{"id":3256,"date":"2018-07-03T14:27:17","date_gmt":"2018-07-03T14:27:17","guid":{"rendered":"https:\/\/redinternacional.net\/?p=3256"},"modified":"2018-07-03T14:27:17","modified_gmt":"2018-07-03T14:27:17","slug":"dossier-neuro-piratas-control-social-a-traves-del-desorden-por-lucien-cerise","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/redinternacional.net\/2018\/07\/03\/dossier-neuro-piratas-control-social-a-traves-del-desorden-por-lucien-cerise\/","title":{"rendered":"DOSSIER: “Neuro-piratas”, control social a trav\u00e9s del desorden – por Lucien Cerise"},"content":{"rendered":"

“La novedad del siglo XX reside en que se pasa de un control social a trav\u00e9s del orden a un control social a trav\u00e9s del desorden. El orden a partir del caos.” LUCIEN CERISE
\n<\/em><\/strong><\/p>\n

 <\/p>\n

Reflexiones sobre la ingenier\u00eda social<\/h1>\n

 <\/p>\n

 <\/p>\n

\"653456564577\"<\/p>\n

VER TEXTO COPMPLETO EN PDF: neuro-piratas-lucien-cerise<\/a><\/em><\/strong><\/p>\n

 <\/p>\n

Le\u00edmos con mucho inter\u00e9s Gouverner par le chaos – Ing\u00e9nierie sociale et mondialisation <\/em>(Gobernar a trav\u00e9s del caos: Ingenier\u00eda social y globalizaci\u00f3n) aparecida de forma an\u00f3nima en 2010 (Max Milo), que luego supimos que era obra de Lucien Cerise. Ahora hemos seguido con Neuro-Pirates: R\u00e9flexions sur l’ing\u00e9nierie sociale <\/em>(Neuro-piratas: Reflexiones sobre la ingenier\u00eda social, Kontre Kulture, 2016).<\/p>\n

Nos interesa todo lo que se mueve alrededor de Egalit\u00e9 et R\u00e9conciliation y su editorial Kontra Kulture, liderados por Alain Soral, una de las voces m\u00e1s l\u00facidas del pensamiento franc\u00e9s contempor\u00e1neo, ferozmente perseguido por la dictadura atlantista-sionista que se esconde tras la careta del aparato de Estado franc\u00e9s desde hace d\u00e9cadas.<\/p>\n

Lucien Cerise es uno de esos intelectuales con un pie en el pensamiento acad\u00e9mico y otro en la calle, en la realidad de lo que est\u00e1 ocurriendo en el mundo. Nos dice que se ha movido mucho en los \u00e1mbitos del activismo, de la militancia pol\u00edtica, de los movimientos de base (pp. 215, 331-332).<\/p>\n

Habla el lenguaje de los acad\u00e9micos, pero para tratar de los temas de los te\u00f3ricos de la conspiraci\u00f3n, y lo hace con un admirable rigor, armado de lecturas, referencias y citas. Pero sobre todo de lucidez, de capacidad para discernir lo importante de lo que no lo es, para moverse entre disciplinas y \u00e1mbitos del saber, para saltar de escala, para poner el dedo en la llaga. Es un investigador suficientemente especializado en el \u00e1mbito de la ingenier\u00eda social, pero al mismo tiempo un intelectual con una gran cultura y sensibilidad. Esto le permite mostrar hasta qu\u00e9 punto esta disciplina ocupa un lugar central en nuestros d\u00edas, como \u00e1mbito en el que se ejerce lo pol\u00edtico<\/em>, por oposici\u00f3n a la pol\u00edtica <\/em>de teatro de marionetas, cada vez m\u00e1s vac\u00eda de contenido.<\/p>\n

As\u00ed, a pesar de que la ingenier\u00eda social es el \u00e1mbito central de su trabajo, Cerise es uno de esos intelectuales transversales, profundos, comprometidos. De manera que m\u00e1s que hablarnos solo de ingenier\u00eda social, lo que hace es hablarnos de todo a trav\u00e9s de la ingenier\u00eda social. Poner el foco de lo pol\u00edtico en la manera c\u00f3mo el poder transforma las sociedades.<\/p>\n

Es un pensador que recoge lo mejor de la tradici\u00f3n francesa \u2014Foucault, Deleuze, Guattari, Debord, Baudrillard, Girard\u2014 pero que sabe actualizar este saber de cara a analizar y comprender, de manera muy concreta, el presente. En esto Cerise nos recuerda a Comit\u00e9 Invisible\/Tiqqun, otro colectivo de gran inter\u00e9s, que tambi\u00e9n alimenta su obra.<\/p>\n

\n

\n

Orden a partir del caos<\/h1>\n

 <\/p>\n

Desde Gouverner par le chaos <\/em>Cerise ha comprendido la clave del poder contempor\u00e1neo:<\/p>\n

“La novedad del siglo XX reside en que se pasa de un control social a trav\u00e9s del orden a un control social a trav\u00e9s del desorden. El orden a partir del caos.”<\/em><\/p>\n

Esta estrategia se remonta, seg\u00fan Cerise, a las revoluciones burguesas de finales del XVIII (pp. 190, 239). Lo que cambia es que entonces las revoluciones eran disrupciones en la continuidad del orden instituido, tras las que se retornaba a otro orden, mientras que hoy la revoluci\u00f3n tiende a hacerse permanente, con los efectos traum\u00e1ticos que esto tiene para la gran mayor\u00eda, que no se beneficia de tanto cambio.<\/p>\n

Subraya algo obvio, a pesar de que el pensamiento dominante tienda a obviarlo: que la historia de la humanidad ha sido mayoritariamente la de la instauraci\u00f3n del orden. Y que el prestigio del cambio, del progreso, de la revoluci\u00f3n, de la transformaci\u00f3n, es de hecho una anomal\u00eda, inculcada por el mismo aparato de propaganda del sistema, fuertemente ideologizado. La tradici\u00f3n, la continuidad, el orden, ha sido casi siempre la norma. El antitradicionalismo moderno es la anomal\u00eda (p. 217).<\/p>\n

De manera que el franc\u00e9s pone el dedo en otra de las claves de la religi\u00f3n capitalista: el culto al progreso. Que se resume, para \u00e9l, en la repetici\u00f3n permanente del mantra “antes era peor”. Efectivamente, el progreso cient\u00edfico o tecnol\u00f3gico, no solo no siempre lleva aparejado el progreso humano o espiritual, sino que, de hecho, tiende a impedirlo, a eclipsarlo, a sustituirlo.<\/p>\n

Pero lo que nos dice Cerise, como vamos a ver, es que no se trata de rechazar de plano el progreso, sino de valorar hasta qu\u00e9 punto este es negativo o positivo, “disolutivo” o “coagulante”.<\/p>\n

Cerise comprende que el progreso capitalista no consiste en “adaptar el mercado al pueblo”, sino al contrario en “adaptar el pueblo al mercado” (p. 132). A\u00fan se podr\u00eda ir m\u00e1s lejos y decir que el objetivo \u00faltimo del capitalismo ser\u00eda fusionar el pueblo y el mercado, esto es, transformar el ser humano en ganado cibern\u00e9tico. La mercanc\u00eda, el valor de cambio, la plusval\u00eda, el dinero, son solo medios para un fin. El objetivo a largo plazo, creemos, es mercantilizar al humano. De ah\u00ed que la ingenier\u00eda social est\u00e9 hoy en el centro de lo pol\u00edtico, pero tambi\u00e9n de lo econ\u00f3mico, en la medida en que en el capitalismo ambas dimensiones tienden a fundirse. Y que en el hollycapitalismo la mercanc\u00eda fundamental es el hombre.<\/p>\n

El soci\u00f3logo reconoce que el comunismo ha fracasado. Pero tambi\u00e9n que este no ha sido tan destructor de la moral y los valores humanos como el capitalismo (pp. 134-135). Porque, m\u00e1s all\u00e1 de las ideolog\u00edas y de las diferencias entre los distintos sistemas politico-econ\u00f3micos, lo que cuenta es siempre una relaci\u00f3n real de fuerzas, en la que el m\u00e1s agresivo, el m\u00e1s perverso, el m\u00e1s amoral, pero tambi\u00e9n el que mejor sabe enmascararlo, tiende a ganar.<\/p>\n

Cerise pone el \u00e9nfasis en los hechos, y el hecho por excelencia en pol\u00edtica y sociedad es la relaci\u00f3n de fuerzas (p. 227). Toma de Her\u00e1clito el elogio del polemos<\/em>, de la lucha, por principio:<\/p>\n

