{"id":1342,"date":"2018-04-23T18:47:05","date_gmt":"2018-04-23T18:47:05","guid":{"rendered":"https:\/\/redinternacional.net\/?p=1342"},"modified":"2018-04-23T19:31:02","modified_gmt":"2018-04-23T19:31:02","slug":"la-verdad-sobre-el-wahhabismo-desde-los-saud-hasta-el-daesh-por-youssef-hindi","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/redinternacional.net\/2018\/04\/23\/la-verdad-sobre-el-wahhabismo-desde-los-saud-hasta-el-daesh-por-youssef-hindi\/","title":{"rendered":"La verdad sobre el wahhabismo: desde los Saud hasta el DAESH – por Youssef Hindi"},"content":{"rendered":"
<\/p>\n
Este texto es una aclaraci\u00f3n que se apoya en documentos y hechos hist\u00f3ricos s\u00f3lidos e indiscutibles, lejos de la narraci\u00f3n saudita. Me vino impuesto despu\u00e9s de que una serie de j\u00f3venes musulmanes, habiendo adquirido una educaci\u00f3n religiosa y certezas a trav\u00e9s de youtube, me reclamaran pruebas en cuanto a lo que manifest\u00e9 acerca de la historia y la doctrina wahhabita, de la cual aparentemente ignoran todo, aferr\u00e1ndose a la f\u00e1bula que les cuentan los wahhabitas, acerca de que Mohamed Ibn Abd al-Wahhab habr\u00eda revivificado la religi\u00f3n musulmana, y habr\u00eda sido un fundamentalista que llam\u00f3 a los musulmanes a regresar al verdadero Islam.<\/p>\n
No volver\u00e9 aqu\u00ed sobre la alianza fundacional entre Mohamed Ibn Abd al-Wahhab y la tribu de Saud, las diferentes fases de expansi\u00f3n de los wahhabo-saud\u00edes (desde mediados del siglo XVIII hasta el establecimiento del \u00faltimo reino saudita en 1932), las grandes masacres que las acompa\u00f1aron [1] \u2013 que han servido de modelo para el Ej\u00e9rcito Libre de Siria (FSA), Al-Nosra (Al Qaeda) y Daesh \u2026 \u2013 el apoyo que los wahhabo-saud\u00edes recibieron de los brit\u00e1nicos, luego de los estadounidenses, combinado con el patrocinio de los petrod\u00f3lares, a fin de hacer de la nueva doctrina wahhabita la nueva ortodoxia del Islam. Por no hablar de c\u00f3mo los reformistas del Islam, los disc\u00edpulos de Muhammad Abdu, incluyendo a Rashid Ridha (el maestro de Hassan al-Banna), previamente promovieron y legitimaron, con el dinero de los Saud, el wahhabismo en los pa\u00edses \u00e1rabes.<\/p>\n
Todo esto lo expliqu\u00e9 en mi libro Occident et Islam \u2013 Sources et gen\u00e8se messianiques du sionisme [Islam y Occidente \u2013 Fuentes y or\u00edgenes mesi\u00e1nicos del sionismo], situando en una perspectiva hist\u00f3rica, escatol\u00f3gica y geopol\u00edtica, el papel del wahhabismo y del reformismo isl\u00e1mico, cuyo origen es, como he explicado, mesi\u00e1nico.<\/p>\n
Me limitar\u00e9 aqu\u00ed a los inicios del wahhabismo, a su doctrina y a la actitud de los grandes eruditos y muft\u00edes contempor\u00e1neos de Mohamed Ibn Abd al-Wahhab, para ofrecer un punto de vista exclusivamente isl\u00e1mico sobre el wahhabismo.<\/p>\n
