{"id":4121,"date":"2018-07-24T23:26:20","date_gmt":"2018-07-24T23:26:20","guid":{"rendered":"https:\/\/redinternacional.net\/?p=4121"},"modified":"2018-07-24T23:26:20","modified_gmt":"2018-07-24T23:26:20","slug":"es-el-fascismo-de-izquierda-y-como-reconocer-su-esencia","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/redinternacional.net\/2018\/07\/24\/es-el-fascismo-de-izquierda-y-como-reconocer-su-esencia\/","title":{"rendered":"Es el fascismo ‘de izquierda’ ? (y c\u00f3mo reconocer su esencia)"},"content":{"rendered":"
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‘Fascismo Liberal’: Por qu\u00e9 el fascismo siempre ha sido un movimiento de izquierda y c\u00f3mo reconocer su esencia.<\/h4>\n<\/div>\n
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En estos tiempos de arrolladora correcci\u00f3n pol\u00edtica, cuando bravucones atacan a quienes cuestionan la santa trinidad liberal de la diversidad, la inclusividad y la igualdad, y en los que los medios de comunicaci\u00f3n acatan la l\u00ednea del partido al tiempo que difaman a los disidentes, es f\u00e1cil ver por qu\u00e9 cada vez m\u00e1s gente llama “fascista” al actual pensamiento grupal progresista. Pero si uno mira la historia, como lo hizo Jonah Goldberg en su libro, Liberal Fascism<\/em> (“El fascismo liberal”), uno se da cuenta de que esto pasa por alto lo importante: la izquierda de hoy no est\u00e1 simplemente usando t\u00e1cticas fascistas. No, el fascismo es, y siempre ha sido, un proyecto progresista de izquierda. Lo que hoy llamamos conservadurismo tiene poco que ver con el mismo; de hecho, se trata casi exactamente de lo contrario<\/strong>.<\/p>\n

Para comprender esto, primero debemos darnos cuenta de que el fascismo es un movimiento revolucionario, dentro de la tradici\u00f3n de la Revoluci\u00f3n Francesa. Como lo expresa Goldberg:<\/p>\n<\/div>\n

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…la Revoluci\u00f3n Francesa fue la primera revoluci\u00f3n totalitaria, la madre del totalitarismo moderno, y el modelo espiritual para las revoluciones fascista italiana, nazi alemana y comunista rusa. Fue un levantamiento nacionalista-populista, dirigido y manipulado por una vanguardia intelectual decidida a reemplazar el cristianismo por una religi\u00f3n pol\u00edtica que glorificara “al pueblo”, consagrara la vanguardia revolucionaria como sus sacerdotes y coartara los derechos de los individuos<\/strong>.<\/p><\/blockquote>\n

La revoluci\u00f3n no es exactamente un tema de conversaci\u00f3n conservador, \u00bfverdad? O considere un programa prematuro de Mussolini, “el padre del fascismo”: algunas de las cosas que estos primeros fascistas quer\u00edan inclu\u00edan rebajar la edad m\u00ednima para votar, poner fin al servicio militar, revocar los t\u00edtulos de nobleza, fijar un salario m\u00ednimo, construir escuelas “r\u00edgidamente seculares” para el proletariado, un gran sistema tributario progresista… en otras palabras, una plataforma cl\u00e1sicamente izquierdista. El fascismo fue, en cierto sentido, una revoluci\u00f3n bolchevique sin el internacionalismo<\/strong>. Consecuentemente, muchos progresistas estadounidenses de la \u00e9poca se mostraron muy favorables<\/a> a Mussolini. Hitler era igualmente anticapitalista y anticonservador. Goldberg escribe:<\/p>\n<\/div>\n

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Los nazis llegaron al poder aprovech\u00e1ndose de la ret\u00f3rica anticapitalista en la que cre\u00edan indiscutiblemente. Incluso si Hitler era un criptonihilista como lo retratan muchos, es imposible negar la sinceridad de las masas nazis que se ve\u00edan a s\u00ed mismas como organizadoras de un ataque revolucionario contra las fuerzas del capitalismo. Adem\u00e1s, el nazismo tambi\u00e9n enfatiz\u00f3 muchos de los asuntos planteados posteriormente por las Nuevas Izquierdas en otros lugares y tiempos: la primac\u00eda de la raza, el rechazo al racionalismo, el \u00e9nfasis en lo org\u00e1nico y hol\u00edstico (incluyendo el ambientalismo, la alimentaci\u00f3n saludable y el ejercicio) y, sobre todo, la necesidad de “trascender” las nociones de clase<\/strong>.<\/p><\/blockquote>\n

Goldberg deja claro que el fascismo (tanto el fascismo cl\u00e1sico de Mussolini como el nazismo de Hitler; pero tambi\u00e9n el comunismo como el gemelo igualmente malvado del fascismo) es en esencia colectivista, anticapitalista, antirreligioso (aunque a veces puede usar la religi\u00f3n para promover sus objetivos), quiere controlarlo todo en nombre del bienestar, el progreso y el “bien del pueblo”, utiliza la ciencia como una especie de clase sacerdotal para justificar a los l\u00edderes del “movimiento”, odia al individuo y siempre busca el avance del colectivo… sip<\/em>, exactamente la pesadilla Orwelliana que vemos hoy, mayormente en la izquierda.<\/p>\n<\/div>\n

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\"NRW<\/a><\/p>\n

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El New Deal de Roosevelt y su Reforma Nacional: lo mejor del fascismo progresista.<\/span><\/div>\n<\/div>\n