“Porque la victoria consiste en luchar” (pp. 178-180).<\/em><\/p>\n

As\u00ed, propone apoyar a todos los contrapoderes, en la medida en que supongan una oposici\u00f3n real al imperio atlantista-sionista: China, Rusia, Ir\u00e1n, Venezuela (p. 355). Pero tambi\u00e9n, apoyar al\u00a0 Estado, que es hoy la \u00fanica estructura que puede resistir los embates del capitalismo global. Esto relega a un segundo plano todas las ideolog\u00edas, las distinciones artificiales entre derechas e izquierdas, etc. La cuesti\u00f3n es detectar d\u00f3nde est\u00e1 la oposici\u00f3n real y apoyarla, dejando en un segundo lugar las ideolog\u00edas.<\/p>\n

La ingenier\u00eda social consiste \u2014nos dice Cerise\u2014 en considerar a la sociedad como un objeto (pp. 141-142). Insistimos, lo que diferencia al hollycapitalismo del capitalismo es que el humano pasa a ser la mercanc\u00eda por excelencia. De ah\u00ed que la ingenier\u00eda social se convierta en una disciplina central en este r\u00e9gimen de poder-religi\u00f3n. Simplificando, en el capitalismo se produc\u00edan coches y en el hollycapitalismo se producen humanos. El objetivo del capitalismo, aunque estuviese centrado en la producci\u00f3n de mercanc\u00edas, era servirse de estas como intermediarias para someter y transformar al humano. El hollycapitalismo ser\u00eda una fase posterior del capitalismo, en la que las mercanc\u00edas ya no ocupan el lugar central para transformar al humano, en la medida en que la ciencia y la tecnolog\u00eda de la producci\u00f3n de mercanc\u00edas se aplica ya directamente al humano.<\/p>\n

Veamos con m\u00e1s detalle c\u00f3mo, seg\u00fan Cerise, opera este gobierno de las sociedades a trav\u00e9s del caos. Una de las claves, a la que su investigaci\u00f3n recurre, es la ideolog\u00eda de g\u00e9nero. Porque nos permite ver de manera muy evidente c\u00f3mo el poder orquesta una guerra artificial entre dos partes<\/p>\n

\u2014en este caso mujeres y hombres, pero tambi\u00e9n heterosexuales y homosexuales\u2014, que est\u00e1n por naturaleza llamados a conformar una unidad. Se hace realidad una ficci\u00f3n, se naturaliza un artificio. Y \u00bfqu\u00e9 puede haber de m\u00e1s artificial que fabricar la noci\u00f3n de g\u00e9nero e independizarla de la realidad del sexo? Por supuesto que siempre habr\u00e1 anomal\u00edas, y estas deben ser respetadas. Pero eso es una cosa y otra muy distinta hacer de la anomal\u00eda el paradigma.<\/p>\n

\n

La ideolog\u00eda de la confusi\u00f3n de g\u00e9neros<\/h1>\n

\u00a0<\/strong><\/p>\n

Lo interesante es que esta separaci\u00f3n artificial lo que persigue en \u00faltima instancia es una “confusi\u00f3n”. As\u00ed, para Cerise la teor\u00eda de g\u00e9nero es, en realidad, “ideolog\u00eda de confusi\u00f3n de g\u00e9neros” (pp. 25, 361). Las teor\u00edas de g\u00e9nero est\u00e1n ah\u00ed para destruir una de las riquezas, de los valores fundamentales de toda cultura: la distinci\u00f3n entre hombres y mujeres. Distinci\u00f3n entendida como complementariedad, como suma integral en la que 1 + 1 > 2. La teor\u00eda de g\u00e9nero es una ideolog\u00eda tremendamente perversa, al servicio de una agenda de empobrecimiento y de destrucci\u00f3n de las sociedades humanas. El g\u00e9nero es un invento, una entelequ\u00eda de los intelectuales, aliados de manera impl\u00edcita con la agenda transhumanista, para destruir todo lo que nos diferencia, y por lo tanto nos atrae, nos une, a hombres y a mujeres.<\/p>\n

Pero lo m\u00e1s interesante de Lucien Cerise es que disecciona con mucha exactitud “c\u00f3mo” esto se est\u00e1 llevando a cabo. Nos dice, y estamos plenamente de acuerdo con \u00e9l, que lo importante es el “c\u00f3mo”, y no el “qui\u00e9n” o el “por qu\u00e9” (p. 341).<\/p>\n

Seg\u00fan el franc\u00e9s, lo que est\u00e1n haciendo es demonizar las diferenciaciones y las jerarqu\u00edas que hacen una sociedad rica, estructurada, compleja. La clave para esto est\u00e1 en la mec\u00e1nica de identificaci\u00f3n, que depende de categor\u00edas y estructuras delimitadas y jerarquizadas. La entelequia de la igualdad-confusi\u00f3n entre hombres y mujeres es el caso m\u00e1s evidente de este igualitarismo mal entendido (pp. 36-37). Igualitarismo que, en realidad, persigue la destrucci\u00f3n de todas las diferencias, y con ello la destrucci\u00f3n del ser humano.<\/p>\n

Lo importante es comprender que esta desestructuraci\u00f3n a un nivel se produce en paralelo a una reestructuraci\u00f3n a otro nivel. Es decir, la desestructuraci\u00f3n al nivel de la sociedad tradicional se produce en paralelo a la reestructuraci\u00f3n el nivel mercantil-tecnol\u00f3gico-informacional. De ah\u00ed que ingenier\u00eda social y capitalismo est\u00e9n tan \u00edntimamente relacionados.<\/p>\n

Cerise comprende que lo que est\u00e1 en el trasfondo de la ingenier\u00eda social es el cuestionamiento de la norma, en el sentido m\u00e1s fundamental, en el \u00e1mbito moral y el del comportamiento. Nos dice que “la heteronormatividad es la fuente de toda norma, la norma de las normas, la metanorma” y que “piratear” esta heteronormatividad equivale a destruir las sociedades humanas tradicionales (pp. 38-40):<\/p>\n

“Las diferencias primeras, fundadoras, de toda sociedad, se resumen en un concepto: el complejo de Edipo. Son las diferencias hombres\/mujeres y padres\/hijos (por extensi\u00f3n j\u00f3venes\/viejos)” (p. 193).<\/em><\/p>\n

Y efectivamente esto es lo que estamos viendo hoy. Levantar dos de las prohibiciones centrales en las que se fundan todas las comunidades sanas, desde hace milenios: la prohibici\u00f3n del incesto y la prohibici\u00f3n de la homosexualidad:<\/p>\n

“Existe por lo tanto una verdadera ingenier\u00eda psicosocial del levantamiento de los l\u00edmites, de la transgresi\u00f3n de las prohibiciones, de las leyes, de los tab\u00faes y de la abolici\u00f3n de las fronteras, y por lo tanto una ingenier\u00eda de la desocializaci\u00f3n, del asalvajamiento, de la desestructuraci\u00f3n de masas y de la regresi\u00f3n civilizatoria provocada; en suma, una ingenier\u00eda de la desedipizaci\u00f3n…” (p. 196).<\/em><\/p>\n

Como vemos, hay un cierto paralelismo entre el tab\u00fa del incesto \u2014distinci\u00f3n entre padres e hijos\u2014 y el de la homosexualidad \u2014distinci\u00f3n entre sexos\u2014. Estos son los dos tabu\u00e9s que sostienen las estructuras familiares o cl\u00e1nicas tradicionales, del tipo que sea, desde los matrimonios de grupo o las diversas formas de poligamia, a la familia extendida o la nuclear. La homosexualidad se puede entender como una forma de incesto. Esto es, la homosexualidad ser\u00eda una suerte de endogamia, mientras que la heterosexualidad ser\u00eda una forma de exogamia.<\/p>\n

Levantar estas dos prohibiciones \u2014incesto y homosexualidad\u2014 equivale a destruir todas las formas de familia o clan tradicionales, las que hac\u00edan posible la existencia de un ser social natural, de una zo\u00e9<\/em>. Levantar la prohibici\u00f3n de la homosexualidad \u2014proceso ya muy avanzado en Occidente\u2014 y la del incesto \u2014que vamos a padecer en las pr\u00f3ximas d\u00e9cadas\u2014, equivale a exterminar al ser humano social, y con ello al ser humano individual, que de hecho no es m\u00e1s que una faceta de este ser social. Y evidentemente todo esto forma parte de la agenda transhumanista.<\/p>\n