Mohamed Ibn Abd al-Wahhab y su doctrina<\/strong><\/p>\n Mohamed Ibn Abd al-Wahhab [2] (1703-1792) naci\u00f3 en una familia de eruditos; su padre, Abd al-Wahhab, era un juez respetado de quien aprendi\u00f3 los fundamentos de la teolog\u00eda, pero antes de acabar sus estudios abandon\u00f3 su tierra natal (el Nayd) para encontrar maestros con los que poder estudiar. Primero visita el Hiyaz (regi\u00f3n de La Meca y Medina), y regresa a su casa antes de salir hacia Irak, a Basora (ciudad principalmente chi\u00edta). Despu\u00e9s de una estancia de cuatro a\u00f1os, alrededor de 1727 fue expulsado, y regresa al Nayd, en la provincia de Huraymala, donde se encuentra su padre.<\/p>\n Alrededor de 1740 escribi\u00f3 su obra m\u00e1s famosa: El libro de la unicidad divina (de s\u00f3lo 50 p\u00e1ginas), y decide predicar p\u00fablicamente, pero su padre se lo impide; m\u00e1s adelante entenderemos por qu\u00e9. Por otra parte, la tradici\u00f3n contemplaba que el hijo mayor del juez sucediera a \u00e9ste, sin embargo, el padre de Mohamed Ibn Abd al-Wahhab nombr\u00f3 en su lugar a su hermano menor, Suleim\u00e1n, que sucedi\u00f3 as\u00ed a su padre en el cargo de juez. De hecho, Mohamed Ibn Abd al-Wahhab fue repudiado por su padre.<\/p>\n Mohamed Ibn Abd al-Wahhab<\/strong><\/p>\n Si usted quiere, como Oliver Cromwell (1599-1658) o Ibn Abd al-Wahhab, imponer una nueva ideolog\u00eda para subvertir una religi\u00f3n mayoritaria y bien establecida, debe comenzar por presentarse como un fundamentalista \u2013 en el sentido de un retorno a la pureza original -, y al mismo tiempo se\u00f1alar con el dedo a sus \u201ccorreligionarios\u201d como una desviaci\u00f3n en relaci\u00f3n a los fundamentos de la religi\u00f3n de la que usted pretende ser el revivificador y el representante.<\/p>\n Esto es precisamente lo que hizo Ibn Abd al-Wahhab. En su obra, El Libro de la unicidad divina \u2013 pobre desde el punto de vista intelectual y teol\u00f3gico \u2013 enuncia banalidades relativas a la unicidad divina, dogma fundamental de la fe monote\u00edsta que es familiar a todo musulm\u00e1n de ayer y de hoy. Pero el prop\u00f3sito del libro de Ibn Abd al-Wahhab no era, como \u00e9l pretend\u00eda, restaurar los fundamentos de la fe que los musulmanes habr\u00edan olvidado, sino m\u00e1s bien acusarlos de ser asociacionistas [id\u00f3latras], imp\u00edos y no creyentes, con el objetivo de imponerles su doctrina.<\/p>\n Acus\u00f3 abiertamente a los musulmanes de Arabia y de las zonas circundantes de ser paganos, adoradores de los santos y de sus tumbas.<\/p>\n Por ello, en 1740 comenz\u00f3 a enviar cartas a sus partidarios como a sus enemigos y a los musulmanes en general. Estas cartas, de las que incluyo a continuaci\u00f3n un extracto, contienen amenazas veladas as\u00ed como la sombra de la excomuni\u00f3n (takfir):<\/p>\n \u201cLa creencia dominante en la santidad (hace alusi\u00f3n a los santos que los musulmanes veneraban) y cosas semejantes es el asociacionismo. Si usted est\u00e1 convencido, usted debe saber tambi\u00e9n que los que dicen que har\u00edamos mejor en dejar de acusar a la gente de impiedad y en hacerles la guerra se equivocan. Le aconsejamos solamente conocer y aplicar la religi\u00f3n de Dios y de su Profeta, es decir, si usted pertenece a la comunidad de Muhammad\u201d [3].