Es realmente fascinante y escalofriante c\u00f3mo Goldberg (re)cuenta la historia moderna de Estados Unidos a trav\u00e9s de esta lente; como la historia de Woodrow Wilson y Teddy Roosevelt, que abrazaron exactamente este tipo de pensamiento: ellos fueron personas que ve\u00edan la constituci\u00f3n como un mero obst\u00e1culo en el camino de los grandes l\u00edderes y quer\u00edan el poder absoluto en nombre del “progreso”. Es asombroso leer la historia de Estados Unidos durante la Primera Guerra Mundial y lo que Wilson y toda la banda progresista, incluyendo m\u00e1s tarde a Franklin D. Roosevelt, ten\u00edan en sus mentes; personas con una tremenda influencia en el pensamiento progresista hasta el d\u00eda de hoy. Y decir que la muy glorificada revoluci\u00f3n de los a\u00f1os 60 conten\u00eda elementos fascistas ser\u00eda quedarse corto; de hecho, las turbas violentas y hambrientas de poder que acallaban a cualquiera que se opusiera remotamente a sus ideas radicales son inquietantes reminiscencias de lo que pas\u00f3 en las universidades alemanas en los a\u00f1os 30.<\/p>\n

Si todo esto parece confuso, puede deberse a que se trata de un fen\u00f3meno enga\u00f1oso por su propia naturaleza<\/strong>. La utilizaci\u00f3n de palabras como armas y la torsi\u00f3n de su significado tienen una larga tradici\u00f3n entre los l\u00edderes patol\u00f3gicos. Un buen ejemplo es el brillante uso propagand\u00edstico que hizo Josef Stalin de la palabra “fascismo” para difamar a todos y a todo lo que no estaba de acuerdo con \u00e9l al cien por cien – de donde viene el uso obstinado del t\u00e9rmino por parte de la izquierda de hoy para difamar cosas que no tienen nada que ver con el fascismo. Lo cierto es que los esl\u00f3ganes y las justificaciones ideol\u00f3gicas cambian, pero la naturaleza profundamente patol\u00f3gica del fascismo permanece, ya se trate del nazismo, del fascismo de Mussolini, del comunismo o del “progresismo” liberal de hoy.<\/p>\n<\/div>\n

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\"stalin\"<\/a><\/p>\n

\u00a9 Bundesarchiv, Bild 183-R80329 \/ CC-BY-SA 3.0<\/span>
\nJosef Stalin: el hombre que redefini\u00f3 el significado del “fascismo” con fines propagand\u00edsticos.<\/span><\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n
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Por lo tanto, si hemos de tomar en serio el mantra tan repetido de “nunca m\u00e1s”, tenemos que llegar a un acuerdo sobre lo que es realmente el fascismo y c\u00f3mo es su aspecto. El problema es que su naturaleza patol\u00f3gica lo convierte en un blanco m\u00f3vil: el fascismo siempre adapta su lenguaje a lo que est\u00e1 de moda<\/strong>. Lo que debemos hacer, entonces, es examinar los principios subyacentes: \u00bfcu\u00e1les son las caracter\u00edsticas que son independientes de los esl\u00f3ganes ideol\u00f3gicos de hoy d\u00eda?<\/p>\n

Andrew Lobaczewski ha intentado estudiar los reg\u00edmenes patol\u00f3gicos y c\u00f3mo llegaron al poder. Despu\u00e9s de haber presenciado los horrores del comunismo de primera mano, \u00e9l y sus compa\u00f1eros en la entonces Polonia controlada por los nazis miraron el fen\u00f3meno desde una perspectiva psicol\u00f3gica y reportaron sus hallazgos en su libro, La ponerolog\u00eda pol\u00edtica<\/em><\/a>. \u00c9l acu\u00f1\u00f3 el t\u00e9rmino “patocracia” para describir un r\u00e9gimen que es patol\u00f3gico en el sentido cl\u00ednico: un sistema que responde a la visi\u00f3n distorsionada de individuos patol\u00f3gicos que buscan corromper a toda la sociedad. Denomin\u00f3 “ponerizaci\u00f3n” al proceso por el cual una sociedad normal y funcional se transforma en una patocracia: comienza con un conjunto de ideas de intelectuales que parecen prometedoras, pero que son demasiado limitadas, dicot\u00f3micas y tienen ciertas caracter\u00edsticas patol\u00f3gicas. Una de ellas es lo que Lobaczewski llama “la declaraci\u00f3n esquizoide”: una creencia fundamental de que, dejada a su suerte, la gente siempre ser\u00e1 est\u00fapida y cruel, y por lo tanto debe estar firmemente integrada a una estructura poderosa; todo por “el bien de la gente”, por supuesto.<\/p>\n

El siguiente paso es que los individuos con diversas patolog\u00edas vean el potencial de estas ideolog\u00edas y las utilicen instintivamente para ganar poder. A pesar de su ret\u00f3rica, su objetivo no es hacer del mundo un lugar mejor, sino someter y corromper la sociedad de la “gente normal”, a la que ven como una amenaza. En palabras de Lobaczewski:<\/p>\n<\/div>\n

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Los individuos con diferentes trastornos psicol\u00f3gicos perciben la estructura social dominada por personas normales, al igual que su mundo conceptual, como un “sistema de fuerza y opresi\u00f3n”<\/span>. En reglas generales, los psic\u00f3patas siempre llegan a esa conclusi\u00f3n. Si, al mismo tiempo, existe una gran cantidad de iniquidad en una sociedad determinada, los sentimientos patol\u00f3gicos de injusticia y las declaraciones sugestivas emitidas por individuos con trastornos pueden resonar con aquellos que han sido verdaderamente tratados injustamente<\/strong>. Eso llevar\u00e1 a que sea posible difundir f\u00e1cilmente doctrinas revolucionarias en ambos grupos, si bien cada uno tendr\u00e1 razones completamente diferentes para apoyarlas<\/strong>.<\/p><\/blockquote>\n

