![\"7745745736767\"](\"https:\/\/redinternacional.net\/wp-content\/uploads\/2018\/07\/7745745736767.png\")
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En estos tiempos que corren se habla mucho, y especialmente desde las altas instancias, de respetar y promover la diversidad, <\/em>as\u00ed como de extender la igualdad<\/em> (en realidad, igualitarismo)<\/em> entre todos los seres humanos y muy en particular en el \u00e1mbito de la llamada pol\u00edtica de g\u00e9nero<\/em>, a fin de poner a las mujeres al mismo nivel que los hombres en todos los \u00e1mbitos. En este punto, he cre\u00eddo conveniente realizar una serie de consideraciones para poner de manifiesto que, una vez m\u00e1s, estamos ante una las t\u00edpicas trampas de la ingenier\u00eda social cocinada desde el poder global. Porque, como siempre, el sibilino lenguaje y las grandes proclamas pol\u00edticas y sociales esconden intenciones que poco o nada tienen que ver con las aparentemente mejores intenciones. Pero empecemos por el principio, con una reflexi\u00f3n sobre la realidad del mundo natural.<\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n La especie humana tiene sus caracter\u00edsticas propias, distinta de otros animales. Aparte, existe la obvia diversidad entre razas y entre los dos sexos. Todo esto viene marcado por la gen\u00e9tica y en \u00faltima instancia por los c\u00f3digos del ADN, que no dejan de ser unos complej\u00edsimos programas inform\u00e1ticos[1]<\/a>. La diversidad supone la existencia de rasgos determinantes que dan ciertas ventajas e inconvenientes en el mundo f\u00edsico, y cada uno se desempe\u00f1a en ese mundo desde su singularidad, al igual que todas las especies vegetales o animales. De ah\u00ed que los negros, por ejemplo, tengan una notable protecci\u00f3n frente a la radiaci\u00f3n solar de la que carecemos los blancos o una capacidad atl\u00e9tica superior en la carrera[2]<\/a>. En cambio, su cuerpo no est\u00e1 tan bien adaptado a la nataci\u00f3n como los blancos. Tampoco es ninguna novedad ver que las j\u00f3venes gimnastas de corta edad \u2013casi ni\u00f1as\u2013 se desempe\u00f1an mejor que las mujeres adultas en la realizaci\u00f3n de los ejercicios gracias a una combinaci\u00f3n de extrema elasticidad, ligereza y fuerza. Todo esto se puede ver en las competiciones deportivas y no sorprende a nadie.<\/p>\n Con todo, a trav\u00e9s de los siglos el ser humano parece no haber entendido esta realidad diversa, en que la diferencia biol\u00f3gica es algo natural, y ha ca\u00eddo repetidamente en actitudes xen\u00f3fobas, supremacistas o racistas por considerar la pureza<\/em> y virtudes<\/em> de un determinado grupo o comunidad como un factor de superioridad. Y lo peor es que tal diversidad o distinci\u00f3n va m\u00e1s all\u00e1 de lo estrictamente f\u00edsico y puede ser utilizada con fines pol\u00edticos o partidistas, apelando a una lengua, una cultura, una tradici\u00f3n, un territorio, etc., lo que a d\u00eda de hoy a\u00fan es fuente de conflicto, incluso en pa\u00edses llamados \u201ccivilizados y democr\u00e1ticos\u201d. El caso es que desde hace unos a\u00f1os la diversidad \u2013en cualquiera de sus formas\u2013 se ha convertido en una especie de arma arrojadiza para reivindicar quimeras y falsas igualdades que no vienen a cuento. De este modo, se ha extendido en todo el mundo una infundada correcci\u00f3n pol\u00edtica que quiere \u201cigualar\u201d a todas las razas y comunidades con la idea de que hay que resta\u00f1ar heridas, agravios y ofensas de unos supuestos \u201csuperiores\u201d contra otros \u201cinferiores\u201d, y que para ello hay imponer a la fuerza falsas realidades, cuotas y normas.