![\"\"](\"https:\/\/redinternacional.net\/wp-content\/uploads\/2022\/07\/Flexner-polio-300x188.jpg\")
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Una de las consecuencias del supuesto nuevo virus SARS-CoV-2 que sali\u00f3 a la luz p\u00fablica en 2019 es que la especialidad m\u00e9dica de la virolog\u00eda ha sido elevada a una estatura casi divina en los medios de comunicaci\u00f3n. Pocos entienden los or\u00edgenes de la virolog\u00eda y su elevaci\u00f3n a un papel principal en la pr\u00e1ctica de la medicina actual. Para ello hay que fijarse en los or\u00edgenes y en la pol\u00edtica del primer instituto de investigaci\u00f3n m\u00e9dica de Estados Unidos, el Instituto Rockefeller de Investigaci\u00f3n M\u00e9dica, hoy Universidad Rockefeller, y en sus trabajos sobre lo que dec\u00edan que era un virus de la polio.\u00a0\u00a0\u00a0 <\/em><\/p>\n En 1907, un brote de una enfermedad en la ciudad de Nueva York dio al director del Instituto Rockefeller, el doctor Simon Flexner, una oportunidad de oro para reivindicar el descubrimiento de un \u00abvirus\u00bb invisible causado por lo que se llam\u00f3 arbitrariamente poliomielitis. La palabra poliomielitis significa simplemente inflamaci\u00f3n de la materia gris de la m\u00e9dula espinal. Ese a\u00f1o, unos 2.500 neoyorquinos, en su mayor\u00eda ni\u00f1os, fueron afectados por alguna forma de poliomielitis, incluyendo par\u00e1lisis e incluso la muerte.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0El fraude de Flexner<\/strong><\/p>\n El aspecto m\u00e1s sorprendente de toda la saga de la poliomielitis en los Estados Unidos durante la primera mitad del siglo XX fue el hecho de que todas las fases clave del negocio estaban controladas por personas vinculadas a lo que se convirti\u00f3 en la c\u00e1bala m\u00e9dica de los Rockefeller. Este fraude comenz\u00f3 con las afirmaciones del director del Instituto Rockefeller, Simon Flexner, de que \u00e9l y su colega, Paul A. Lewis, hab\u00edan \u00abaislado\u00bb un pat\u00f3geno, invisible al ojo, m\u00e1s peque\u00f1o incluso que las bacterias, que seg\u00fan ellos causaba la enfermedad paralizante en una serie de brotes en los Estados Unidos. \u00bfC\u00f3mo llegaron a esta idea?<\/p>\n En un art\u00edculo publicado en 1909 en el Journal of the American Medical Association, Flexner afirm\u00f3 que \u00e9l y Lewis hab\u00edan aislado el virus de la poliomielitis responsable. Inform\u00f3 de que hab\u00edan conseguido \u00abpasar\u00bb la poliomielitis a trav\u00e9s de varios monos, de mono a mono. Comenzaron inyectando en los cerebros de los monos tejido de m\u00e9dula espinal humano enfermo de un ni\u00f1o que hab\u00eda muerto, presumiblemente a causa del virus. Despu\u00e9s de que un mono cayera enfermo, se inyect\u00f3 una suspensi\u00f3n de su tejido medular enfermo en el cerebro de otros monos que tambi\u00e9n cayeron enfermos.<\/p>\n Proclamaron que los m\u00e9dicos del Instituto Rockefeller hab\u00edan demostrado as\u00ed la causalidad del virus de la poliomielitis para la misteriosa enfermedad. No hab\u00edan hecho nada de eso. Flexner y Lewis incluso lo admitieron: \u00abNo pudimos descubrir en absoluto bacterias, ni en las preparaciones de pel\u00edculas ni en los cultivos, que pudieran explicar la enfermedad; y, dado que entre nuestra larga serie de propagaciones del virus en monos ning\u00fan animal mostraba, en las lesiones, los cocos descritos por algunos investigadores anteriores, y que no hab\u00edamos conseguido obtener ninguna bacteria de este tipo en el material humano estudiado por nosotros, pensamos que pod\u00edan excluirse de la consideraci\u00f3n\u00bb. Lo que hicieron entonces fue hacer una suposici\u00f3n extra\u00f1a, un salto de fe, no una afirmaci\u00f3n cient\u00edfica. Tomaron su hip\u00f3tesis de la acci\u00f3n viral ex\u00f3gena y la convirtieron en un hecho, sin ninguna prueba. Afirmaron<\/a>: \u00abPor lo tanto, …el agente infeccioso de la poliomielitis epid\u00e9mica pertenece a la clase de los virus diminutos y filtrables que hasta ahora no han sido demostrados con certeza bajo el microscopio<\/strong>\u00bb. \u00bfPor lo tanto?<\/p>\n Simon Flexner se limit\u00f3 a afirmar que \u00abdeb\u00eda\u00bb ser un virus de la poliomielitis el que mataba a los monos, porque no pod\u00eda encontrar otra explicaci\u00f3n. De hecho, no busc\u00f3 otra fuente de las enfermedades. Esto no era un aislamiento cient\u00edfico. Era una especulaci\u00f3n salvaje: \u00ab…hasta ahora no se ha demostrado con certeza bajo el microscopio\u00bb. Lo admitieron en un seguimiento<\/a> del 18 de diciembre de 1909 en JAMA, titulado, LA NATURALEZA DEL VIRUS DE LA POLIOMIELITIS EPIDEMICA.