El libro de Goldberg se aproxima bastante al abordaje del proceso de ponerizaci\u00f3n que tuvo lugar en Occidente y, con el conocimiento adquirido en La ponerolog\u00eda pol\u00edtica<\/em>, emerge un panorama desagradable sobre c\u00f3mo, poco a poco, fuimos conducidos a una trampa. En retrospectiva, es realmente incre\u00edble c\u00f3mo la humanidad pudo haberlo permitido; c\u00f3mo renunciamos a nuestra individualidad, a las comunidades locales, a la responsabilidad sobre nuestras vidas, a la sabidur\u00eda tradicional, y a tanto m\u00e1s, ante los caprichos de un Estado tir\u00e1nico y fascista enmascarado en sutilezas y en un doble discurso “progresista”<\/strong>, en el que las decisiones de largo alcance se toman tras los bastidores entre las instituciones, los “cient\u00edficos ilustrados” y las grandes corporaciones ligadas al aparato estatal. \u00a1C\u00f3mo perdimos nuestras voces tanto individualmente como a nivel comunitario para que “ellos” puedan hacernos lo que quieran, delante de nuestras narices y, cada vez m\u00e1s, a nuestras espaldas! \u00bfC\u00f3mo pudimos permitir la completa reingenier\u00eda de todo (nuestros valores, nuestras reacciones, nuestro vocabulario, etc.), todo en nombre del “progreso”?<\/p>\n<\/div>\n

10 principios del fascismo<\/span><\/p>\n

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La imagen del fascismo que surge de la descripci\u00f3n de Goldberg de la historia del pensamiento y las acciones fascistas, desde Wilson hasta Stalin y Hitler, podr\u00eda condensarse en 10 principios. A continuaci\u00f3n se presentan, junto con algunos comentarios sobre c\u00f3mo se manifiestan en el mundo actual:<\/p>\n

1. La declaraci\u00f3n esquizoide, es decir, “abandonado a su suerte, el hombre siempre ser\u00e1 est\u00fapido y cruel, as\u00ed que debemos integrarlo firmemente a una estructura vertical”<\/strong>. Para un ejemplo de c\u00f3mo se desarrolla esto hoy en d\u00eda, no miremos m\u00e1s all\u00e1 de la cosmovisi\u00f3n de los “activistas” liberales de hoy en d\u00eda, donde todo el mundo sin excepci\u00f3n es opresor, racista, mis\u00f3gino y violador potencial. Y si usted piensa que no lo es, entonces simplemente no es consciente de su “sesgo inconsciente”. La soluci\u00f3n, seg\u00fan la vieja tradici\u00f3n fascista, es la reeducaci\u00f3n masiva y la vigilancia de la palabra y el pensamiento, \u00a1por supuesto!<\/p>\n

2. Para encauzar a la gente (porque no se puede confiar en ellos), necesitamos crear un Estado poderoso (tambi\u00e9n conocido como Gran Gobierno) que controle todos los aspectos de la vida<\/strong>. Siempre son los fascistas los que piden un Estado poderoso que obligue a la gente a “alinearse”. En su sistema, no est\u00e1 permitido tomar decisiones diferentes; uno marcha o perece. La burocracia impera. Y aunque podemos discutir incesantemente sobre diferentes pol\u00edticas y sistemas pol\u00edticos, los l\u00edmites son claramente sobrepasados cuando el Estado dicta nuestros propios valores y reemplaza a las familias y comunidades locales como el origen del sentido y la \u00e9tica. Pero \u00e9ste es precisamente el proyecto fascista: pretender que el Estado-naci\u00f3n, o incluso cierto internacionalismo vago, puede emular el funcionamiento y el sentido de pertenencia que caracterizan a las peque\u00f1as comunidades. Todas las marchas y la ostentaci\u00f3n de virtudes, todos los intentos de dictar nuevos valores como la equidad, la diversidad, el veganismo<\/a>, el no fumar<\/a> o el dar “consentimiento” regular<\/a> a tu pareja de baile, la presi\u00f3n moral y tambi\u00e9n legal sobre las instituciones, las empresas y los domicilios privados… todo ello indica que el Estado se est\u00e1 convirtiendo en la madre devoradora arquet\u00edpica que destruye las almas de sus hijos al tratar de protegerlos de s\u00ed mismos.<\/p>\n<\/div>\n

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\"Liberal<\/a><\/p>\n

“Motines, no dietas”: la violencia y la estupidez siempre han sido el sello distintivo del fascismo,<\/span><\/div>\n<\/div>\n
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3. Para hacer avanzar nuestra “gran causa por el bien del pueblo”, necesitamos crear un “movimiento”, “movilizarnos”<\/strong>. Mucha gente asocia el fascismo con la guerra. Pero para los fascistas, el punto no es tanto la guerra en s\u00ed, sino la movilizaci\u00f3n<\/em>. Siempre se trata de hacer que la gente act\u00fae, ya que, la acci\u00f3n triunfa sobre el pensamiento. Considere la locura de que Los \u00c1ngeles pinte sus calles de blanco<\/a> “contra el cambio clim\u00e1tico” o trucos publicitarios como romper bombillas de luz normales<\/a> en Berl\u00edn para “protestar” contra su huella energ\u00e9tica (ir\u00f3nicamente, si hubiesen hecho esto con bombillas de bajo consumo, esta maniobra no habr\u00eda sido permitida bajo las leyes de protecci\u00f3n del medio ambiente debido a todos los productos qu\u00edmicos y electr\u00f3nicos que contienen), o toda la locura del #MeToo<\/a>. Advierta el sabor fascista aqu\u00ed: no se trata de una discusi\u00f3n inteligente de temas tan complejos como el cambio clim\u00e1tico, la pol\u00edtica energ\u00e9tica o la complicada relaci\u00f3n entre hombres y mujeres en la era moderna. No, se trata de la “movilizaci\u00f3n”, de marchar y gritar, no importa cu\u00e1n mal definida est\u00e9 su raz\u00f3n o cu\u00e1n est\u00fapida sea la causa.<\/p>\n