\n

\n

Normalizar las anomal\u00edas<\/h1>\n

\u00a0<\/strong><\/p>\n

Seg\u00fan el soci\u00f3logo, una de las t\u00e9cnicas que est\u00e1n utilizando para vendernos lo que en realidad es la destrucci\u00f3n encubierta del ser humano, es una “puesta de anzuelo” (hame\u00e7onnage<\/em>). Consiste en presentar como discriminaci\u00f3n positiva, como defensa de las minor\u00edas, lo que en realidad es un ataque encubierto a las mayor\u00edas. Esto es, una defensa de las excepciones, de la anomal\u00edas, pero que enmascara lo que en realidad es un ataque a las normas, a los paradigmas (pp. 73, 119). Y esto pasa por culpabilizar a las mayor\u00edas, de cara a legitimar la discriminaci\u00f3n positiva de las minor\u00edas (pp. 230, 238-239).<\/p>\n

Insistimos, una cosa es respetar la anomal\u00eda, y otra muy distinta hacer de la anomal\u00eda el paradigma. Y esto segundo es lo que est\u00e1 ocurriendo hoy. Se declara una cosa pero en realidad lo que se est\u00e1 haciendo de manera encubierta es otra muy distinta. As\u00ed funciona todo hoy. Hacer de la anomal\u00eda el paradigma, hacer de la transgresi\u00f3n la norma, tiene efectos perniciosos y pervertidores devastadores para cualquier sociedad (p. 279). La muerte, el sacrificio del ser humano.<\/p>\n

Y esta l\u00f3gica, que vemos de manera muy evidente en las teor\u00edas de g\u00e9nero, Cerise la extiende a otros muchos dominios:<\/p>\n

“… el transhumanismo es esencialmente una forma quim\u00e9rica para vendernos otra cosa, que es la discriminaci\u00f3n positiva human\u00f3foba y la dictadura de las minor\u00edas. La propaganda homo y transexual, el pinkwashing, el antiespecismo, el veganismo, los derechos de los robots y la lucha moral y jur\u00eddica contra todas las diferencias naturales, participan tambi\u00e9n de este programa de puesta en minor\u00eda jur\u00eddico-moral de la especie humana” (p. 281).<\/em><\/p>\n

A todo esto nosotros a\u00f1adimos la dimensi\u00f3n religiosa. La transgresi\u00f3n siempre ha sido el \u00e1mbito de la sagrado. Hacer de la transgresi\u00f3n la norma lleva impl\u00edcito esta religiosidad, sin la que no se puede entender en todo su alcance el r\u00e9gimen de poder-religi\u00f3n contempor\u00e1neo, el hollycapitalismo. As\u00ed, esta ingenieria social no se puede entender sin el papel central que est\u00e1n desempe\u00f1ando toda una serie de figuras que podemos calificar como semisagradas, que act\u00faan como referencias sociales para los profanos. Las estrellas de Hollywood y de la Hollym\u00fasica son las m\u00e1s evidentes. Pero en realidad hay que ir m\u00e1s al fondo de la cuesti\u00f3n para comprender que estas estrellas son de hecho solo parte de un fen\u00f3meno m\u00e1s profundo, que es el de los programas de control mental mediante trauma, tipo MK Ultra o Monarch, que producen <\/em>literalmente todo tipo de figuras sociales que lideran las agendas de ingenier\u00eda social. Y todo esto opera como las religiones paganas, con iniciaciones, rituales, sacrificios, hierogamias.<\/p>\n

Y todo esto est\u00e1, adem\u00e1s, muy vinculado con el abuso intergeneracional, que nos atrevemos a decir que es una de las claves de b\u00f3veda del sistema, del que se nutren estos programas institucionales de control mental, en los que, el incesto y la homosexualidad ocupan un papel central. Como vemos todo encaja, todo se cierra, todo se relaciona.<\/p>\n

Hacer de la transgresi\u00f3n la norma implica una inversi\u00f3n may\u00fascula de las bases morales y normativas de cualquier sociedad, que solo podemos calificar de sat\u00e1nica. Y efectivamente esta es la corriente subterr\u00e1nea sin la que no se puede entender todo este movimiento transhumanista. Aunque en realidad siempre ha estado ah\u00ed, desde hace milenios, porque es la estructura profunda del poder-religi\u00f3n: el ritual de sexo y sangre.<\/p>\n

Volviendo a Cerise, lo que se esconde detr\u00e1s de estas discriminaciones positivas, de esta defensa de las minor\u00edas, es algo en realidad mucho m\u00e1s perverso, patol\u00f3gico y patog\u00e9nico. Lo que estar\u00edan encubriendo estos movimientos, supuestamente progresistas, es en realidad un “odio visceral contra el pueblo y los heterosexuales” (p. 272). Esto es, un odio contra lo normal, contra la norma.<\/p>\n

Se podr\u00eda a\u00f1adir que estos movimientos, que podemos englobar bajo el t\u00e9rmino trans <\/em>\u2014 transexualismo, transgenerismo, transgenetismo, transespecismo, transhumanismo\u2014 son mucho m\u00e1s religiosos y fundamentalistas de lo que aparentan. Ser\u00edan de hecho la herencia de la tradici\u00f3n judeo-cristiana m\u00e1s radical, m\u00e1s puritana. Parad\u00f3jicamente. En el sentido en que suponen una demonizaci\u00f3n de lo corporal, de la carne, en lo que esta tiene de menos maleable por el esp\u00edritu, por la cultura, que es su tendencia a unirse con el otro sexo.<\/p>\n

Todos estos movimientos trans<\/em>, est\u00e1n alimentados por un trans<\/em>cendentalismo, en el sentido m\u00e1s negativo del t\u00e9rmino. En otras palabras, lo que todos ellos tienen en com\u00fan es la adoraci\u00f3n, sin duda marcadamente religiosa, de lo espiritual, y la demonizaci\u00f3n de lo corporal. Pero sobre todo de lo espiritual separado de lo corporal. En definitiva, de la dominaci\u00f3n enormemente sublimada, hasta el punto en que se convierte en inconsciente, del esp\u00edritu sobre la materia, del artificio sobre la naturaleza, de la ficci\u00f3n sobre la realidad. Y a su vez, entre las masas, de la dominaci\u00f3n del cuerpo sobre el esp\u00edritu. Lo que padecemos hoy es el reino de la desencarnaci\u00f3n, de la desespiritualizaci\u00f3n del cuerpo y la descorporizaci\u00f3n del esp\u00edritu. Y evidentemente esto solo lo saben orquestar altos iniciados.<\/p>\n

Lo trans <\/em>es, de hecho, una de las facetas m\u00e1s importantes para comprender la religi\u00f3n hollycapitalista, el reino de la producci\u00f3n de realidad a partir de ficciones. Dinero fiduciario, teor\u00eda de g\u00e9nero, ingenier\u00eda gen\u00e9tica, Hollywood, etc., son finalmente distintas facetas de un mismo fen\u00f3meno que hoy se despliega ante nosotros.<\/p>\n

Lo m\u00e1s interesante de Lucien Cerise es que nos muestra, como avanz\u00e1bamos, que muchos de estos movimientos trans <\/em>\u2014fomentados por el globalismo tras la m\u00e1scara de activismos, militantismos y progresismos varios\u2014 son parte de una \u00fanica agenda transhumanista:<\/p>\n

“… veremos aparecer uno de estos d\u00edas leyes antihumanas que se imponen enmascaradas bajo el pretexto moral de luchar contra la \u00abtranshumanofobia\u00bb y por la igualdad del humano y el transhumano.”<\/em><\/p>\n

Esto es, la misma mec\u00e1nica de defensa de las minor\u00edas, de lo an\u00f3malo, de lo excepcional, de lo artificial, va a ser utilizada, seg\u00fan \u00e9l, para otorgar a los robots los mismos derechos que a los humanos (pp. 74, 276, 279). Aqu\u00ed vemos como esta dimensi\u00f3n transcendentalista es central, que como decimos no es otra que la de la dominaci\u00f3n del cuerpo desencarnado por el esp\u00edritu, al m\u00e1ximo nivel, y del esp\u00edritu por el cuerpo, en la base. Insistimos, la noci\u00f3n clave para comprender lo que vivimos hoy es esta: desencarnaci\u00f3n. Y todo esto se est\u00e1 realizando, no solo con ciencia y tecnolog\u00eda, sino adem\u00e1s con rituales, con magia negra.<\/p>\n