<\/p>\n El supuesto \u00abvirus\u00bb que inyectaban a los monos no era puro. Tambi\u00e9n conten\u00eda una cantidad indeterminada de contaminantes. Inclu\u00eda \u00abpur\u00e9 de m\u00e9dula espinal, cerebro, materia fecal, incluso moscas fueron molidas e inyectadas en los monos para inducir la par\u00e1lisis\u00bb. Hasta que Jonas Salk consigui\u00f3 la aprobaci\u00f3n del Gobierno de EE.UU. en abril de 1955 para una vacuna contra la poliomielitis, no se hab\u00eda demostrado cient\u00edficamente la existencia de un virus causante de la poliomielitis, o par\u00e1lisis infantil, como se conoc\u00eda com\u00fanmente. As\u00ed ha sido hasta hoy. Todo el mundo m\u00e9dico acept\u00f3 la palabra de Flexner de que \u00abdeb\u00eda\u00bb ser un virus.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0 \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0El Instituto Rockefeller, Flexner y la Asociaci\u00f3n M\u00e9dica Americana<\/strong><\/p>\n El Instituto Rockefeller se fund\u00f3 a partir de la fortuna de la Standard Oil de John D. Rockefeller en 1901, para ser el primer instituto biom\u00e9dico de Estados Unidos. Se inspir\u00f3 en el Instituto Pasteur de Francia (1888) y en el Instituto Robert Koch de Alemania (1891). Su primer director, Simon Flexner, desempe\u00f1\u00f3 un papel fundamental y muy criminal en la evoluci\u00f3n de lo que se convirti\u00f3 en la pr\u00e1ctica m\u00e9dica estadounidense aprobada. El objetivo de los Rockefeller era controlar completamente la pr\u00e1ctica m\u00e9dica estadounidense y transformarla en un instrumento, al menos inicialmente, de promoci\u00f3n de los medicamentos aprobados por los intereses de los Rockefeller. Para entonces buscaban monopolizar los medicamentos producidos a partir de su refinado de petr\u00f3leo, como hab\u00edan hecho con el petr\u00f3leo.<\/p>\n Mientras el director del Instituto Rockefeller, Simon Flexner, publicaba sus estudios sobre la poliomielitis, poco concluyentes pero muy aclamados, dispuso que su hermano, Abraham Flexner, un maestro de escuela sin formaci\u00f3n m\u00e9dica, dirigiera un estudio conjunto de la Asociaci\u00f3n M\u00e9dica Americana (AMA), el Consejo de Educaci\u00f3n General de Rockefeller y la Fundaci\u00f3n Carnegie, fundada por Andrew Carnegie, amigo \u00edntimo de Rockefeller.<\/p>\n El estudio de 1910 se titul\u00f3 \u00abInforme Flexner\u00bb y su objetivo aparente era investigar la calidad de todas las facultades de medicina de Estados Unidos. Sin embargo, el resultado del informe estaba predeterminado. Los lazos entre el bien dotado Instituto Rockefeller y la AMA pasaban por el corrupto jefe de la AMA, George H. Simmons.<\/p>\n Simmons era tambi\u00e9n el editor del influyente Journal of the American Medical Association, una publicaci\u00f3n que se entregaba a unos 80.000 m\u00e9dicos de toda Am\u00e9rica. Al parecer, ejerc\u00eda un poder absoluto sobre la asociaci\u00f3n de m\u00e9dicos. Controlaba los crecientes ingresos publicitarios de las empresas farmac\u00e9uticas para promocionar sus medicamentos entre los m\u00e9dicos de la AMA en su revista, un negocio muy lucrativo. Fue una pieza clave del golpe m\u00e9dico de Rockefeller, que iba a redefinir por completo la pr\u00e1ctica m\u00e9dica aceptable, pasando de los tratamientos curativos o preventivos al uso de f\u00e1rmacos a menudo mortales y de costosas cirug\u00edas. Como director de la AMA, Simmons se dio cuenta de que la competencia de la proliferaci\u00f3n de escuelas de medicina, incluidas las entonces reconocidas quiropr\u00e1ctica, osteopat\u00eda, homeopat\u00eda y medicina natural, estaba disminuyendo los ingresos de sus m\u00e9dicos de la AMA, ya que el n\u00famero de escuelas de medicina hab\u00eda aumentado de unas 90 en 1880 a m\u00e1s de 150 en 1903.