<\/p>\n En estas pocas l\u00edneas, acusa al conjunto de los musulmanes de asociacionismo (shirk) y de impiedad, y los amenaza con hacerles la guerra si no se someten a \u00e9l.<\/p>\n Sin embargo, el Profeta Muhammad dijo (hadiz muy conocido y aut\u00e9ntico): \u201cMi comunidad nunca se pondr\u00e1 de acuerdo sobre un error\u201c.<\/p>\n Por lo tanto, Mohamed Ibn Abd al-Wahhab, seg\u00fan este hadiz, no podr\u00eda estar en el camino de la Verdad y los musulmanes en el error.<\/p>\n El movimiento hoy llamado takfiri, proviene precisamente de esta doctrina de excomuni\u00f3n erigida por el beduino Ibn Abd al-Wahhab. Takfir significa excomulgar; el movimiento takfiri excomulga a toda persona que no comparta las ideas del wahhabismo, lo que justifica seg\u00fan ellos la ejecuci\u00f3n del \u201cimp\u00edo\u201d. Un arma pol\u00edtica tan cruel como eficaz.<\/p>\n Pero el Profeta Muhammad dijo acerca del que dice que un musulm\u00e1n es un incr\u00e9dulo: \u201cCuando un musulm\u00e1n dice de su hermano que es un incr\u00e9dulo, uno de los dos lo es necesariamente. Si el hombre es tal y como se le describe, ser\u00e1 tratado como tal, si no, la acusaci\u00f3n se volver\u00e1 contra \u00e9l (quien la pronunci\u00f3)\u201d [4].<\/p>\n La combinaci\u00f3n de estos dos \u00fanicos hadices del Profeta bastar\u00eda para concluir que Ibn Abd al-Wahhab era un incr\u00e9dulo. Lo que est\u00e1 en consonancia con las opiniones de todos los eruditos de su tiempo que se pronunciaron sobre su caso (me pondr\u00e9 a ello a continuaci\u00f3n).<\/p>\n En una de sus cartas, Ibn Abd al-Wahhab expone su sistema de excomuni\u00f3n y designa a aquellos sobre los que recae la acusaci\u00f3n de impiedad. De un modo bastante h\u00e1bil, pero sin ning\u00fan fundamento teol\u00f3gico-jur\u00eddico, extiende el \u00e1mbito de la excomuni\u00f3n a todos aquellos que no comparten su opini\u00f3n:<\/p>\n \u201cEl que conoce la unicidad divina y no act\u00faa en consecuencia es un infiel, obstinado como el Fara\u00f3n o Satan\u00e1s. Y el que declara inocente al culpable de un acto tal, ya se trate de los Antiguos o de los imp\u00edos de nuestro tiempo, \u00a1\u00e9l mismo es un infiel! Todos ellos son culpables de gran impiedad, es decir, de asociacionismo\u201d [5].<\/p>\n Ibn Abd al-Wahhab incluye en el asociacionismo toda una serie de actos que juzga imp\u00edos y no deja ninguna escapatoria al musulman \u201cculpable\u201d, sino la de la excomuni\u00f3n.<\/p>\n Esta nueva doctrina, que no se funda sobre ninguna ciencia isl\u00e1mica, no deja de sorprender a los eruditos contempor\u00e1neos de Ibn Abd al-Wahhab.<\/p>\n Mohamed Ibn Abd al-Wahhab excomulgado por los eruditos<\/strong><\/p>\n Lo que los musulmanes y los partidarios del wahhabismo ignoran hoy es que la totalidad de los grandes eruditos de la \u00e9poca de Ibn Abd al-Wahhab lo desautoriz\u00f3, no reconoci\u00e9ndole ninguna cualificaci\u00f3n teol\u00f3gica y acus\u00e1ndolo de ser un innovador, un extraviado, un hip\u00f3crita, un ateo, un taimado, un manipulador y un falso profeta [6].