{"id":2254,"date":"2018-05-18T17:17:14","date_gmt":"2018-05-18T17:17:14","guid":{"rendered":"https:\/\/redinternacional.net\/?p=2254"},"modified":"2018-05-18T17:17:14","modified_gmt":"2018-05-18T17:17:14","slug":"bienvenidos-al-mundo-en-que-las-empresas-disfrutan-de-la-vigilancia-permanente-de-sus-trabajadores","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/redinternacional.net\/2018\/05\/18\/bienvenidos-al-mundo-en-que-las-empresas-disfrutan-de-la-vigilancia-permanente-de-sus-trabajadores\/","title":{"rendered":"Bienvenidos al mundo en que las empresas disfrutan de la vigilancia permanente de sus trabajadores"},"content":{"rendered":"
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\"trabajador-logistico-Amazonsdfhsdfh\"<\/p>\n

Desde implantes con microchips hasta pulseras con rastreadores y sensores que detectan el cansancio y la depresi\u00f3n, las nuevas tecnolog\u00edas permiten a los empleadores vigilar a sus trabajadores cada vez de forma m\u00e1s intensa<\/p>\n

“Como esta vigilancia se puede hacer de forma retrospectiva para despedir a la gente, se usa para hacerles sentir que podr\u00edan perder su trabajo en cualquier momento”, dice un soci\u00f3logo que trabaj\u00f3 como teleoperador<\/p>\n

Una empresa estadounidense implant\u00f3 microchips a decenas de trabajadores<\/a> el a\u00f1o pasado. En aquella ‘fiesta del chip’ que fue noticia en todo el mundo, los empleados hicieron cola para que les colocaran entre el dedo pulgar y el \u00edndice un dispositivo del tama\u00f1o de un grano de arroz bajo la piel.<\/p>\n

Cuando a Todd Westby, consejero delegado de Three Square Market, se le ocurri\u00f3 la idea pens\u00f3 que s\u00f3lo cinco o seis personas se ofrecer\u00edan como voluntarias: \u00e9l, dos o tres directores y algunos de los empleados del departamento de inform\u00e1tica. Pero de las noventa personas que trabajan en la sede de Three Square Market, 72 tienen ahora el chip (Westby tiene uno en cada mano). Los usan para abrir puertas de seguridad, conectarse a ordenadores y hacer pagos en las m\u00e1quinas expendedoras de la compa\u00f1\u00eda.<\/p>\n

\u00bfSe imagina Westby este concepto extendi\u00e9ndose a muchas otras empresas? “No necesariamente”, dice. O a\u00fan no, por lo menos.<\/p>\n

El consejero delegado cree que, en parte, se debe a una diferencia generacional. “Tal vez t\u00fa nunca quieras tener un chip, pero si eres millennial<\/i>, no hay problema. Para ellos es guay”.<\/p>\n

Los microchips tienen otros usos. Three Square Market (que se dedica a vender m\u00e1quinas expendedoras y quioscos) comenz\u00f3 hace dos meses a pon\u00e9rselos a personas con demencia en Puerto Rico. Si alguien se pierde y la polic\u00eda lo encuentra, puede escanear su microchip “y tener acceso a todo su historial m\u00e9dico, a las medicinas que pueden y no pueden tomar, a su identidad”. Hasta ahora, la empresa le ha puesto microchips a cien personas, pero planea hacerlo con diez mil.<\/p>\n

La compa\u00f1\u00eda acaba de lanzar una aplicaci\u00f3n para tel\u00e9fonos m\u00f3viles que empareja el chip con el GPS del tel\u00e9fono y rastrea la ubicaci\u00f3n de la persona. La semana pasada comenzaron a utilizarlo con personas en libertad condicional, en vez de las tobilleras electr\u00f3nicas que Westby describe como “intimidantes y degradantes”.<\/p>\n

\u00bfSe imagina que un d\u00eda la empresa pueda usar el GPS para rastrear a sus empleados con el implante? “No. No hay raz\u00f3n para hacerlo”, responde Westby.<\/p>\n