<\/p>\n Abraham Flexner, antiguo director de una escuela privada, recorri\u00f3 varias escuelas de medicina de EE.UU. en 1909 y recomend\u00f3 que se cerrara la mitad de las 165 escuelas de medicina, por ser lo que \u00e9l defin\u00eda como \u00absubest\u00e1ndar\u00bb. As\u00ed se reduc\u00eda la competencia de otros enfoques para curar enfermedades. Se dirigieron despiadadamente a las escuelas de medicina naturista, entonces muy extendidas, a las de quiropr\u00e1ctica y a las de osteopat\u00eda, as\u00ed como a las escuelas alop\u00e1ticas independientes que no estaban dispuestas a unirse al r\u00e9gimen de la AMA. Entonces, el dinero de Rockefeller se destin\u00f3 a las escuelas seleccionadas con la condici\u00f3n de que los profesores fueran investigados por el Instituto Rockefeller y que el plan de estudios se centrara en los medicamentos y la cirug\u00eda como tratamiento, no en la prevenci\u00f3n, ni en la nutrici\u00f3n, ni en la toxicolog\u00eda como posibles causas y soluciones. Ten\u00edan que aceptar la teor\u00eda de los g\u00e9rmenes de Pasteur, que afirma el reduccionismo de un germen<\/a> a una enfermedad. Los medios de comunicaci\u00f3n controlados por Rockefeller lanzaron una caza de brujas coordinada contra todas las formas de medicina alternativa, los remedios a base de hierbas, las vitaminas naturales y la quiropr\u00e1ctica, todo lo que no estuviera controlado por los medicamentos patentados por Rockefeller.<\/p>\n En 1919, el Consejo de Educaci\u00f3n General de Rockefeller y la Fundaci\u00f3n Rockefeller hab\u00edan pagado m\u00e1s de 5.000.000 de d\u00f3lares a las facultades de medicina de Johns Hopkins, Yale y la Universidad de Washington en San Luis. En 1919 John D. Rockefeller concedi\u00f3 otros 20.000.000 de d\u00f3lares en valores, \u00abpara el avance de la educaci\u00f3n m\u00e9dica en los Estados Unidos\u00bb. Eso ser\u00eda comparable a unos 340 millones de d\u00f3lares de hoy, una suma enorme. En resumen, los intereses monetarios de los Rockefeller hab\u00edan secuestrado la educaci\u00f3n m\u00e9dica y la investigaci\u00f3n m\u00e9dica en Estados Unidos en la d\u00e9cada de 1920.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 La creaci\u00f3n de la virolog\u00eda<\/strong><\/p>\n Esta toma de control m\u00e9dico, respaldada por la organizaci\u00f3n de m\u00e9dicos m\u00e1s influyente, la AMA, y su corrupto jefe, Simmons, permiti\u00f3 a Simon Flexner crear literalmente la virolog\u00eda moderna bajo las reglas de Rockefeller. El muy controvertido Thomas Milton Rivers, como director del laboratorio de virolog\u00eda del Instituto Rockefeller, estableci\u00f3 la virolog\u00eda como un campo independiente, separado de la bacteriolog\u00eda, durante la d\u00e9cada de 1920. Se dieron cuenta de que pod\u00edan manipular mucho m\u00e1s f\u00e1cilmente cuando pod\u00edan afirmar que los pat\u00f3genos mortales eran g\u00e9rmenes invisibles o \u00abvirus\u00bb. Ir\u00f3nicamente, \u00abvirus\u00bb viene del lat\u00edn y significa \u00abveneno\u00bb.<\/p>\n La virolog\u00eda, un fraude m\u00e9dico reduccionista, fue una creaci\u00f3n de la c\u00e1bala m\u00e9dica de Rockefeller. Este hecho tan importante est\u00e1 enterrado en los anales de la medicina actual. Enfermedades como la viruela, el sarampi\u00f3n o la poliomielitis fueron declaradas causadas por pat\u00f3genos invisibles llamados virus espec\u00edficos. Si los cient\u00edficos pod\u00edan \u00abaislar\u00bb el virus invisible, te\u00f3ricamente podr\u00edan encontrar vacunas para proteger a la gente del da\u00f1o. As\u00ed fue su teor\u00eda. Fue una gran ayuda para el c\u00e1rtel de empresas farmac\u00e9uticas de Rockefeller, que en aquel momento inclu\u00eda a American Home Products, que promocionaba falsamente medicamentos sin pruebas de su efecto, como el preparado H para las hemorroides o el Advil para el alivio del dolor; Sterling Drug, que se hizo con los activos estadounidenses, incluida la aspirina, de la empresa alemana Bayer AG tras la Primera Guerra Mundial; Winthrop Chemical; American Cyanamid y su filial Lederle Laboratories; Squibb y Monsanto.<\/p>\n Pronto los investigadores de virus del Instituto Rockefeller, adem\u00e1s de reclamar el descubrimiento del virus de la poliomielitis, afirmaron descubrir los virus que causaban la viruela, las paperas, el sarampi\u00f3n y la fiebre amarilla. Luego anunciaron el \u00abdescubrimiento\u00bb de vacunas preventivas contra la neumon\u00eda y la fiebre amarilla. Todos estos \u00abdescubrimientos\u00bb anunciados por el Instituto resultaron ser falsos. Con el control de la investigaci\u00f3n en la nueva \u00e1rea de la virolog\u00eda, el Instituto Rockefeller, en connivencia con Simmons en la AMA y su igualmente corrupto sucesor, Morris Fishbein, pod\u00eda promocionar nuevas vacunas patentadas o \u00abremedios\u00bb farmacol\u00f3gicos en la influyente revista de la AMA que se enviaba a todos los m\u00e9dicos afiliados de Estados Unidos. Las empresas farmac\u00e9uticas que se negaban a pagar por los anuncios en la revista de la AMA eran excluidas por la AMA.