<\/p>\n Estas acusaciones extremadamente graves que ven\u00edan de los estudiosos y de los muft\u00edes de Arabia, de Irak y de Yemen, se hicieron, en la mayor\u00eda de los casos, sin concertaci\u00f3n, lo que les da m\u00e1s valor todav\u00eda (volver\u00e9 sobre ello). Todos los eruditos que lo refutaron lo declararon her\u00e9tico, le denegaron el estatus de erudito muytahid (habilitado para interpretar el Cor\u00e1n) y constataron que no dominaba la docena de ciencias religiosas. Los eruditos no se detuvieron all\u00ed, refutaron una por una las tesis de Ibn Abd al-Wahhab, demostrando as\u00ed que es un hereje y un inculto ignorante de los fundamentos mismos de la teolog\u00eda [7].<\/p>\n Comenzar\u00e9 con el propio hermano de Mohamed Ibn Abd al-Wahhab, Suleim\u00e1n (que era magistrado en Huraymala), que le escribi\u00f3 lo siguiente en una carta que le dirigi\u00f3 alrededor de 1753 y cuyo t\u00edtulo es Los Rayos divinos refutan el wahhabismo (es a Suleim\u00e1n Ibn Abd al-Wahhab a quien le corresponde la paternidad del neologismo wahhabismo):<\/p>\n \u201cDurante ocho a\u00f1os ninguna persona es musulm\u00e1n salvo las tierras que te obedecen\u2026 \u00a1Que Dios nos guarde a todos del extrav\u00edo!\u201d [8].<\/p>\n Suleim\u00e1n interpela a su hermano y le plantea esta pregunta: \u201c\u00bfCu\u00e1l es el n\u00famero de los pilares del Islam?\u201c. Mohamed respondi\u00f3 \u201ccinco\u201c, a lo que Suleim\u00e1n replic\u00f3:\u201d\u00bfPor qu\u00e9 entonces este sexto pilar sobre la impiedad de los musulmanes?\u201d [9].<\/p>\n Entre 1740 y 1745, al comienzo de la predicaci\u00f3n de Mohamed Ibn Abd al-Wahhab, el magistrado y mufti \u2013 el mufti tiene una autoridad jur\u00eddica, est\u00e1 autorizado a emitir opiniones legales (fatwas) \u2013 de Riad, Suleim\u00e1n Ibn Suhaym (1717 -1767), despu\u00e9s de un intercambio epistolar con Ibn Abd al-Wahhab, escribi\u00f3 una carta a los eruditos saud\u00edes:<\/p>\n \u201cTraigo a su conocimiento que un innovador apareci\u00f3 en nuestro pa\u00eds, un ignorante, un extraviado que extrav\u00eda, sin ciencia, sin piedad; ha cometido fechor\u00edas temibles de las que algunas ya se han propagado, y otras todav\u00eda se limitan a nuestro pa\u00eds. Quiero informar justamente a los ulemas (los eruditos), herederos de los profetas, para que pongan fin a su extrav\u00edo y a su ignorancia. Ha destruido las tumbas y ha quemado los libros de oraciones populares; afirma que, si pudiera, destruir\u00eda la Piedra Negra de la Kaaba; considera que la gente desde hace seiscientos a\u00f1os est\u00e1 en la ignorancia\u2026 Pero \u00bfde d\u00f3nde saca este saber? \u00bfRecibi\u00f3 la revelaci\u00f3n? \u00bfO el diablo le sopl\u00f3? \u00a1Os lo ruego! \u00a1Hac\u00e9rselo saber a la pobre gente que sedujo mediante artificios, y solucionarlo con urgencia antes de que sea demasiado tarde!\u201d [10].<\/p>\n En la regi\u00f3n de Ahsa, un erudito llamado Al-\u2018Afaleq (muerto en 1751) atac\u00f3 a Ibn Abd al-Wahhab en una carta titulada Los tradicionalistas se burlan del que pretende renovar la religi\u00f3n. En 1745, el mismo Al-\u2018Afaleq redacta una respuesta al libro de Ibn Abd al-Wahhab (El libro de la unicidad divina) sobre el que dice:<\/p>\n \u201cLa unicidad divina es un credo al respecto del cual la umma (la comunidad musulmana) es un\u00e1nime (conforme al hadiz del Profeta antes citado), excepto este falso profeta\u201d [11].