4. Nuestra comprensi\u00f3n avanzada del camino hacia el “progreso” se basa en la ciencia; hay una clase sacerdotal de cient\u00edficos que pueden decirnos exactamente d\u00f3nde est\u00e1n los problemas y qu\u00e9 necesitamos hacer<\/strong>. Todos debemos recordar que los marxistas, siguiendo la tradici\u00f3n de Hegel, pensaban que ten\u00edan un conocimiento cient\u00edfico de la historia y que pod\u00edan predecir con precisi\u00f3n el futuro bas\u00e1ndose en sus principios “cient\u00edficos”. Para los nazis, las teor\u00edas racistas eran consenso cient\u00edfico, o como podr\u00edamos decir hoy: “la ciencia estaba resuelta”, o mejor a\u00fan: “una abrumadora mayor\u00eda de cient\u00edficos estaban de acuerdo”. En retrospectiva, es f\u00e1cil descartar el “materialismo hist\u00f3rico” de Marx o los experimentos de los nazis para probar la superioridad racial de la gente blanca como pseudociencias, pero para la gente de la \u00e9poca era todo lo contrario. Las teor\u00edas cient\u00edficas racistas eran la tendencia dominante incluso antes de los nazis, y en el siglo XIX, la gente realmente cre\u00eda que la ciencia pod\u00eda predecir la historia de la misma manera que pod\u00eda predecir los movimientos de los planetas. Lo mismo sucede hoy en d\u00eda cuando los “cient\u00edficos ilustrados” predican su evangelio desde grupos de reflexi\u00f3n, organismos gubernamentales, facultades universitarias y oficinas de prensa. Deber\u00edamos preguntarnos: \u00bfc\u00f3mo ver\u00e1n las generaciones futuras los dogmas actuales del ate\u00edsmo materialista, el neodarwinismo r\u00edgido, el alarmismo por el calentamiento global o la negaci\u00f3n categ\u00f3rica de hechos biol\u00f3gicos como las diferencias entre hombres y mujeres por parte de los departamentos de estudios de g\u00e9nero? Por no hablar del cheque en blanco m\u00e9dico para envenenar a los ni\u00f1os con hormonas<\/a> a fin de tratar la “disforia de g\u00e9nero”. Y no olvidemos la estafa de la pir\u00e1mide alimenticia<\/a> que fue impuesta en el mundo occidental mediante la fuerza fascista, que causa miseria a una escala sin precedentes. Esto no quiere decir que la ciencia no sea importante, por supuesto, pero no nos enga\u00f1emos: el fascismo siempre utiliza afirmaciones muy extendidas de ortodoxias cient\u00edficas ideol\u00f3gicas para promover su agenda.<\/p>\n

5. N<\/strong>ecesitamos romper estructuras tradicionales, lealtades, jerarqu\u00edas, religiones, clases, etc., “s\u00f3lo entonces podremos alcanzar nuestras metas progresistas”<\/strong>. Las estructuras tradicionales obviamente se interponen en el camino del cambio radical. El sello distintivo del programa fascista es acabar con todo lo que existi\u00f3 antes y reescribir la historia: en sinton\u00eda con el viejo esp\u00edritu de la Revoluci\u00f3n Francesa, se trata de derrocar violentamente el orden existente, de “trascender las clases” y de eliminar sin piedad cualquier fuente de sentido y cordura psicol\u00f3gica ajena a la agenda progresista. Las familias no caben aqu\u00ed y son degradadas a meras herramientas para hacer avanzar la ideolog\u00eda. Todos los que est\u00e1n resentidos y amargados por diversas razones tienen libertad para quebrar las estructuras “opresivas” de la gente normal procedentes de generaciones pasadas. Esto va acompa\u00f1ado de una grotesca glorificaci\u00f3n de la juventud; la falta de experiencia y sabidur\u00eda se eleva como una virtud a los ojos de los fascistas. Los revolucionarios patol\u00f3gicos siempre tratan de hablar con la juventud, probablemente porque las personas mayores est\u00e1n generalmente mejor preparadas para comprender hacia d\u00f3nde conducen inevitablemente estos programas revolucionarios. Quiz\u00e1s la manifestaci\u00f3n m\u00e1s obvia del derribo de las estructuras tradicionales en el mundo actual es el derribo literal de estatuas<\/a> o la prohibici\u00f3n de obras literarias<\/a> debido al “lenguaje ofensivo” o a la raza del autor. Cualquier cosa que sea m\u00e1s profunda que la \u00faltima moda debe ir a la basura para que el desenfrenado Nuevo Orden pueda ser construido.<\/p>\n

6. Necesitamos “educar” a la gente, especialmente a los ni\u00f1os<\/strong>. Si las masas se niegan a adoptar el programa radical, es siempre por una “falta de educaci\u00f3n” o porque “no transmitimos el mensaje lo suficientemente bien”. En otras palabras, necesitamos propaganda masiva para enderezar a los est\u00fapidos tradicionalistas. Si observamos las pol\u00edticas educativas de los nazis, los comunistas o los progresistas de hoy en d\u00eda, son sorprendentemente similares. El contenido y el enfoque ideol\u00f3gico pueden cambiar, pero el principio es siempre el mismo: separar a los ni\u00f1os de sus familias tan pronto como sea posible, debilitar la estructura familiar y colocarlos en instituciones educativas estatales para romper el v\u00ednculo entre el ni\u00f1o y la familia, de modo que la principal lealtad del ni\u00f1o est\u00e9 con el Estado y su ideolog\u00eda. Hoy en d\u00eda, esto se manifiesta con toda su fealdad en los ideales de la educaci\u00f3n postmoderna que utilizan el feminismo para justificar el desamparo de los beb\u00e9s al cabo de pocos meses, ense\u00f1an el relativismo cultural y moral, la igualdad de resultados, la obsesi\u00f3n por el sexo y la “diversidad” y no toleran ning\u00fan otro punto de vista. Huelga decir que el adoctrinamiento de la poblaci\u00f3n debe ser total; para ello, los medios de comunicaci\u00f3n deben atenerse a las normas las 24 horas del d\u00eda, los 7 d\u00edas de la semana, y siempre atacar a los disidentes.<\/p>\n