<\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n As\u00ed, se ha ido incorporando en la sociedad occidental \u2013mayoritariamente blanca\u2013 una idea de culpabilidad ante el resto de comunidades por haberlas oprimido o marginado. A este respecto, es innegable que las grandes potencias occidentales se dedicaron a explotar o esclavizar a muchos pueblos poco desarrollados o incluso salvajes. Pero, ojo, mientras todav\u00eda se habla de la leyenda negra<\/em> espa\u00f1ola, se suele omitir que los propios imperios precolombinos ya eran marcadamente agresivos y colonialistas con los pueblos vecinos sometidos, por no hablar de otros muchos pueblos en todo el mundo que practicaban la conquista y la opresi\u00f3n sobre otras comunidades o sobre sus iguales de raza y cultura. Ahora parece, empero, que los \u00fanicos malos<\/em> sean los hombres blancos occidentales.<\/p>\n Esto ha hecho que la diversidad natural y los hechos hist\u00f3ricos sean mal entendidos y convertidos en una especie de multirracialidad forzosa y pol\u00edticamente correcta. Esto ha llevado a una progresiva reinterpretaci\u00f3n social e hist\u00f3rica que hace que en las series de ficci\u00f3n o en las pel\u00edculas aparezcan personajes negros o de otras razas en papeles que no les corresponden, como ver a una persona de raza negra en un papel clave de la Inglaterra medieval. Actualmente estas cuotas<\/em> se han extendido a casi todos los terrenos sociales y en cualquier actividad p\u00fablica, independientemente de que tengan una traslaci\u00f3n efectiva al mundo real.<\/p>\n El resultado \u00faltimo se ha visto en la absurda correcci\u00f3n pol\u00edtica ejercida en muchos pa\u00edses occidentales que incide en el victimismo y la reivindicaci\u00f3n \u2013m\u00e1s all\u00e1 de cualquier posici\u00f3n razonable\u2013 hasta caer en la pura fobia. Por ejemplo, un sindicato de estudiantes negros de una universidad norteamericana vet\u00f3 en el curr\u00edculo el estudio de un gran n\u00famero de famosos literatos blancos por ser demasiados (l\u00f3gicamente en proporci\u00f3n a los escritores negros) y por no cumplir los requisitos de una exquisita postura ideol\u00f3gica limpia e igualitaria. Pero lo cierto es que la literatura universal es la que es y no atiende a proporciones o cuotas y hasta Mark Twain podr\u00eda ser considerado hoy un racista<\/em>. La diversidad mal entendida se convierte pues en un instrumento de separaci\u00f3n y de b\u00fasqueda incesante de una quim\u00e9rica igualdad que no existe siquiera en el mundo animal.<\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n Asimismo, las actuales pol\u00edticas de g\u00e9nero nos han hecho creer que hoy en d\u00eda ya no hay dos sexos sino m\u00faltiples g\u00e9neros \u2013docenas de ellos\u2013 y que esta \u201cdiversidad\u201d, fruto de la independencia racional y emocional de los humanos, es la real<\/em> y no la impuesta<\/em> por la naturaleza desde hace millones de a\u00f1os. Como ya expuse en su momento, tal diversidad artificiosa s\u00f3lo tiene como objetivo destruir la familia, el amor y el sexo entre hombres y mujeres (incluida la reproducci\u00f3n natural) y en \u00faltima instancia dar cobertura a una pol\u00edtica eugen\u00e9sica global. El caso es que las personas que han denunciado esta diversidad como algo fatuo y contrario a la propia humanidad han sido acusadas directamente de retr\u00f3gradas, opresoras, machistas, fascistas, patriarcales y otras lindezas por el estilo. Porque aqu\u00ed no puede haber siquiera diversidad<\/em> de opiniones. Lo que se dice desde arriba \u2013\u00adlos estados, instituciones internacionales y poderosos lobbies<\/em> sociales\u2013 es lo \u00fanico que cuenta, no nos vayamos a equivocar. Sea como fuere, el victimismo y la reivindicaci\u00f3n de la diversidad de g\u00e9nero<\/em> vuelven a estar muy presentes y sirven para imponer una \u00fanica forma de pensar.<\/p>\n Si seguimos en la l\u00ednea de la cuesti\u00f3n de g\u00e9nero llegaremos a otro terreno muy vivo en la actualidad, que no es otro que la reivindicaci\u00f3n igualitaria feminista. En este campo es donde se ha implementado en los \u00faltimos a\u00f1os toda una serie de medidas en los \u00e1mbitos pol\u00edtico, social y econ\u00f3mico tendentes a superar lo que se ha considerado una situaci\u00f3n completamente injusta e inicua de las mujeres, v\u00edctimas del llamado heteropatriarcado,<\/em> seg\u00fan denuncia el feminazismo. El esp\u00edritu de estas iniciativas ha sido b\u00e1sicamente poner a la mujer en el lugar que le corresponde y equipararla a los hombres para evitar todo tipo de discriminaci\u00f3n o agravio. Pero, \u00bfes esto igualdad o igualitarismo<\/em>?