<\/p>\n Otro estudioso, al-Hudari en un libelo que difunde, escribe:<\/p>\n \u201cRespecto a la refutaci\u00f3n del innovador Ibn Abd al-Wahhab, que opera ahora mismo en Najd, persistiendo en su extrav\u00edo y su obstinaci\u00f3n\u2026\u201d [12].<\/p>\n Eso en cuanto a las refutaciones que llegaron de Nayd (regi\u00f3n de origen de Ibn Abd al-Wahhab).<\/p>\n Posteriormente, las refutaciones vinieron de eruditos de Hiyaz (regi\u00f3n de La Meca y de Medina), empezando por el maestro que tuvo Ibn Abd al-Wahhab durante sus estudios en La Meca, M. Suleim\u00e1n Ibn al-Kurdi y M. Hayet Ibn al-Sanad, que sospechan de su ate\u00edsmo.<\/p>\n Al-Kurdi, en una carta que envi\u00f3 a su antiguo alumno, escribi\u00f3:<\/p>\n \u201c\u00a1Eh! Abd al-Wahhab, te aconsejo que dejes de denigrar a los musulmanes. Si alguien cree en la intercesi\u00f3n y no en Dios, t\u00f3mate el trabajo de prodigarle buenos consejos; si persevera, ac\u00fasalo de impiedad intuiti personae, pero no tienes el derecho de acusar a la gran masa de los musulmanes de la que t\u00fa mismo te excluiste (siempre conforme al hadiz del Profeta). \u00bfNo dijo Dios que: \u201cEl que siga otro camino que el de los creyentes, le quemaremos en el fuego de la gehena\u201d (IV: 115)? Pero como se suele decir: \u201cel lobo s\u00f3lo ataca a las ovejas extraviadas\u201d [13].<\/p>\n En 1743, los muft\u00edes de las cuatro escuelas de la ley isl\u00e1mica sunita (Malikita, Shafi\u00edta, Hanafita y Hanbalita) avalan y comentan una refutaci\u00f3n contra Ibn Abd al-Wahhab titulada El libro de la prevenci\u00f3n del extrav\u00edo y de la represi\u00f3n de la ignorancia, redactado por un erudito egipcio residente en La Meca llamado al-Tandatawi [14].<\/p>\n Adem\u00e1s de Yemen [15], las refutaciones provienen de Irak, donde en 1776, el erudito Ali bin Abdullah as-Suwadi escribe Tabern\u00e1culo que ilumina la refutaci\u00f3n del wahhabismo. Concluye su carta as\u00ed, dirigi\u00e9ndose a Abd al-Wahhab:<\/p>\n \u201c\u00a1Eh! Torpe y demonio obstinado, si comprendiste lo anterior, \u00bfc\u00f3mo puedes acusar de impiedad a quien atestigua que no hay m\u00e1s dios que Dios y que Muhammad es su Profeta\u201d [16].<\/p>\n Algunos a\u00f1os despu\u00e9s de la muerte de Ibn Abd al-Wahhab (1792), su libro, El libro de la unicidad divina, es le\u00eddo por un consejo de eruditos en Bagdad, entre los que se encuentra el im\u00e1n de la mezquita de Bagdad, Abd al -Khattib Affendi al-Rawi. Esto es lo que se desprende del an\u00e1lisis del libro hecho por este consejo:<\/p>\n \u201cDespu\u00e9s del examen, el libro comprende cuestiones disparatadas de desigual valor. Su autor es de los que no conocen m\u00e1s que una parte de la sharia [17], en la que no se molest\u00f3 en profundizar; no tuvo un maestro que lo dirigiera por el camino correcto, lo orientara y del que aprender las ciencias necesarias que gu\u00edan por el camino correcto\u201d [18].