7. La verdad est\u00e1 sobrevalorada: tenemos que ser pragm\u00e1ticos<\/strong>. Una mentira a menudo funcionar\u00e1 mejor. Si usted quiere salvar el mundo y hacer que la poblaci\u00f3n marche hacia un nuevo amanecer, una era iluminada de prosperidad e igualdad para todos, se le permite decir algunas mentiras para promover su noble agenda. Y as\u00ed es precisamente como los fascistas del pasado y del presente ven el mundo. Todo es por el bien de la gente, siempre. Y a veces una mentira es m\u00e1s efectiva para movilizar a la gente por una buena causa, \u00bfno es as\u00ed? Ya ve usted, una vez que haya comprendido “completamente” c\u00f3mo puede conducir a la sociedad a una nueva gran edad de oro, el fin justifica los medios. No es una coincidencia que pol\u00edticos y activistas parezcan salirse con la suya con mentiras cada vez m\u00e1s escandalosas -una palabra deber\u00eda bastar como prueba: Hillary.<\/p>\n

8. Necesitamos experimentar valientemente y a gran escala<\/strong>. Recuerde: se trata de actuar. S\u00f3lo hace falta poner en pr\u00e1ctica “reformas” radicales y ver qu\u00e9 pasa, sin importar la ley de las consecuencias imprevistas que dice que es mucho m\u00e1s f\u00e1cil empeorar las cosas que mejorarlas. Pero los fascistas no quieren mejorar las cosas. Esto requerir\u00eda un trabajo duro y humilde, y los fascistas lo odian. Les encanta deleitarse con su poder. Esencialmente, juegan a ser dioses reformando el mundo entero a su propia imagen patol\u00f3gica.<\/p>\n<\/div>\n

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\"Liberal<\/a><\/p>\n

Racista, hom\u00f3fobo, intolerante, fascista, islamof\u00f3bico, nazi, mis\u00f3gino, Hitler… todo esto es una persona que gana una discusi\u00f3n con un liberal.<\/span><\/div>\n<\/div>\n


\n9. Callar las voces opositoras<\/strong>. La discusi\u00f3n inteligente puede ser confusa y revelar la infinita complejidad de las cuestiones pol\u00edticas y \u00e9ticas. Los fascistas odian esa complejidad, por lo que necesitan sofocar la disidencia o incluso el cuestionamiento m\u00e1s sutil de sus metas e intenciones. Ejemplos actuales incluyen el espeluznante
tribunal de Lindsay Shepherd<\/a>, la violenta confrontaci\u00f3n de Bret Weinstein<\/a> en el Evergreen College y los despiadados ataques contra Jordan Peterson<\/a>. Ya no deber\u00eda ser un secreto que los que se atreven a oponerse a las narrativas ideol\u00f3gicas actuales, por muy grotescas que sean (desde el asunto del Novichok<\/a> hasta el inventado ataque qu\u00edmico<\/a> en Duma, pasando por el constructivismo social radical y la flagrante promoci\u00f3n de pr\u00e1cticas sexuales perversas en la marcha del Orgullo Gay) son un blanco de ataque. Y s\u00ed, ni siquiera se puede insinuar este tipo de cosas en discusiones privadas con amigos, familiares o compa\u00f1eros de trabajo que han aceptado la narrativa del “movimiento” sin temer repercusiones sociales o incluso profesionales. Piense en eso.<\/p>\n

10. La violencia, la guerra, etc. son medios necesarios para alcanzar nuestras metas; en \u00faltima instancia, todo es por el “bien de la gente”<\/strong>. Hay que romper algunos huevos para hacer una tortilla. \u00c9se ha sido siempre el mantra del revolucionario patol\u00f3gico. Los bandidos fascistas de Antifa son su manifestaci\u00f3n actual, al igual que las guerras intervencionistas en nombre de la “compasi\u00f3n”. \u00bfY qu\u00e9 es la “movilizaci\u00f3n” o el “activismo” sino una forma de coerci\u00f3n paramilitar? Estas personas no buscan dar un buen argumento, sino forzarlo a usted a aceptar su versi\u00f3n distorsionada de la realidad. No es de extra\u00f1ar, puesto que la filosof\u00eda postmoderna niega la existencia de la verdad y los valores objetivos y lo ve todo como una jungla de grupos que ejercen un poder primitivo. Con estas premisas, todo lo que uno puede hacer es ser una v\u00edctima o victimizar a otros. Los fascistas actuales pretenden ser lo primero mientras son lo segundo.<\/p>\n<\/div>\n

El conservadurismo sano: \u00bfUn ant\u00eddoto contra el fascismo?<\/span><\/p>\n

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Muchos liberales piensan que el conservadurismo significa rechazar obstinadamente el cambio, y que si los conservadores se hubieran salido con la suya en el pasado, seguir\u00eda habiendo esclavitud, las mujeres no podr\u00edan votar y la homosexualidad seguir\u00eda siendo ilegal. El problema es que se trata de un gran argumento de hombre de paja: casi nadie, conservador o no, defiende la esclavitud o la prohibici\u00f3n de la homosexualidad. A los conservadores simplemente no les gusta que los liberales les impongan<\/em> su estilo de vida radical. Est\u00e1n instintivamente disgustados por los excesos liberales que est\u00e1n obligados a ver, as\u00ed como a participar<\/em> en ellos.<\/p>\n