<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 El control de la investigaci\u00f3n sobre la poliomielitis<\/strong><\/p>\n Simon Flexner y el influyente Instituto Rockefeller consiguieron en 1911 que los s\u00edntomas que se denominaban poliomielitis se incluyeran en la Ley de Salud P\u00fablica de los Estados Unidos como una \u00abenfermedad infecciosa y contagiosa causada por un virus transmitido por el aire\u00bb. Sin embargo, incluso ellos admitieron que no hab\u00edan demostrado c\u00f3mo entraba la enfermedad en el cuerpo de los humanos. Como se\u00f1al\u00f3 un experimentado m\u00e9dico en una revista m\u00e9dica en 1911, \u00abNuestro conocimiento actual de los posibles m\u00e9todos de contagio se basa casi por completo en el trabajo realizado en esta ciudad en el Instituto Rockefeller\u00bb. En 1951, el Dr. Ralph Scobey, un cr\u00edtico de la apresurada opini\u00f3n de Rockefeller sobre el contagio de la polio, se\u00f1al\u00f3: \u00abEsto, por supuesto, se bas\u00f3 en experimentos con animales m\u00e1s que en investigaciones cl\u00ednicas…\u00bb Scobey tambi\u00e9n se\u00f1al\u00f3 la falta de pruebas de que la poliomielitis fuera contagiosa: \u00ab…los ni\u00f1os afectados por la enfermedad se manten\u00edan en las salas generales del hospital y ni uno solo de los otros internos de las salas del hospital estaba afectado por la enfermedad\u00bb. La actitud general en ese momento se resumi\u00f3 en 1911: \u00abNos parece, a pesar de la falta de pruebas absolutas, que los mejores intereses de la comunidad se conservar\u00edan si consideramos la enfermedad desde el punto de vista del contagio<\/a>\u00bb. (sic).<\/p>\n Al clasificar los s\u00edntomas de la poliomielitis como una enfermedad altamente contagiosa causada por un virus invisible, supuestamente ex\u00f3geno o externo, el Instituto Rockefeller y la AMA pudieron cortar cualquier investigaci\u00f3n seria de explicaciones alternativas, como la exposici\u00f3n a pesticidas qu\u00edmicos u otras toxinas, para explicar los brotes estacionales de enfermedad y par\u00e1lisis, incluso la muerte, sobre todo en ni\u00f1os muy peque\u00f1os. Esto tuvo consecuencias fatales que perduran hasta el presente.<\/p>\n <\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Aparece el DDT<\/strong><\/p>\n En su declaraci\u00f3n de 1952 ante la C\u00e1mara de Representantes de los Estados Unidos, en la que investigaba los posibles peligros de las sustancias qu\u00edmicas en los productos alimenticios, el doctor Ralph R. Scobey se\u00f1al\u00f3: \u00abDurante casi medio siglo las investigaciones sobre la poliomielitis se han dirigido a un supuesto virus ex\u00f3geno que entra en el cuerpo humano para causar la enfermedad. La forma en que la Ley de Salud P\u00fablica se establece ahora, impone s\u00f3lo este tipo de investigaci\u00f3n. Por otro lado, no se han realizado estudios intensivos para determinar si el llamado virus de la poliomielitis es o no una sustancia qu\u00edmica aut\u00f3ctona que no entra en el cuerpo humano en absoluto, sino que simplemente es el resultado de un factor o factores ex\u00f3genos, por ejemplo, un veneno alimentario<\/a>\u00bb. Las toxinas como causa no se investigaron, a pesar de las enormes evidencias.<\/p>\n Durante la d\u00e9cada de 1930, con la depresi\u00f3n econ\u00f3mica y luego la guerra, se observaron pocos brotes nuevos importantes de poliomielitis. Sin embargo, inmediatamente despu\u00e9s del final de la Segunda Guerra Mundial, en particular, el drama de la poliomielitis explot\u00f3 en dimensi\u00f3n. A partir de 1945, cada verano se diagnosticaba poliomielitis a m\u00e1s ni\u00f1os en toda Am\u00e9rica y se les hospitalizaba. Menos del 1% de los casos fueron realmente analizados mediante pruebas de sangre u orina. Un 99% se diagnosticaba por la mera presencia de s\u00edntomas como dolor agudo en las extremidades, fiebre, malestar estomacal, diarrea.<\/p>\n En 1938, con el apoyo de Franklin D. Roosevelt, presunta v\u00edctima de la poliomielitis, se cre\u00f3 la Fundaci\u00f3n Nacional para la Par\u00e1lisis Infantil (March of Dimes) con el fin de solicitar donaciones exentas de impuestos para financiar la investigaci\u00f3n sobre la poliomielitis. Un m\u00e9dico e investigador alem\u00e1n, el Dr. Henry Kumm, lleg\u00f3 a EE.UU. y se incorpor\u00f3 al Instituto Rockefeller en 1928, donde permaneci\u00f3 hasta incorporarse a la Fundaci\u00f3n Nacional en 1951 como Director de Investigaci\u00f3n sobre la Poliomielitis. A Kumm se le uni\u00f3 en la Fundaci\u00f3n Nacional otro veterano clave del Instituto Rockefeller, el llamado \u00abpadre de la virolog\u00eda\u00bb, Thomas M. Rivers, que presidi\u00f3 el comit\u00e9 consultivo de investigaci\u00f3n de vacunas de la fundaci\u00f3n que supervisaba la investigaci\u00f3n de Jonas Salk. Estas dos figuras clave del Instituto Rockefeller controlaban as\u00ed los fondos para la investigaci\u00f3n de la polio, incluido el desarrollo de una vacuna.