<\/p>\n Los ataques contra la doctrina de Abd al-Wahhab Abd, su \u201cpensamiento\u201d, y contra los wahhabitas que lo sucedieron, son m\u00faltiples y vienen de todas partes; esencialmente de eruditos sunitas \u2013 los eruditos chi\u00edtas lo refutan tambi\u00e9n, al un\u00edsono con los sunitas \u2013 aunque los wahhabitas se reclamen sunitas. Es importante recordar que la oposici\u00f3n al wahhabismo \u2013 que consagra un odio visceral tanto al sunismo como al chi\u00edsmo \u2013 fue objeto de consenso entre los eruditos sunitas y chi\u00edtas.<\/p>\n Hemos informado aqu\u00ed de algunas de las muchas r\u00e9plicas y denuncias de las que la doctrina wahhabita era objeto; refutaciones que proseguir\u00e1n a trav\u00e9s de los siglos hasta nuestros d\u00edas, como por ejemplo el Jeque de Al-Azhar (el centro intelectual del Islam sunita), Yusri al-Azhari, en 2012 [19].<\/p>\n Cerca de un siglo despu\u00e9s de la muerte de Abd al-Wahhab, Ibn Girgis ataca a los wahhabitas en un texto que llama Le plus Dur Jihad (1887-1888), donde expresa la posici\u00f3n musulmana sunita tradicional respecto a la cual los wahhabitas son extra\u00f1os, es decir, que s\u00f3lo los cuatro fundadores de las Escuelas de Derecho (Malik, Abu Hanifa, Chafii e Ibn Hanbal), herederos de los profetas, est\u00e1n dotados del ijtih\u0101d (esfuerzo de interpretaci\u00f3n del Cor\u00e1n del que emanan las normas del derecho) absoluto. Ellos son los \u00fanicos dignos de imitaci\u00f3n, les recuerda. Pero, a\u00f1ade, \u201cen estos d\u00edas, los pretendidos eruditos se improvisan en creadores de Escuela, mientras que son los m\u00e1s ignorantes de los hombres, obstinados, corruptos y controvertidos, dementes que merecen el encarcelamiento y el castigo perpetuo\u201d [20].<\/p>\n Concluiremos esta serie de refutaciones con la prueba (si no estaba ya demostrado) de que Ibn Abd al-Wahhab no era un verdadero erudito, sino un impostor. En 1883, Zaini Dahlan (1817-1886), el muft\u00ed de la Meca, hace un balance de las respuestas dadas a Ibn Abd al-Wahhab:<\/p>\n \u201cEn total, numerosos son los que lo refutaron, de Oriente y de Occidente; pertenecen a las cuatro escuelas, incluyendo la suya, la Hanbalita; le plantearon cuestiones al alcance de principiantes, a las cuales no se hall\u00f3 en situaci\u00f3n de responder\u201d [21].<\/p>\n Valor teol\u00f3gico-jur\u00eddico de los dict\u00e1menes de los muft\u00edes y eruditos sobre el wahhabismo<\/strong><\/p>\n Acabamos de verlo, hubo consenso (iym\u00e1\u2019) entre los eruditos de las cuatro escuelas jur\u00eddicas sunitas, de Nayd, de Hiyaz, de Yemen y de Irak, sobre Mohamed Ibn Abd al-Wahhab y su doctrina.<\/p>\n Desde la perspectiva del derecho musulm\u00e1n, en teor\u00eda, existe consenso sobre un caso legal cuando todos los muytahid (eruditos capaces de interpretar el Cor\u00e1n) del mundo musulm\u00e1n son un\u00e1nimes [22].<\/p>\n En el caso del wahhabismo, hubo acuerdo entre un n\u00famero preciso de muytahid; pero precisemos que en aquella \u00e9poca se pronunciaron los eruditos de las regiones que tuvieron conocimiento de la existencia de Abd al-Wahhab y de su secta. En el siglo XIX, los eruditos del Magreb, refutaron a su vez el wahhabismo [23].