<\/p>\n Desde el pasado siglo y de una forma m\u00e1s acentuada en estos \u00faltimos a\u00f1os, se ha buscado reivindicar a la mujer para ponerla a la misma altura que el hombre e incluso para superarlo en determinados aspectos, a modo de \u201ccompensaci\u00f3n\u201d por los agravios seculares. Esto ha provocado, como tambi\u00e9n escrib\u00ed en su momento, una pol\u00edtica oficial estatal de protecci\u00f3n de la mujer en todos los campos, como si fuera un ser \u201cinferior\u201d. Pero no nos enga\u00f1emos, la incorporaci\u00f3n de la mujer a la igualdad<\/em>, ha significado caer en la misma esclavizaci\u00f3n y explotaci\u00f3n que ha sufrido el hombre durante los \u00faltimos siglos. O sea, la supuesta equidad ha comportado que la mujer tenga que trabajar la jornada completa, que acuda a f\u00e1bricas, tiendas, comercios, oficinas, etc. y que se someta a contratos y a impuestos que va a pagar al estado. En suma, la supuesta igualdad es lo de menos; lo importante es que ahora la mujer pasa a ser propiedad de las empresas y sobre todo del estado, que la ha de proteger y controlar \u201cpor su propio bien\u201d, a base de una serie de pol\u00edticas que la favorecen<\/em> frente al var\u00f3n.<\/p>\n Y por si fuera poco, se ha planteado una pol\u00edtica de igualdad<\/em> basada en mentiras (como la falsa brecha salarial por un mismo trabajo), arbitrariedades (como la imposici\u00f3n de cuotas femeninas obligatorias para cargos y trabajos, s\u00f3lo por motivos de sexo y no por m\u00e9ritos) o incluso abiertas injusticias (como las leyes de violencia de g\u00e9nero,<\/em> que niegan la posibilidad de que la mujer mienta, destruyen la presunci\u00f3n de inocencia e invierten la carga probatoria). En otras palabras, la reivindicaci\u00f3n de la mujer en pos de esa igualdad social no tiende a crear concordia, sino a explotar la guerra de sexos y a marcar distancias, a fomentar el odio y la separaci\u00f3n. Antes, bajo el prisma de la tradici\u00f3n cultural y religiosa judeo-cristiana, el hombre era el bueno y la p\u00e9rfida Eva le hab\u00eda dado a comer la manzana del \u00e1rbol prohibido. Ahora el hombre es el malo, a no ser que se feminice radicalmente.<\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n Lo cierto es que la realidad biol\u00f3gica \u2013estudiada y confirmada por la ciencia\u2013 nos asegura que mujeres y hombres, las dos piezas que componen el ser humano \u2013como cualquier macho y hembra en las que hay dimorfismo sexual\u2013 son distintas f\u00edsica y psicol\u00f3gicamente[3]<\/a>. En la pr\u00e1ctica, esto no es m\u00e1s que la diferencia o distinci\u00f3n \u201cmec\u00e1nica\u201d entre dos piezas que se complementan la una con la otra. Nada es mejor ni peor, es como es, como la naturaleza quiere que sea para que tengamos nuestra experiencia vital.<\/p>\n Creer que las mujeres han de ser forzosamente<\/em> como los hombres o que han de hacer lo mismo que ellos es violentar la naturaleza y la libertad. L\u00f3gicamente, las mujeres hacen hoy en d\u00eda muchas cosas que antes no hac\u00edan porque la sociedad ha evolucionado y se han superado t\u00f3picos culturales, costumbres ancestrales y prejuicios, pero ello no implica que constantemente tengan que retar al hombre por puro igualitarismo. As\u00ed, poner a m\u00e1s ministras<\/em> que ministros<\/em> en un gobierno no va a hacer mejor a ese gobierno; la buena gesti\u00f3n no tiene sexo. Y si no hay competiciones mixtas deportivas por algo ser\u00e1 (e incluso en ajedrez hay campeonatos diferenciados), a pesar de que en algunos casos se quiere forzar la situaci\u00f3n cuando la realidad es tozuda. Por ejemplo, no hay chicas en F\u00f3rmula 1 porque las pilotos que han llegado a ser probadoras no dieron la velocidad suficiente como para competir con los hombres a un nivel tan profesional. Algunas chicas son extremadamente r\u00e1pidas, pero les falta el punto de agresividad o arrojo \u2013no necesariamente la fuerza f\u00edsica o resistencia\u2013 de sus compa\u00f1eros pilotos[4]<\/a>. Pero a la hora de destacar, recordemos que en la antigua Rep\u00fablica Democr\u00e1tica Alemana se hormonaba fraudulentamente a las atletas (con hormonas masculinas, por supuesto) para poder vencer a sus rivales femeninas. \u00bfQu\u00e9 clase de igualdad es esta?