No todas las empresas est\u00e1n de acuerdo. Las tecnol\u00f3gicas est\u00e1n ideando formas cada vez m\u00e1s extra\u00f1as e intrusivas de control del personal. La semana pasada The Times<\/i> inform\u00f3 de que algunas empresas chinas est\u00e1n usando cascos y sombreros con sensores para escanear las ondas cerebrales de sus trabajadores y detectar cansancio, estr\u00e9s y hasta emociones como la ira. El art\u00edculo tambi\u00e9n hablaba de una empresa el\u00e9ctrica que decid\u00eda el n\u00famero y duraci\u00f3n de las pausas de los trabajadores en funci\u00f3n de sus ondas cerebrales. La tecnolog\u00eda se est\u00e1 usando en conductores de trenes de alta velocidad para “detectar el agotamiento y la p\u00e9rdida de atenci\u00f3n”.<\/p>\n

Aunque pueda haber aplicaciones de seguridad leg\u00edtimas (un proyecto similar se llev\u00f3 a cabo con las pulseras para detectar cansancio de los trabajadores de Crossrail<\/a>), es f\u00e1cil imaginar c\u00f3mo este tipo de tecnolog\u00edas se infiltra en otras \u00e1reas.<\/p>\n

N\u00famero de teclas pulsadas por minuto<\/strong><\/p>\n

En febrero se supo que Amazon hab\u00eda patentado una pulsera que no s\u00f3lo rastrea la ubicaci\u00f3n de los trabajadores dentro del almac\u00e9n mientras recogen<\/i> los art\u00edculos, sino que adem\u00e1s puede leer<\/i> los movimientos de sus manos, zumbando o emitiendo un pulso para alertarlos cuando se est\u00e1n equivocando de caja.<\/p>\n

En el registro de la patente, Amazon lo describe como un dispositivo capaz de “supervisar el desempe\u00f1o de la colocaci\u00f3n de los art\u00edculos de inventario en el lugar de almacenamiento identificado por el trabajador del sistema de inventario”.<\/p>\n

Hay compa\u00f1\u00edas de tecnolog\u00eda vendiendo productos que toman capturas de pantalla del trabajo de los empleados a intervalos regulares, controlan sus pulsaciones de teclas y uso de la web, y hasta los fotograf\u00edan en sus mesas con la c\u00e1mara web del ordenador. Trabajar desde casa no es ninguna protecci\u00f3n contra esa vigilancia porque se puede hacer de forma remota. El software puede supervisar el uso de las redes sociales, analizar el idioma o instalarse en los tel\u00e9fonos de los empleados para supervisar aplicaciones cifradas como WhatsApp. Los empleados pueden llevar dispositivos que no s\u00f3lo rastrean su ubicaci\u00f3n, sino que tambi\u00e9n siguen su tono de voz, la frecuencia con la que hablan en las reuniones, con qui\u00e9n y durante cu\u00e1nto tiempo.<\/p>\n

Los empleados han sido vigilados en el trabajo desde siempre y vali\u00e9ndose de la tecnolog\u00eda. Pero como dice Andr\u00e9 Spicer, profesor de comportamiento en las organizaciones de la Cass Business School, si antes era el capataz de la f\u00e1brica con un cron\u00f3metro, o la m\u00e1quina en la que se fichaba f\u00edsicamente al entrar y salir, ahora “todo ese material f\u00edsico ha pasado a ser tecnolog\u00eda digital”. “Detecta cosas que antes no se pod\u00edan detectar, como el n\u00famero de teclas que pulsan los empleados, lo que miran en su pantalla mientras trabajan, el tipo de lenguaje que usan. Y ahora la vigilancia te sigue fuera del lugar de trabajo”.<\/p>\n

\u00bfEs legal? Seg\u00fan Philip Landau, socio especializado en Derecho laboral de Landau Law Solicitors, los empleadores de Reino Unido tienen derecho a controlar las webs que los empleados visitan mientras trabajan. “No obstante, el dispositivo bajo control deber\u00e1 ser parcial o totalmente suministrado por el empleador. Los empleadores tambi\u00e9n deben avisar por adelantado si van a controlar la actividad en Internet y tienen que informar al trabajador sobre la pol\u00edtica en redes sociales de la empresa”.<\/p>\n

Tambi\u00e9n es legal controlar las pulsaciones de teclas, aunque de nuevo hay que decirle a los empleados que ser\u00e1n vigilados. “En las empresas con este sistema, es com\u00fan que los empleadores hablen con los empleados cuando creen que su n\u00famero de pulsaciones es bajo”, dice Landau. “Hay que destacar que un alto n\u00famero de pulsaciones no significa necesariamente altos niveles de productividad, y viceversa”.<\/p>\n