<\/p>\n No obstante, los ulemas (eruditos) piensan que es imposible tener un consenso real, en la medida en que no podemos conocer a todos los muytahid del planeta, as\u00ed como sus opiniones sobre todos los casos legales. A partir de ah\u00ed, el fundador de la cuarta escuela de derecho musulm\u00e1n, Ahmad ibn Hanbal (780-855) concluy\u00f3 que: \u201cEl que pretende que hubo consenso miente. Puede ser que los especialistas se hayan contradicho a prop\u00f3sito de la cuesti\u00f3n sin saberlo, y que no lo sepa. Vale m\u00e1s decir: que yo sepa, no hay conflicto de opiniones sobre esta cuesti\u00f3n\u201d [24].<\/p>\n En realidad, lo que se califica como iym\u00e1\u2019 (consenso), como las sentencias consensuadas emitidas por los Compa\u00f1eros del Profeta, es un dictamen concertado entre un grupo de personas presentes en un momento dado, con el saber y la competencia necesarias para juzgar el caso llevado ante ellos [25].<\/p>\n Hist\u00f3ricamente, la opini\u00f3n concertada existi\u00f3 s\u00f3lo en dos \u00e9pocas: la de los primeros califas y Compa\u00f1eros del Profeta (Abu Bakr, Omar, Othman y Ali) y durante algunos califatos omeyas en Andaluc\u00eda.<\/p>\n Aparte de estos dos per\u00edodos, cada muytahid respond\u00eda a los casos legales que le eran presentados en su pa\u00eds y en su sociedad [26].<\/p>\n Existen dos tipos de consenso: [27]<\/p>\n \u2022 El consenso expl\u00edcito (al-ijma\u2019 as-Sarih): todos los muytahid de una \u00e9poca dada expresan su acuerdo sobre un dictamen legal de manera expl\u00edcita. A la vista de los elementos hist\u00f3ricos y teol\u00f3gico-jur\u00eddicos presentados, los juicios que los estudiosos y muft\u00edes han producido al respecto del wahhabismo, tanto individuales como concertados, son los m\u00e1s s\u00f3lidos en la historia del Islam en lo que concierne a una secta [28].<\/p>\n Como escribi\u00f3 el antiguo juez de El Cairo, inspector de los tribunales y profesor de la Facultad de Derecho de El Cairo, Abd al-Wahhab Khallaf (1888-1956): \u201cEl consenso sobre un dictamen jur\u00eddico se convierte en una ley religiosa coercitiva. Si el mismo caso se presenta a los muytahid de \u00e9pocas posteriores, deben adoptar el juicio pronunciado por sus predecesores y abstenerse de todo nuevo esfuerzo de reflexi\u00f3n sobre susodicho caso. As\u00ed, una ley religiosa que resulta de la iym\u00e1\u2019 es definitiva, indiscutible y no puede ser contradicha ni revocada\u201d [29].<\/p>\n Esperamos pues que los eruditos contempor\u00e1neos tengan el coraje de adoptar el juicio pronunciado por sus predecesores.<\/p>\n Youssef Hindi, 09 de diciembre 2015<\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n Fuente Original<\/a><\/p>\n
\n\u2022 El consenso impl\u00edcito (ali-ijma\u2019 as-soukouti): una parte de los muytahid de una \u00e9poca se expresa sobre un caso legal, mientras que el resto de muytahid no expresa ninguna opini\u00f3n. Este tiene un valor m\u00e1s bajo, excepto para los eruditos hanafitas, porque seg\u00fan ellos el silencio de un muytahid solicitado no puede expresar sino su acuerdo.<\/p>\n