<\/p>\n Durante la Segunda Guerra Mundial, mientras segu\u00eda en el Instituto Rockefeller, Henry Kumm fue consultor del ej\u00e9rcito estadounidense, donde supervis\u00f3 estudios de campo en Italia. All\u00ed Kumm dirigi\u00f3 estudios de campo para el uso del DDT contra el tifus y los mosquitos de la malaria en los pantanos cercanos a Roma y N\u00e1poles. El DDT hab\u00eda sido patentado como insecticida por la empresa farmac\u00e9utica suiza Geigy y su filial estadounidense en 1940, y se autoriz\u00f3 por primera vez su uso en soldados del ej\u00e9rcito estadounidense en 1943 como desinfectante general contra los piojos, los mosquitos y muchos otros insectos. Hasta el final de la guerra, casi toda la producci\u00f3n de DDT en EE.UU. se destin\u00f3 al ej\u00e9rcito. En 1945, las empresas qu\u00edmicas buscaron con ah\u00ednco nuevos mercados. Los encontraron.<\/p>\n A principios de 1944, los peri\u00f3dicos estadounidenses informaron triunfalmente de que el tifus, \u00abla temida plaga que ha seguido la estela de todas las grandes guerras de la historia\u00bb, ya no era una amenaza para las tropas estadounidenses y sus aliados gracias al nuevo polvo \u00abmata-piojos\u00bb del ej\u00e9rcito, el DDT. En un experimento realizado en N\u00e1poles, los soldados estadounidenses espolvorearon a m\u00e1s de un mill\u00f3n de italianos con DDT disuelto con queroseno (\u00a1!), matando los piojos del cuerpo que propagaban el tifus. Henry Kumm, del Instituto Rockefeller, y el ej\u00e9rcito estadounidense sab\u00edan que, como dijo un investigador, \u00abel DDT era un veneno, pero lo suficientemente seguro para la guerra. Cualquier persona da\u00f1ada por el DDT ser\u00eda una baja aceptada en combate\u00bb. El Gobierno de EE.UU. \u00abrestringi\u00f3\u00bb un informe sobre insecticidas emitido por la Oficina de Investigaci\u00f3n Cient\u00edfica y Desarrollo en 1944 que advert\u00eda de los efectos t\u00f3xicos<\/a> acumulativos del DDT en humanos y animales. El Dr. Morris Biskind se\u00f1al\u00f3 en un art\u00edculo de 1949: \u00abComo el DDT es un veneno acumulativo, es inevitable que se produzca una intoxicaci\u00f3n a gran escala de la poblaci\u00f3n estadounidense\u00bb. En 1944, Smith y Stohlman, de los Institutos Nacionales de Salud, tras un amplio estudio sobre la toxicidad acumulativa del DDT, se\u00f1alaron: \u00abLa toxicidad del DDT, combinada con su acci\u00f3n acumulativa y su capacidad de absorci\u00f3n por la piel, pone en peligro su uso\u00bb. Sus advertencias fueron ignoradas<\/a> por las autoridades superiores.<\/p>\n En cambio, despu\u00e9s de 1945, en toda Am\u00e9rica se promocion\u00f3 el DDT como el nuevo pesticida milagroso y \u00abseguro\u00bb, muy parecido al Roundup de Monsanto con el glifosato tres d\u00e9cadas despu\u00e9s. Se dec\u00eda que el DDT era inofensivo para los humanos. Pero nadie en el gobierno comprobaba seriamente esa afirmaci\u00f3n desde el punto de vista cient\u00edfico. Un a\u00f1o despu\u00e9s, en 1945, al terminar la guerra, los peri\u00f3dicos estadounidenses alabaron el nuevo DDT como una sustancia \u00abm\u00e1gica\u00bb, un \u00abmilagro\u00bb. Time llam\u00f3 al DDT \u00abuno de los grandes descubrimientos cient\u00edficos de la Segunda Guerra Mundial\u00bb.<\/p>\n A pesar de las advertencias aisladas sobre los efectos secundarios no comprobados, de que era un producto qu\u00edmico persistente y t\u00f3xico que se acumulaba f\u00e1cilmente en la cadena alimentaria, el Gobierno estadounidense aprob\u00f3 el DDT para su uso general en 1945. La Administraci\u00f3n de Alimentos y Medicamentos (FDA), controlada por los intereses de Rockefeller-AMA, estableci\u00f3 como \u00abseguro\u00bb un contenido de DDT de hasta 7 partes por mill\u00f3n en los alimentos, aunque nadie lo hab\u00eda probado. Las empresas qu\u00edmicas del DDT alimentaron a la prensa con fotos y an\u00e9cdotas. Los peri\u00f3dicos informaron con entusiasmo de c\u00f3mo el nuevo producto qu\u00edmico milagroso, el DDT, se estaba probando en EE.UU. contra los mosquitos del sur que se cre\u00eda que eran portadores de la malaria, as\u00ed como \u00abpara preservar los vi\u00f1edos de Arizona, los huertos de Virginia Occidental, los campos de patatas de Oreg\u00f3n, los campos de ma\u00edz de Illinois y las lecher\u00edas<\/a> de Iowa\u00bb. El DDT estaba por todas partes en EE.UU. a finales de los a\u00f1os 40.