En lo que hay que insistir es en que lo que tenemos siempre es un doble movimiento de desestructuraci\u00f3n a un nivel y de reestructuraci\u00f3n a otro nivel. Esto es, el propio sistema tiene que desestructurar a un nivel m\u00e1s natural para reestructurar a un nivel m\u00e1s s\u00edstemico. Siempre en el marco de agendas de medio-largo plazo que operan m\u00e1s all\u00e1 de la farsa de la pol\u00edtica de telediario, controlada por las logias.<\/p>\n

Cerise ha comprendido muy bien, como ya mostr\u00f3 en Gouverner par le chaos<\/em>, que las \u00e9lites atlantistas-sionistas est\u00e1n llevando a cabo una “demolici\u00f3n controlada” de las estructuras existentes (pp. 45-46), esto es, una desestructuraci\u00f3n. Y que por ello, la labor de cualquier resistencia a esta din\u00e1mica debe pasar, al margen de las distinciones artificiales entre derechas e izquierdas, por la tendencia contraria, por una reestructuraci\u00f3n. Pero una reestructuraci\u00f3n “por abajo”, frente a la reestructuraci\u00f3n “por arriba”, que tambi\u00e9n se produce.<\/p>\n

Si el “orden a partir del caos” (p. 54) es eficaz es porque el sistema construye estructuras “por arriba”, m\u00e1s artificiales, que son capaces de recuperar las energ\u00edas que libera de las estructuras m\u00e1s naturales. Las teor\u00edas de g\u00e9nero, la homosexualizaci\u00f3n y transexualizaci\u00f3n, la violencia de g\u00e9nero, el abuso infantil, y como iremos viendo cada vez m\u00e1s, el incesto, nos llevan a una sociedad atomizada. Por eso todo esto est\u00e1 siendo instigado por las \u00e9lites sat\u00e1nicas. Porque la desestructuraci\u00f3n “por abajo” hace posible la reestructuraci\u00f3n por “por arriba”, el del intercambio mercantil, el dinero, el control del Estado, los dispositivos educativos, medi\u00e1ticos, tecnol\u00f3gicos, etc.<\/p>\n

Esta transferencia entre planos tambi\u00e9n puede entenderse como una estructura piramidal, tal como propone Cerise. La desestructuraci\u00f3n y la divisi\u00f3n en la base se produce al mismo tiempo que la reestructuraci\u00f3n y la cohesi\u00f3n de la cumbre. El soci\u00f3logo es consciente de la implicaci\u00f3n de la masoner\u00eda en todo esto, a pesar de que no ha profundizado en este tema (p. 54). Esto es lo que se echa de menos en el pensamiento de Cerise.<\/p>\n

Como dec\u00edamos, su m\u00e9todo es comprender el “c\u00f3mo” antes que el “qui\u00e9n”, y en esto demuestra mucha inteligencia. Y es que cuanto m\u00e1s nos acercamos a las c\u00fapulas m\u00e1s desinformaci\u00f3n vamos a encontrar sobre los “qui\u00e9nes”, mientras que los “c\u00f3mos” son relativamente constantes. As\u00ed, Cerise propone investigar y “democratizar” los m\u00e9todos utilizados por las agencias de inteligencia, que son de hecho quienes verdaderamente ejecutan las agendas concebidas por el verdadero poder en la sombra (pp. 256, 334, 344). Sobre todo en el r\u00e9gimen del caos, de la crisis, del desastre, que hoy padecemos.<\/p>\n

Esta mec\u00e1nica de desestructuraci\u00f3n y divisi\u00f3n de la bases se puede aplicar tambi\u00e9n a la distinci\u00f3n tradicional entre izquierdas y derechas. Pero de hecho todas las oposiciones sociales responden a la misma mec\u00e1nica (pp. 56, 90, 149, 152, 181).<\/p>\n

\n

\n

La ficci\u00f3n produce la realidad desencarnada<\/h1>\n

\u00a0<\/strong><\/p>\n

El sistema pone en escena la tesis y la ant\u00edtesis, pero ambas controladas, esto es, tesis y ant\u00edtesis solo hasta ciertos l\u00edmites. Y al mismo tiempo deja fuera de escena todo aquello que supone una verdadera oposici\u00f3n al sistema (pp. 152, 156, 158). Lo que hay que subrayar es que la dimensi\u00f3n espectacular, esc\u00e9nica, representativa, de esta mec\u00e1nica, es central. Especialmente en el mundo de hoy en el que cada vez m\u00e1s todo est\u00e1 inscrito en alg\u00fan dispositivo de representaci\u00f3n, de mediaci\u00f3n. Este es el verdadero poder hoy.<\/p>\n

De hecho la mercanc\u00eda no tiene sentido sin su “puesta en mercado”, que es una suerte de “puesta en escena”. Esta “puesta en mercado” es lo que la dota de valor, lo que permite incrementar su valor de cambio por encima de su valor de uso. Pero esta misma l\u00f3gica afecta a los dem\u00e1s valores: a la verdad, al honor, a la credibilidad, al prestigio. La homosexualidad, el transgenerismo, la cocina deconstruida, las mayores artificialidades… todo se carga de valor en funci\u00f3n de c\u00f3mo es escenificado en los medios dominantes. Como el dinero ficticio. De manera m\u00e1gica, por el simple hecho de aparecer en la escena hollycapitalista.<\/p>\n

Pero lo importante es comprender que estas ficciones son el veh\u00edculo en el que se transfieren los flujos libidinoso-agresivos que articulan todo el sistema, que vinculan los distintos planos de la realidad de los que habl\u00e1bamos. Son ficciones pero ficciones encarnadas. Que sin embargo producen realidad desencarnada. Aqu\u00ed est\u00e1 una de las claves para comprender el hollycapitalismo.<\/p>\n

Cerise nos dice que esta dimensi\u00f3n ficticia es a veces suficiente, cuando el poder pone en escena la violencia:<\/p>\n

“… la representaci\u00f3n [del terror] es a veces suficiente para provocar los mismos efectos que lo real. [\u2026] La capacidad para \u00abhacer creer\u00bb (en el poder o en el peligro) es fundamental, porque la representaci\u00f3n del peligro provoca m\u00e1s o menos los mismos efectos anxi\u00f3genos que el peligro real” (p. 165).<\/em><\/p>\n

Aqu\u00ed el investigador franc\u00e9s pone el dedo en un tema central en el hollycapitalismo. En lo que hace de \u00e9l un r\u00e9gimen no solo pol\u00edtico sino tambi\u00e9n religioso. Todo el sistema se sostiene sobre una estructura de producci\u00f3n de valor de cambio ficticio, que vac\u00eda cada vez m\u00e1s de contenido, de realidad, el resto de los valores sociales. Pero esta producci\u00f3n inmaterial, ficticia, de valor, tiene que estar tensada a su vez por una producci\u00f3n de goce y de violencia, en parte ficticios pero tambi\u00e9n, en alguna medida, reales. Realidad y ficci\u00f3n son los dos polos entre los que se mueven todas las producciones del sistema. Y lo que estructura y articula todos los niveles del sistema son flujos libidinoso-agresivos que se transfieren entre los distintos niveles. En otras palabras, si es posible que la ficci\u00f3n del dinero fiduciario, del terrorismo fabricado, de las pandemias de laboratorio o de las teor\u00edas de g\u00e9nero, se sostengan, es porque todas ellas vienen acompa\u00f1adas en \u00faltima instancia, aunque sea solo parcialmente, por producciones reales de goce y de violencia. En este sentido decimos que son ficciones encarnadas. Aunque parad\u00f3jicamente produzcan realidad desencarnada. Esto donde mejor se ve es en los programas de control mental mediante trauma.<\/p>\n

En este sentido, Cerise ha comprendido muy bien que el terrorismo en Occidente es, en esencia, un producto sint\u00e9tico del propio sistema, controlado por las agencias atlantistas-sionistas (de Estados Unidos, de Reino Unido, de Israel, y de otros Estados aliados). Y que esta amenaza terrorista es, en parte, una ficci\u00f3n, “terror virtual” (pp. 166-167). Pero, como dec\u00edamos, una ficci\u00f3n fundamental, porque es la que permite, entre otras, que el resto de valores ficticios del sistema, como el dinero fiduciario falsificado por la mafia bancaria, as\u00ed como la burbuja financiera, se carguen de valor real. Y lo mismo con el goce sint\u00e9tico, con las pornograf\u00eda, con las ni\u00f1as-esclavas sexuales de las que disfrutan los altos pol\u00edticos, los monarcas, las estrellas de Hollywood, etc. Ficci\u00f3n encarnada, producci\u00f3n sint\u00e9tica de goce y de violencia que es lo que ha caracterizado siempre al poder-religi\u00f3n. Esta es la clave de b\u00f3veda de todo poder-religi\u00f3n, del de hoy como del de hace milenios.<\/p>\n