En otras palabras, lo que est\u00e1n haciendo los liberales que se quejan de los “conservadores fascistas” es atacar una caricatura, una fata morgana<\/em> del extremismo conservador. Lo que no entienden es que las actitudes conservadoras deben ser vistas en relaci\u00f3n con la sociedad en la que se expresan. Por ejemplo, \u00bfno estar\u00eda usted de acuerdo en que en la Alemania de Hitler, “resistirse al cambio” era algo bueno? \u00bfHablar en contra de la transformaci\u00f3n radical que los nazis buscaban implementar? Hoy nos encontramos en una situaci\u00f3n similar: los llamados (y calumniados como) conservadores hoy en d\u00eda no son meros tradicionalistas testarudos con una tendencia temperamental hacia una estructura r\u00edgida. No, en estos uno pasa a ser un conservador simplemente por plantear preguntas sobre los cambios radicales, la reingenier\u00eda radical de todo (desde nuestras relaciones rom\u00e1nticas hasta las relaciones internacionales), mediante la fuerza fascista de los “movimientos” y el “activismo”. Una vez m\u00e1s, la resistencia al cambio es una virtud o no dependiendo, obviamente, del tipo de cambio al que se est\u00e9 resistiendo uno.<\/p>\n

Es cierto que el conservadurismo tambi\u00e9n ha sido secuestrado y convertido, por ejemplo, en “neoconservadurismo” imperialista o cristiano-fundamentalista. Pero el verdadero conservadurismo que se levanta y dice: “basta, tenemos valores profundos e importantes que son el fundamento de la humanidad y vemos de qu\u00e9 se tratan sus juegos de poder”, parece ser la actitud correcta hacia el fascismo. O, como dijo Goldberg, no se trata de estar en contra del cambio per se<\/em>. Eso ser\u00eda rid\u00edculo. Se trata m\u00e1s bien de preguntarse: \u00bfqu\u00e9 cambio y por qu\u00e9, precisamente? \u00bfA qu\u00e9 costo? Se trata de cuestionar el cambio radical basado en conceptos mal definidos y mirar los detalles<\/strong>.<\/p>\n

Tal vez m\u00e1s al grano, el conservadurismo sensato podr\u00eda ser simplemente lo que Andrew Lobaczewski llam\u00f3 la cosmovisi\u00f3n natural de la “gente normal”, en oposici\u00f3n a la percepci\u00f3n completamente diferente de quienes est\u00e1n psicopatol\u00f3gicamente retorcidos y buscan imponer su vida interior moribunda a la sociedad. As\u00ed es como \u00e9l lo describe:<\/p>\n

Los psic\u00f3patas comienzan a so\u00f1ar con una especie de utop\u00eda de un mundo “feliz” y de un sistema social que no los rechaza ni los obliga a someterse a leyes y costumbres cuyo significado les resulta incomprensible<\/span>. Sue\u00f1an con un mundo en el que su forma simple y radical de experimentar y percibir la realidad domine la sociedad, asegur\u00e1ndoles as\u00ed, por supuesto, seguridad y prosperidad<\/strong>. En este sue\u00f1o ut\u00f3pico, imaginan que aquellos “otros”, diferentes pero a su vez m\u00e1s habilidosos, deben ser obligados a trabajar para permitir que los psic\u00f3patas y otros miembros de su grupo alcancen esa meta. “A fin de cuentas”, dicen, “nosotros crearemos un nuevo gobierno justo”.<\/p>\n

Los l\u00edderes patocr\u00e1ticos creen que pueden lograr un estado en el que la mente de aquellas “otras” personas se vuelva dependiente, a trav\u00e9s de los efectos que generan su personalidad, los m\u00e9todos pedag\u00f3gicos p\u00e9rfidos, los medios de desinformaci\u00f3n masiva y el terror psicol\u00f3gico; asumen que dicha creencia es algo evidente. En su mundo conceptual, los pat\u00f3cratas estiman que es pr\u00e1cticamente un hecho que los “otros” vayan a aceptar su forma obvia, realista y simple de percibir la realidad. Sin embargo, por alguna misteriosa raz\u00f3n, los “otros” se las ingenian para escapar, se escabullen y se r\u00eden entre s\u00ed de los pat\u00f3cratas. Estos \u00faltimos asumen que alguien debe ser responsable por esto: quiz\u00e1s sean los ancianos de antes de la revoluci\u00f3n, o alguna estaci\u00f3n de radio extranjera. Se vuelve entonces necesario mejorar el m\u00e9todo de acci\u00f3n, hallar mejores “ingenieros del alma” con cierto talento literario, y aislar a la sociedad de la literatura inapropiada y de toda influencia extranjera<\/strong>.<\/p>\n

Por ende, el conflicto es dram\u00e1tico para ambas partes. Las personas normales sienten que se est\u00e1 insultando su humanidad, que el sistema los est\u00e1 volviendo obtusos y los obliga a razonar en forma opuesta a lo que dicta el sentido com\u00fan sano<\/strong>. Los pat\u00f3cratas rechazan la premonici\u00f3n de que, en caso de que no logren sus objetivos, tarde o temprano el gobierno volver\u00e1 a estar en manos del hombre normal, y los juzgar\u00e1 seg\u00fan una vengativa falta de comprensi\u00f3n acerca de su personalidad.<\/p><\/blockquote>\n