<\/p>\n El Gobierno de EE.UU. afirmaba que el DDT, a diferencia del ars\u00e9nico y otros insecticidas utilizados antes de la guerra, era inofensivo para los seres humanos, incluso para los ni\u00f1os, y pod\u00eda utilizarse en abundancia. A partir de 1945, ciudades como Chicago rociaron las playas p\u00fablicas, los parques y las piscinas. Las amas de casa compraron dispensadores de DDT en aerosol para rociar la cocina y especialmente las habitaciones de los ni\u00f1os, incluso sus colchones. A los agricultores se les dijo que rociaran sus cultivos y sus animales, especialmente las vacas lecheras, con DDT. En los Estados Unidos de la posguerra se promov\u00eda el DDT, sobre todo por parte de las empresas farmac\u00e9uticas de Rockefeller, como American Home Products, con su aerosol de DDT Black Flag, y Monsanto. Entre 1945 y 1952 la producci\u00f3n de DDT en Estados Unidos se multiplic\u00f3 por diez.<\/p>\n A medida que los presuntos casos de poliomielitis se dispararon literalmente en los Estados Unidos despu\u00e9s de 1945, se propuso la teor\u00eda, sin pruebas, de que la enfermedad paralizante de la poliomielitis se transmit\u00eda, no por medio de productos qu\u00edmicos pesticidas t\u00f3xicos como el DDT, sino por medio de mosquitos o moscas a los seres humanos, especialmente a los ni\u00f1os peque\u00f1os o beb\u00e9s. El mensaje era que el DDT pod\u00eda proteger a su familia de la paralizante poliomielitis de forma segura. Los casos de poliomielitis registrados oficialmente pasaron de unos 25.000 en 1943, antes del uso civil del DDT en EE.UU., a m\u00e1s de 280.000 casos en 1952 en su punto \u00e1lgido, lo que supone un aumento de m\u00e1s de diez veces.<\/p>\n En octubre de 1945, el DDT, que hab\u00eda sido utilizado por el ej\u00e9rcito estadounidense bajo la supervisi\u00f3n de Henry Kumm, del Instituto Rockefeller, fue autorizado por el gobierno estadounidense para su uso general como insecticida contra mosquitos y moscas. Los cient\u00edficos disidentes que advert\u00edan de los efectos t\u00f3xicos del DDT en humanos y animales fueron silenciados. Se dijo a las familias que el DDT pod\u00eda salvar a sus hijos de la temida polio al matar a los temidos insectos.<\/p>\n El Departamento de Agricultura de EE.UU. aconsej\u00f3 a los granjeros que lavaran sus vacas lecheras con una soluci\u00f3n de DDT para combatir los mosquitos y las moscas. Los campos de ma\u00edz fueron rociados con DDT, as\u00ed como los huertos frutales. Sin embargo, era incre\u00edblemente persistente y su efecto t\u00f3xico sobre las plantas y los vegetales era tal que no se pod\u00eda lavar. A\u00f1o tras a\u00f1o, desde 1945 hasta 1952, la cantidad de DDT rociado en los Estados Unidos aument\u00f3. En particular, tambi\u00e9n lo hizo el n\u00famero de casos humanos de poliomielitis.<\/p>\n <\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 La peor epidemia de poliomielitis<\/strong><\/p>\n A principios de la d\u00e9cada de 1950, el Congreso de EE.UU. y los agricultores prestaban cada vez m\u00e1s atenci\u00f3n a los posibles peligros del uso de este tipo de plaguicidas, no s\u00f3lo del DDT, sino tambi\u00e9n del a\u00fan m\u00e1s t\u00f3xico BHC (hexacloruro de benceno). En 1951, Morton Biskind, un m\u00e9dico que hab\u00eda tratado con \u00e9xito a varios cientos de pacientes intoxicados con DDT, testific\u00f3 ante la C\u00e1mara de Representantes de EE.UU. sobre la posible relaci\u00f3n de la poliomielitis paral\u00edtica con las toxinas, concretamente con el DDT y el BHC. Se\u00f1al\u00f3:<\/p>\n \u00a0\u00a0\u00a0 <\/strong>\u00abLa introducci\u00f3n del insecticida “DDT” (clorofenotano) para su uso generalizado e incontrolado por parte del p\u00fablico y la serie de sustancias a\u00fan m\u00e1s mort\u00edferas que le siguieron, no tiene parang\u00f3n en la historia. Sin duda, ninguna otra sustancia conocida por el hombre se desarroll\u00f3 tan r\u00e1pidamente y se extendi\u00f3 indiscriminadamente por una parte tan grande de la tierra en tan poco tiempo. Esto es tanto m\u00e1s sorprendente cuanto que, en el momento en que el DDT fue liberado para su uso p\u00fablico, ya se dispon\u00eda de una gran cantidad de datos en la literatura m\u00e9dica que demostraban que este agente era extremadamente t\u00f3xico para muchas especies diferentes de animales, que se