En teor\u00eda, las empresas tambi\u00e9n podr\u00edan usar la c\u00e1mara web del ordenador para ver cuando el trabajador est\u00e1 en su escritorio, pero “deber\u00eda haber una justificaci\u00f3n para tal vigilancia y deber\u00edan informar (al empleado) de antemano. Tambi\u00e9n se le debe decir para qu\u00e9 se usar\u00e1n las fotos y c\u00f3mo se almacenar\u00e1n”.<\/p>\n

En cuanto al rastreo por GPS, “una empresa puede rastrear cualquier veh\u00edculo del que provea a su personal, pero los datos recogidos s\u00f3lo deben usarse con fines de gesti\u00f3n de la empresa. No se permite activar ning\u00fan dispositivo GPS si el empleado est\u00e1 usando el veh\u00edculo por razones personales fuera del trabajo”.<\/p>\n

\u201cEra imposible cumplir los objetivos sin correr\u201d<\/strong><\/p>\n

James Bloodworth trabaj\u00f3 en marzo de 2016 durante un mes como “recolector” de Amazon (la persona que localiza los productos pedidos) como parte de la preparaci\u00f3n de su libro Hired: Six Months Undercover in Low-Wage Britain<\/a><\/i> (Contratado: seis meses encubierto en la Gran Breta\u00f1a de los salarios bajos).<\/p>\n

“Llev\u00e1bamos todo el rato un dispositivo port\u00e1til que controlaba la productividad”, dice. En uno de los gigantescos almacenes de Amazon, el dispositivo serv\u00eda para orientar a los trabajadores hacia las estanter\u00edas con los art\u00edculos que necesitaban. “Cada vez que recog\u00edas uno se activaba una cuenta atr\u00e1s (para llegar al siguiente art\u00edculo) que med\u00eda tu productividad”. Seg\u00fan Bloodworth, los supervisores informaban a los empleados sobre su productividad. A \u00e9l le advirtieron de que estaba en el 10% inferior.<\/p>\n

“Tambi\u00e9n te enviaban avisos a trav\u00e9s del dispositivo diciendo que ten\u00edas que aumentar tu productividad. Eres constantemente rastreado y clasificado. Descubr\u00ed que era imposible cumplir los objetivos de productividad sin correr, pero tambi\u00e9n te dec\u00edan que no estaba permitido correr, y que si lo hac\u00edas, recibir\u00edas una sanci\u00f3n disciplinaria. Pero si te retrasabas en productividad, tambi\u00e9n recib\u00edas una sanci\u00f3n disciplinaria”.<\/p>\n

No parec\u00eda “que te trataran como a un ser humano”, dice.<\/p>\n

Al entrar y al salir, los trabajadores ten\u00edan que pasar por esc\u00e1neres de seguridad como los de los aeropuertos. Tambi\u00e9n para llegar a las \u00e1reas de descanso. Ir al ba\u00f1o, cuenta Bloodworth, era considerado “tiempo muerto”. Una vez encontr\u00f3 una botella con orina en uno de las estanter\u00edas del almac\u00e9n.<\/p>\n

Amazon dice que sus dispositivos de escaneado “son comunes en todo el sector de almacenes y log\u00edstica, as\u00ed como en supermercados, grandes almacenes y otros negocios\u201d. \u201cEst\u00e1n dise\u00f1ados para ayudar a nuestra gente en el desempe\u00f1o de sus funciones”. Tambi\u00e9n asegura que “todos sus asociados tienen f\u00e1cil acceso a los ba\u00f1os, que est\u00e1n muy cerca de su lugar de trabajo”. La empresa a\u00f1ade: “Los asociados pueden usar el ba\u00f1o cuando lo necesiten. No controlamos los descansos para ir al ba\u00f1o”.<\/p>\n

Bloodworth cuenta que a algunos de sus colegas les enfadaba el nivel de vigilancia, “pero predominaba el cinismo y la resignaci\u00f3n\u201d. \u201cLa mayor\u00eda de las personas que conoc\u00ed no llevaban mucho tiempo en el trabajo o estaban buscando otro. Todos los contratos eran temporales y el personal cambiaba constantemente”.<\/p>\n

