\u00e9ficit fiscal lo cual sumado a la liberaci\u00f3n de las importaciones generadora de un enorme d\u00e9ficit comercial y a las devaluaciones del peso, provocaron concentraci\u00f3n de ingresos, inflaci\u00f3n y enfriamiento econ\u00f3mico. La avalancha de d\u00e9ficits fue cubierta con deudas en d\u00f3lares a lo que se agreg\u00f3 un ins\u00f3lito casino especulativo en pesos convertibles en d\u00f3lares a alt\u00edsimas tasa de inter\u00e9s (la org\u00eda de las Lebacs). En el segundo a\u00f1o de su mandato el gobierno busc\u00f3 amortiguar la recesi\u00f3n con obras p\u00fablicas financiadas con m\u00e1s deudas, d\u00f3lares que adem\u00e1s serv\u00edan para tapar agujeros fiscales y comerciales y para aceitar las fugas de capitales producto de las diversas rapi\u00f1as y de la retracci\u00f3n de las inversiones productivas. La burbuja de deudas no pod\u00eda seguir creciendo indefinidamente y la fiesta concluy\u00f3 en 2018 cuando asom\u00f3 el fantasma de la insolvencia y el gobierno desesperado pidi\u00f3 auxilio al FMI que, como no pod\u00eda ser de otra manera, le impuso un plan de ajuste que va hundiendo a la econom\u00eda en la depresi\u00f3n.<\/p>\n
El gobierno suele echarle la culpa del descalabro financiero a la suba \u201cinesperada\u201d de la tasas de inter\u00e9s en los Estados Unidos provocando una suerte de efecto aspiradora sobre los capitales perif\u00e9ricos. La crisis del endeudamiento acelerado argentino era inevitable, tal vez la suba de tasas norteamericanas la anticip\u00f3 un poco pero no mucho. El globo de las Lebacs ten\u00eda un l\u00edmite f\u00edsico marcado por las reservas netas del Banco Central, claramente inferiores al monto dolarizado de esos papeles. A lo que hay que sumar los pagos exigidos por la deuda p\u00fablica directa en d\u00f3lares en una coyuntura caracterizada por un fuerte d\u00e9ficit del comercio exterior y una persistente fuga de capitales. Eso ya era visible en 2017 y la situaci\u00f3n se fue agravando en los primeros meses de 2018. El poder de fuego debilitado del Banco Central ante posibles turbulencias qued\u00f3 al desnudo y los acreedores empezaron a olfatear escenarios de insolvencia. La pregunta es qu\u00e9 ten\u00edan dentro de sus cabezas Macri y los integrantes de su equipo econ\u00f3mico entre fines de 2017 y comienzos de 2018 ante la inminencia del desenlace. Algunos analistas suponen que se trat\u00f3 de una evaluaci\u00f3n err\u00f3nea (o de mala informaci\u00f3n) del comportamiento de los grupos financieros embarcados en la rapi\u00f1a especuladora, cosa dif\u00edcil de aceptar ya que los que piloteaban el negocio desde el gobierno formaban parte de esos grupos. El misterio aumenta cuando constatamos que la suba de tasas de inter\u00e9s en Estados Unidos era completamente previsible ya que formaba parte de la estrategia monetaria anunciada mucho tiempo antes por las autoridades de ese pa\u00eds. La explicaci\u00f3n m\u00e1s razonable es que la mega operaci\u00f3n financiera montada por el gobierno se convirti\u00f3 una trampa de la que no pudo (y no puede) salir, la convergencia de intereses que la sobredetermina constituye un s\u00faper poder saqueador cuya din\u00e1mica desborda a los actores gubernamentales. De todos modos la psicolog\u00eda de Macri, nutrida por la brutalidad cortoplacista de los negocios mafiosos [1], se adapta c\u00f3modamente a esa loca fuga hacia adelante.<\/p>\n
Mientras tanto la impopularidad del gobierno crece d\u00eda a d\u00eda y la protestas sociales se multiplican. Argentina se encamina a paso r\u00e1pido hacia una crisis de gobernabilidad probablemente muy superior a la de 2001 alentada por el derrumbe econ\u00f3mico en curso.<\/p>\n
La alternativa represiva no debe ser descartada, el car\u00e1cter aventurero del macrismo, su ra\u00edz lumpenburguesa, el nucleo duro social neofascista que lo rodea, pueden dar pie a una tentativa desesperada de ese tipo impulsada por la declinante viabilidad de un Plan B bajo control oficialista en torno de la hipot\u00e9tica candidatura de Mar\u00eda Eugenia Vidal que va perdiendo cuerpo arrastrada por la impopularidad del Presidente a lo que se agregan no pocos m\u00e9ritos propios (como el reciente esc\u00e1ndalo a partir del descubrimiento de la utilizaci\u00f3n de fondos negros en sus campa\u00f1as electorales).<\/p>\n