Es verdad que una buena parte de estas violencias son ficticias, fabricadas, actuadas. Pero necesitan tambi\u00e9n tener algo de realidad. Con ello, lo importante es que provocan amenazas reales. Lo mismo podr\u00edamos decir del goce sint\u00e9tico, fabricado por el sistema, y del deseo real que este produce. De hecho el grado de perversi\u00f3n y de amoralidad que hoy padecemos, pone de manifiesto hasta qu\u00e9 punto el r\u00e9gimen de poder-religi\u00f3n es precario.<\/p>\n

Aqu\u00ed vemos otra vez la importancia de ciertas figuras que operan como intermediarias entre los profanos y los iniciados, aquellas que aparecen en el escenario del poder-religi\u00f3n. Son las que articulan la dimensi\u00f3n real y la ficticia. Las que “hacen creer” en la realidad del goce y la violencia, aunque esta realidad sea solo parcial. Estas figuras articuladoras de los dos \u00e1mbitos de lo social, del \u00e1mbito p\u00fablico y el secreto, del profano y el inici\u00e1tico, no son otras que los esclavos de control mental tipo MK Ultra o Monarch. Otra vez, esta es la clave de b\u00f3veda de todo el sistema. Nos atrevemos a decir que toda la espectacularizaci\u00f3n del Hollycausto est\u00e1 ah\u00ed, entre otras cosas, para encubrir estos programas desarrollados en los campos de concentraci\u00f3n, que despu\u00e9s siguieron llev\u00e1ndose a cabo en Occidente, a trav\u00e9s de la Operaci\u00f3n Paperclip.<\/p>\n

Este es un tema en el que Cerise no ha profundizado, dej\u00e1ndose guiar por desinformadoras como Naomi Klein (pp. 64-67, 182). Es verdad que el modus operandi <\/em>del “capitalismo del desastre”, de la “doctrina del schock” tiene mucho que ver con los programas de control mental mediante trauma. Pero la cuesti\u00f3n es mucho m\u00e1s compleja, mucho m\u00e1s profunda y mucho m\u00e1s sutil de lo que nos cuentan tanto Klein como Cerise. Porque para comprenderla es necesario recorrer el laberinto de las iniciaciones, del abuso intergeneracional, de lo que podemos denominar el gobierno encubierto del Falo desvirgador, violador, peder\u00e1stico, incestuoso, homosexual, felado. Es este Falo del poder-religi\u00f3n el que articula el goce y la violencia reales, y por lo tanto el sadismo, con el goce y la violencia sint\u00e9ticas producidas en su escenario, y que a su vez producen el deseo y la amenaza que sostienen todo el orden social. Esto es el hollycapitalismo en el que Hollywood lo atraviesa todo. Pero no el Hollywood pol\u00edticamente correcto que nos muestran los medios dominantes, sino el Hollywood inici\u00e1tico, el Hollywood del abuso infantil y sexual, el Hollywood vinculado a las agencias de inteligencia y a los programas de control mental.<\/p>\n

Y sin embargo Cerise se acerca a comprender lo que est\u00e1 aqu\u00ed en juego, que en definitiva es la utilizaci\u00f3n ambivalente \u2014sat\u00e1nica\u2014 de s\u00edmbolos. Nos dice que lo que hace el poder es “esconder a plena luz” (pp. 91-92). Este es el doble lenguaje orwelliano, el que hace posible que una misma palabra, un mismo discurso, una misma imagen, en definitiva, un mismo s\u00edmbolo, pueda ser le\u00eddo de distintas maneras, a los distintos niveles del sistema. Y que pueda servir como mantra de programaci\u00f3n mental, tanto de control “duro”, para esclavos MK Ultra-Monarch, como de control “blando”, para el resto de la ciudadan\u00eda.<\/p>\n

\n

\n

Disoluci\u00f3n y coagulaci\u00f3n<\/h1>\n

\u00a0<\/strong><\/p>\n

Otro tema interesante en la obra de Cerise es su utilizaci\u00f3n de los t\u00e9rminos alqu\u00edmicos “disoluci\u00f3n” (solve<\/em>) y “coagulaci\u00f3n” (coagula<\/em>). Similares a las nociones de “sociedad l\u00edquida” y “sociedad s\u00f3lida” de Zygmunt Bauman. Ya hemos introducido este tema al hablar de desestructuraciones y reestructuraciones sociales.<\/p>\n

El soci\u00f3logo franc\u00e9s identifica la “disoluci\u00f3n” con la “ingenier\u00eda social negativa” y la “coagulaci\u00f3n” con la “ingenier\u00eda social positiva”. La primera es la que utiliza el poder para “disolver” las estructuras sociales que se le oponen. La segunda la que propone como acci\u00f3n emancipadora, resistente, de protecci\u00f3n y recuperaci\u00f3n de soberan\u00eda (pp. 103-104, 210, 237, 328).<\/p>\n

Pero el asunto es algo m\u00e1s complejo. Porque el poder, de hecho, utiliza alternativamente ambas tendencias. Esta es la clave para entender c\u00f3mo recupera muchos movimientos que aparentemente se lo oponen. Esta est\u00e1 impl\u00edcito en la obra de Cerise, siguiendo, entre otros, a Pierre Hillard. As\u00ed, reconoce que diversos regionalismos, soberanismos, independentismos, separatismos, etc., est\u00e1n antes que nada inscritos en una relaci\u00f3n real de fuerzas con el poder imperial. Esta relaci\u00f3n real de fuerzas es la que nos dice hasta qu\u00e9 punto act\u00faan a favor o en contra de la agenda globalista, hasta qu\u00e9 punto son movimientos de recuperaci\u00f3n, de oposici\u00f3n controlada (pp. 121-122). Cerise trata siempre de remitirse a los hechos, a las relaciones de fuerzas reales, m\u00e1s all\u00e1 de las declaraciones o de las ideolog\u00edas, y en esto vuelve a mostrar su lucidez.<\/p>\n

De manera que no es tan sencillo decir que el poder “disuelve” las sociedades y para resistirlo debemos “coagularlas”. En determinadas circunstancias el poder tambi\u00e9n “coagula”, y esta “coagulaci\u00f3n” explica su extraordinario poder para recuperar movimientos populares. Porque lo que en \u00faltima instancia est\u00e1 impl\u00edcito aqu\u00ed es una mec\u00e1nica de creaci\u00f3n a partir de la destrucci\u00f3n.<\/p>\n

La cuesti\u00f3n no es tanto “poner la otra mejilla”, como propone el pacifismo na\u00edf cristiano, que en realidad es una ideolog\u00eda creada por el imperio romano para amansar a las masas, para legitimar su monopolio de la violencia. Una verdadera e inteligente resistencia popular supone reconocer que, en determinadas circunstancias, es necesario recurrir a la violencia, pero solo si esto es imprescindible. O en otras palabras, no dejarse provocar por el poderoso, en la medida en que este puede benerficiarse de esta confrontaci\u00f3n, sobre todo si puede escenificar ante la opini\u00f3n p\u00fablica que se trata, en su caso, de una defensa frente a un ataque ajeno.<\/p>\n

“Disoluci\u00f3n” y “coagulaci\u00f3n” est\u00e1n, insistimos, en funci\u00f3n de una mec\u00e1nica de destrucci\u00f3n y creaci\u00f3n mucho m\u00e1s elemental. Pero tambi\u00e9n mucho m\u00e1s m\u00e1gica, propiciatoria y simb\u00f3lica de lo que nos dice Cerise. Esta mec\u00e1nica es la que conocen bien los magos negros que nos gobiernan en la sombra, la que siempre han practicado las religiones de misterios, las logias. Tanto la disoluci\u00f3n como la coagulaci\u00f3n, llevadas la extremo, implican una dimensi\u00f3n destructiva. La disoluci\u00f3n tiende a destruir al individuo, como ponen de manifiesto las numerosas perversiones, anomal\u00edas, patolog\u00edas que padece el ciudadano medio de las metr\u00f3polis contempor\u00e1neas. Pero tambi\u00e9n la coagulaci\u00f3n, llevada al extremo, enfrentada a otra coagulaci\u00f3n, lleva al conflicto ente comunidades, entre razas, entre religiones, a la guerra civil. El poder juega con estas dos tendencias, alternativa o incluso simult\u00e1neamente, en funci\u00f3n de las circunstancias. Siempre teniendo en cuenta que la destrucci\u00f3n es el verdadero motor del sistema, el elemento verdaderamente activo. Destrucci\u00f3n necesaria para la regeneraci\u00f3n. Esto es lo que saben los iniciados. Esto es lo que se aprende en las logias, lo que no se ense\u00f1a en las universidades.<\/p>\n