\u00bfHa visto Bloodworth el futuro? \u00bfNuestros jefes nos vigilar\u00e1n as\u00ed a todos en los pr\u00f3ximos a\u00f1os? \u201cPosiblemente\u201d, dice. “Una de las cosas que han surgido en respuesta al libro es que la gente dice que el trabajo va a ser automatizado de todos modos, o que los trabajadores necesitan ser m\u00e1s flexibles, como si el camino del futuro fuera as\u00ed y fuera inevitable, algo que me parece bastante peligroso. Amazon puede salirse con la suya gracias a decisiones pol\u00edticas y porque el movimiento sindical es muy d\u00e9bil. Creo que otros negocios observar\u00e1n a Amazon, ver\u00e1n que tuvo \u00e9xito con ese modelo de negocios y tratar\u00e1n de replicarlo”.<\/p>\n

\u201cPantallas de televisi\u00f3n mostrando el rendimiento\u201d<\/strong><\/p>\n

Para escribir su libro Working the Phones<\/a><\/i> (Trabajando en los tel\u00e9fonos), el soci\u00f3logo del Oxford Internet Institute especializado en sociolog\u00eda del trabajo Jamie Woodcock pas\u00f3 seis meses empleado como teleoperador. Te das cuenta de la vigilancia “desde el momento en que entras\u201d, dice. \u201cHay pantallas de televisi\u00f3n mostrando el rendimiento relativo de cada trabajador. Los directores recopilan datos sobre casi todo lo que haces. Cada llamada que hice fue grabada y almacenada digitalmente. En t\u00e9rminos de control, es como recuperar todas las partes que alguien hizo en una l\u00ednea de montaje y juzgarlas retrospectivamente por su calidad. Todos cometemos errores y todos tenemos d\u00edas malos, pero, como este tipo de vigilancia se puede hacer de forma retrospectiva para despedir a la gente, se usa para hacerles sentir que podr\u00edan perder su trabajo en cualquier momento”.<\/p>\n

La supervisi\u00f3n est\u00e1 incorporada en muchos de los puestos de trabajo que forman la llamada “econom\u00eda de los peque\u00f1os encargos\u201d (gig economy)<\/i>. No es f\u00e1cil oponerse a la vigilancia constante cuando est\u00e1s desesperado por trabajar. Lo que ha sorprendido a Spicer es lo dispuestos que se han mostrado los empleados en trabajos mejor pagados. “Antes, a los prisioneros les obligaban a usar pulseras de rastreo, pero ahora nos ponemos voluntariamente rastreadores de pasos y otros dispositivos de seguimiento proporcionados por nuestros empleadores, y en algunos casos, hasta pagamos por el privilegio”. Empresas como IBM, BP, Bank of America, Target y Barclays han ofrecido a sus empleados las pulseras Fitbit de rastreo de actividad<\/a>.<\/p>\n

Seg\u00fan Spicer, profesor de comportamiento, en parte tiene que ver con \u201ctoda esta idea de querer optimizarse o mejorar\u201d. \u201cUna gran cantidad de tecnolog\u00eda ha sido dise\u00f1ada no s\u00f3lo para dar al jefe los datos de su rendimiento, sino tambi\u00e9n para d\u00e1rselos a usted. Supongo que la tecnolog\u00eda tambi\u00e9n es vista como algo guay o de moda, as\u00ed que no es de extra\u00f1ar que se acepte con tanta facilidad”.<\/p>\n

Spicer ha detectado que se ha pasado de \u201csupervisar algo como los correos electr\u00f3nicos a supervisar los cuerpos de las personas, es decir, el aumento de la biovigilancia o la supervisi\u00f3n de tus signos vitales, emociones y estados de \u00e1nimo”. Sobre la estrategia de Three Square Market de instalar un chip a sus empleados, dice: “Es posible imaginar estas cosas extendi\u00e9ndose lentamente. Es posible imaginar a los jefes del futuro pidiendo conocer tu ADN y otros datos”.<\/p>\n

La vigilancia puede tener aplicaciones beneficiosas. Es necesaria (y legalmente requerida) en la industria financiera para evitar el uso de informaci\u00f3n privilegiada. Podr\u00eda usarse para evitar el acoso y la intimidaci\u00f3n y para erradicar prejuicios y discriminaci\u00f3n. En un interesante estudio de 2017<\/a> se supervisaron los correos electr\u00f3nicos y la productividad aplicando sensores para rastrear el comportamiento y la interacci\u00f3n con la gerencia. El descubrimiento fue que los hombres y las mujeres se comportaban de manera casi id\u00e9ntica en el trabajo. Los hallazgos cuestionan la creencia de que las mujeres no ascienden porque son menos proactivas o porque tienen menos interacciones con los l\u00edderes y que simplemente necesitan “ser firmes”.<\/p>\n