En otras palabras, los fascistas (o “pat\u00f3cratas”, como los llamaba Lobaczewski) est\u00e1n aterrorizados por el “gobierno de la gente normal” y, por lo tanto, atacan vilmente hasta al m\u00e1s elemental sentido com\u00fan por ser “conservadores” o incluso “de ultraderecha”, y a sus defensores por ser “deplorables”, seg\u00fan las infames palabras de Hillary Clinton. Pero aferrarse al sentido com\u00fan y a los valores tradicionales es una sana reacci\u00f3n de la gente normal a la dominaci\u00f3n cada vez mayor de individuos patol\u00f3gicos en posiciones de poder. Por supuesto, esto es inadmisible para los fascistas patocr\u00e1ticos, as\u00ed que si no pueden culpar a la estupidez de los “deplorables”, tambi\u00e9n conocidos como los “viejos pre-revolucionarios”, entonces debe ser (\u00a1tach\u00e1n, tach\u00e1n!) “la intromisi\u00f3n rusa”<\/strong>. Es asombroso c\u00f3mo el an\u00e1lisis de Lobaczewski predice con precisi\u00f3n el comportamiento del establishment<\/em> liberal-fascista actual.<\/p>\n<\/div>\n

Antisemitismo y pol\u00edtica de identidad<\/span><\/p>\n

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Cuando hablamos del fascismo, tambi\u00e9n deber\u00edamos tocar brevemente el tema candente del antisemitismo – porque esto es algo que mucha gente atribuye al fascismo y no al izquierdismo. Pero esto est\u00e1 lejos de ser la verdad completa. Mientras que Hitler, por supuesto, hizo que el odio a los jud\u00edos alcanzara niveles genocidas completamente in\u00e9ditos, el fascismo de Mussolini no era antisemita en absoluto hasta que se someti\u00f3 al poder de Hitler. En contrapartida, el antisemitismo en la izquierda siempre ha prevalecido. Goldberg escribe:<\/p>\n

S\u00ed, los nazis eran antisemitas de primera categor\u00eda, pero el antisemitismo no es en absoluto un fen\u00f3meno de la derecha. Es un hecho ampliamente reconocido, por ejemplo, que Stalin era antisemita y que la Uni\u00f3n Sovi\u00e9tica era, en efecto, oficialmente antisemita<\/strong> (aunque mucho menos genocida que la Alemania nazi; en lo que respecta a los jud\u00edos<\/em>). El mismo Karl Marx (a pesar de su herencia jud\u00eda) odiaba intensamente a los jud\u00edos<\/strong>, denunciaba en sus cartas a los “jud\u00edos sucios” y denunciaba a sus enemigos con frases como “jud\u00edo semejante a un negro”.<\/p><\/blockquote>\n

\u00bfY c\u00f3mo podr\u00eda ser de otro modo, teniendo en cuenta que las pol\u00edticas de identidad no son m\u00e1s que otra forma de racismo? Para los fascistas progresistas, todo lo que cuenta es la pertenencia a un grupo, principalmente racial. Si uno ha adoptado esta ideolog\u00eda patol\u00f3gica, nada le impide convertirse en Hitler y ver a un “jud\u00edo” como alguien con caracter\u00edsticas perennemente inmutables y negativas. Este peligro se ve amplificado por la amarga iron\u00eda de que muchos jud\u00edos tambi\u00e9n participan en la pol\u00edtica de identidad<\/a> con su apoyo acr\u00edtico al sionismo y la primac\u00eda \u00e9tnica que lo acompa\u00f1a.<\/p>\n

Consideremos la situaci\u00f3n explosiva en la que nos encontramos hoy en d\u00eda: por un lado, hay una gran reacci\u00f3n contra la correcci\u00f3n pol\u00edtica, los Guerreros de la Justicia Social (SJW, por sus siglas en ingl\u00e9s) y el extremismo izquierdista dominante, tambi\u00e9n conocido como fascismo, de parte de lo que hoy en d\u00eda se considera de “derecha” o “conservador”. Muchas de esas voces son jud\u00edas, como los miembros jud\u00edos de la llamada “red oscura intelectual”. Justo ah\u00ed, tenemos un blanco para el antisemitismo “progresista”. Los izquierdistas est\u00e1n dispuestos a eso porque todo su pensamiento est\u00e1 dominado por categor\u00edas raciales. Luego est\u00e1 la controversia de Israel: la mayor\u00eda de los que hablan en contra de la actual locura fascista se identifican como proisrael\u00edes, incluyendo por supuesto a muchos jud\u00edos.<\/p>\n

Todo esto crea mucha confusi\u00f3n respecto a todas estas etiquetas y campos pol\u00edticos (como si no tuvi\u00e9ramos ya suficiente confusi\u00f3n). El problema es que aquellos que se oponen a la postura ciega a favor de Israel a menudo est\u00e1n en la izquierda, y de hecho del lado de los Guerreros de la Justicia Social. Pero en este caso, tienen algo de raz\u00f3n: no importa lo que uno piense pol\u00edticamente sobre la cuesti\u00f3n de Israel\/Palestina, disparar a ni\u00f1os inocentes<\/a> o acosar al azar a la gente<\/a> s\u00f3lo porque uno odia su etnia es censurable, y punto. Incluso si uno acepta el resto de la postura israel\u00ed (el derecho absoluto a defenderse, el derecho de los jud\u00edos a la tierra santa, que los palestinos son los culpables de todo lo que les ha sucedido desde 1948, etc.) simplemente no hay un universo moral en el que uno no est\u00e9 obligado a denunciar los terribles excesos de Israel. Pero eso no es lo que sucede y, tristemente, a muchos jud\u00edos (y expertos conservadores<\/a> en la materia) les han lavado el cerebro para que justifiquen y toleren hasta las m\u00e1s horrendas aventuras genocidas de “su” Estado y no se averg\u00fcenzan de llamar a cualquiera que se\u00f1ale esta verdad obvia como “antisemita”.<\/p>\n