Cerise apunta a todo esto, pero no lo llega a desarrollar suficientemente. No comprende por completo la reciprocidad de las fases de coagulaci\u00f3n y de disoluci\u00f3n, a los distintos niveles. Es un autor muy l\u00facido, un todoterreno, que sabe poner las teor\u00edas al servicio de la realidad y el compromiso con su tiempo. Y sin embargo su pensamiento es demasiado lineal para comprender a fondo las ambivalencias del poder-religi\u00f3n, que no se puede entender en todo su alcance al margen de esta mec\u00e1nica mist\u00e9rica, religiosa. Lo que nosotros denominamos el mecanismo hierog\u00e1mico-sacrificial.<\/p>\n

El nazismo, apoyado por los grandes capitales atlantistas-sionistas, la Segunda Guerra Mundial, el Hollycausto, nos ofrecen un ejemplo privilegiado de c\u00f3mo operan estos v\u00f3rtices de coagulaci\u00f3n y destrucci\u00f3n, que propician a su vez las creaciones de nuevos \u00f3rdenes. V\u00f3rtice coagulador y destructor del nacionalsocialismo aleman, del Hollycausto, por un lado, y v\u00f3rtice disolvente y creador de Israel y del sionismo global. Y esto a todos los niveles, al material y al energ\u00e9tico, esto es, tambi\u00e9n al nivel simb\u00f3lico, al de la producci\u00f3n de narrativas, de sentidos, de valores. Y as\u00ed podr\u00edamos llegar hasta la vinculaci\u00f3n del sionismo y del pinkwashing<\/em>, como Cerise ha mostrado. Pero toda esta tendencia disolvente, que hoy declina, no estar\u00eda ah\u00ed sin la tendencia coagulante del nazismo alem\u00e1n, catalizado por el imperio anglo-americano-sionista.<\/p>\n

El soci\u00f3logo franc\u00e9s ha comprendido, como no pod\u00eda ser de otra manera, que una de estas estrategias de largo alcance para la “disoluci\u00f3n” de las culturas occidentales es la inmigraci\u00f3n musulmana, en buena medida porque supone la “multiplicaci\u00f3n al infinito de los c\u00f3digos de comunicaci\u00f3n y los lenguajes, de manera a complejizar la situaci\u00f3n m\u00e1s all\u00e1 de lo controlable, lo que har\u00e1 que aumente autom\u00e1ticamente la tasa de incomunicaci\u00f3n, y por lo tanto de violencia y de entrop\u00eda” (p. 111).<\/em><\/p>\n

Esta es una de las claves para comprender por qu\u00e9 el sistema hoy no necesita censurar todo el repertorio de posiciones, movimientos, iniciativas, que se le oponen, siempre que no superen un cierto alcance. Todo lo que contribuya a la “disoluci\u00f3n” beneficia al poder de hoy. Incluso aunque lo cr\u00edtique o lo exponga con crudeza. Los m\u00e1s radicales, los m\u00e1s conspiranoicos le son tan \u00fatiles al poder como los medios de masas, siempre que la proporci\u00f3n entre unos y otros sea la adecuada. Siempre que las masas cr\u00edticas sean suficientes. (Es tambi\u00e9n la l\u00f3gica capitalista. El monopolio, el cartel, se ejercen de facto en el momento en que se domina una masa cr\u00edtica de las acciones, del mercado.) Proporci\u00f3n que puede ser en todo momento controlada mediante operaciones psicol\u00f3gicas. El contenido no es lo prioritario, siempre que est\u00e9 inscrito en la estructura o la tecnolog\u00eda del poder, que es la que le permite controlar el efecto que dichos contenidos tienen en las masas cr\u00edticas. “El medio es el mensaje.”<\/p>\n

Generar en la sociedad desorden, entrop\u00eda, sobreabundancia de c\u00f3digos, de identificaciones, es por lo tanto una de las estrategias fundamentales para debilitarla, para despolitizarla (p. 191). Despolitizar con respecto a lo que m\u00e1s se opone al poder, para repolitizar seg\u00fan toda otra serie de cuestiones que, aunque parecen resistir al poder, en realidad lo apoyan. En este sentido funcionan el greenwashing <\/em>y el pinkwashing<\/em>, e incluso todas las revoluciones de color (pp. 345, 374). Se despolitiza la econom\u00eda, la geopol\u00edtica, la soberan\u00eda, la guerra; y se repolitiza el g\u00e9nero, el aborto, el ecologismo, el animalismo.<\/p>\n

De nuevo, todo lo que tiene que ver con la liberaci\u00f3n sexual debe ser interpretado en este sentido. Como una operaci\u00f3n de disidencia controlada de muy largo alcance, que padecemos desde los a\u00f1os 60, que nos lleva una sociedad transhumana de ganado cibern\u00e9tico. Liberaci\u00f3n que es tambi\u00e9n disoluci\u00f3n, normalizaci\u00f3n de la transgresi\u00f3n.<\/p>\n

Frente a esto, Cerise nos aconseja: “[h]ay que tener ni\u00f1os, el m\u00e1ximo de ni\u00f1os\u201d (p. 174). O, frente a la homofobia, “heterofilia”. O contra la falsa horizontalidad, que en realidad es una estrategia de recuperaci\u00f3n por las estructuras jer\u00e1rquicas verticales, estructuras alternativas, pero tambi\u00e9n complejas, articuladas, jer\u00e1rquicas, intelectuales (pp. 175, 328-329).<\/p>\n

\n

\n

La triangulaci\u00f3n y escenificaci\u00f3n de las divisiones sociales<\/h1>\n

\u00a0<\/strong><\/p>\n

Otro de los an\u00e1lisis muy l\u00facidos de Cerise es que esta ingenier\u00eda social negativa se basa en la utilizaci\u00f3n de estructuras triangulares. Se refiere al “tri\u00e1ngulo de Karpman”, que pone en escena un verdugo y una v\u00edctima (pp. 30 y ss, 43). Pero para nosotros esta estructura es algo m\u00e1s compleja, porque adem\u00e1s de una tercera figura oculta, que es el poderoso que orquesta el espect\u00e1culo, tiende a haber una cuarta figura, que es el p\u00fablico asistente a dicho espect\u00e1culo, a dicha escenificaci\u00f3n.<\/p>\n

En todo caso, de lo que se trata es de escenificar la debilidad de la v\u00edctima, su inferioridad, su situaci\u00f3n de minor\u00eda (pp. 371-372). De esta manera se busca la identificaci\u00f3n, o en todo caso la compasi\u00f3n del espectador. Pero tambi\u00e9n la culpabilizaci\u00f3n de este \u00faltimo, como mayor\u00eda relativamente privilegiada y protegida. Se trata as\u00ed de generar un consenso social, aparentemente humanitario, protector, solidario, pol\u00edticamente correcto.<\/p>\n

Pero en realidad se trata de una estructura perversa, magnificada y falseada por los medios de masas, controlados por las \u00e9lites que orquestan la operaci\u00f3n desde detr\u00e1s de bambalinas. Cualquier posici\u00f3n que se oponga a la mayor\u00eda de manipulados se convierte autom\u00e1ticamente en “extremista”, “radical”, “racista”, “machista”, “mis\u00f3gina”, “conspiranoico”, etc. Siempre con comillas porque estos mantras operan en el marco de una escenificaci\u00f3n orquestada por el poder, que en definitiva es lo que les da su poder casi hipn\u00f3tico. De nuevo esto nos llevar\u00eda, en \u00faltima instancia, a los proyectos de control mental mediante trauma. A comprender que este control mental “blando”, de masas, es la otra cara de la moneda del control de masas “duro” que sufren los MK Ultra o Monarch. Aqu\u00ed es, otra vez, a donde Cerise no llega.<\/p>\n