Un pieza importante tanto en la instalaci\u00f3n como en el funcionamiento posterior del gobierno ha sido y sigue siendo el opoficialismo, mezcla gelatinosa de dirigentes pol\u00edticos y sindicales, donde predomina la derecha peronista pero tambi\u00e9n poblada por no pocos gorilas sueltos, que suelen combinar \u201ccriticas sensatas\u201d al oficialismo, alguna que otra rebeld\u00eda de poca monta y obsecuencia pr\u00e1ctica. A medida que la crisis se agrava van surgiendo desde ese espacio toda clase de opciones, algunas fantasiosas y otras m\u00e1s realistas, destinadas a preservar los intereses dominantes, desde la ampliaci\u00f3n del gabinete presidencial en una suerte de gobierno de \u201cunidad nacional\u201d hasta la conformaci\u00f3n de una variante electoral gatopardista que remplazar\u00eda a Macri en 2019 (o antes).<\/p>\n
Como parte del show no pod\u00edan faltar las declaraciones de Eduardo Duhalde que tras vaticinar que: \u201cel pr\u00f3ximo presidente\u2026 va a ser Roberto Lavagna\u201d, y luego de elogiarlo, agregaba que \u201cel acuerdo con el FMI ayuda a salir (de la crisis), a pesar de que la mayor\u00eda de los argentinos est\u00e1 en contra de esa medida\u201d [2]. El rostro de empleado de pompas f\u00fanebres de Lavagna encaja bastante bien con el destino fondomonetarista que Duhalde le asigna a la Argentina sin embargo no es para nada evidente que esa alternativa u otra parecida funcionen ante a la tormenta que se avecina.<\/p>\n
A diferencia de las danzas cupulares y desde el comienzo del gobierno macrista se ha venido desplegando una amplia variedad de protestas populares que con el correr de los meses fueron no s\u00f3lo ganando en masividad sino tambi\u00e9n en autonom\u00eda, que no es total sino que aparece como una suerte de fen\u00f3meno complejo que incluye desde expresiones sociales independientes de las dirigencias pol\u00edticas y sindicales, donde se hace visible la autoconvocatoria, hasta llegar a las encuadradas por dirigencias sobre todo sindicales, pasando por otras que acompa\u00f1an a los dirigentes org\u00e1nicos desbord\u00e1ndolos en ciertos casos y en algunos coloc\u00e1ndolos en situaciones inc\u00f3modas.<\/p>\n
Se trata de una sucesi\u00f3n interminable de movilizaciones populares de todo tipo, muchas de ellas gigantescas, mayormente pac\u00edficas pero con algunos brotes de radicalizaci\u00f3n (por ejemplo las protestas del 18 de Diciembre de 2017 frente al Congreso) preocupantes para oficialistas y opoficialistas, que les hacen temer puebladas de gran magnitud en un futuro no muy lejano . A medida que la crisis se vaya profundizando ese escenario ser\u00e1 cada vez m\u00e1s probable, la ola puede seguir creciendo hasta engendrar un estallido social de dimensi\u00f3n oce\u00e1nica mucho m\u00e1s devastador que el hurac\u00e1n de 2001.<\/p>\n
La intoxicaci\u00f3n medi\u00e1tica no la ha podido enfriar, peor a\u00fan su rendimiento manipulador es decreciente, las represiones puntuales han resultado ineficaces, no han generado temor sino indignaci\u00f3n. De todos modos desde el primer d\u00eda y de manera sistem\u00e1tica el gobierno ha ido conformando una suerte de polic\u00eda militar integrando fuerzas convencionales (polic\u00edas, gendarmer\u00eda, etc.), entren\u00e1ndolas con asesoramiento norteamericano-israel\u00ed, dot\u00e1ndolas de armamento id\u00f3neo, la \u00faltima novedad ha sido la decisi\u00f3n de incorporar a las Fuerzas Armadas a tareas de represi\u00f3n interna. Pero nada le asegura al gobierno la utilizaci\u00f3n eficaz de ese engendro ante una revuelta popular a gran escala. El blindaje medi\u00e1tico se est\u00e1 oxidando y el blindaje militar-policial tiene un destino incierto, mientras tanto el gobierno sigue haciendo m\u00e1s (mucho m\u00e1s) de lo mismo: contin\u00faa con su estrategia de control medi\u00e1tico total atacando ahora los \u00faltimos (y ya marginales) reductos cr\u00edticos y desarrollando el aparato represivo convencido de la inminencia de estallidos sociales. No sabe cuando se producir\u00e1 una nueva corrida cambiaria, ni cual ser\u00e1 el ritmo del hundimiento econ\u00f3mico (los \u00faltimos datos comparativos mayo 2017-mayo 2018 muestran, seg\u00fan datos oficiales, una ca\u00edda del Producto Bruto Interno del orden del 5,8 %), tampoco sabe cuando ni como se expresar\u00e1 la bronca popular en lo que resta del a\u00f1o, pero enfrenta a esos y otros peligros acentuando su din\u00e1mica dictatorial, Argentina ha ingresado en Terra Incognita<\/em>.<\/p>\n Jorge Beinstein, 31 julio 2018<\/p>\n