almacenaba acumulativamente en la grasa corporal y que aparec\u00eda en la leche. En esta \u00e9poca tambi\u00e9n se hab\u00edan registrado algunos casos de intoxicaci\u00f3n por DDT en seres humanos. Estas observaciones se ignoraron casi por completo o se <\/em>malinterpretaron<\/em><\/a>\u00bb. Los operativos del Instituto Rockefeller y la AMA, a trav\u00e9s de sus agentes en el Gobierno de los Estados Unidos, crearon la emergencia sanitaria de 1946-1952 en los Estados Unidos llamada polio. Lo hicieron promoviendo a sabiendas el altamente t\u00f3xico DDT como una forma segura de controlar a los m\u00edticos insectos propagadores de la temida enfermedad. Su campa\u00f1a de propaganda convenci\u00f3 a la poblaci\u00f3n estadounidense de que el DDT era la clave para detener la propagaci\u00f3n de la poliomielitis.<\/p>\n Bajo el liderazgo de los dos m\u00e9dicos del Instituto Rockefeller, Henry Kumm y Thomas Rivers, la Fundaci\u00f3n Nacional para la Par\u00e1lisis Infantil (NFIP) rechaz\u00f3 a los cr\u00edticos como Biskind y Scobey. Los tratamientos curativos naturales, como el uso de vitamina C intravenosa para la par\u00e1lisis infantil, fueron rechazados de plano como \u00abcharlataner\u00eda\u00bb. En abril de 1953, el Dr. Henry Kumm, asesor principal del Instituto Rockefeller en materia de DDT, se convirti\u00f3 en director de investigaci\u00f3n sobre la poliomielitis para el NFIP. Financi\u00f3 la investigaci\u00f3n de la vacuna contra la polio de Jonas Salk.<\/p>\n Un valiente m\u00e9dico de Carolina del Norte, el Dr. Fred R. Klenner, que tambi\u00e9n hab\u00eda estudiado qu\u00edmica y fisiolog\u00eda, tuvo la idea de utilizar grandes dosis de \u00e1cido asc\u00f3rbico intravenoso -Vitamina C- con la hip\u00f3tesis de que sus pacientes eran v\u00edctimas de un envenenamiento por toxinas y que la vitamina C era un poderoso desintoxicante. Esto fue mucho antes de la investigaci\u00f3n del Premio Nobel del Dr. Linus Pauling sobre la vitamina C. Klenner tuvo un \u00e9xito notable en pocos d\u00edas para m\u00e1s de 200 pacientes en las epidemias de verano de 1949 a 1951. El Instituto Rockefeller y la AMA no ten\u00edan ning\u00fan inter\u00e9s en las perspectivas de curaci\u00f3n. Ellos y la Fundaci\u00f3n Nacional para la Par\u00e1lisis Infantil, controlada por los Rockefeller, s\u00f3lo financiaban el desarrollo de la vacuna contra la polio, bas\u00e1ndose en la afirmaci\u00f3n no probada de Flexner de que la polio era un virus contagioso y no un resultado del veneno ambiental.<\/p>\n Luego, a partir de 1951-1952, cuando los casos de poliomielitis estaban en su punto m\u00e1s alto, empez\u00f3 a aparecer algo inesperado. El n\u00famero de casos diagnosticados de poliomielitis en los Estados Unidos comenz\u00f3 a disminuir. El descenso de las v\u00edctimas de la poliomielitis fue espectacular, a\u00f1o tras a\u00f1o, hasta 1955, mucho antes de que la Fundaci\u00f3n Nacional y la vacuna contra la poliomielitis de Jonas Salk fueran aprobadas para su uso p\u00fablico y se generalizaran.<\/p>\n Aproximadamente un a\u00f1o antes del repentino descenso de los casos de poliomielitis, los granjeros, cuyas vacas lecheras estaban sufriendo los graves efectos del DDT, fueron aconsejados por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos para que redujeran el uso del DDT. La creciente preocupaci\u00f3n del p\u00fablico sobre la seguridad del DDT para los seres humanos, incluidas las audiencias del Senado de EE.UU. sobre el DDT y la poliomielitis en 1951, tambi\u00e9n condujeron a un descenso significativo de la exposici\u00f3n al DDT en 1955, aunque el DDT no se prohibi\u00f3 oficialmente en EE.UU. hasta 1972.<\/p>\n Los casos de la llamada \u00abpoliomielitis\u00bb se redujeron en unos dos tercios en ese periodo de 1952-1956, en un notable paralelismo con el descenso del uso del DDT. Fue mucho despu\u00e9s de ese descenso, a finales de 1955 y 1956, cuando la vacuna contra la polio de Salk, desarrollada por Rockefeller, se administr\u00f3 por primera vez en grandes poblaciones. Salk y la AMA dieron todo el cr\u00e9dito a la vacuna. Las muertes y par\u00e1lisis como resultado de la vacuna Salk fueron ocultadas. El Gobierno cambi\u00f3 la definici\u00f3n de polio para reducir a\u00fan m\u00e1s los casos oficiales. Simult\u00e1neamente, aumentaron notablemente los casos de enfermedades nerviosas de la m\u00e9dula espinal similares a la poliomielitis: par\u00e1lisis fl\u00e1cida aguda, s\u00edndrome de fatiga cr\u00f3nica, encefalitis, meningitis, s\u00edndrome de Guillain-Barr\u00e9 y esclerosis muscular.