En definitiva, parece la tormenta perfecta: \u00bfcu\u00e1nto falta para que los liberales de hoy vuelvan a culpar a los jud\u00edos por los males del mundo? Y cuando el antisemitismo ataque de nuevo, \u00bfqui\u00e9n creer\u00e1 a los que est\u00e1n en contra si el concepto ha sido desgastado y se ha vuelto ineficaz a causa de la propaganda israel\u00ed durante tanto tiempo? No es tan dif\u00edcil imaginar un escenario donde los llamados antifascistas y sus hermanos progresistas adopten el fascismo en el pleno sentido hitleriano, con el antisemitismo y todo lo dem\u00e1s. Iron\u00eda de iron\u00edas. Pero, \u00bfqu\u00e9 se puede esperar de una historia en la que los protagonistas patol\u00f3gicos se han metido en la cabeza de la gente redefiniendo y convirtiendo las palabras y las etiquetas en armas?<\/p>\n<\/div>\n

Cuidado con los nuevos movimientos<\/span><\/p>\n

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La lecci\u00f3n que todos debemos aprender de la locura progresista de la izquierda, as\u00ed como de los libros de Goldberg y Lobaczewski, es que el fascismo puede venir en todas las formas y colores. Las ideolog\u00edas, las palabras de moda, las “cosas que hay que hacer por el bien de la gente” siempre pueden cambiar. Sin embargo, lo que permanece es la esencia del fascismo y su naturaleza revolucionaria, autoritaria y jer\u00e1rquica, que puede ser reconocida.<\/p>\n

Al leer sobre la historia del descenso de Occidente al fascismo, parece que cada peque\u00f1o paso en el establecimiento de esta mentalidad fascista y la implementaci\u00f3n de su plan tuvo \u00e9xito porque, a pesar de que a la mayor\u00eda de la gente no le gustaba, tambi\u00e9n miraron para otro lado porque no parec\u00eda importante o porque pensaban que en realidad no afectaba tanto su vida<\/strong>. Pero en conjunto, a lo largo de la historia, fuimos completamente corrompidos y llevados a aceptar la autoridad total del Estado y sus sacerdotes, y nuestra total dependencia del mismo. Mire a Jordan Peterson y su esc\u00e1ndalo de los pronombres<\/a>. La gente siempre dice “no es gran cosa, no afecta mi vida, tal vez incluso es una buena idea”, etc., pero estas cosas representan exactamente los peque\u00f1os pasos hacia un fascismo cada vez mayor.<\/p>\n

Debemos tener en cuenta estos mecanismos porque est\u00e1 claro que veremos surgir nuevos “movimientos” de oposici\u00f3n a la patol\u00f3gica pol\u00edtica izquierdista de hoy en d\u00eda, y est\u00e1 igualmente claro que estos movimientos estar\u00e1n sujetos al mismo proceso de ponerizaci\u00f3n que se describe en La ponerolog\u00eda pol\u00edtica<\/em>. Incluso si las ideas iniciales son m\u00e1s o menos buenas, sin el conocimiento psicol\u00f3gico adecuado y, yo dir\u00eda, la sabidur\u00eda espiritual, estos movimientos mismos degenerar\u00e1n r\u00e1pidamente en fascismo de una forma u otra.<\/p>\n

Tal vez ser\u00eda un buen ejercicio echar un vistazo a los 10 puntos mencionados arriba cada vez que alguien presente su “gran programa cient\u00edficamente informado” para finalmente “volver a encaminar a la humanidad” aplicando tal o cual visi\u00f3n universalmente como si fuera la f\u00f3rmula cient\u00edfica mundial para la salvaci\u00f3n espiritual. Entonces lo podemos verificar: \u00bfEse l\u00edder o movimiento quiere romper las estructuras tradicionales? \u00bfQuiere reeducar a las masas y especialmente a los ni\u00f1os? \u00bfSe trata de “activismo” -actuar audazmente ahora, hacer preguntas despu\u00e9s? \u00bfSe esfuerza por lograr un cambio radical, especialmente cuando se trata de valores y virtudes tradicionales? Lo m\u00e1s probable es que cualquier movimiento que surja muestre algunas o muchas de estas caracter\u00edsticas o las desarrolle r\u00e1pidamente una vez que gane algo de tracci\u00f3n.<\/p>\n

Entonces, \u00bfqu\u00e9 nos queda por hacer? Concuerdo con Jordan Peterson: ning\u00fan movimiento, ning\u00fan partido, ning\u00fan l\u00edder y ninguna visi\u00f3n cient\u00edfica de alg\u00fan genio puede “salvarnos”. Nuestro crecimiento espiritual depende de nosotros como individuos. O aceptamos la carga de sufrimiento que la vida conlleva inevitablemente, nuestra responsabilidad individual y la humildad que eso acarrea, o podemos ser arrastrados a la muerte espiritual por las fuerzas mefistof\u00e9licas que siempre nos prometen iluminaci\u00f3n, progreso y un nuevo amanecer dorado… si tan s\u00f3lo ofrecemos nuestras almas.<\/p>\n<\/div>\n

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Luke Baier, 14 julio 2018<\/p>\n

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Fuente<\/a><\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

‘Fascismo Liberal’: Por qu\u00e9 el fascismo siempre ha sido un movimiento de izquierda y c\u00f3mo reconocer su esencia. En estos tiempos de arrolladora correcci\u00f3n pol\u00edtica, cuando bravucones atacan a quienes cuestionan la santa trinidad liberal de la diversidad, la inclusividad y la igualdad, y en los que los medios de...<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":4122,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[1376,1381,1366],"tags":[3137,3136],"class_list":["post-4121","post","type-post","status-publish","format-standard","has-post-thumbnail","hentry","category-analisis","category-ingenieria_social-propaganda-minorias-genero-cambio_climatico","category-all","tag-izquierda-fascista","tag-que-es-fascismo"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4121","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=4121"}],"version-history":[{"count":2,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4121\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":4131,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/4121\/revisions\/4131"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/media\/4122"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=4121"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=4121"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=4121"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}