<\/p>\n Esto mismo se podr\u00eda a aplicar a otros campos donde el hombre se desempe\u00f1a mejor por su propia naturaleza. Eso no quita que haya muchos \u00e1mbitos en los que la mujer ha probado sobradamente que puede ser tan buena o mejor que los hombres. No hay que darle vueltas y buscar agravios. La mujer en s\u00ed misma no necesita compararse con el hombre ni demostrar nada a nadie<\/em> ni empe\u00f1arse en luchar o competir para llegar a las mismas metas donde los varones no han encontrado\u2026 nada. Esta es una falsa igualdad que no lleva a ninguna parte, porque la mujer ya es perfecta en s\u00ed misma, ya sea una mujer moderna o tradicional, trabaje o se quede en casa a cuidar de la familia, tenga cuatro carreras o sea analfabeta. En definitiva, la verdadera igualdad \u2013la que reside en la conciencia\u2013 existe desde siempre, y desde esa perspectiva no hay nada que juzgar, valorar, compensar, condenar o reivindicar. Llegar a esa comprensi\u00f3n supone, de hecho, un acto de liberaci\u00f3n.<\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n <\/p>\n En cambio, el igualitarismo se presenta en forma de tiran\u00eda, como la prof\u00e9tica visi\u00f3n de la novela Fahrenheit 451<\/em>, seg\u00fan la cual en un futuro pr\u00f3ximo un extra\u00f1o cuerpo de bomberos (en realidad, una polic\u00eda socio-pol\u00edtica) se dedicar\u00eda a buscar y quemar libros, argumentando que la lectura de libros hace a unos pocos creerse superiores a los dem\u00e1s\u2026 En efecto, el objetivo de este igualitarismo es conseguir que todo el mundo se sienta feliz<\/em> (v\u00e9ase la alegor\u00eda de \u201cUn mundo feliz\u201d de Huxley) haciendo tabla rasa y destruyendo cualquier tipo de distinci\u00f3n o diversidad, pues el mensaje de fondo es del todo contrario al expl\u00edcito: \u201c\u00bfVeis a qu\u00e9 desastres lleva la diversidad? Hay que igualar<\/em> a todo el mundo y as\u00ed se acabar\u00e1n los problemas.\u201d Con lo cual se justifica que todo el mundo deba comportarse de modo similar, trabajar, vivir y relacionarse de forma id\u00e9ntica, poseer las mismas cosas, divertirse con los mismos entretenimientos, etc.<\/p>\n En fin, la igualdad superficial, promovida y potenciada por ese espurio igualitarismo, no nos lleva a ninguna parte, es una carrera sin sentido. En realidad, esa igualdad que nos quieren imponer es el camino hacia la absoluta neutralidad y sometimiento, hacia la p\u00e9rdida de nuestra aut\u00e9ntica libertad, diversidad y distinci\u00f3n, para convertirnos en meros aut\u00f3matas o robots, f\u00e1cilmente controlables mediante las consignas oficiales y la tecnolog\u00eda transhumanista que se nos viene encima. Y por cierto, los que integran el selecto club que rige los destinos de la Humanidad tienen muy clara su distinci\u00f3n elitista sobre el resto de mortales y desde luego no est\u00e1n por la labor de que haya igualdad de conciencia, pues eso representar\u00eda el fin de su dominio.<\/p>\n Xavier Bartlett, 16 julio 2018<\/p>\n Fuente<\/a><\/p>\n ***<\/p>\n \n NOTAS<\/strong><\/em><\/p>\n [1]<\/a> V\u00e9ase el art\u00edculo Buscando al programador primigenio<\/a> <\/em>sobre este tema.<\/p>\n [2]<\/a> El propio Hitler ya tuvo un oportuno ba\u00f1o de realidad \u2013y contrariedad\u2013 cuando observ\u00f3 en los Juegos Ol\u00edmpicos de 1936 que sus poderosos atletas de raza aria eran barridos en la pista por un ciudadano negro americano llamado Jesse Owens.<\/p>\n![\"4_x_400_Relay_at_the_Summer_Olympics_1984\"](\"https:\/\/somniumdei.files.wordpress.com\/2018\/06\/4_x_400_relay_at_the_summer_olympics_1984.jpg?w=323&h=479\")
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