<\/p>\n Hace m\u00e1s de un siglo, el hombre m\u00e1s rico del mundo, el bar\u00f3n del petr\u00f3leo John D. Rockefeller, y su c\u00edrculo de asesores se propusieron reorganizar por completo la forma en que se practicaba la medicina en Estados Unidos y en el resto del mundo. El papel del Instituto Rockefeller y de figuras como Simon Flexner supervis\u00f3 literalmente la invenci\u00f3n de un fraude m\u00e9dico colosal en torno a las afirmaciones de que un germen extra\u00f1o contagioso invisible, el virus de la polio, causaba par\u00e1lisis aguda e incluso la muerte en los j\u00f3venes. Prohibieron pol\u00edticamente cualquier esfuerzo por relacionar la enfermedad con el envenenamiento por toxinas, ya sea por pesticidas de DDT o ars\u00e9nico o incluso por envenenamiento por vacunas contaminadas. Su proyecto criminal inclu\u00eda una \u00edntima cooperaci\u00f3n con la direcci\u00f3n de la AMA y el control de la incipiente industria farmac\u00e9utica, as\u00ed como de la educaci\u00f3n m\u00e9dica. El mismo grupo Rockefeller financi\u00f3 la eugenesia nazi en los Institutos Kaiser Wilhelm de Alemania en los a\u00f1os 30, as\u00ed como la Sociedad Americana de Eugenesia. En los a\u00f1os 70 financiaron la creaci\u00f3n de semillas patentadas transg\u00e9nicas que fueron todas desarrolladas por el grupo de empresas de pesticidas qu\u00edmicos de los Rockefeller: Monsanto, DuPont, Dow.<\/p>\n En la actualidad, este control de la salud p\u00fablica y del complejo m\u00e9dico industrial lo ejerce el protegido de David Rockefeller y defensor de la eugenesia, Bill Gates, autoproclamado zar de la OMS y de las vacunas mundiales. El Dr. Tony Fauci, jefe del NIAID, dicta los mandatos de las vacunas sin pruebas. El fraude detr\u00e1s del esc\u00e1ndalo del virus de la polio despu\u00e9s de la Segunda Guerra Mundial se ha perfeccionado con el uso de modelos inform\u00e1ticos y otras artima\u00f1as hoy en d\u00eda, para avanzar un supuesto virus mortal tras otro, desde el Covid19 a la viruela del mono y el VIH. Al igual que con la poliomielitis, ninguno de ellos ha sido cient\u00edficamente aislado y probado como causante de las enfermedades alegadas. Ninguno. La misma Fundaci\u00f3n Rockefeller libre de impuestos hoy en d\u00eda, haci\u00e9ndose pasar por una organizaci\u00f3n ben\u00e9fica filantr\u00f3pica, est\u00e1 en el coraz\u00f3n de la tiran\u00eda m\u00e9dica global detr\u00e1s del Covid19 y la agenda eugen\u00e9sica del Gran Reinicio del Foro Econ\u00f3mico Mundial. Su modelo del virus de la poliomielitis les ayud\u00f3 a crear esta tiran\u00eda m\u00e9dica dist\u00f3pica. Nos dicen: \u00abconf\u00eda en la ciencia\u00bb.<\/p>\n F. William Engdahl, 12 de julio de 2022<\/p>\n <\/p>\n *<\/p>\n <\/p>\n William Engdahl es consultor de riesgos estrat\u00e9gicos y conferenciante, es licenciado en pol\u00edtica por la Universidad de Princeton y autor de best-sellers sobre petr\u00f3leo y geopol\u00edtica, en exclusiva para la revista online “New Eastern Outlook”.<\/em><\/em><\/p>\n <\/p>\n *<\/p>\n
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\nBiskind declar\u00f3 adem\u00e1s ante el Congreso a finales de 1950: \u00abA principios del a\u00f1o pasado publiqu\u00e9 una serie de observaciones sobre el envenenamiento por DDT en el hombre. Desde poco despu\u00e9s de la \u00faltima guerra, los m\u00e9dicos de todo el pa\u00eds hab\u00edan observado un gran n\u00famero de casos en los que se produc\u00eda un grupo de s\u00edntomas cuya caracter\u00edstica m\u00e1s destacada era la gastroenteritis, los s\u00edntomas nerviosos persistentemente recurrentes y la debilidad muscular extrema…\u00bb Describi\u00f3 varios ejemplos de casos de pacientes cuyos s\u00edntomas graves, incluida la par\u00e1lisis, desaparecieron cuando se elimin\u00f3 la exposici\u00f3n al DDT y las toxinas relacionadas: \u00abMi experiencia original sobre m\u00e1s de 200 casos que comuniqu\u00e9 a principios del a\u00f1o pasado se ha ampliado considerablemente desde entonces. Mis observaciones posteriores no s\u00f3lo han confirmado la opini\u00f3n de que el DDT es responsable de una gran cantidad de discapacidades humanas que de otro modo ser\u00edan inexplicables…\u00bb Tambi\u00e9n se observ\u00f3 el hecho de que los casos de poliomielitis eran siempre mayores en los meses de verano, cuando la fumigaci\u00f3n con DDT contra los insectos era m\u00e1xima.<\/p>\n
\nLa poliomielitis disminuye repentinamente<\/strong><\/p>\n
\nPor qu\u00e9 es importante<\/strong><\/p>\n