La dictadura de lo pol\u00edticamente correcto y de la superficialidad opera en esta estructura triangular o triangulada. Pero tambi\u00e9n en esta estructura de control mental de masas a dos niveles, “duro” y “blando”. De esta manera es como se lleva progresivamente a toda a una sociedad a renunciar a sus principios y valores “normales” para adoptar los de las minor\u00edas, en ocasiones tremendamente artificiales, pervertidos (pp. 346-347). Finalmente tremendamente antinaturales, lo que nos lleva a la transhumanizaci\u00f3n. Y esto s\u00ed lo explica Cerise con lucidez.<\/p>\n

Primero tuvimos que aceptar el matrimonio homosexual. \u00a1Hoy toca respetar la elecci\u00f3n de g\u00e9nero de los ni\u00f1os! En las pr\u00f3ximas d\u00e9cadas veremos la normalizaci\u00f3n de la pederastia y el incesto. De la misma manera, nos dice Cerise, en un futuro pr\u00f3ximo habr\u00e1 que respetar las diferencias de los robots, o la de los seres h\u00edbridos o transhumanos. Y as\u00ed lo normal, la norma, ir\u00e1 siendo aniquilada progresivamente (p. 301).<\/p>\n

En esta estructura triangular siempre est\u00e1n impl\u00edcitos un verdugo y una v\u00edctima. En la estructura pol\u00edtica cl\u00e1sica, la de conservadores y progresistas, estamos ante la misma mec\u00e1nica, aunque en este caso se tienda, en contextos estables, al equilibrio y la alternancia de ambos actores <\/em>(p. 90). Pero insistimos en que, en la medida en que la situaci\u00f3n se haga cr\u00edtica, estos pasar\u00e1n a desempe\u00f1ar los roles de verdugo y v\u00edctima.<\/p>\n

Cerise se inspira para estas ideas, entre otros, en Ren\u00e9 Girard y su “rivalidad mim\u00e9tica” (pp. 80-81). Pero ni Girard ni Cerise llegan a comprender que lo que est\u00e1 en juego es una mec\u00e1nica, no solo sacrificial, sino hierog\u00e1mico-sacrificial. No llegan a mostrarnos que uno de los fen\u00f3menos centrales en el sacrificio, sea de una minor\u00eda social, sea de materia y energ\u00eda en general, es la destrucci\u00f3n. Y que esta, lo repetimos, est\u00e1 en funci\u00f3n de una hierogamia, de una creaci\u00f3n, de una regeneraci\u00f3n.<\/p>\n

El soci\u00f3logo nos muestra la importancia del trauma fundador (pp. 85-86, 211), y c\u00f3mo este sigue estando en el trasfondo de las operaciones psicol\u00f3gicas y los ataques de bandera falsa. Tambi\u00e9n c\u00f3mo el poder utiliza hoy la “estrategia del shock” o el “management del terror” (pp. 164, 336). Pero, como decimos, no llega a vincular todo esto con la dimensi\u00f3n destructiva, en el sentido m\u00e1s amplio del t\u00e9rmino: destrucci\u00f3n de materia, de energ\u00eda, de vida, de valores, de s\u00edmbolos. Destrucci\u00f3n disolvente o coagulante.<\/p>\n

Pone el dedo en la llaga, pero no llega a introducirlo. No llega a comprender que estamos ante una mec\u00e1nica hierog\u00e1mico-sacrificial, en la que el motor del sistema es siempre la destrucci\u00f3n sacrificial, y que esta destrucci\u00f3n sacrificial est\u00e1 en funci\u00f3n de una regeneraci\u00f3n, de una reconstituci\u00f3n, de una hierogamia a otro nivel. Esto le habr\u00eda permitido tambi\u00e9n comprender que la distinci\u00f3n entre disoluci\u00f3n y coagulaci\u00f3n no es tan lineal como \u00e9l la plantea, y que ambas est\u00e1n tambi\u00e9n impl\u00edcitas en esta mec\u00e1nica de disyunciones y conjunciones que opera en toda transformaci\u00f3n del sistema.<\/p>\n

Esta estructura triangular \u2014o mejor, estructuraci\u00f3n <\/em>triangular, porque lo hace el poder es producir esta polarizaci\u00f3n, esta triangulaci\u00f3n\u2014 la utiliza tambi\u00e9n Cerise a nivel geopol\u00edtico. Afirma que la Segunda Guerra Mundial fue un “gigantesco conflicto mundial triangulado por actores financieros, que apoyaban a los dos bandos enfrentados para hacer avanzar su programa de hegemon\u00eda mundial al precio del caos en Europa” (p. 297).<\/em><\/p>\n

Esta vinculaci\u00f3n entre distintas escalas, entre distintas disciplinas, en este caso entre la geopol\u00edtica y la ingenier\u00eda social, es una de las virtudes del trabajo de Cerise. El modus operandi <\/em>es siempre comprender una determinada mec\u00e1nica, que permite entender diversos fen\u00f3menos aparentemente heterog\u00e9neos:<\/p>\n

“Los separatismos pueden por lo tanto ser regionalistas, \u00e9tnicos, culturales, pero tambi\u00e9n sexuales (entre hombres y mujeres) y familiares, enfrentando a los hijos contra los padres, que es el trabajo que se lleva a cabo desde la emergencia de la contracultura \u00abjuvenil\u00bb de los a\u00f1os sesenta hasta el d\u00eda de hoy” (p. 322).<\/em><\/p>\n

Insistimos, lo importante no es el “qui\u00e9n” sino el “c\u00f3mo”, lo importante no es el contenido sino la estructura, la forma, el s\u00edmbolo. De lo que se trata es de desestructurar y reestructurar, y para esto se puede recurrir a unos u otros contenidos, en funci\u00f3n de los contextos: cristianos y musulmanes, sunitas y chiitas, hombres y mujeres, heterosexuales y homosexuales, machistas y metrosexuales, etc. Siempre para desviar la atenci\u00f3n de la distinci\u00f3n fundamental: \u00e9lites de iniciados, amorales, pervertidos, criminales, soci\u00f3patas, por un lado, y pueblos morales, trabajadores, sanos, por otro.<\/p>\n

Tambi\u00e9n ha comprendido Cerise que esta “rivalidad mim\u00e9tica” est\u00e1 en buena medida orquestada por los medios de masas, protagonizada por “im\u00e1genes”, por “palabras-clave” (p. 87). Casi podr\u00edamos hablar de mantras. De nuevo, porque es m\u00e1s importante la forma que el contenido. En \u00faltima instancia lo que se busca es el posicionamiento de unos y otros, a uno y a otro lado de la divisi\u00f3n artificial que es presentada en el escenario del poder, que el propio mecanismo hace real, naturaliza (pp. 344-345). Ficci\u00f3n productora de realidad. Cuanto m\u00e1s cerca estemos de una situaci\u00f3n cr\u00edtica m\u00e1s neta ser\u00e1 est\u00e1 separaci\u00f3n, con mayor intensidad e irracionalidad ser\u00e1n demonizados o divinizados uno u otro bando.<\/p>\n

En lo que hay que insistir es en la estructura espectacular, esc\u00e9nica, medi\u00e1tica, de esta triangulaci\u00f3n. Cerise afirma que, en esta estructura triangular, solo dos de los tres integrantes aparecen en escena (p. 82). La tercera figura, el poder que orquesta la operaci\u00f3n, est\u00e1 por encima del nivel en el que se enfrentan las otras dos partes del tri\u00e1ngulo. De nuevo, seg\u00fan la l\u00f3gica de que la desestructuraci\u00f3n de la base hace posible la reestructuraci\u00f3n de la cumbre:<\/p>\n

“… dividir lo bajo para unificar lo alto. [\u2026] dividir, descentralizar y desorganizar siempre m\u00e1s la base de la pir\u00e1mide social, lo que permite, por un efecto de vasos comunicantes, unificar, centralizar y organizar siempre mejor la cumbre de esta misma pir\u00e1mide social. Acelerar artificialmente la entrop\u00eda de los grupos humanos, intensificando las tendencias centr\u00edfugas que los recorren, para producir por contraste neguentrop\u00eda centr\u00edpeta al nivel del control. En una palabra: \u00abvampirizaci\u00f3n\u00bb. Este es el nombre literario de esta transferencia de energ\u00eda y de informaci\u00f3n” (pp. 320-231).<\/em><\/p>\n