Aun as\u00ed, dice Woodcock, “necesitamos iniciar un debate sobre si queremos o no que el trabajo sea un lugar en el que est\u00e9s vigilado”. Esta necesidad es quiz\u00e1 m\u00e1s urgente para los empleos mal pagados e inseguros. “Si trabajas en la econom\u00eda de los peque\u00f1os encargos, tienes un tel\u00e9fono inteligente”, se\u00f1ala Woodcock, y con ese tel\u00e9fono inteligente te pueden rastrear. “Como muchos de estos lugares de trabajo no tienen formas tradicionales de organizaci\u00f3n ni sindicatos, la direcci\u00f3n es capaz de introducir estas medidas con una resistencia colectiva relativamente peque\u00f1a”.<\/p>\n

El caso de Uber, \u00bfalimentando algoritmos?<\/strong><\/p>\n

El Sindicato de Trabajadores Independientes de Gran Breta\u00f1a est\u00e1 muy al tanto de todo lo relativo a la supervisi\u00f3n y la recopilaci\u00f3n de datos. James Farrar es el conductor de Uber que el a\u00f1o pasado gan\u00f3 una batalla legal contra la compa\u00f1\u00eda por los derechos de los conductores (tambi\u00e9n preside su delegaci\u00f3n de la asociaci\u00f3n United Private Hire Drivers).<\/p>\n

“Recopilan una cantidad enorme de informaci\u00f3n”, dice. “Una de las cosas de las que te informan diariamente es lo buenos que han sido tu aceleraci\u00f3n y frenado. Te ponen una nota. La pregunta es: \u00bfpor qu\u00e9 est\u00e1n recogiendo esa informaci\u00f3n?”. Uber tambi\u00e9n supervisa los “movimientos inusuales” del tel\u00e9fono cuando alguien est\u00e1 conduciendo (para saber si usa su tel\u00e9fono mientras est\u00e1 al volante) y, por supuesto, rastrea los coches y los conductores por GPS.<\/p>\n

“Lo que me preocupa es que esta informaci\u00f3n est\u00e9 alimentando el algoritmo\u201d que decide la asignaci\u00f3n de conductores, dice. “Deber\u00edamos tener acceso a los datos y entender c\u00f3mo se usan. Si alg\u00fan tipo de puntuaci\u00f3n de calidad sobre mi capacidad de conducci\u00f3n (se mete en un algoritmo), tal vez se me ofrezca un trabajo menos valioso, alejado de los clientes m\u00e1s valiosos, \u00bfqui\u00e9n sabe?”.<\/p>\n

No es un miedo irracional. La empresa de distribuci\u00f3n de comidas preparadas Deliveroo ya hace algo similar. Supervisando el rendimiento de sus ciclistas, motoristas y conductores, ha empezado a ofrecer “acceso prioritario” en la reserva de turnos a los que “dan el servicio m\u00e1s coherente y de mayor calidad<\/a>“.<\/p>\n

Uber dice que su seguimiento s\u00f3lo es para conseguir “una conducci\u00f3n m\u00e1s suave y segura… Los datos se utilizan para informar a los conductores sobre sus h\u00e1bitos de conducci\u00f3n y no se usan para influir sobre futuras solicitudes de viaje”.<\/p>\n

No toda la vigilancia es mala, dice Farrar. En algunos casos, le gustar\u00eda que hubiera m\u00e1s. Cuando le agredi\u00f3 un pasajero pidi\u00f3 que se instalasen sistemas de videovigilancia en todos los veh\u00edculos, en parte por la seguridad de los conductores. “La tecnolog\u00eda de vigilancia desempe\u00f1a un papel importante”, dice.<\/p>\n

Ir\u00f3nicamente, cuando Farrar se reuni\u00f3 con Uber para hablar sobre la agresi\u00f3n, la compa\u00f1\u00eda le hizo apagar su tel\u00e9fono para asegurarse de que no estaba grabando.<\/p>\n

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Traducido por Francisco de Z\u00e1rate, 16 mayo 2018
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Fuente traduccion <\/a><\/p>\n

Fuente original THEGUARDIAN<\/a><\/a><\/p>\n

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