\u00a0<\/em><\/p>\n

En esto, la teor\u00eda de Cerise (pp. 351-353) se acerca mucho a la que hemos propuesto nosotros, bajo el lema del “ojo que todo lo enmascara”. En la pir\u00e1mide mas\u00f3nica, no solo el ojo, esto es, el esp\u00edritu, el control, se ejerce desde arriba hacia abajo. Adem\u00e1s, desde la base de la pir\u00e1mide no se debe comprender lo que hay por encima. La escenificaci\u00f3n de las falsas oposiciones se inscribe en esta estructura piramidal, en esta mec\u00e1nica de enmascaramiento por niveles. De esta manera, los niveles superiores sirven de pantalla a los inferiores. Y finalmente ocultan lo que se esconde en la cumbre: la amoralidad, la perversi\u00f3n, la lascivia, el sadismo, el incesto, la antropofagia, el ritual de sexo y de sangre, el satanismo. Esta estructura piramidal y enmascaradora representa los diversos niveles y jerarqu\u00edas de poder y de control, pero tambi\u00e9n los diversos niveles de comprensi\u00f3n del sistema. Y en este sentido la dimensi\u00f3n espectacular, esc\u00e9nica, medi\u00e1tica, enmascaradora, es clave.<\/p>\n

Cerise est\u00e1 muy cerca de reconocer que lo que opera aqu\u00ed es una mec\u00e1nica sacrificial, pero no da el \u00faltimo paso. El sistema, en su conjunto, se alimenta de s\u00ed mismo, autodestruye su base para\u00a0 recuperar esta materia y esta energ\u00eda y emplearla en la cohesi\u00f3n de su estructura, definida desde la cumbre. El esp\u00edritu, el plan, la cifra, la l\u00f3gica, el valor de cambio, la c\u00e1bala, se alimentan de la muerte de la materia, y al mismo tiempo la enmascaran en su aparato de propaganda, que hoy se extiende a todo. La metaf\u00edsica es, en \u00faltima instancia, antropof\u00e1gica. La trascendencia es un erupto que apesta a carne humana.<\/p>\n

Ya hemos dicho que una de las cosas interesantes de este investigador es su pensamiento transversal, transdisciplinar, multiescalar. Esto se aprecia a menudo, cuando sintetiza en una frase lo que para otros requiere p\u00e1ginas:<\/p>\n

“La definici\u00f3n del capitalismo es: \u00abTodo sistema en el que el dinero es el valor supremo\u00bb (p. 204).”<\/em><\/p>\n

Efectivamente, aqu\u00ed Cerise nos muestra que la clave es entender el capitalismo, el marxismo, el valor de cambio, en relaci\u00f3n con el resto de valores. Lo que han hecho pocos economistas. Esto es lo que se echa de menos a menudo en la casta acad\u00e9mica.<\/p>\n

El franc\u00e9s no pierde de vista en ning\u00fan momento las vinculaciones profundas entre diversos \u00e1mbitos del conocimiento, en particular entre ingenier\u00eda social y capitalismo. Y as\u00ed, nos dice que el objetivo de las \u00e9lites es<\/p>\n

“la abolici\u00f3n de todas las diferencias, salvo las que existen entre las cuentas bancarias” (p. 220).<\/em><\/p>\n

De lo que se trata es de abolir todas las diferencias, de confundir todas las identidades, de vaciar todos los valores. De manera que toda la riqueza, que toda la energ\u00eda que, por as\u00ed decirlo, queda liberada, cargue el valor de cambio, como valor hegem\u00f3nico global que estructura todo el sistema desde la cumbre. Aqu\u00ed vemos el rol central que desempe\u00f1a el dinero fiduciario en el r\u00e9gimen hollycapitalista que hoy padecemos.<\/p>\n

O dicho con otras palabras, el capitalismo es “la abolici\u00f3n de todas las fronteras y de todos los l\u00edmites” (p. 261). Excepto el l\u00edmite del valor de cambio, como unidad de medida y jerarqu\u00eda \u00fanica y universal.<\/p>\n

Insistimos en que lo m\u00e1s interesante de Cerise es pensar al mismo tiempo diversos \u00e1mbitos del saber. As\u00ed, para \u00e9l, el transhumanismo es equivalente al capitalismo integral (p. 262). Diversos movimientos aparentemente heterog\u00e9neos, en realidad confluyen en la agenda transhumanista- hollycapitalista. El feminismo, el homosexualismo, el transgenerismo, el transgenetismo, el animalismo, el minoritarismo, el cibernetismo, etc., son epifen\u00f3menos de un fen\u00f3meno \u00fanico que es la implementaci\u00f3n de la agenda transhumanista. Esto es, del sacrificio del humano, tal como lo entendemos, para crear el transhumano.<\/p>\n

\n

\n

Estamos en guerra<\/h1>\n

\u00a0<\/strong><\/p>\n

Por \u00faltimo, otro de los temas del pensamiento de Cerise que compartimos, y que muestra su lucidez y su compromiso, es que comprenda que “estamos en guerra”:<\/p>\n

“Es necesario no olvidar nunca una cosa: estamos en guerra. Hace falta tener esto muy presente. Tenemos por lo tanto que convertirnos en guerrilleros y librar esta guerra” (pp. 126, 173).<\/em><\/p>\n

Pero aclara que esto no significa que sea necesario hacerlo, por el momento, con armas. La guerra es multidimensional, se libra desde hace d\u00e9cadas contra todos, en todos los frentes, tambi\u00e9n los psicol\u00f3gicos, cognitivos, medi\u00e1ticos, etc.:<\/p>\n

“Estamos en guerra y las armas utilizadas no son exclusivamente materiales” (pp. 337-339).<\/em><\/p>\n

Cerise nos anima a librar esta guerra, pero con racionalidad, frialdad, inteligencia, mesura, nos llama a constituir, tambi\u00e9n, una \u00e9lite intelectual (pp. 173-174).<\/p>\n

Y nos recuerda que esta guerra es m\u00e1s crucial de lo que parece. Pues en definitiva implica el genocidio del ser humano, tal como lo entendemos. Nosotros a\u00f1adimos que se trata, adem\u00e1s de un genocidio, de un sacrificio del humano. Sobre todo de lo humano-social, de la zo\u00e9<\/em>, en todas sus variedades \u2014familia, clan, comunidad, raza, naci\u00f3n, Estado\u2014, y con ello de lo humano-individual, que no es nada sin lo humano-social. En esto la religi\u00f3n del individualismo, que practicamente coincide con la religi\u00f3n del capital, tiene la m\u00e1xima responsabilidad. El individuo es una m\u00e1s de las ficciones, de los mitos, de las creencias, de esta religi\u00f3n contempor\u00e1nea que hoy padecemos.<\/p>\n

Y junto al sacrificio del ser humano \u2014Osiris\u2014, lo que estamos presenciando hoy es la hierogamia de la inteligencia artificial \u2014Isis\u2014 con su cad\u00e1ver, para concebir y dar a luz a un nuevo ser transhumano \u2014Horus\u2014. Esto nos lo ha contando mejor que nadie Stanley Kubrick en “2001: Una odisea del espacio”.<\/p>\n

Pedro Bustamante, 11 enero 2017<\/p>\n

Fuente<\/a><\/p>\n

Libro disponible en AMAZON<\/a><\/p>\n

*A<\/em><\/strong>utor de “Sacrificios y hierogamias: La violencia y el goce en el escenario del poder (1 <\/a>y 2<\/a>)” (2016) y “<\/a>El imperio de la ficci\u00f3n: Capitalismo y sacrificios hollywoodenses” <\/a>(2015). Colabora en diversos medios alternativos como El Robot Pescador,<\/a> El Esp\u00eda Digital<\/a>, Katehon<\/a>, La Caja de Pandora<\/a> y Csijuan.<\/a><\/em><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

“La novedad del siglo XX reside en que se pasa de un control social a trav\u00e9s del orden a un control social a trav\u00e9s del desorden. El orden a partir del caos.” LUCIEN CERISE   Reflexiones sobre la ingenier\u00eda social     VER TEXTO COPMPLETO EN PDF: neuro-piratas-lucien-cerise   Le\u00edmos...<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":3257,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[1376,2608,1381,1366],"tags":[2294,1849,2609,2611,2610],"class_list":["post-3256","post","type-post","status-publish","format-standard","has-post-thumbnail","hentry","category-analisis","category-cerise-lucien","category-ingenieria_social-propaganda-minorias-genero-cambio_climatico","category-all","tag-hollywood","tag-ingenieria-social","tag-orden-caos","tag-transexualismo","tag-transhumanismo"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/3256","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=3256"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/3256\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":3259,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/3256\/revisions\/3259"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/media\/3257"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=3256"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=3256"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/redinternacional.net\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=3256"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}

VER TEXTO COPMPLETO EN PDF: neuro-piratas-lucien-cerise<\/a><\/em><\/strong><\/p>\n